El pasado año, con motivo de la celebración del 30º Salón Internacional del Cómic de Barcelona, el equipo de Zona Negativa tuvo la magnífica oportunidad de entrevistar al autor británico David Lloyd, ampliamente conocido por su trabajo en V de Vendetta junto a Alan Moore, el cual había acudido al evento para promocionar su trabajo en Materia Oscura (001 Ediciones). La entrevista, preparada por los compañeros Toni Boix y David Fernández y realizada por en entregado Pedro Monje se llevó a cabo, casualmente, el mismo día del cumpleaños de David Lloyd, pero por desgracia, y pese al buen ambiente y el entusiasmo y la plena disposición del autor para atendernos, muchas de las preguntas que se habían preparado para la ocasión quedaron sin una respuesta. Por suerte, el destino nos ofreció una segunda oportunidad a principios de este mismo mes de Marzo, cuando invitado por ECC Ediciones David Lloyd aterrizaba de nuevo en Barcelona para la presentación y firma de ejemplares de la nueva edición de V de Vendetta publicada por la editorial en nuestro país. Hasta allí se desplazaría una pequeña representación de Zona Negativa, tomando el relevo Jordi Molinari y Jordi T. Pardo, con la intención de saldar esta cuenta pendiente.
Breve biografía de David Lloyd
Los primeros pasos de David Lloyd (Reino Unido; 1950) en la industria del cómic se produjeron a través de diversas publicaciones británicas, muchas de ellas editadas por Marvel U.K. -división británica de «La Casa de las Ideas»-, su trabajo junto a Steve Parkhouse en Night Raven comenzó a suscitar la admiración de numerosos lectores, quienes apreciarían la evolución del dibujante a través de títulos como Hulk: Dr Scarabeus, o Doctor Who, donde coincidiría por vez primera con Alan Moore. Y ya en 1982, colaboró de nuevo con Parkhouse en la adaptación al cómic de la película Héroes del Tiempo (Time Bandits, Terry Gilliam; 1981). Pero si hubo un punto de inflexión en su carrera profesional fue el que representó V de Vendetta, cómic que, surgido por encargo del encargo del editor Dez Skinn, propició su recordada colaboración con Alan Moore.
Con posterioridad, Lloyd tuvo la oportunidad de participar en los más variados proyectos junto a algunos de sus más afamados compatriotas. Tal es el caso de Sláine: Cauldron of Blood, miniserie guionizada por Pat Mills en la que el popular personaje surgido de las páginas de la cabecera 2000 AD e inspirado en la mitología celta, acapara todo el protagonismo. Lloyd también se dejó caer por las páginas de Hellblazer, una de las colecciones más emblemáticas del sello Vertigo, donde formó equipo creativo con Grant Morrison y Jamie Delano. La experiencia con éste último debió resultar enriquecedora, puesto que repitieron con la miniserie The Territory, publicada por Dark Horse Comics. De regreso en Vertigo, colaboró en la ambiciosa War Story, proyecto personal de Garth Ennis en el que, contando con la participación de dibujantes de la talla de Carlos Ezquerra, Chris Weston, Dave Gibbons, o John Higgins, el polémico guionista trenzó un interesante retrato de la II Guerra Mundial. En los últimos años, dejando a un lado diferentes fill-in o proyectos menores –Espers, Global Frequency– David Lloyd ha potenciado su faceta de autor completo siendo su obra más significativa Kickback publicada originalmente en Francia por Editions Carabas.
Lo último de David Lloyd: Aces Weekly
En esta presentación de la nueva edición V de Vendetta realizada en el FNAC de L´Illa Diagonal el pasado 10 de Marzo, previa a las entrevistas inviduales con los medios, David Lloyd nos habló de su perspectiva del medio y contestó a las preguntas realizadas por los asistentes respecto a diferentes cuestiones sobre su carrera. De esta manera, el autor remarcó el hecho de que la idea original de esta obra no era realizar premeditadamente una historia distópica de ciencia ficción, en la línea de 1984 de George Orwell o Un Mundo Feliz de Aldous Huxley, sino simplemente hablar de «porque y cómo se corrompe una sociedad» y, más importante aún, «cómo se recuperar». También, respecto a alguna pregunta realizada, quiso dejar claro que no le preocupa el hecho de que pudiesen lanzarse algún día al mercado continuaciones o secuelas de su obra, como sería el caso Before Watchmen, porque básicamente estas serían una simples «falsificaciones» puesto que sólo hay un V posible y ese fue el creado por Alan Moore y él mismo hace ya más de treinta años.
Fuera de esto, la charla de David Lloyd pronto derivó hacía uno de sus intereses actuales, el de la independencia creativa, alejada de las grandes editoriales, y a su misma responsabilidad actual como editor de la web de cómics digitales Aces Weekly. Este es el resultado del intento de David Lloyd de actualizarse a los nuevos tiempos, apostando por edición y publicación digital, siendo Aces Weekly un proyecto definido por su propio creador como un «online comic art magazine» en el que ha conseguido contar con un amplio abanico de autores de diferentes países entre cuyas filas se encuentran autores consagrados y también noveles. Entre la larga lista de colaboradores de Aces Weekly encontramos nombres como Phil Hester, David Hitchcock, John McCrea, Alain Mauricet, JC Vaughn, Algesiras, Benjamin Dickson, Yishan Li, Kev Hopgood, Kyle Baker, Esteban Hernández, Antonio Bifulco, Lucy Stone o Rory Walker.
La idea e intención de Aces Weekly surgió para David Lloyd al percatarse de las dificultades propias con las que se puede encontrar un autor para abrirse camino en el medio, de cómo conseguir combinar lo que quieres expresar en tu trabajo y lo que realmente puedes hacer y los editores te permiten. Es la respuesta a esa independencia que David LLoyd siempre ha perseguido y que hasta cierto punto, según él mismo, ha conseguido. Esta web nace pues con el espíritu de dar a sus autores la total libertad creativa sobre sus obras, como él mismo experimentó por primera vez en V de Vendetta, y en la que los beneficios recaudados se reparten a partes iguales entre todos los guionistas y artistas ligados al proyecto. Esto es posible debido a que este formato digital permite ahorrarse los costes derivados de la distribución, los intermediarios y los gastos impresión puesto que las obras publicadas en Aces Weekly sólo se pueden encontrar en formato digital a los que el lector puede acceder pagando una cuota de 7.99 € mediante la cual se tiene acceso a un volumen completo de 126 páginas con diversas y variadas historias.
