Como comprenderéis, desde Zona Negativa tenemos un cariño especial a Emma Ríos, autora de nuestras cabeceras en la web, ya sean esa Lilandra, Hal Jordan o, made in Kirby, Galactus. Quizás esta no sea la mejor forma de presentar una entrevista, porque puede parecer imparcial de entrada. Pero la verdad es que no estoy dando paso a una sola entrevista. Hoy, Martes 13, desde Zona Negativa dedicamos nuestro día a la dibujante gallega y todo el contenido generado está basado en su producción. Desde esta extensa entrevista, mantenida el pasado mes de Noviembre con motivo de su asistencia al Salón del Cómic de Getxo hasta las reseñas que desfilarán en las próximas horas por la parrilla de la web, el día de hoy está dedicado a Emma Ríos.
Por la parte que me toca, en la entrevista tomamos el relevo de aquellas dos que en 2009 publicó mi compañero David Fernandez. Cinco años (esta entrevista, como comentaba, está realizada a finales de 2014) en los que la trayectoria de Emma ha dado un giro, pasando de ser una recién llegada a la Marvel Comics a una estrella de primera fila en el mercado del cómic independiente en Estados Unidos, con proyectos de creación propia tanto al apartado gráfico como en las labores de guión. Mucho contenido para repasar, sin duda alguna.
Todas las imágenes de esta entrevista han sido extraidas de la cuenta de Flickr de la propia Emma, excepto la de la portada, obra de mi gran compi Alberto Benavente. Con este último detalle, os dejo con la entrevista, esperando que sea de vuestro agrado y que la disfrutéis al menos tanto como yo haciéndola. Porque con el paso de los años, uno tiene la posibilidad de entrevistar a muchos autores, ya sean editores, guionistas o dibujantes, aunque en ninguna ocasión he disfrutado tanto como con esta. Con todos ustedes, Emma Ríos y nuestro particular #EmmaRiosDay en Zona Negativa.
Entrevista a Emma Ríos
Pedro Monje: La última vez que hablamos por última vez ibas a empezar a trabajar con Mark Waid en Strange.
Emma Ríos: ¡Madre mía! Eso fue el principio de todo.
Z.N: Venías de haber coincidido con Mark Waid en Boom, pero cuando aquello se acabó te llegó esta oportunidad. Supongo que fue cosa de él elegirte como dibujante en Strange. ¿Cómo lo recuerdas?
E.R.: Sí. Aquel año Mark dejó Boom! Porque estaba muy liado trabajando en varias series a la vez para Marvel. Antes de nada, he de decir que Strange, The Doctor is Out es uno de los tebeos que más aprecio de todos los que he hecho para Marvel. Aunque reconozco que en general he tenido bastante suerte. Había hecho en Marvel un pequeño fill-in en Runaways y después de eso me volví a centrar en acabar Amadís de Gaula para SM, que lo tenía rezagado. Ese fue un momento difícil, porque me habían abierto la puerta en Marvel y había tenido que decirles que no podía seguir tras acabar esa historia corta así que no sabía si podrían, os si les interesaría, ofrecerme nuevos trabajos más adelante.
Lo de Mark Waid surgió porque ese año estuvo invitado al Salón del Cómic de Barcelona y yo acababa de terminar Hexed. Nos conocimos en la entrega de premios y estuvo un rato vacilarme para que no abandonase Boom!. Yo esto era algo que tenía muy claro, porque mi contrato en Boom! era trabajo de encargo en unas condiciones leoninas. Parecido a Marvel, pero en la última obviamente el beneficio económico y la exposición eran mucho más seductoras. La exposición especialmente es lo que se debe buscar siempre, conseguir audiencia y una comunidad de lectores que te apoyen. Esto es muy importante si quieres vivir de esto y aspiras a hacer lo que te de la gana. Así que en definitiva, sí, Mark fue la clave que me permitió arrancar en Marvel con un proyecto relativamente importante.
P.M.: Ahí está el tema. Yo entiendo que un autor cuando entra empieza a hacer un fill-in aquí, un par de números por allí, colaboraciones con autores no muy reconocidos, etc… pero en tu caso enseguida colaboras con Mark Waid en un proyecto atractivo.
E.R.: Sí, exactamente. La primera vez que nos vimos fue en la presentación de los premios del Saló de Barcelona, en 2008 creo, donde me colé como siempre, tratando de ratear entradas o haciéndome pasar por acompañante de alguien que tuviera. Aquella época era demencial. Él estaba allí comiendo jamón, como todos, y conseguimos hablar un rato. Y la verdad es que aparte de ser uno de los mejores profesionales del medio, es una persona encantadora. En aquel momento no me comentó nada, pero cuando volví a casa, supe que ya había hablado con Tom Brevoort sobre la posibilidad de que yo fuese la dibujante de la miniserie.
Como siempre, la idea era que se hubiese convertido en una serie regular, aunque esta vez no pudo ser. De hecho, casi todos los proyectos que he hecho en Marvel tenían la intención de ser serie regular y no salió ninguna por cuestiones diversas. Arrancando como miniseries, relativamente pequeñas, es difícil que aunque la gente quiera leerlas puedan encontrarlas en las tiendas, porque el Previews es un verdadero lio con tal cantidad de material que se mueve desde la editorial… En aquel momento no tenía ni idea de cómo funcionaba la distribución, más allá de comprar por Previews a nivel personal, Así que claro, no comprendía muy bien cómo podía ser que recibiendo tanto apoyo en las redes sociales y buenas críticas la serie no vendiera más. Internet aturde bastante al principio, hasta que te das cuenta de que lo que percibes no refleja tanto la realidad como parece.
P.M.: Anda, sabía que la de Capa y Puñal sí que había sido creada con la intención de ser serie regular, pero esta de Strange no…
E.R.: Pues esta también, sí. Tom Brevoort estaba encantado con el proyecto, le gustaba el personaje y querían plantear algo distinto. Recuerdo que tanto Tom como Mark estaban flipados con Doctor Who en aquel momento, y se les ocurrió la idea de emular el tono de la serie metiéndole una sidekick a Extraño, Casey Kinmont. Mark, que es bastante escéptico, tenía bastantes dudas sobre cómo enfocar el tema de la magia al principio pero después se enganchó y nos lo pasamos francamente bien. Particularmente me gusta porque es bastante tierna, divertida y dramática, y tiene un punto sutil de crítica social.
La última página de cliffhanger nunca debió existir. La metimos por si éramos capaces de seguir finalmente, pero una vez más quedó en el aire: esa pobre cría perdida en sabe Dios qué dimensión de la que nunca más se supo… He dejado hechos unos zorros a un montón de personajes… La mini de Capa y Puñal era una presentación de una serie propia que pretendíamos lanzar después. Teníamos un montón de ideas con Pesadilla, uno de mis villanos favoritos, pero no hubo manera. Los números no funcionaron ni metiéndolos en el crossover de Spider Island.
P.M.: Así que cuando haces el número uno ya sabes que va a ser una miniserie.
E.R.: El tema es que las miniseries nunca van a vender como una serie regular. Cuando creamos Pretty Deadly, a pesar de que no teníamos expectativas y dudábamos mucho de que pudiese ir más allá del primer arco, sabíamos que llamarla miniserie sería matar el proyecto antes de arrancar. Nuestro ritmo de trabajo no nos permite sacar un número al mes, ya que es un proyecto difícil en general y tanto Kel como yo invertimos bastante tiempo en las páginas. Así que nuestra opción fue plantear una serie regular a lo Brubaker, por arcos argumentales.
Realmente esto ya es un tema de educación. Si quieres un proyecto que esté dibujado con detalle, por un mismo artista, no puedes esperar obtener un cómic al mes a cambio. Los fill-ins son bastante injustos porque convierten un trabajo concebido entre dos personas en propiedad del escritor, ya que, en general, a él le resulta más fácil mantener los plazos, y para él no hay problema. Hay que entender que un dibujante no es una impresora de ideas sino también una parte del proceso de creación. En un buen trabajo, el dibujo y escritura se retroalimentan siempre, convirtiéndose en algo indivisible. Por eso es tan importante considerar la identidad de ambos creadores.
P.M.: Tus siguientes trabajos que haces en Marvel se pueden englobar en la franquicia arácnida (incluso algún número de Spiderman), que dirigía por aquel entonces con bastante acierto Stephen Wacker.