De estas cuestiones también nos hablaría David Lloyd en nuestra entrevista, la cual nos alegra y congratula poder ofreceros finalmente, aunque con alguna pregunta extra, como fue concebida originalmente. Hemos de destacar también el trabajo en la transcripción y traducción llevada a cabo por Pedro Monje con el material recopilado en el último Salón del Cómic de Barcelona y el de nuestra colaboradora Jennifer Camacho, traductora licenciada y autora del muy recomendable blog Cuentistas y demás Adictos dedicado a los libros ilustrados, en la más reciente e interesante presentación de V de Vendetta.
Encontraréis la entrevista divida en dos partes, lo ya publicado en su día respecto a la enrevista realizada a David Lloyd durante el 30º Salón Internacional del Cómic de Barcelona, y una segunda con el material nuevo que hemos podido ofreceros con motivo de la reciente visita del autor a Barcelona y la presentación de la nueva edición de V de Vendetta de ECC Comics . Espero que la disfrutéis porque no tiene desperdicio.
Entrevista a David Lloyd. Primera Parte
durante el pasado 30º salón Internacional del Cómic de Barcelona
Zona Negativa (ZN).- En una entrevista publicada en tu página web recordabas la primera vez que pensaste en convertirte en historietista: viendo un programa de televisión en el que se representaban a diferentes profesionales trabajando, entre ellos a un artista comercial. ¿Desde un primer momento pensaste en canalizar ese interés por lo gráfico en forma de historietas, o pensaste en probar fortuna a través de otras disciplinas artísticas?
David Lloyd.- Sinceramente, al final todo esto se reduce al hecho de que yo era capaz de dibujar. Ver el trabajo de esos hombres en los anuncios de televisión resumió para mí el trabajo que sería convertirme un artista comercial y llegar a dibujar un comic. Me pareció interesante y, definitivamente, me influenció.
ZN.- También nombras la influencia de tres autores: Steve Ditko, y dentro del campo de las tiras de prensa, Ron Embleton y John Burns. ¿Fue una atracción temática o estética? En el sentido de si te viste atrapado por las historias que contaban, sus dibujos te movieron a intentar imitar sus estilos, o ambas cosas…
David Lloyd.- Definitivamente fue estética. Completamente estética, sin ninguna duda. Creo que, a causa de que soy un artista, y tengo un punto de vista artístico, esas son las cosas en las que se fija mi subconsciente. Era fuertemente atraído por el valor artístico que me transmitía lo que hacían, no por las historias en sí. Al final, creo que esto es una representación de la vida misma. No es lo que haces, sino como lo haces. Todo el mundo puede ser un buen cantante o un buen pianista, pero es el cómo lo haces lo que te hace especial. Y esto es por lo que me sentía fuertemente atraído hacia la obra de Steve Ditko, y Jack Kirby también. No era el argumento en sí, porque todo el mundo puede contar una historia sobre superhéroes. Y tú y yo sabemos que el mercado es un negocio que está lleno de gente que cuenta historias sobre superhéroes pero, al final del día, ellos no tienen lo que Ditko o Kirby> tenían: “esa cosa especial”. Y eso era lo que me atraía a mí. Aparte de eso, si que había historias y géneros a los que me sentía atraído: thrillers, ciencia ficción, fantasía…
ZN.- Bien, David, bien. Estas leyéndonos la mente, porque esa es la siguiente pregunta [risas ambos] Imaginamos que habrá una lista interminable de historietistas que pudieron influenciar tu estilo; pero suele ser habitual que reivindiques tus influencias cinematográficas y literarias, a menudo relacionadas con el género negro. Con que por fin pudiste canalizar en forma de historieta: primero a través de la adaptación de El lápiz, relato y de Marlowe, y posteriormente a través de Kickback. ¿Fue ese interés por el noir lo que te animó definitivamente a emprender tu primer cómic como autor completo?
David Lloyd.- Si, hice la historia grafica de Philip Marlowe, pero nadie la vio. Esa es una historia curiosa. Hice la adaptación de una historia corta de Raymond Chandler protagonizada por Marlowe. Puse mucha atención y cuidado en esta historia porque quería hacerla lo mejor posible. Y uno de los motivos fue porque en el mundillo del comic hay muchos aficionados trabajando. Hice esto en 1994 y el editor considero que no era el momento de publicar esa historia porque no había, según él, mercado para ella. No fue hasta diez años después (David remarca “diez años después” con una mueca de rabia y dolor, a la que prosigue un incomodo silencio) que esta historia vio la luz… Y yo había trabajado con tanta dedicación en ese proyecto… Si, cierto, el me pago por el proyecto, y yo estaba orgulloso del trabajo y el resultado del mismo pero al final el trabajo no se publico en aquel momento… Esa es una de las razones por las que estoy interesado en el comic digital. Estoy cansado de trabajar con editores y empresas en las que tienes que confiar y con las que negociar para que te publiquen tu trabajo, en el que has trabajado muy duro, de cara al público… Pero eso es otra historia, perdona que haya cambiado de tema…
ZN.- Como apuntábamos en la pregunta anterior, Kickback es una obra que acometes como autor completo y, además, para un mercado como el francés que no trabaja con los formatos que a ti te eran familiares. A tenor de eso, ¿cuánto había de ti en aquel personaje que tenía miedo de enfrentarse a sí mismo y a sus propios límites?
David Lloyd.- Oooohh! Eso es realmente interesante. Grande! Buena, buena pregunta. Sois buenos [risas]. Este no es mi caso, pero creo que hay mucha gente en este mundo que evita enfrentarse a sí mismos. Creo que para mí, la historia de Joe Canelli (protagonista de Kickback, que podría ser traducida como Soborno) representa la sociedad. El es un policía corrupto, en un cuerpo de policía corrupto, que decide cambiar y enderezar su vida. Pero la sociedad esta corrompida. Todos nosotros estamos corruptos. Esa es la verdad y el gran problema. Ya sabes, cuando tenemos una elección, sea esta cual sea, en la que debemos votar a nuestros mejores representantes en la sociedad para nosotros, ¿lo hacemos? ¿O lo que realmente hacemos es votarnos a nosotros mismos porque miramos todo con desinterés y lo que único que realmente nos preocupa es pagar las facturas? Esto no es un crimen, evidentemente, pero es un signo de debilidad. Si alguien nos dijera: “ten, toma 10 euros, para ti, para tu bolsillo a final de mes, si tú me votas”, nosotros le votaríamos. Porque estamos todos corruptos. Así que, volviendo al tema, Joe Canelli nos representa a nosotros y esa parte corrompida de nosotros mismos, a lo peor de la sociedad, sociedad corrupta. Si nosotros pudiéramos, como conjunto de sociedad, como una masa uniforme, pensar lo que es bueno para el resto del mundo a la vez que lo que es bueno para nosotros mismos, todo nos iría mucho mejor. Pero nosotros siempre hacemos cosas que son buenas para nosotros y pensamos “que la sociedad se preocupe por sí misma”. Eso es lo que sucede.
ZN.- De forma diferida, The Territory presenta un mundo en el que un variado surtido de iconografía pulp refleja lo perverso de un sistema social estructuralmente injusto. ¿Dirías que la actual debacle económica y el aprovechamiento que de ella hacen los poderes fácticos demandan más obras de este tipo por parte de los artistas narrativos?
David Lloyd.- Sí, The Territory es completamente pulp. Y sí, cuantas más obras haya mejor. The Territory fue realmente un experimento. Detrás de The Territory hay una larga historia, que me temo no tenemos tiempo para explayarnos. La historia era, en el fondo, sobre una persona que tenía una consciencia culpable y revive en su cabeza todas esas cosas que debería haber hecho y que no hizo en la realidad. El está en una especie de coma (voy a dejar algunos detalles para vosotros) y reproduce todos esos escenarios posibles para convencerse a si mismo que hizo bien en su momento, aunque no tiene éxito. No le funciona. Pero es que, de nuevo, se reduce a la sociedad. Porque en The Territory existe otro personaje, un tipo rico, que al final del día siempre acaba ganando y se queda con todo el dinero, porque este hombre no tiene ninguna complejo ni culpabilidad por hacer mal las cosas. Es una respuesta complicada, que nos daría para hablar durante mucho más tiempo.
ZN.- En relación a la pregunta anterior, alusiva a la situación socioeconómica contemporánea, procede preguntarte acerca de la utilización de la máscara de Guy Fawkes que diseñaste para V de Vendetta. ¿Qué se siente al comprobar que una creación propia se emplea alrededor del mundo como símbolo tan representativo e inmediatamente identificable?
David Lloyd.- Es genial, creo que es genial. Me siento muy bien acerca de este símbolo. Creo que la máscara es precisamente eso, un símbolo para cualquier buen propósito de protesta. Por eso la gente ha sido capaz de usarla como símbolo en las manifestaciones contra la Cienciología, en el movimiento Occupy, Anonymous… Representa a todos los hombres, y cualquier persona puede usarla para luchar contra los tiranos de forma libre, y que sientan que ellos no tienen miedo de hacerlo. Por ello estoy muy orgulloso sobre la máscara. Y sé que Alan también lo está. Los dos estamos muy contentos que este siendo usado como lo está. Personalmente pienso que el movimiento Occupy es necesario y que necesita nuestro apoyo, ya que es necesario demostrar que el 99% de la población está en contra del otro 1%.
ZN.- Para finalizar, nos gustaría hacer referencia a Materia Oscura, libro de relatos cortos que presentas en España aprovechando tu estancia en el Salón del Cómic de Barcelona. Una antología de género fantástico y de terror que cuenta con la participación de autores como Peter Milligan, Stephen R. Bissette o Ramsey Campbell. ¿Cómo surgió este proyecto? ¿Tienes en mente alguna otra aventura literaria?
David Lloyd.- Este proyecto comenzó como una iniciativa para adaptar los copyrights de esas historias que tenia con mis amigos de forma que las pudiéramos publicar de forma conjunta en un recopilatorio, con la intención de venderlas. No por venderlas en si en busca del dinero, sino porque si no las publicas, se evaporan, desaparecen. Y es una pena, porque es buen material.
ZN.- Muchas gracias por atendernos y por tu amabilidad, David. Nos gustaría tener más tiempo, pero tenemos que dejarlo aquí. Y una vez más, ¡Feliz Cumpleaños!
David Lloyd.- Muchas gracias a vosotros. Me habeis hecho muy buenas preguntas. Un abrazo
Entrevista a David Lloyd. Segunda Parte
Zona Negativa (ZN).- El pasado año se publicó la edición digital de Kickback: The iPad Graphic Novel. ¿Crees que este puede ser un buen medio para publicar tus obras más personales a partir de ahora? Y, por otro lado, ¿el formato de álbum europeo original en el que se publicó Kickback, para ti y tu grafismo, supuso una trampa o un trampolín?
David Lloyd.- Interesante pregunta. Me parece que las ventas de la aplicación de Kickback todavía no están disponibles. No sé cómo se ha vendido, desconozco los números. Tampoco sé cómo han vendido las aplicaciones de otras novelas gráficas. Aunque debo decir que tenemos que aprovechar el futuro digital. Me encanta cómo queda el arte en pantalla. Me encanta la apariencia de lo digital. Sobre todo me gusta cuando enchufas el Ipad a una pantalla grande de plasma y los ves ampliado, ese tipo de arte que merece espacio en la versión impresa. Opino que uno de los problemas que han tenido los cómics durante años, posiblemente durante generaciones, es el tamaño, demasiado pequeño. Tenemos que perseguir a los editores digitales. Porque es irónico que, una vez que nos hayamos deshecho del formato cómic, que es pequeño, pues las viñetas no dan espacio suficiente a los dibujos, ¿tengamos qué: el Ipad? ¿Qué es lo que ofrece? Que los cómics se reduzcan de nuevo.
Con Aces Weekly me quiero desprender de todo eso. Quiero que el arte en el cómic sea grande. Parece que el curso de la economía nos lo impide. Nos hemos deshecho del cómic, del formato impreso, y ahora porque el mercado lo impone nos vemos abocados al Ipad, que tiene el mismo tamaño que un cómic. Pero es digital. Hay algo que no cuadra. Entiendo que el mercado más potente actualmente sea el mercado americano de los usuarios de Ipad, de los que se descargan los cómics y los llevan en el metro, a cualquier parte. De los «Mira sí, este es mi Nexus». Sé que tengo que conquistar ese mercado. Porque es bueno para nuestros colaboradores de Aces Weekly, de la que seguro habréis oído hablar, no os tengo que explicar nada ahora. Es un mercado que necesitamos, pero me resulta irónico. Y me encantaría poder dirigirme a los usuarios de PC y que se dieran cuenta de que ellos también pueden bajarse este tipo de cosas, y que son geniales.