E.R.: Sí, empecé en la oficina de Tom Brevoort, que por aquel entonces llevaba a Los Vengadores, El Capitán América, Bucky y demás. Evidentemente, mi estilo no encajaba en la línea limpia que utilizaban en aquellas series en ese momento, aunque en su oficina siempre tenían un par de series o miniseries para. A Tom (Brevoort) le gusta también mucho Marcos Martin. Hice algún numerito de Firestar porque se ve que al hombre le gustaba mi estilo. Lo que hizo Tom, como no tenía espacio entre sus proyectos para meternos, fue transferirnos a la oficina de Steve Wacker. Steve es la persona con la que he trabajado más a gusto y que más dio la cara por mí en todo momento durante mi paso por Marvel. Creo que ha hecho un trabajo magnífico en Marvel durante estos años y no se le ha reconocido lo suficiente. En premios y dentro de la propia editorial sí, pero vamos… Cuando salió el anuncio de la película de la Capitana Marvel, sabiendo lo difícil que fue para ellos reconstruir el personaje, me emocioné. Sé que los que han estado involucrados no van a ver un céntimo, pero digamos que fue un momento importante.
Wacker tenía su esquinita con dibujantes así un poco peculiares y haciendo cosas que además vendían, a pesar de salirse un poco de lo que era la regla de aquel momento. Y ahí caí yo, en el lugar perfecto, en la oficina de Spiderman. Me dieron algunos números y cosas en Spiderman para que pudiera cobrar royalities además de hacer miniseries y cosas así. Siempre queríamos hacer más. En Capa y Puñal fue un dramón porque ahí sí que pudimos planificarlo en persona, en Londres. Y recuerdo una reunión que tuvimos en una terraza tan informal pero tan habitual y friki. Nos reunimos Nick Spencer, Wacker y yo y nos pusimos a planificar la serie. A los tres nos gustaban mucho los personajes y empezamos a sacar ideas de cómo hacerlo. Tiene un problema que es un planteamiento de base muy de su época, un tanto racista con el tema de capa/oscuridad y puñal/luz/chica rubia. Es un tema peliagudo, sobre todo en Estados Unidos. Había que tratarlo con delicadeza y hacer algo interesante. La idea era hacerlo serie regular y Wacker nos metió en el evento de Spider-Island para que las tiendas lo pidieran. Porque si tu sacas una miniserie de Capa y Puñal directamente no te compra nadie. Ni tres ejemplares. Sobre todo porque si están pasando tres eventos a la vez, otros cuatro crossovers y además estás sacando doble número de Vengadores al mes por la película o por lo que sea. Así es imposible. Por eso nos había hecho parte del evento, pero su idea era que con que metiéramos un par de arañas por ahí ya iba a valer. Algún detalle, sin atarlo a la trama general más que ligeramente. Todo para lanzar la serie de forma regular. Era también cuando estaba intentando lanzar Capitana Marvel y captar un público poco habitual a la vez que lanzar personajes que molan.
P.M.: Precisamente Nick Spencer es un autor muy ligado al comic independiente en los últimos cinco años. Ha probado muchas miniseries hasta dar con la tecla. Proyectos cortitos hasta encontrar la fórmula. ¿Llegaste a hablar con él de hacer algo independiente?
E.R.: Sí, pero lo que pasa es que yo ya estaba con Kelly Sue. Nick habló conmigo y es un tío que me cae bien y me gusta todo lo que hace. Muy consciente. Siempre intentando equilibrar todo el tema de vender con hacer algo interesante. Es lo de siempre, una vez empiezas a trabajar para ti mismo te vuelves un mercenario, porque si no vendes es imposible seguir haciéndolo. Yo con Pretty Deadly he tenido una suerte que no me lo puedo ni creer. Y Kelly Sue lo mismo. Ni ella, ni yo, ni nadie podríamos haber esperado lo que ha vendido hasta la fecha. Al final ha sido alucinante. Así que sí, en su día hablamos de hacer algo para Image cuando él estaba allí, pero coincidió que yo ya tenía algo con Kelly Sue y ya estábamos hablando de Pretty Deadly. Y es que realmente antes de hacer Capa y Puñal con Spencer yo había colaborado en Osborn con Kelly Sue. Cuando estábamos cerrando el final del primer número ya estábamos hablando de hacer algo solas. Fue una conexión brutal. Y aparte de eso, que yo ya tenía algo más de nombre… Reconozco que el trabajar con las grandes también tiene algo de barrera idiomática. Yo empecé en Polaqia haciendo dibujos y trabajando como creadora completa. Pero para poder venderte como autora completa en USA tienes que hacer mucho más. Entonces puedes trabajar para Marvel o DC y hacerte un nombre y luego ya trabajar en tus propios proyectos. Así que cuando Kelly Sue mencionó hacer algo de creación propia yo me lancé de cabeza.
P.M.: Genial, pero no está mal recordar que eso fue en una época en la que todavía no estaba de moda todo esto del cómic independiente. O no tanto como ahora, al menos…
E.R.: Si, es cierto. Por aquel entonces estaba Matt Fraction haciendo Casanova en blanco y negro en Image antes de pasarse a Icon. En Image lo habían hecho algo regular, en parte porque lo habían hecho en blanco y negro, y luego al llevarlo a Icon le metieron color. Estuvo bien. Pero claro, Icon era para estrellitas en Marvel. Nosotras no teníamos el perfil ni el caché para publicar en Icon. Estuvimos dándole vueltas para ver qué hacer. Pensamos en Dark Horse… pero las condiciones de Dark Horse en creaciones propias… uf. Yo cada vez que oigo que Dark Horse y Vértigo hacen proyectos de autor, pues como que me da un poco la risa, porque ellos se quedan una parte bien gorda. Así que hoy la única opción, aparte claro de Panel Syndicate, es Image. Image trabaja como una cooperativa. Ellos no se quedan absolutamente nada. Es una plataforma de auto-edición. Funciona casi como Polaqia. De hecho es que tienen mejores porcentajes que nosotros. Es impresionante. Yo la primera vez que vi el contrato con Image, no me puse a llorar de milagro. Funciona prácticamente como una cooperativa. De cabeza. Además nosotros cuando hablamos con [Eric] Stephenson, creo que allí todavía no estaban Brubaker y Matt.
P.M.: Por aquel entonces 2008-2009 estaban de perfil alto en Image Chew y Morning Glories. Brubaker todavía no había ido a Image a hacer Fatale, aunque me imagino que eso ya se sabría de antes… Él y Vaughan fueron los responsables finales del efecto llamada.
E.R.: Si, algo así. Evidentemente hablamos con Matt porque estaba muy contento. Hablamos también con Eric, que resultó ser un tío super abierto. Y claro, nos permitían conservar los derechos. Además de Image, también tuvimos una opción de cómic digital, que es algo que ya habíamos estado hablando entre nosotras y Warren Ellis. Había un tío que estaba intentando montar una plataforma solo digital, muy similar a lo de Panel Syndicate. Sin embargo, luego aquello no acabó saliendo, pero nosotras por aquel entonces etábamos dudando mucho. Yo estaba planteándome hacer la serie a dos tintas y cosas similares, intentando ahorrar. Hay que ponerse en la situación: estás en Marvel y te vas a marchar. Y sabes que van a reaccionar como van a reaccionar. Aunque en ese momento yo tampoco era tanto, porque aunque teníamos buenas críticas de la prensa especializada, tampoco es que fuéramos unas estrellitas.
P.M.: Claro, además no es lo mismo que se vaya un guionista que puede compatibilizar el trabajo con Marvel a que se vaya una artista, que solo va a trabajar en ello. Hay que tener en cuenta que, pese a lo que muestre el presente, por aquel entonces no había dibujantes famosos por aquel entonces en Image.
E.R.: Claro, claro. Yo me estaba jugando el cuello. Así que buscaba una forma de trabajar de forma rápida, para no tener que pagar a entintadores o coloristas. Me plantaba hacerlo a dos tintas y yo creo que Steve nos ofreció hacer lo que quisiéramos. Nos apoyaban al 100% con cualquier formato. Se me abrieron los ojos. Al final, claro, eres tú el que pagas todo y el que arriesgas, pero ellos te apoyan con cualquier edición que quieras hacer. Salió todo redondo. Y como Matt estaba contento y lanzando los nuevos proyectos con Image por aquel entonces (Sex Criminals, Satellite Sam) pues fue coincidiendo todo y ayudó a que nos auto-convenciesemos Una suertaza. Todo salió bien. Realmente, si por mi fuera, yo me habría ido un poco antes a Image. Mi plan era no haber aceptado la Season One de Marvel.
P.M.: Sí, cierto. Pero antes me gustaría hablar de Osborn, donde supongo que Stephen Wacker os reúne a ti y a Kelly Sue.
E.R.: Sí, nos pone a las dos a trabajar juntas. Fueron Steve y Alejandro Arbona, que estaba trabajando de editor por aquel entonces en Marvel. Alejandro es un tío que también tiene muy buen gusto. Ahora está en Valiant.