Pero volviendo a vuestra pregunta, disculpad que me haya ido por las ramas, si publicas algo como Kickback en papel, que era el formato original, el único inconveniente es adónde puede llegar. Si está en inglés, sólo puede distribuirse en Estados Unidos y el Reino Unido, que es donde todo el mundo habla inglés. Si intentas enviarlo a Francia, o incluso a Inglaterra, también se escriben comics en inglés fuera, corres un riesgo enorme. ¿Quién lo va a vender en sus tiendas? Si publicas en papel, te metes en una especie de trampa. Por su distribución. El papel es una trampa. No solamente por las cuestiones del idioma, sino por la distribución. Si utilizas papel, aunque no lo exportes, tendrás que empaquetarlos, pagar portes, aduanas, exponerlos en las tiendas, etc. Si lo haces digitalmente, te ahorras todo eso. Mientras haya un público, ni que sea doce personas en Islandia, o en cualquier otra parte, que pueda leer inglés, y se lo puedas vender porque usáis la misma divisa, no les tienes que enviar nada. Si es digital, cruzará fronteras, no tiene fronteras.
Además, no tienes que pagar la impresión, el almacenaje, la distribución… Nace directamente del “tengo una historia que quiero contaros”. La dibujas y listos. Que te den 8 euros, 10 dólares o 7 libras, vía PayPal, y ya está, fácil. Y lo percibes directamente. Por eso, el papel es una trampa. No puedo decir mucho más. Lo digital es un medio estupendo de obtener libertad. Aunque haya, como ya sabéis, esas grandes compañías que aun así intentan ponerte trabas. Intentan colártela con un «Bueno, si vas a hacer esto, nos quedamos la mitad». A ver, ¿por qué? Tengo la libertad de la red. Y todavía te dirán: «Sí, vale, tienes la libertad de la red pero mejor si nos quedamos con la mitad».
ZN.- A pesar de que tú mismo dominabas cada apartado de la obra, sorprende que en Kickback aparezca un tic habitual en los cómics de factura compartida: que los personajes hablen con la boca cerrada. ¿Por qué lo hiciste así?
David Lloyd.- Oh, interesante. Los personajes hablan con la boca cerrada. Bueno, no es necesario que tengan la boca abierta para añadir el diálogo, ¿no? ¿Por qué? ¿Habéis visto mucho comics en que los personajes hagan (gesto del habla)? ¿En serio? ¿Cuántos? (Ríe).No hace falta que les abráis la boca. Tan sólo en ocasiones si algún personaje grita. Si uno de los personajes (imita un grito), entonces sí que os hace falta que abran la boca. Pero si no, en una conversación normal, no hay motivo. Lo importante es la expresión. En muchos segmentos de diálogo el personaje se muestra reflexivo, permanece callado, lo que indica que está pensando. Por lo que no querréis que abra la boca ya que eso cambiaría su expresión.
ZN.- A pesar de lo disciplinado que suele ser tu dibujo, sorprende que en algunos momentos de Kickback arriesgas con imágenes donde líneas y sombras abandonan el realismo buscando efectos más simbólicos y expresionistas, como cuando unos policías irrumpen en un local y acaban con la vida de toda una banda callejera. ¿Te resulta sugerente probar ese tipo de recursos y crees que encajan lo bastante bien con tu grafismo?
David Lloyd.- Bueno, he aquí la cuestión: el arte. Uno puede utilizar el arte como quiera. He probado distintas técnicas artísticas. Para crear distintos efectos. Lo voy a intentar exponer de manera sencilla. La mayor parte del arte en el cómic se produce de una manera determinada porque forma parte de un sistema de montaje. La mayor parte del arte del cómic mainstream se produce en cadena. Ya conocéis el concepto industrial de dibujante, quien estructura el guión en viñetas. Dibujantes, entintadores, color… La razón por la que utilizan este sistema es porque así producen más. Pues mientras uno dibuja, otro puede hacer las tintas. Es un trabajo en cadena. Un producto de fábrica. Gran parte del arte que veis en los cómics mainstream tiene esa apariencia porque satisface el concepto industrial. Tienes que tener a alguien que dibuje, y alguien que pinte. Así que tienes que tener a dibujantes y a entintadores a la vez, y que todo esté claro y sea comprensible para todos. Para que quien trabaje el color sepa por dónde tirar.
Pero así no es como se deberían hacer los cómics. Creemos que han de ser así, porque es como la mayoría de cómics mainstream se hacen. Y he aquí la tragedia de los cómics mainstream. Los cómics mainstream han originado la percepción de que, por ejemplo, los héroes deben tener determinada apariencia, con líneas bien definidas. Pero se puede contar una historia sin todo eso, sin ese sistema en cadena. Es una herramienta. Yo no trabajo en la industria del mainstream. A mí me parece una buena idea, que será efectiva, dibujar a unos tipos derribando la puerta, o lo que sea, sin líneas definidas, o simplemente de forma abstracta. Y funcionará. Y comunicará. Así que así lo haré. Pues el arte no entiende de reglas. Una fábrica tiene reglas, porque se basa en ellas para funcionar. Pero el arte no tiene reglas. Y el arte en el cómic tampoco. Al menos, no más allá de las convenciones.
ZN.- A diferencia del acabado que utilizas en Kickback o V de Vendetta, en tu trabajo en The Territory junto a Jaime Delano optas por un entintado detallado y definido. ¿Qué te llevó a ir en esa dirección?
David Lloyd.- Eso es porque queríamos producir múltiples efectos en The Territory. Intentamos crear cuatro efectos distintos. Y estilos diferentes. Uno era muy detectivesco, un estilo noir. En cada uno de los números queríamos reflejar la calidad y los estándares de una revista pulp en particular. De ahí los diferentes efectos.
ZN.- Todo el mundo conoce tu trabajo junto a Alan Moore en V de Vendetta pero esa no fue la primera vez que coincidisteis en un mismo proyecto, el antecedente se encuentra en algunas historias realizadas para Doctor Who Magazine ¿Cómo fue ese primer encuentro y colaboración?
David Lloyd.- Fue una historia colectiva sobre los hombres cibernéticos que se llamaba Black Legacy. Ésa fue nuestra primera historia. Al trabajar con Alan me di cuenta del grandísimo escritor que es.
ZN.- Hace ya 23 años desde que se publicó la última entrega de V de Vendetta, pero por su temática parece que nunca pierde vigencia, además de tratarse de un best-seller intemporal. Imaginamos que tiene que resultar reconfortante, pero ¿en algún momento te has sentido “prisionero” de la fama obtenida por este trabajo?
David Lloyd.- No, en realidad no. Creo que ha sido muy positivo para mí. Son mis credenciales. Todo el mundo me conoce por ello. Y sabe de lo que soy capaz. Y eso me beneficia. A veces, no respetan mi posición y mis habilidades. No se han aprovechado de mi reputación. Eso es problema de ellos. Y mío. Porque no se han dado cuenta de que pueden ganar dinero. Las editoriales no han caído en que pueden utilizarme para vender más. Por mi conexión con V. He ahí su estupidez. Que no se hayan dado cuenta de eso. Y mi pérdida. Su estupidez me ha privado de mayores beneficios, los de los libros que se podrían haber vendido. Y es lo que no entiendo. Para mí es un misterio cómo la gente puede ser tan estúpida. Pero la estupidez afecta a todos: editores, comerciales… Así que nadie es inmune a la estupidez. Creo que ése fue el caso de Dark Horse cuando se publicó Kickback. Con todo mi respeto, y ya que vosotros mencionáis el tema, lo que os agradezco. No hay respuesta. No hay explicación para la estupidez. Hay personas de las que se espera que sean muy eficientes y si no lo son, ¿qué puedes hacer? ¡Que dimita el gobierno, que dimita! Y tú los habías votado porque esperabas que hicieran algo. ¿Y qué hicieron? Cagarla.
ZN.- A raíz del estreno de la adaptación cinematográfica, te mostraste satisfecho con el trabajo de los Hermanos Wachowski y James McTeigue. Pero, ¿no crees que parte de los cambios que introdujeron alteran de forma bastante significativa el mensaje de la obra original?
David Lloyd.- Bueno, sí. Pero hasta cierto punto. Muchas personas me comentaron que la escena final en la que la multitud se reúne y se pone la máscara es un desastre. Contradice un poco el concepto original de individualidad. Si las personas se reúnen y forman una multitud, desaparece la individualidad. Es un esfuerzo común. Creo que no existe ningún motivo por el que las personas debieran tener un punto de vista individualista. Pueden juntarse y decir: «mirad, todos somos seres individuales». Así que yo opino que lo que retrata esa escena de la manifestación masiva es un grupo de seres individuales con el derecho a manifestarse.
No siento que haya un cambio sustancial. Más allá de que, por supuesto, Hollywood destierra el concepto de anarquía. Bueno, tampoco esperábamos que Hollywood vendiera la anarquía a los espectadores. Es un concepto un poco sofisticado, complicado. Lo que Hollywood se limita a decir es: que no te avasallen, eterna libertad. Pero la eterna libertad es una forma de anarquía. Es un método simplista, un mensaje simplificado. Pero es lo que significa. La eterna libertad es sinónimo de anarquía. Claro que los hermanos Wachowski no se lo podían vender así a Hollywood. Es un mensaje sofisticado. Pero lo más importante de la película es que mantuvo y enfatizó el concepto primordial, que para mí es: tu individualidad es absolutamente fundamental. Te puedes aferrar a ello. Aférrate a tu individualidad, hasta las últimas consecuencias. Al final es lo que te queda, todo lo que tienes. Pienso que te lo podrían quitar todo, y siempre te quedaría eso. Y si te la quitan, estás acabado. Así que la individualidad es la clave. Y desde luego eso se refleja en la película. Vale que no sea la adaptación perfecta, pero creo que es lo suficientemente buena.
ZN.- ¿Participaste en el trabajo de concept art realizado para la película?
David Lloyd.- Yo no hice nada. Desde mi punto de vista, una vez cuentas la historia, ya está. Se acabó. ¿Para qué necesitas el arte conceptual? Lo que tienes que hacer es narrar la historia. Primer encuadre. Cámara. Empieza por ahí.
ZN.- Aunque es una obra cuyo proceso creativo verás muy lejano en el tiempo, nos gustaría preguntarte acerca de uno de los recursos gráficos más característicos de V de Vendetta: la ausencia total de onomatopeyas, cuadros de texto o bocadillos de pensamiento. ¿Te costó adaptarte a estos requerimientos, o estuviste de acuerdo con Alan Moore de que era una decisión imprescindible para preservar el enfoque realista de la obra?
David Lloyd.- Sucedió lo siguiente: tanto Alan como yo tuvimos total libertad para hacer lo que quisiéramos. Desde un punto de vista artístico, la razón por la que quité todos los efectos de sonido y esas cosas es porque quería llegar a más lectores, no sólo a los de cómic, sino al máximo de personas. Gran parte del público general, que bien podría disfrutar de los cómics, se deja engañar por cierto tipo de cosas, como los efectos de sonido. Ningún adulto inteligente quiere ver BUUUUUM escrito. Así que si lo eliminas, automáticamente interesarás a más personas. Además, solamente quieres contar una historia. Si el arte es realista, la historia es realista. Era una forma fácil de seducir al público que no es lector de cómics y por eso lo hicimos así.
ZN.- A lo largo de los años has tenido ocasión de trabajar con algunos de los guionistas británicos más destacados, como Alan Moore, Jamie Delano o Garth Ennis. ¿Cómo valoras estas colaboraciones y en qué puntos crees que difiere más su estilo y mecánica de trabajo? ¿Alguno de ellos con el que creas que has conseguido un entendimiento especial?
David Lloyd.- De todos esos escritores es obvio que con Alan. Aunque si no hubiera trabajado con él V… Trabajé de nuevo con Alan en una especie de proyecto benéfico. No hace falta que entremos en eso ahora. De todos esos autores, creo que con el que más disfruté trabajando, porque se implica muchísimo, es Garth Ennis.