P.M.: Lo que te quería comentar es que en Osborn ya se empezaba a notar un cambio en tu estilo, jugando en este caso un poco más con la claustrofobia, con las líneas…
E.R.: Lo de Osborn fue muy cachondo. Porque nosotros realmente cogimos a Osborn después de Asedio. Y claro, la gente estaba tan hasta los cojones después de tenerlo hasta en la sopa que no querían ni verlo [Risas]. Todo empezó, creo, con una coña en la oficina de Spiderman con la serie de televisión de Oz, la de la HBO, la de la cárcel. Se habló un poco de meter a Osborn ahí y la broma siguió adelante y hicieron la serie basada en eso. Y claro, Steve nos dijo que teníamos que trabajar las dos juntas. Nos conocía por separado y sabía que nos iba a ir el rollo ese. También Alejandro nos conocía y como estaba trabajando en ese momento de editor asistente nos dijo que podíamos hacer lo que quisiéramos, porque más o menos aquel personaje en ese momento ya no interesaba nada a nadie y no iban a prestar atención a lo que fueramos a hacer. No se esperaban ni de coña que la miniserie fuese a tener ese éxito de movida alternativa.
P.M.: Sí, todo el tema de los tatuajes de Osborn y demás. Con eso pasó un poquito lo que estaba empezando a pasar también con los trajes de Capitana Marvel y las Carol Corps.
E.R.: Si, aquello fue la monda. En la línea de ese rollo de crear comunidad. Es que Kelly Sue es… es super extrovertida. Yo me quedo un poco rezagada en ese sentido pero ella se abre a todo. Es maravillosa y le encanta llegar a la gente. Y a la gente le encanta llegar a ella. Tiene fuerza. Lo de los tatuajes creo que fue idea de Steve o algo así. Les apetecía hacer algo raro y se acabó volviendo loco con los fans de Osborn. Por momentos era demencial. Y bueno, ni te imaginas lo que está pasando a día de hoy con lo de Non Compliant de la maravillosa Bitch Planet. Cuando creamos la serie, el poder trabajar con villanos y hacerlos adorables era muy interesante. Y tenía un montón de carisma. Además luego cogimos el personaje de Norah (eso también fue idea de Steve). Al principio no íbamos a usarla pero al final la empleamos en la serie y resultó ser muy buena idea. Norah fue el contraste perfecto. La tía que no es nada dulce, que da grima, que no limpia nunca porque es una adicta al trabajo, que se mete en un submarino siguiendo una pista para hacer un artículo… Muy loca. Y sirve para identificar. El tándem me hizo especialmente gracia.
Además tuve la oportunidad de crear a cinco personajes nuevos que algunos han tenido posteriormente cierto peso, como June Covington o Ai Apaec, a quien le hicieron las diez mil judiadas. Y a June Covington también. Pero vamos, son cosas con las que tú como creador no puedes hacer nada. Precisamente eso es lo que significa trabajar para alguien, ya sea Marvel o DC. Tu creas un personaje, te vuelcas en él totalmente y luego lo dejan hechos unos zorros. Pero no pasa nada, es algo con lo que cuentas. La verdad es que Osborn tuvo unas críticas espectaculares a nivel de prensa especializada. Yo alucinaba bastante, porque venía de Strange donde yo había tenido unas críticas pésimas. Cuando entré, tenía un estilo más limpio, con algo de manga y un poco de animación. Esa mezcla quizás hizo que a la gente le costó mucho entrar en mi estilo y no tenía críticas buenas. Aunque la verdad es que a Mark también lo habían puesto verde y yo en parte creo que por eso no había seguido, aunque como te decía al principio es uno de los mejores proyectos en los que he estado. Era un rollo un poco extraño porque en un número te daban una puntuación de un 1 y en el siguiente te daban un 10 o un 5. La gente estaba un poco aturdida. Muy raro. Con Osborn fue todo muy rápido, se coló y la gente lo hizo popular. Pero claro, no se encontraba en las tiendas. Como siempre. Así que era popular pero con unas ventas de 20.000 o 22.000. Y si no subes de 20.000, la cosa se acaba. Pero Osborn lo hizo bastante bien porque nunca tuvo pretensión de ser nada más allá de una mini. Así que pudimos acabarlo como estaba previsto, que también está bien de vez en cuando dejarlo todo acabado.
P.M.: Y hablando un poco de los personajes en sí, tanto de Osborn como de Strange, ¿tú que influencias tienes para los personajes? ¿Cómo les ves?
E.R.: En Osborn pegué un cambio de estilo. Reconozco que al principio me costó un huevo entintar bien. De hecho, seguramente en la entrevista de 2009 ya comentaríamos eso. Me dio bastante guerra. Y muchos reparos y traumas. Pero quería hacerlo. Y es que seguramente yo hubiera entrado en Vértigo si no me hubiera entintado a mí misma. Al principio en proyectos como Strange la línea es super fina y el color es muy plano. Hay más peso de por sí. En Osborn me solté más. Como ya era de por sí oscuro y agobiante, pues le pegaba mucho lo que quería hacer así que me solté. Además tenía mucho apoyo en la oficina porque les gustaba lo que hacía. E idem con Kelly Sue. Coincidió que cuando empezamos a trabajar juntas las dos estábamos en el mismo punto, intentando esquivar estas cosas de Women of Marvel y todas estas mierdas que estaban sacando promocionales. Teníamos mucha empatía. El equipo entero. Alejandro y Steve también. Así que al final salió bien.
P.M.: Y luego, de ahí, pasas a hacer una novela gráfica del Doctor Extraño que te tiene cosa de un año sin sacar casi nada al mercado. ¿Cómo nos explicas eso?
E.R.: Yo creo que el orden fue Strange, Osborn, Capa y Puñal, alguna cosa puntual y luego la novela gráfica. Y luego ya los dos números de Capitana Marvel. Fui a Nueva York en 2011 y justo cuando estaba allí sucedió el despido masivo en Marvel, después de que Disney comprara Marvel. Parecía que no iba a pasar nada, que la situación iba a ser cojonuda, y de repente fue “¡Zasca!”. Muchos cambios. Una de las personas a las que despidieron fue Alejandro. A él lo despidieron cuando yo estaba en Nueva York y habíamos estado hablando todo el fin de semana para intentar preparar algo con Blade.
P.M.: ¿Con quiéeeen?
E.R.: Con Blade.
P.M.: ¡Qué dices! [Risas]
E.R.: [Risas] Queríamos plantear una historia Kelly Sue, Alejandro y yo de Blade. Y fue una putada. Además yo quería plantear cosas de Marv Wolfman, de la serie clásica de Tomb of Dracula, meter a la hija de Van Helsing. Aquello tenía una pinta brutal. Me hubiera encantado hacerlo. Una cosa pasmosa. Pero no pudimos sacarlo adelante. Habíamos pasado todo el fin de semana pensándolo y planificándolo, así que fue un bajón. Y entonces empezaron a cortar todas las miniseries y todas las series regulares que no vendían. Y duplicar el número de Vengadores porque ya se sabía que iba a haber película en nada y todo el mundo estaba como loco con lo de vender, vender y vender. Y coincidía con el reboot de DC. Todo el mundo con la soga al cuello. La salida de Alejandro fue muy flipante. Hablé con Steve y con Ellie Pyle, otra de las asistentes de Steve y otra de las personas a las que tengo muchísimo aprecio. Le habían dado la novela gráfica del Doctor Extraño como primer trabajo para hacer y me llamó. Y yo les decía que claro, me iban a tener un año sin salir en las tiendas.
P.M.: Es que en realidad hasta la fecha tú habías publicado una docena contada de cómics y ahora meterte en eso…
E.R.: Claro. Íbamos a hacer una cosa chula, pero para mi carrera era un parón. Además en aquel momento estaban bajando las tarifas a todo el mundo. Intentaron bajarme la tarifa y Ellie se peleó por mí, consiguió que no me la bajaran y conseguí meter a Jordie [Bellaire] por primera vez en Marvel. Lo primero que hizo fueron las novelas gráficas de Extraño y Hulk. La pedimos Tom Fowler [dibujante de la Season One de Hulk] y yo, y esos fueron sus primeros trabajos. Y nada, la razón por la que hice la Season One fue porque Kelly Sue y yo no nos habíamos coordinado todavía para empezar Pretty Deadly, mi novio se había quedado en paro y yo estaba acojonada. No teníamos muchas opciones. Así que iba a hacer eso, sacarme una pasta, ahorrar eso y luego lanzarme a Pretty Deadly. No tenía hipoteca, no tengo hijos así que podía lanzarme a ello y arriesgar. Y luego ya me buscaría la vida.