Garth Ennis adora contar historias, tiene mucha libertad, le gusta contar lo que quiere contar. Le da mucha libertad a la historia. Está muy comprometido con lo que hace, y tiene los pies en la tierra. Además de relatar historias muy buenas. Le gusta tratar sobre la gente corriente. Garth es genial. Me encanta trabajar con él, aunque solamente lo haya hecho una vez. Jamie es brillante. Pero tiene una relación difícil con los cómics. Si quiere contar una historia, lo hace. A Jamie le gustan las historias sobre cuestiones de carácter político. En realidad he trabajado con artistas maravillosos, todos son buenos. En lo que a términos artísticos se refiere, todos son fantásticos narradores. No puedo decir mucho más.
ZN.- Como dibujante ya veterano y visto en perspectiva, ¿crees que a la hora de plasmar el guión de una obra en imágenes es más favorable para ti que este sea rico en detalles o prefieres que te deje una mayor libertad para poder imaginar la historia a tu manera? ¿Te ha costado alguna vez hacer tuya una historia?
David Lloyd.- Bueno, eso depende del escritor. Si vas a trabajar con un guionista que quiere darte muchos detalles, puedes elegir trabajar con él o no. Personalmente no me gusta trabajar con mucho detalle. Ya sabéis que hay esta legenda de que Alan escribe guiones muy detallados. Puede que lo haga ahora. O que lo haya hecho en el pasado con algún artista. Pero cuando colaboré con él en V no era así. De lo contrario, no hubiera trabajado con él. Porque creo que es muy importante para el dibujante tener su propia visión. Y contribuir en algo. Si el guionista se limita a indicarte lo que tienes que hacer se crea una relación desigual que puede llegar a ser muy tóxica.
Nunca me he visto en esa coyuntura. Algunos quieren más control. A otros les parece bien aplicar el método Marvel. No sé si conocéis mucho esta técnica. Pero existe lo que se llama el método Marvel de creación, que es cuando el escritor hace un resumen de la acción. Entonces el dibujante se avanza y termina la página y a partir del dibujo el escritor añade el diálogo. Pues bien, es un buen método y de hecho es el mejor método para el dibujante y para conseguir la mejor corriente de imágenes. Porque el detalle obstaculiza.
El único escritor con el que he podido aplicar este método ha sido Jamie Delano. Todo lo que he hecho con él ha sido empleando el método Marvel. Él hacía la sinopsis de la acción, yo dibujaba y él volvía para terminarlo. Por ejemplo, se lo propuse a Garth y se llevó las manos a la cabeza. Garth detesta esta técnica. Garth quería ese tipo de control, lo necesitaba. Lo que está bien. De verdad, depende del escritor. Aunque la libertad es muy importante.
David Lloyd.- Y si ésa era vuestra última pregunta…
ZN.- Así es
David Lloyd.- Hablando de libertad, tengo que contaros lo de Aces Weekly, para que lo pongáis en vuestra web. V de Vendetta nació de la libertad que tuve en ese momento. Y quería transmitir esa misma libertad. Aces Weekly es una revista antológica online de cómics. Exclusivamente digital. A todos los que les propuse participar les dije que podían hacer lo que quisieran. Que escribieran historias de 20, de 3 páginas, que hicieran lo que les gustase. Así que esto es a lo que me dedico ahora. A publicar la revista.
He participado en el primer tomo. Y estoy muy orgulloso de todos los colaboradores. Entrad en la web. Y pasad el mensaje. Está disponible en España. Al menos si hablas inglés. Es lo único que hace falta: poder leer el inglés, ni siquiera hablarlo. Pero se puede conseguir, se vende en tres divisas distintas: euros, dólares y libras. Y si os apetece leer a los mejores de los mejores en cómic, entrad. Os podéis hacer suscritores o comprar números individuales, los tenéis todos allí. Lo ensencial de Aces Weekly es el don de la libertad que tuve cuando dibujé V de Vendetta. Y es algo que la gente que trabaja en este negocio no siempre tiene. En general porque si quieres que sea tu sustento tienes que trabajar para las grandes editoriales. Y las grandes compañías no te dirán: «Eh, haz lo que quieras». Cosa que yo sí les digo. Así que por favor, habladles de Aces Weekly.
¿Son imaginaciones mías o cuando le pregunta si en algún momento se ha sentido “prisionero” de la fama obtenida por V se le va la cabeza?
Si que se le va la cabeza en algún momento, sí. Y tampoco acepta de buen agrado un mínima crítica como la de las bocas.
Una doble entrevista muy interesante, enhorabuena a todos los responsables. Hay bastantes cosas con las que no comulgo. Para empezar en lo que comenta del cómic digital. ¿El papel siempre ha sido una limitación? ¿Desde cuando? Él que ha publicado en Francia debería saber que hay tantos tamaños cómo hagan falta. A mí nunca me ha parecido que el tamaño comic-book sea pequeño. Y por cierto, un iPad es más pequeño aún, no es igual.
En lo que sí estoy de acuerdo es en la peli de V. Creo que es, como dice él «lo suficientemente buena». De hecho, la máscara se hizo famosa por ella. Si hubiera sido un cagarro de peli a la que nadie hubiera hecho caso, eso no habría pasado.
Ivan Rivas ha comentado: Y tampoco acepta de buen agrado un mínima crítica como la de las bocas.
*Propuesta de ocio*
Intente decir «Y tampoco acepta de buen agrado un mínima crítica como la de las bocas» manteniendo la boca cerrada, sin juntar los labios en ningún momento.
¡Conviertase en el centro de la fiesta! ¡Risas aseguradas!
Dejando a parte que se le haya podido ir la olla o no, yo creo que en la pregunta sobre si se siente «prisionero» de V o no, demuestra una sinceridad sobre un aspecto que muchos otro autores nunca llegan a reconocer, e incluso intentan desterrar. Seguramente V vaya a ser la obra más importante de su carrera. Ahora bien, que él precisamente se sienta injustamente tratado, pues eso creo que puede llegar a ser discutible. Al fin y al cabo siempre se ha mantenido en activo y ha participado en proyectos más que interesantes. Qué tendrían que decir tantísimos otros ilustradores…
En cuanto a que no acepta ni una crítica: a mí me parece que es muy inglés y un poco de «grumpy» no le puede faltar 🙂
¿ Prisionero de V?, este hombre tendría que darle gracias al cielo cada mañana por haber conseguido ese encargo con el nivel que tenía en aquella época, Yo a Lloyd lo valoro primero como ilustrador que me parece muy bueno, y segundo por las ideas que aportó a la obra y que el propio Moore ha reconocido mas de una vez, eso si, como dibujante no llega ni a mediocre, todas las caras iguales, malas proporciones, expresiones faciales inexistente… Para mi el lápiz de V de vendetta es un desastre y aun así el tebeo es una jodida obra maestra.
«Si que se le va la cabeza en algún momento, sí. Y tampoco acepta de buen agrado un mínima crítica como la de las bocas.»
No tengo, ni tuve la impresión, que se lo tomase a mal ni como una crítica, más bien le pareció una pregunta curiosa. Tampoco la pregunta está planteada como una crítica. Lo que pasa es que leer y escuchar no es lo mismo y pueden dar impresiones diferentes. De hecho, mismo se ve que considera la pregunta interesante al principio, no noté en persona que fuese con ironía, además que hizo una pausa para pensar en ello, pero claro, ¿en realidad que puedes responder a esa pregunta?
Lo que sí se le nota resquemor con las grandes editoriales y en la pregunta «prisionero» es cierto que no sé que intentaba decir… parece como que se va por las ramas y no contesta a la pregunta.
«Para mi el lápiz de V de vendetta es un desastre y aun así el tebeo es una jodida obra maestra.»
Para nada de acuerdo. V de Vendetta es una obra maestra, tanto por su historia y guión, como por su dibujo, pero hay que saber apreciarlo en conjunto. Los lápices de David Lloyd son perfectos para esta historia, porque se buscaba un tono que encajase con la narración en folletín, algo que fuese áspero, sucio y pudiese transmitir en los menos trazos posibles. Un dibujo pensado para ser publicado en blanco y negro. El dibujo de David Lloyd consigue la ambientación necesaria y además hace que el personaje parezca casi un fantasma, un icono o una idea. O todas a la vez.
Y eso con un trazo más detallado, pongamos un Dave Gibbons, por no salirnos del ambito de Alan Moore, no se habría conseguido o habría perdido parte de la fuerza e intención de esta obra. De hecho, una queja habitual de las obras de Alan Moore, muchas veces cierta, es lo excesivamente cerebral que resulta, pero eso no pasa en V de Vendetta, más pasional y entregada precisamente por la aportación de David Lloyd.
Javié ha comentado: Para mi el lápiz de V de vendetta es un desastre
Lo que molaría sería un Before V de Vendetta dibujado por Jim Lee.
Estupenda entrevista, y me sumo a las voces contrarias al «lápiz desastroso»: el dibujo de V de Vendetta es estupendo y el más adecuado para la historia. Claro que, si uno solamente lee cómics con supertipos disfrazados, puede no gustarle. En ese caso, el dibujo de From Hell, por ejemplo, le debe de parecer a uno los monigotes de un niño de 4 años. Qué mundo.
Off-topic: respondo a Ocioso una pregunta que me hizo en los comentarios de un post anterior: el señor de mi avatar es Jean Luc Godard, el puto amo, con permiso de Bárcenas. ¿Se parece a Grant Morrison? Mmmm, ahora que lo miro detenidamente…
Luisru ha comentado: el señor de mi avatar es Jean Luc Godard
Hostias, es verdad. Te juro que pensé que era Morrison. Al entrar en ZN uno pone el cerebro en modo comic y no se le ocurre que pueda ser alguien de fuera.
Yo leyendo la entrevista en ningún momento veo que el amigo LLoyd tenga ningún mal rollo o ninguna molestia. Incluso dice en varias ocasiones «oh, interesante pregunta». Y da respuestas bastante largas y argumentadas, cosa que no pasaría si tuviera alguna molestia con tal o cual pregunta. Tampoco me da la sensación de que se le vaya la pinza, sólo que como a cualquier autor con renombre pues ha de caminar entre varias aguas y eso hace que se disperse en demasía.
Es decir; tiene que quedar bien con las grandes editoriales, pues al fin y al cabo depende de ellas, pero a la vez defender su independencia artística, pues al fin y al cabo es un autor outsider, tiene que reconocer que con V DE VENDETTA le tocó la lotería, pero a la vez demostrar que como autor tiene validez más allá de esa obra, tiene que quedar bien con ALAN MOORE, pero a la vez desmarcarse del barbas en lo que considera, etc…
Estoy de acuerdo entre quienes consideran que el dibujo de LLoyd le va estupendo a V DE VENDETTA y sin él no sería lo mismo. Yo le doy gran parte del mérito a LLoyd el que esta obra transmita las sensaciones que transmite. Eso no es incompatible con que es cierto que con esta obra le tocó la lotería; por su estilo, no me lo imagino en ninguna otra con la misma repercusión mediática y crítica.
He leído a LLoyd en muchas entrevistas concedidas a medios generalistas y me parece alguien muy coherente. Está muy orgulloso de que la máscara de V sea un símbolo de movimientos que cuestionan el sistema, por ejemplo, y ni se plantea cobrar derechos o poner ningún impedimento al respecto (que tampoco sé si podría, claro, pero al menos de entrada ya muesta su solidaridad).
Jordi T. Pardo
ha comentado
Para nada de acuerdo. V de Vendetta es una obra maestra, tanto por su historia y guión, como por su dibujo
Guión e historia, insuperable, tinta y color, muy adecuada para el tono de la historia, lápiz, una mierda pinchada en un palo.
Ocioso
ha comentado
Lo que molaría sería un Before V de Vendetta dibujado por Jim Lee.
OCI, ¿Tu eres consciente de que me has contestado lo mismo en cuatro o cinco comentarios sobre temas diferentes?, si lo haces como arma contra mi perfecto, pero ya tienes una edad y me da un poco de miedo que te empieces a repetir de manera sistemática.
Interesante entrevista. E interesante personaje el bueno de Lloyd. Aunque yo también me quedé un tanto así con lo de que el problema de los cómics es el formato…
Y en cuanto al dibujo de V… ya no es que el trabajo de Lloyd sea bueno o malo (a mí me parece bueno), sino que, difícilmente, ningún otro autor habría sido capaz de hacerlo tan bien como él, no digamos mejorarlo. Y es que, como ya ha dicho Luisru, el dibujo de Lloyd le encaja a V como un guante tal y como el de Campbell encaja en From Hell.