¿Podría haber hecho otras cosas? Si. Me arrepiento mucho de no haber ido a Dark Horse a intentar trabajar con John Arcudi, porque me encanta su curro y me gusta AIDP. Hubiera estado bien. Y eso que había hecho una portada para ellos. Pero me acojoné un poco. Y que además ya estaba con la gente que me gustaba trabajar así que acepté. Y Ellie se peleó mucho por mí entrando en la habitación de los tiburones y me mantuvo las tarifas. Y así es como te mantienes en una empresa de este tipo. Hay editores buenos y otros no tan buenos. Los buenos son los que se lo juegan todo por ti y discuten allí. Y al final me apeteció hacerla. Greg [Pak] parecía un tío majo, la idea había sido de Alejandro antes de irse y nada, adelante. El trabajo fue lo que fue. Tom Brevoort se metió otra vez y él tenía la idea de mi trabajo limpio del principio ya que no estaba tan acostumbrado a mi nuevo estilo. Y al final, como era para todos los públicos y para captar nueva gente, pues acabó habiendo algunos problemas de entendimiento por el medio, pero creo que quedó un producto bastante bueno. Obviamente, el guión está bastante limitado porque es una revisión. Por lo menos no hicimos una reinterpretación, sino una especie de aventura perdida. Y me gusta trabajar con Wong, me hace mucha gracia. Hay topicazos y cosas que no me molan, pero para el tipo de producto que era estoy bastante satisfecha. No me lo pasé muy bien trabajando ese año, pero al final la cosa salió bien.
Tras esto yo ya estaba preparada para dejar Marvel, porque ya teníamos casi todo cerrado para lanzar Pretty Deadly de una vez por todas. Así que no me quería meter en otra movida porque si no, no íbamos a arrancar nunca. Había pasado un año entero desde que habíamos planteado ya todo en serio. Y yo sabía que iba a perder mucho tiempo en los primeros meses del proyecto. Pero antes de irme me pidieron ella y Steve que cerrase el arco de Capitana Marvel para hacer algo así especial. Una especie de despedida.
P.M.: Y un poco de promoción, algo encubierta.
E.R.: Sí, también promoción. El tema es que Capitana Marvel se lanzó con un dibujante que no estaba muy preparado para un tebeo con el tono que pretendía tener. Era un dibujante más de pin-ups, más de acción. No estaba ajustado a lo que Kelly Sue es como autora. Aún y así no funcionó mal. Y yo cerré el arco para darle un estilo algo diferente quizás. Y claro, si a mí me piden algo ellos pues no voy a decir que no, y menos si se trata Capitana Marvel con tanto ella, como Steve como Jamie [McKelvie] involucrados. Y es que la serie tardó un año y medio en ser aprobada. Y al final, mira, peli. Es emocionante que haya salido tan bien.
Y cuando ves a la gente disfrazada… pues flipas. Es muy alucinante. Al principio cuando lo veía así en el ordenador, pensaba que toda esa gente estaba fatal de la cabeza. Y luego vas allí y ves que el tema este de sentido de comunidad que tienen y es muy agradable. Hay choque cultural al principio, porque creo que aquí en Europa somos un poco más reservados, pero es que te contagia. Y lo agradecido que es todo el mundo. Es muy abrumador. Sin ir más lejos, el fin de semana pasado estuve en Leeds [Thought Bubble 2014] y estuve firmando siete horas el domingo porque el sábado estuve liada con dos charlas. Y tras siete horas, la última tía que tenía en la fila se me puso a llorar, estaba nerviosa y nos estaban echando y se emocionó dándome las gracias por estar ahí, pensando en las mujeres que ahora trabajan en ese mercado a alto nivel. Fue bastante abrumador la verdad. Desde casa no te das cuenta, pero estas cosas te hacen ver lo importante que es y que hay gente que te está viendo y quiere llegar a ser algo en esto. Entiendo que ellas todavía no tienen muchas personas en las que verse reflejadas.
Y esto es un poco lo que también ha pasado con Capitana Marvel y otras colecciones similares. Se ha generado un espacio muy importante, una zona segura. Luego además tienes otras cosas, claro. Pero al menos hay una opción para quien quiera empezar a leer cómics desde cero sin haber entrado en una tienda de tebeos en la vida. Porque al parecer, hay gente que se siente incómoda en las tiendas. Me hace gracia que esto se haya convertido en objetivo de mercado ahora. Feminismo consumible y consumista.
P.M.: Claro, pero Capitana Marvel en total ya lleva más de treinta números…
E.R.: Es que es eso. Y yo que sé, lo de Pretty Deadly. A ver, no está orientado a ningún tipo de público. Pero somos dos creadoras, así que el planteamiento desde luego patriarcal no va a ser. Y con esta aceptación, pues…
P.M.: Hablemos pues de Pretty Deadly. ¿La idea era hacer unos cuantos números y luego volver a Marvel?
E.R.: La idea era probar y a ver cómo salía. Tenía intención de poder volver. Lo que pasa que bueno… Cuando me fui hubo alguna reacción un poco jodidilla. No sé muy bien cómo explicarlo, porque realmente tampoco me lo han dicho a la cara, pero sé que a alguna persona le pareció mal que me fuera. Recuerdo eso y que cuando Pretty Deadly se anunció en San Diego, recibí un email bastante corporativo en plan “tienes una carrera con nosotros”…
P.M.: Ya, pero eso me hace gracia, porque… ¿para entonces cuantas portadas habías hecho en Marvel hasta entonces?
E.R.: Una
P.M.: ¿Una? Vaya, pensaba que cero. Es que…
E.R.: Si, suena ridículo que te digan eso. Lo normal es que tú te vayas por lo que te decía antes. Habían recortado todas las miniseries y no había casi ni sitio para el estilo que yo hacía. Me voy fuera e intento hacer algo más de creación propia y luego ya vuelvo y si esto se ha recuperado podemos hacer cosas más interesantes. Cuando lo cuento ahora me rio, pero en el momento me quedé un poco asustada…
P.M.: Claro, es que por aquel entonces no sabías que ibas a vender 60.000… Era una incógnita.
E.R.: Eso es. Y ya era de perdidos al rio. Por lo menos la idea que yo tenía de Image es que aunque no vendas muchos números cómic-books, luego con el recopilatorio la cosa se puede recuperar e igualar. Con un ritmo de trabajo majo puedes conseguir no perder pasta. Pero claro… luego resultaron ser 60.000 ejemplares del primer número. Aquello fue brutal. Me caí de la silla cuando me mandaron los números iniciales de ventas, que habían sido 51.000. Y luego las llamadas durante los últimos días de reserva a las librerías para que pidieran más hicieron que subieran hasta los 58.000 o 60.000. Una pasada. Con el resto de los números también me quedé muy sorprendida, porque no había tantas portadas alternativas.
P.M.: Si te digo la verdad, yo suponía que estaría en torno a las 30.000 el primer número…
E.R.: Pues nosotras esperábamos que 11.000. Y necesitábamos 7.000 para quedarnos igualadas. Y al final estuvo guay. En el resto creo que pudimos superar en todos los 25.000. Creo que el último fueron 22.000. El recopilatorio se agotó. Hicimos una movida muy rara porque no sabíamos que iba a ser así. Salió y se agotó al mes y tuvimos que esperar casi mes y medio para sacar la segunda edición. Lo conseguimos sacar super baratito, que era la idea.
P.M.: Y lo bueno del recopilatorio fue que, dos o tres semanas antes, salieron las nominaciones a los Eisner. Que supongo que ayudan… [Risas]
E.R.: Ya te digo. ¿Te acuerdas de lo que decía de ser mercenaria? [Risas] Estuvo genial. Me hizo mucha gracia porque por aquel entonces me habían llamado para hacer un podcast de Marvel y me decían algo así como “claro, tú te fuiste de Marvel porque ya eras tan famosa…”. Y a mí me entraba la risa, mi situación era muy, muy discreta cuando salí de allí. [Risas]. Lo del Eisner es cierto que no me lo esperaba y a veces es una chorrada, pero para poder vender tu propio trabajo está muy bien. Y además las tres nominadas: Kel, Jordie y yo.
P.M.: A mí lo que me hizo gracia fue, lo que te decía antes, que en Marvel habías hecho una sola portada y aquí te nominan a mejor portadista por las portadas de Pretty Deadly. Toma ya. ¡Zas en toda la boca!
E.R.: Si, ahora me están pidiendo, sí. Pero no tengo mucho tiempo. El tema es que claro, Marvel cuando yo estaba trabajando allí, usaban este estilo pictórico de portadas pseudo-realistas y demás. Había gente como Marcos [Martin] que si estaba haciendo un trabajo impresionante, pero Marcos es Marcos. Ya estaba en un nivel muy alto. No tenía nada que ver con lo que yo hacía, porque en el fondo yo llevo siete años en este tinglado. El lleva ya… no sé cuantos serán, pero quince años o así. Pero vamos, tenía una posición más sólida y yo no. Quizá en Marvel si que tenían la sensación de que yo me iba a quedar allí, porque era más joven o lo que fuera, y que me iba a formar allí. Pero yo ya quería hacer esto de Pretty Deadly. Y siempre les agradezco todo un montón y no me importaría nada en algún momento volver. Pero ahora mismo no. Si puedo evitar volver a hacer trabajo de encargo, así lo haré.