Y es que, como ya ha dicho Luisru, el dibujo de Lloyd le encaja a V como un guante tal y como el de Campbell encaja en From Hell.
Claro, no te jode, encaja igual de bien que Stallone como Rocky o Mel Gibson como W. Wallace, porque es la única versión que hemos visto, con el guión que tiene V de Vendetta hay cientos de artistas a nivel mundial que lo podían haber hecho mejor que Lloyd, pero claro, decir eso ahora es hablar por hablar.
Carlos Pacheco lo habría hecho de puta madre.
Hombre, Javié, no jodas, que a poco que pienses hay más de uno y de dos y de diez cómics en los que sin esfuerzo eres capaz de imaginar como habrían quedado realizados por otros autores, bien porque el dibujo con el que conocemos ese cómic sea malo, o demasiado standard, o no pegue con la historia.
Y es que a veces no depende sólo de si el autor sabe o no dibujar si no de si su estilo casa o no con el tono de la historia.
Claro, no te jode, encaja igual de bien que Stallone como Rocky o Mel Gibson como W. Wallace, porque es la única versión que hemos visto, con el guión que tiene V de Vendetta hay cientos de artistas a nivel mundial que lo podían haber hecho mejor que Lloyd, pero claro, decir eso ahora es hablar por hablar.
Pues mira, algo así es lo que le pasa a Predicador. Al ser Dillon su único dibujante, la serie es tan suya que cuesta «verla» realizada por otro; y eso a pesar de que en este caso sí que hay muchísimos dibujantes que habrían sido capaces de hacer un trabajo mejor que el suyo. Lo mismo podría decirse de Skreemer, o de muchos números de Sandman; historias que se sostenían básicamente por el guión pero que a nivel gráfico eran muy pobres y sin personalidad.
Y eso no pasa con el dibujo de V de Vendetta. Otra cosa es que a tí, personalmente, no te guste, pero de ahí a decir que cualquiera lo hubiera hecho mejor… Siguiendo el «chascarrillo» de Ocioso; ¿lo habría hecho mejor Pacheco? No. Y es un gran dibujante. Pero su estilo no serviría a la historia de la misma manera. El dibujo que emplea Lloyd, con esas sombras y contrastes tan marcados, tan de luz dura, le da a la historia una personalidad muy definida que, repito, difícilmente otro hubiera podido mejorar.
Por otro lado me llama la atención que el lápiz de V te parezca una mierda pero, sin embargo, la tinta y el color si te parecen adecuados. Igual me equivoco pero, hasta dónde yo sé, la tinta es de Lloyd. Y la historia se publicó primeramente en b/n; y, de todas formas, también Lloyd participó en el color.
Joder, estoy espeso esta mañana… pero espero haberme explicado bien.
¿lo habría hecho mejor Pacheco? No. Y es un gran dibujante. Pero su estilo no serviría a la historia
Ahhhh, vuelves a caer en el mismo error, a toro pasado no se pueden discutir estas cosas porque no se puede ser objetivo, tu dices que Pacheco tiene un estilo que no sirve para el tono de la historia, pero si Alan Moore le hubiese encargado el apartado gráfico a Pacheco, este sería el único que hubiésemos conocido y la obra sería un clásico imperecedero tal como es hoy día, si en ese futuro alternativo yo te dijese que en vez de Pacheco me hubiese gustado ver a David Lloyd a los lapices me hubieseis tachado de loco.
Si, te has explicado de puta madre, no te preocupes que te he entendido, es muy fácil de entender, cuando yo hablo de «Lápiz» no estoy diciendo que el apartado gráfico sea malo ni mucho menos, a mi me encanta el tono que le imprime el señor Lloyd, cuando hablo exclusivamente de lápiz me refiero a todas las cuestiones de estudios previos, (Anatomía, expresiones faciales, perspectiva, volúmenes…)
Y aquí este señor a mi modo de entender el arte, falla, no hasta el punto de que te sangren los ojos como en Los muertos vivientes (Post Moore), pero si que que se podría calificar de mediocre o de correcto si tienes una buena mañana, ¿Que pasa entonces?, pues pasa que el tío es un ilustrador muy bueno, me encanta como planifica las paginas y esos tonos pastel tan crudos le dan una estética muy acertada para el tono deprimente y opresivo de la historia, pero dibujando no es nada del otro mundo.
¿Pero entonces lo que dices es que el guión de V de Vendetta es tan bueno que nos hubiera dado lo mismo el estilo de dibujo? Joder, pues, no sé, pero la verdad no acabo de estar convencido.
No dudo de que un V dibujado por Pacheco hubiese estado muy bien, pero no habría sido lo mismo. Incluso aunque lo dibujase Quitely (y mira que me gusta Quitely, y creo que es capaz de dibujar lo que sea) sería otra cosa. Son dos autores con un estilo mucho más limpio y luminoso que el de Lloyd, y en los que predomina la línea sobre la mancha. Casi se puede decir que son diametralmente opuestos. Y por eso creo que no funcionarían, al menos del mismo modo. La historia de V necesita de esa atmósfera opresiva, oscura, amenazante, llena de rincones oscuros que le brinda el estilo de Lloyd. Por buscar a alguien que hubiese podido dar un resultado similar… me ha venido a la mente Jesús Blasco.
Y en cuanto a lo que comentas de los fallos anatómicos o de expresión… si te digo la verdad, tendría que volver a mirar el tebeo para estar seguro del todo pero… No recuerdo que sus fallos en ese sentido sean flagrantes o especialmente clamorosos… Estamos demasiado acostumbrados a un canon de representación humana en el cómic que tiene muy poco que ver con la realidad ( lo de medir el cuerpo en siete-ocho cabezas que es el que se usaba en la antiguedad para representar a los héroes); en cuanto a la fisonomía de los personajes de V me parece suficientemente variada y diferenciada; y las expresiones… imagino que Lloyd te contestaría algo parecido a lo que dice cuando le preguntan por las bocas cerradas: que las usa de forma más expresionista (valga la rebuznancia) que natural, exagerando el dramatismo puntualmente, vamos.
Pues a mi Kevin Maguire en Worlds’ Finest me parece el Greg Land de DC Comics. Ale, ya lo he dicho xD
Pues a mi Kevin Maguire en Worlds’ Finest me parece el Greg Land de DC Comics. Ale, ya lo he dicho xD
:O Jo-der…