P.M.: Oye, y si vuelves… ¿qué te gustaría hacer? ¿Grupos? ¿Algo más urbano?
E.R.: La verdad es que ahora mismo no lo sé. Yo cuando entré en Marvel hice unas pruebas para Thor. Ahora con el tiempo reconozco que me siento más cómoda y cerca de la parte más urbana. También es cierto que son los tebeos que yo leía con Daredevil y demás. Pero cualquier cosa. A mí me gusta mucho Marvel. Siempre me gustó mucho más, ya desde pequeña. Me gusta más que DC, con perdón. Los mutantes también los leía mucho, pero ahora no quiero hacer cosas que no sea con mis personajes y crear mis propias cosas. Pero vamos, que haría lo que fuera. De hecho, la verdad es que no me importaría para nada volver a trabajar con el Doctor Extraño, y eso que ya he hecho dos libros. Pero como te decía, si en un principio puedo evitarlo, intentaré no volver a trabajar de encargo. Lo último que hice de encargo fueron las portadas de Hexed, de la nueva serie. Hicieron relanzamiento y lo hice un poco por compromiso y porque esa serie al final se lanzó conmigo en su día. Pero vamos, que prefiero quedarme en el bando del bien. [Risas]
P.M.: [Risas] Seguimos con Pretty Deadly. Cuentanos, ¿el proyecto iba a ser así desde el principio? ¿Ha cambiado mucho desde las primeras charlas? ¿Qué nos puedes contar de todo ello?
E.R.: El proyecto iba a ser una cosa completamente diferente. Western clásico 100%. Tema venganzas. Rollo de las pelis de los setenta que nos gustaba a los dos, especialmente Lady Snowblood. No sé si conoces, pero es una película japonesa de los setenta bastante salvaje, de una tía que nace en la cárcel porque su madre está presa después de que la traicione el marido… y es todo muy macabro con el espíritu de la venganza. La tía al final es una especie de ente que solo representa la venganza. Eso es lo que queríamos, una tía que lo matase todo y que infundiera miedo y hacer el western clásico siguiendo el estilo de Sergio Leone. Kelly Sue tenía varias ideas. Quería hacer un cómic histórico, pero le dije que mejor un western porque llevaba tiempo queriendo hacer un western por mi cuenta. Había hecho alguna tontería para Polaqia, con historias cortas y cosas así. Me llamaba mucho la atención trabajar en esa atmósfera. Y claro, si vas a hacerlo en el mercado americano y con una tía que es de Texas… pues como que te apetece mucho hacer un western [Risas].
Al final a Kelly Sue le acabó convenciendo lo de Leone. Le mandé un artículo para convencerla. No recuerdo la página web pero era sobre el surrealismo de las películas de Sergio Leone porque el tío era bastante fan de los pintores surrealistas e intentaba intentaba llevarlo a sus películas, esas sombras alargadas son de Chirico. Aunque representa el tema del western, luego lo comparas con una de John Ford por ejemplo y es distinto. Las de Leone son como más inquietantes, más extrañas, la música… Y le gustó. Así que al principio queríamos hacer un western de ese corte y a raíz de pensar en cómo trabajaba Leone, la cosa se fue torciendo hasta que al final me escribió un día diciéndome que iba a haber un conejo y una mariposa que hablaban. Y yo: “Pues vale, cojonudo”. A mí me parecía bastante fácil integrarlo. Si metes un trasfondo realista y luego metes el tema sobrenatural, que además yo ya tenía controlado por Hexed o Extraño. Digamos que el truco de meter terror o cosas extrañas es que el entorno parezca normal y da igual que sea hoy, el far-west o lo que sea. Mientras tengas un relato creíble donde luego añadas la parte sobrenatural, siempre te va a funcionar. Me hizo mucha gracia la mezcla porque me acordaba de un manual de rol muy cachondo de los noventa que era el Deadlands y cosas así. Zombies y western ¿qué podría salir mal?. A mí no me costó mucho entender la propuesta y pensaba que iba a salir bien sí o sí estilísticamente. Luego no sabía si iba a vender o no, pero cuanto más raro se iba volviendo, mejor. De hecho, el segundo arco es todavía peor… [Risas]
P.M.: [Risas] ¡¡Tela!!
E.R.: Si, en el segundo arco ya no tenemos nada que depender del western ni nada. Si y no, pero vamos, el pescado ya está vendido y se te puede ir un poco más la cabeza a la hora de diseñarlo.
P.M.: ¡Qué ganas! Otra cosa. He notado que en Bella Muerte no hay grandes splash-pages, cliffhangers continuos y todos esos artificios que quizá son más comerciales. ¿Es algo buscado?
E.R.: Sí, mira. Es un tema que después de haber trabajado cuatro años en tebeos de superhéroes y haber dejado a varios personajes bien jodidos, lo que menos te apetece hacer es cliffhangers. Por ejemplo, Capa y Puñal quedaron invertidos en la miniserie. Casey Kinmont quedó perdida en una dimensión que sabe Dios… y casi es mejor que hubiera muerto. Son cosas que no puedes controlar. Yo suelo leer bastante europeo, bastante americano y bastante manga. El ritmo que tengo en los tebeos es que intento descomprimir lo posible para que las cosas sucedan lo bastante lentas. Y para eso, la única forma de hacerlo en un formato de 24 páginas es metiendo un montón de viñetas para dividir la acción. Tal y como trabajamos Kelly Sue y yo, lo primero es que hablamos de la historia, casi como roleplay, poniéndote en el lugar de todos los personajes y de lo que harían. Algo muy orgánico. Mientras ella está escribiendo yo voy haciendo bocetos y dibujos. Por ejemplo, había un niña, si. Pero la niña no tenía ningún abrigo de buitre. Se lo puse y el buitre se convirtió en un elemento de la historia, de ahí salieron los animales, los animales totémicos representan a cada personaje, se llevaron a la portada, cada portada te introduce el personaje del tebeo y cómo es, el tema del mito, etc. Así, orgánico. Es una forma de trabajo totalmente orgánica y diferente a la que tienes en otros sitios en los que por ejemplo tienes que entregar un tebeo cada mes o cada dos meses o lo que sea.
Así que nosotras hablamos de todo eso desde el principio. El primer número es un poco incomprensible, y yo entiendo a la gente que comenta eso. Pero no queríamos que el pescado estuviese vendido desde el momento cerpo, como ocurre ahora en todos los episodios pilotos de cualquier serie, o las primeras entregas de una mini o lo que esa ya te dan mascado todo el conflicto. Este tiene un problema con nosequién, tiene que resolver este problema y se lleva bien con Fulano y mal con Mengano. Ya está. Ya sabes todos los problemas que tiene esa tía y qué es lo que va hacer en los próximos números. Nosotras no queríamos eso por nada del mundo así que el primer número pretendía ser simplemente atmosférico. Sabíamos que estábamos haciendo una serie regular, así que estábamos pensando en crear un mundo donde contar una historia a posteriori con los personajes. Pero puedes seguirla sin cerrar todos los cabos. No necesitas saber si Alice es hermana de Ginny o no. Necesitas saber que tienen una relación, que es conflictiva. No sabes si se quieren matar o aliar o lo que sea. No tienes por qué saber todo. Eres espectador y percibes lo que ocurre. Y me gustaba mucho la idea de empezar con una parábola en cada entrega.
Y luego en toda la serie solo hay un cliffhanger, en general los capítulos tienen una tendencia a que suba el tono y la tensión a mitad de cada capítulo y luego se rebaja antes de llegar al final. A mí esa idea me gustaba mucho más que el rollo de siempre ir hacia el climax al final. Tan de superhéroe. O sobre todo tan de los Muertos Vivientes, por ejemplo, que Kirkman, en dónde es parte del juego y se repite hasta la saciedad. A mí también me gusta leerlo de vez en cuando, pero no era lo que quería hacer.
P.M.: Aquí sí que es cierto que despista que tarde tanto en aparecer Muerte…
E.R.: Lo de Ginny, si. Y yo de eso estoy orgullosísima. Porque nosotros realmente vendimos a Ginny como el personaje principal durante meses. El tema de cómo se desarrolló Pretty Deadly fue una locura. Porque durante nueve meses solo hubo una imagen que salió. Porque yo no quería enseñar nada. Yo le dije a Kelly Sue que no quería que hubiera hype, que hubiera movidas. Sacamos aquella imagen en San Diego porque nos insistieron mogollón. Era aquella imagen de Ginny cosiéndose un brazo. Eso fue lo único que se supo de Pretty Deadly durante nueve meses. Hasta que salió la previa, claro. Y aún así, se formó un hype brutal. No sé si fue la imagen, si fue Kelly Sue, si fue el tono del western que no había nada en ese momento… no sé. Por eso Ginny se convirtió en el personaje principal de la serie cuando en realidad no lo es, porque es un reparto coral. Y me hizo mucha ilusión cuando en el primer capítulo casi no sale, solo sale en la última página. Es brutal. Es verdad que el primer número es muy confuso porque te suelta la canción y no se le presta mucha atención, pero está dibujada con tanto detalle que algo te dice que tienes que prestar atención… Y luego ya está el desarrollo qué es lo que crea el lazo con la niña. No sabes muy bien qué pasa, personajes que vuelven a aparecer o no, como con Sara, etc. Y luego es que sí, porque todo el mundo tiene peso e importa. Yo es algo que había hablado precisamente con Kelly Sue, y es algo que hace muy bien Naoki Urasawa porque te hace sentir que importan todos los personajes secundarios. Tienen importancia para el peso de la historia. Te hace sentir que el entorno totalmente realista. Cuanto más currados estén esos personajes, mucho mejor para la historia. Aquí tiene peso hasta la prostituta aunque sale muy poco. Que no son maniquíes. Desarrollar el mundo y la atmósfera es importante. En el segundo arco hay personajes nuevos pero también vuelven antiguos.
P.M.: ¿Cuándo vuelve la serie, por cierto?
E.R.: En principio para primavera. Yo durante unos meses he estado haciendo un par de otros proyectos mientras Kelly Sue lanzaba Bitch Planet y otros proyectos. Además tuvo algunos problemas familiares y necesitábamos respirar un poco, hablar y hacer investigación. La idea es sacar un arco al año por ahora. Van a ser cuatro arcos. Una de las cosas que yo decidí cuando planificábamos Pretty Deadly es que yo también tengo que hacer libros más pequeños. Porque no quería dejar Marvel o el trabajo de encargo para convertirme sola en la dibujante de Kelly Sue, porque yo también son creadora completa. Y ahora tenía la oportunidad de hacerlo, porque me lo he ganado. Y luego vuelvo. Y así me ayuda también para limpiar y volver luego a Pretty Deadly con más ganas. Porque nos quedamos las dos exhaustas. Fue heavy. El primero de ellos es para Island & 8house con una historia que he escrito yo y que está dibujando Hwei Lim y el segundo, todavía no puedo decir mucho, pero es una historia de sesenta páginas escrita y dibujada por mí. Ciencia ficción limpia y volviendo un poco a mis orígenes en Polaqia con un rollo de ciencia ficción social. En Image también. Lo anunciaremos en nada, en la Image Expo de Enero en San Francisco.
P.M.: Que pasada. En dos años has pasado de dibujar series secundarias en Marvel, con perdón, a tener tu propio proyecto como guionista y presentarlo en la Image Expo…
E.R.: Es un proyecto colectivo en el que soy una de las cabezas. Es una especie de grupo de antología/revistas, del tipo de Metal Hurlant, que estamos montando Brandon Graham y yo y en que vamos trayendo a gente que nos mola. Nos llevamos muy bien. Empezamos a hablar con el tema de Prophet y luego ya nos encontramos un día y desde entonces somos colegas. Tenemos una posición más o menos similar en la industria por decirlo de alguna forma… Y estamos intentando los dos hacer cosas independientes. Pero independientes de verdad, no independientes del mainstream. Es posible que Jose Domingo esté… Gente menos conocida y abrir una puerta a otro tipo de autores de Image que yo creo que le va a sentar bien, porque últimamente es todo high-profile y grandes nombres. Hablé con Eric la semana pasada y me comentó que adelante. Creo que el mejor sitio para presentar esto era la Image Expo porque es un proyecto que sé que va a ser difícil de vender. Va a ser más grande que un comic-book, etc. Eric nos ha apoyado en todo pero sabemos que va a ser difícil. Lo hacen por hacernos dejarnos hacer nuestro rollo y por la imagen que da, pero va a ser difícil. Tanto Brandon y yo podríamos hacerlo por nuestra cuenta, pero también es un poco luchar por este movimiento, porque el tema de entrar en los cómics y firmar contratos de mierda es habitual, así que si puedes luchar un poco por esto está muy bien. A ver qué tal funciona y si se puede mantener en el tiempo. Estoy muy orgullosa. A ver cómo va la presentación, porque los cómics saldrán para primavera. Ahora mismo estoy un poco saturada de tanta cosa. Es muy similar en cuanto a organización a lo que viví en Polaqia, pero esto lo estoy haciendo para el mercado USA y a una escala brutal.
P.M.: Ya que lo has mencionado varias veces… ¿qué tal con Eric [Stephenson]?
E.R.: Bien. Es un tío así un poco estoico, pero la verdad es que me mola mucho su forma de pensar. Tiene sus cosillas y al principio me costó un poco hablar con él, porque yo también soy bastante tímida, pero siempre nos ha apoyado en todo.
P.M.: Se ha convertido en una de las figuras más importantes del cómic USA. Y en tan solo cinco años o así…
E.R.: Y con razón. El tío desde fuera parece un poco arrogante pero se está peleando con Marvel y con DC y además está defendiendo una causa que merece la pena. A mí me gusta mucho. Me siento cómoda hablando con él. Y aparte eso, nos apoya siempre mucho y siempre que le preguntas algo te dice “Es tu libro, lo que quieras hacer se puede hacer”. Todos los libros que he estado haciendo por mi cuenta, él no me ha metido ninguna presión ni nada. Y se lo agradezco. Porque evidentemente para ellos Pretty Deadly es lo más importante, por la imagen, porque es lo que vende y pensaban que igual iba a ser el nuevo Saga o algo similar. Pero no puede ser. Es un producto diferente. En tiempos y en duración. Esto va a ser un arco cerrado cada aventura. La atmósfera cambia, etc.
P.M.: Y vosotros dibujáis fondos en las viñetas [Risas]
E.R.: [Risas] Sí, bueno. Entre otras cosas. Yo es que soy un poco obsesiva compulsiva últimamente con esas cosas y en Pretty Deadly hay un currazo ahí detrás bastante grande y yo necesito descansar un poco de vez en cuando.
P.M.: Con Kelly Sue cómo trabajáis. ¿Seguís el método Marvel o más a vuestra manera?
E.R.: A mí el método Marvel… En mi caso no funciona ni de broma. Y para Kelly Sue tampoco, porque ella además tiene un background de actriz, creo que en Nueva York. Hizo algo de teatro y estuvo en alguna academia. Hay una cosa que no nos gusta nada y es cuando la gente o los personajes gesticulan demasiado. Y esto es algo que pasa mucho en el comic norteamericano. Ella siempre cuenta una anécdota que le pasó en Capitana Marvel y que fue con Stephen Wacker. Era que ella siempre describe un poco cómo se siente la gente en las viñetas. Hay una escena con Tracy Burke, que tiene cáncer, en la que está hablando con Jessica Drew en el hospital. La descripción en el guión era algo así como “Ella está muy asustada pero ignora a Jess para demostrar que no lo está”. Ella siempre lo describe todo, lo que a mi me encanta. La actuación es lo más importante para nosotras y para eso es necesario saber exactamente cómo se sienten los personajes y qué es lo que dicen. Esa secuencia yo la resolví, haciendo que cuando Jessica sale de la habitación, hay un par de viñetas en las que Tracy agarra las sabanas y con ese gesto te das cuenta que la tía por dentro está destrozada. Este tipo de cosas siempre son importantes. Se puede explicar de mil formas, hay mucho lenguaje corporal con el que se puede jugar. Por eso para mí es importante de entrada tener todo el diálogo con el que trabajar para entender a los personajes. Las descripciones me hablan. Yo puedo tener una idea que a lo mejor no es la misma. Por ejemplo, en Pretty Deadly hay una escena que es muy interesante. En el combate que tienen Ginny y Alice por primera vez, parece que están peleándose a muerte. Aquí Ginny en un principio la iba a matar, pero es que a mí no me encajaba que tuviera sentido que la fuera a matar. Forma parte de su mundo y lo que está buscando es la aprobación de la Muerte y la Muerte pasa de ella. Es una perdedora. Así que en esa escena lo que hace en realidad es protegerla parando la espada. Y entonces, a raíz de la conversación que tuvimos sobre esto por teléfono, la relación que habíamos planteado con ellas cambió. Es un poco ese proceso. Es todo retroalimentación.
Por ejemplo, el número tres es mi favorito, porque la revelación sobre Foxy es bastante bestial. En general me gusta mucho como tratamos a los personajes masculinos. La mayoría están inmovilizados por errores que han cometido, y no son capaces de resolver ninguno de sus conflictos. Algo que en los tebeos de superhéroes sería impensable. En el cuarto número hay una escena de acción de ocho páginas de Foxy contra Ginny precisamente, que creo que es lo que más disfruté dibujando de todo el tebeo. No había diálogo ni había mucho espacio para que los personajes hablaran, entre otras cosas porque no les pega a esos personajes que se sienten a una mesa a hablar, así que había que definirlos a ambos mediante la acción. Fue una locura.
P.M.: A mí de lo que más me gustó fueron las dualidades entre las portadas y las introducciones con los animales y los personajes…
E.R.: Sí, la verdad es que sí. La idea de las portadas… yo quería hacer algo especial porque no había tenido la oportunidad de hacer ninguna en Marvel. Recuerdo al principio que nos llegaban consejos de… “mete algún personaje fumando en la portada”, muy tipo Fatale. Y yo respondía “Nooooooooo”. De hecho, mi primera idea de portada era la portada de la mariposa, incluso en ponerla invertida. El tema es que mi capacidad de venderme es muy mala. Así que enseñamos los bocetos y demás. Les parecían interesantes, pero claro, esto es lo que vendes antes de que salga incluso el primer número y no era muy buena idea, por mucho que a mí me molara. Mis expectativas tampoco es que fueran el vender mucho, y eso que ahora cuesta imaginárselo, pero no pensábamos vender casi nada así que queríamos probar con todo. De perdidos al rio. Tuvimos que pedir un adelanto y todo. Luego seguimos hablándolo así que la primera portada resulto ser la de Ginny reflejada en el rio y demás. Después de esta portada surgió la idea de relacionar al animal con el personaje y así crear parte de la historia. Retroalimentación. Y yo a veces solo quería poner cadáveres y esas cosas. El animal nos ayudó bastante a desarrollar las personalidades y las fábulas y demás. Es lo que te decía, un trabajo muy diferente.
Tuvimos una temporada que estábamos muy preocupadas porque teníamos la sensación de que Beauty era la “Mujer Lámpara”. Parecía que no hacía nada. Teníamos un montón de ideas pero no queríamos caer en ningún tópico, aunque la historia va de ella. De hecho, y ya en plan notas de autor, la historia se titula El Alcaudón, que es ella. Es un pájaro que se dedica a empalar a sus víctimas para comérselas. Es un pájaro muy mono del tamaño de un gorrión, pero que cuando caza lo que hace es empalar a sus víctimas. Ella es El Alcaudón, que es el título del primer arco. Todo tiene su historia.
P.M.: Yo creo, que además es algo que se suele decir mucho en este tipo de obras para quedar de culto, que es un comic que gana muchísimo en su segunda lectura respecto a la primera
E.R.: Sí, es eso. Yo creo que sigue esa tendencia en la que el lector tiene que poner de su parte para entenderlo y disfrutarlo. A mi particularmente me gusta ser lectora activa, y es también lo que me gusta dar como creadora. Porque es verdad que las escenas, aunque no lo entiendas muy bien, son suficientemente sugerentes para que te quedes pensando. Por ejemplo. Cómo puede ser que esta tía a la que esta otra le cae fatal no la mata si puede hacerlo con un pestañeo… Además los diálogos tienen mucha fuerza. A mi Kelly Sue me fascina. Cada proyecto que hace es diferente.. Tiene un tono más novelesco y trabaja no tanto con las imágenes como con los sonidos de las palabras. Yo, en gran parte, una de las cosas por las que elegí trabajar con ella y ser su media naranja en los cómics es porque cuando leía los guiones que me mandaba, no tenía que mirar quién decía cada cosa. Ya lo podía adivinar por el tono de cada diálogo. Es capaz de personalizar mucho los diálogos de la gente. Hace poco hicieron un programa de radio en el que metieron una adaptación de algunas escenas de Pretty Deadly y pusieron a actores interpretando. Sí, sí. Como lo oyes. Un programa de radio. Muy flipante. Pillaron las escenas del escorpión, la de los cuervos hablando… Y… Fue oir a Sara con su voz… y los pelos como escarpias. Te das cuenta de lo bien que funciona todo junto. Y todo el tema de la canción. Al principio Kelly estaba muy avergonzada de la canción, pero luego le acabó gustando. En la edición rusa contrataron a un poeta para traducirla. Santiago García ha sufrido bastante para traducirla también, que de hecho eso era una de las razones por las que queríamos un traductor específico.
P.M.: Oye, ahora que lo mencionas… ¿La traducción del título? ¿Cómo fue ese juego?
E.R.: Lo del título fui yo. Caí un poco en este rollo de “La Jungla de Cristal”, de cambiar la traducción y el sentido. Es que Pretty Deadly en castellano no tiene ningún sentido. Lo bello y lo grotesco y lo de que es peligroso. Eso no había forma de traducirlo al castellano. ¿Qué pones? ¿“Bastante mortal”? Es horrible. Además, cualquier cosa que tenga “Mortal” en el título ya echa para atrás. [Risas] Se me ocurrió porque parece un poco más western que el título original. Y porque Bella es un personaje y Muerte es otro, al fin y al cabo. Me pareció que podía quedar bien. Para la adaptación de Astiberri rehice el logo, del que estoy bastante orgullosa.
P.M.: A mí, la verdad, es que al principio se me hacía raro llamarle Bella Muerte a algo que se llamaba Pretty Deadly.
E.R.: Claro, es normal. Y más si estás al tanto de la escena norteamericana. A mí me pasaba igual. Es que al final yo he estado un año o más llamándolo Pretty Deadly y a mí también me chocaba. Pero a la gente que no ha estado pendiente, no les choca. Y al fin y al cabo, tampoco tiene sentido conservar exactamente el mismo título en inglés que en castellano. Y ya que estamos publicando en mi país y puedo opinar con mi obra, pues adelante. No puedo evitar muchas veces llamarlo Pretty Deadly porque yo estoy todo el día pensando en eso, pero Bella Muerte me gusta mucho porque tiene casi más connotación de western que el original, porque el español tiene mucha relación con el género. Y claro, en castellano además queda mucho más sonoro. Las erres y las eses en la canción… Es que tienes el inglés, que es un idioma muy neutro, y lo tienes que traducir al castellano que es mucho más barroco y marcado. Lo malo de aquí es que se pierde el tema de acentos, que Kelly Sue lo usa y lo hace muy bien.
P.M.: También me gustaría preguntarte sobre Jordie. Me parece una de las mejores coloristas de la actualidad y me gustaría saber qué tal es la relación con ella.
E.R.: Como comentaba antes, con Jordie empecé a trabajar en Doctor Extraño porque me gustaba su trabajo y la conocía más o menos por Twitter y Tumblr. Cuando me pidieron consejo, la mencioné a ella. Al principio tuvo algún problema porque ella se esperaba una línea clara y algo más brillante, pero yo ya estaba en una línea en Marvel a esas alturas que tenía que ver poco con lo que hacía al principio, así que Jordie tuvo que cambiar el color para que fuera más conservador. Luego todo mejoró hasta el punto que llegó un momento en el que yo podía decir que si ella no seguía en Marvel yo me iba. Una sinergia muy positiva. Y con ella también estuve en Capitana Marvel y ahí hizo un trabajo impresionante. En las escenas estas en las que hay un cambio en el tiempo y hay unos colores muy poperos, con mucho gusto, empleó una paleta muy buena. Y siempre basándose en la narrativa, que es muy importante. Me siento muy cómoda con ella. En Pretty Deadly también ha sido así. Al principio marqué un poco el tono yo con las portadas, porque ya tenía más o menos claro lo que quería. Hablamos de usar texturas y fuimos cogiéndole el truco. Del primer número de hecho hubo que cambiar y corregir algunas cosas para el recopilatorio pero cuando el número tres fue el mega-salto y el que marcó la pauta de Pretty Deadly definitivamente. Me parece muy importante tener un colaborador en el que poder confiar así. Y luego está el hecho de que la tía es una maquina a nivel de trabajo, muy rápida. Y como somos muy compatibles de gusto, pues perfecto.
P.M.: También me gustaría preguntarte sobre tus lecturas actuales. ¿Qué nos recomiendas? ¿Qué has leído últimamente que te ha molado?
E.R.: Lo último que me ha flipado ha sido el Alabaster de Tezuka, que lo sacó Astiberri hace poco y el Mutiny Bay de Antoine Cossé de Breakdown Press que me lo pillé recientemente. De libros me he estado leyendo El Maestro y Margarita, de Mijaíl Bulgákov, que me ha gustado muchísimo. También estoy leyendo El Silencio de los Animales de John Gray, que es un filósofo que cuestiona que podamos enfrentarnos a la naturaleza con la ciencia y demás. Afronta la ciencia desde la humildad original de Darwin. Lo he usado para trabajar con lo que estoy haciendo en 8House, que tiene mucho que ver con ello.
De cine un poco todo. Fui a ver Interstellar y me horrorizó. Me espantó y no tengo palabras. Fui pensando que iba a ver algo de ciencia ficción más o menos científica y… Debería haberlo sabido, la verdad. Nolan me parece un tipo super conservador y tengo mogollón de problemas con sus planteamientos en general. En Batman con el tema de los movimientos sociales y aquí con el tema de los planteamientos verdes ya me ha dado bastantes problemas. Y de series… me costó un montón engancharme a Walking Dead y ahora es un placer culpable absoluto. He tardado cuatro temporadas para engancharme, pero a mi novio le gusta el tema de zombis y me convenció y al final he acabado enganchada. El último capítulo es brutal. Pero las primeras temporadas me parecen infames. De todas formas de series tengo una sequía últimamente brutal. Es que series que me flipen como The Wire, que posiblemente sea mi serie favorita, pues echo en falta. Y también series de ciencia ficción. Tengo miedo a lo que puedan hacer con lo de La Fundación en HBO. Juego de Tronos no me gusta mucho la serie, lo reconozco. No me gusta cómo está llevada. No por tema nerd ni por los libros, simplemente por el ritmo, que no me gusta. Me parece que tienen problemas ahí.
La verdad es que últimamente me apetece más jugar a videojuegos que ver series. Pero por otro lado tampoco juego mucho últimamente, porque estoy esperando a que salga Metal Gear Solid para comprarme la Play 4, que quería comprármela antes de Diciembre para meterla en los impuestos, pero es que joder, no hay juegos. El Destiny no me llama mucho. Al Bioshock infinite jugué muy tarde porque no me atraía mucho el apartado gráfico pero al final estuvo muy bien. Estuve rejugando bastantes Metal Gear, pero es que es otro placer culpable. Es que desde 1996… Este año me rejugué el 3, que me mola mucho. Y así esperando a que salga el cinco ya.
P.M.: Ahora sí que sí, ultima pregunta. ¿El cartel para Getxo, qué tal ha ido la experiencia?
E.R.: El cartel lo hice con muchísima presión porque me lo pidió Borja. Hacer carteles para salones del cómic es horrible, y aunque me lo pasé bien al final tuve momentos de sudar. Venía de hacer la ilustración de Agents of S.H.I.E.L.D. y fue una pesadilla con la cantidad de gente involucrada, cuyo trabajo consistía en opinabra. Se metía gente de la productora, tenías que estar pendiente de que te mandaran los capítulos, te los mandaban a medias porque faltaban los efectos especiales… Al final… Uf. No me quedaron ganas de volver a hacerlo.
P.M.: Nunca digas nunca, como eres experta en el Doctor Extraño igual te piden algo para la peli… O de la capitana Marvel…
E.R.: Nah, no creo. Esos rollos van a otro nivel y no estoy muy metida. Pero si me haría gracia que metieran cosas. Es estúpido decir esto, porque yo no veo ningún duro, pero realmente reconozco que si salieran ahí una Casey o una Helen Cobb, que Helen me encanta, me haría bastante ilusión. Me emocionaría un poco.
P.M.: Serás la última enterarte, tú tranquila.
E.R.: Ah, desde luego. Sería al ver la película. Yo creo que ni Kelly Sue lo sabría.
P.M.: Con esto acabamos. Muchas (mil) gracias por tus respuestas, amabilidad y por este ratito que hemos pasado. Un placer. ¡Y mucha suerte en todos tus proyectos!
Mis más sinceras enhorabuenas a entrevistador y entrevistada. Me ha encantado, probablemente una de las que más he disfrutado su lectura en los últimos años.
Pedazo de artista, en Pretty Deadly he visto uno de los mejores artes en el mundo del cómic, sin dudarlo. Ojalá siga con el resto de proyectos y le vaya genial. Yo, personalmente, de los pocos artistas actuales que sigo y compro incondicionalmente (Quitely, Ríos, Allred, …). El único fallo que tiene Emma es que no es mi pareja.
Jose Angel Ares
Lector
13 octubre, 2015 13:07
Entrevista molona, de las de ganar tiempo en lugar de perderlo. Emma rules!
Felicidades por la entrevista, ¡super interesante!
Parece una persona muy normal y lo que dice tiene mucha lógica.
Yo leí los 2 primeros números de la antología Island y también me ha gustado su faceta de escritora. Aparte de disfrutar a otros artistas muy bueno que yo no conocía de nada.
Me queda una duda sobre la edición de Bella Muerte en España, y es si realmente se ha vendido bien o no. Que con las ventas en los USA se ha forrado está claro, pero me preguntaba si Rios ha conseguido ser profeta en su tierra…
o Alberto Jiménez Alburquerque, Jesús Saíz (aunque ya le hicisteis hacer un par de años pero sería interesante tras su fichaje para la Marvel), David Baldeón etc no será por fantásticos artistas españoles xD.
Bajavoz
Lector
13 octubre, 2015 17:15
Genial entrevista, se agradecen de veras esas respuestas extensas. Cuando el/la entrevistado/a tiene ganas de contar cosas se nota y leerlo luego es un verdadero gusto.
Muy ilustrativa en cuanto al funcionamiento y trato tanto en la casa de las ideas como en Image.
La evolución gráfica y mediática de Ríos desde la primera mini de Strange (de la que reconozco no me gusta el estilo) hasta Pretty Deadly es increíble. Sin olvidar el trabajo de Bellaire, claro, que es cojonudo también y ambas encajan a la perfección.
Un placer.
Damián González
Lector
13 octubre, 2015 20:01
Muy buena entrevista por cierto, por la parte final se ha hecho en verano no?¿ xD
Jack Knight
Lector
14 octubre, 2015 8:33
Pues me alegro mucho de que a Emma Ríos le vaya así de bien. En su miniserie del Dr. Extraño ya se le veía una dibujante con muchísimo futuro pero con Pretty Deadly creo que ha superado cualquier previsión, de lo mejor de la industria.
Save
Lector
14 octubre, 2015 11:47
Hay cosas bastante interesantes que rescatar de la entrevista. Sobre todo me ha resultado ilustrativa su visión de las diferentes editoriales/sellos (Imagen, Dark Horse, Vertigo, Icon).
HenryJones
Lector
18 octubre, 2015 17:28
Grandísima artista y genial entrevista. Eso sí en cuanto a gustos madre mia ..decir que te horrorizó Interestellar o que no te enganchas a Walking dead, me ha dejado atónito , pero bueno, a gustos colores y a olores la flores
Perdón yo me refería a Muertos Vivientes, el cómic, la serie es terrible , me he confundido. Pero de todas formas que siendo dibujante de comics no te guste Nolan es bien extraño
No veo la correlación entre ser dibujante y que te guste Nolan. De todas formas se centra en que no le gustan sus planteamientos (y yo estoy de acuerdo, Nolan es de un conservador que asusta).
No hay correlación alguna, cierto, pero por todo la origanlidad visual y guion la mayoria de artistas lo deberian encontar una buena fuente de inspiración. No se dónde ves conservadorismo en Interestellar, Origen o Memento, hablamos del mismo Nolan?si hay algo que le define es precisamente no ser un tio conservador.
Mis más sinceras enhorabuenas a entrevistador y entrevistada. Me ha encantado, probablemente una de las que más he disfrutado su lectura en los últimos años.
Concuerdo.
Pedazo de artista, en Pretty Deadly he visto uno de los mejores artes en el mundo del cómic, sin dudarlo. Ojalá siga con el resto de proyectos y le vaya genial. Yo, personalmente, de los pocos artistas actuales que sigo y compro incondicionalmente (Quitely, Ríos, Allred, …). El único fallo que tiene Emma es que no es mi pareja.
Entrevista molona, de las de ganar tiempo en lugar de perderlo. Emma rules!
Felicidades por la entrevista, ¡super interesante!
Parece una persona muy normal y lo que dice tiene mucha lógica.
Yo leí los 2 primeros números de la antología Island y también me ha gustado su faceta de escritora. Aparte de disfrutar a otros artistas muy bueno que yo no conocía de nada.
Me queda una duda sobre la edición de Bella Muerte en España, y es si realmente se ha vendido bien o no. Que con las ventas en los USA se ha forrado está claro, pero me preguntaba si Rios ha conseguido ser profeta en su tierra…
Lo dicho, enhorabuena!!
Ah, por cierto, gran idea lo del día de Emma Rios. ¡Una iniciativa genial!!!
Como seguro que triunfa, estaría guay que lo ampliarais a otros autores españoles. Marcos Martin, Daniel Acuña. Carlos Pacheco,…
o Alberto Jiménez Alburquerque, Jesús Saíz (aunque ya le hicisteis hacer un par de años pero sería interesante tras su fichaje para la Marvel), David Baldeón etc no será por fantásticos artistas españoles xD.
Genial entrevista, se agradecen de veras esas respuestas extensas. Cuando el/la entrevistado/a tiene ganas de contar cosas se nota y leerlo luego es un verdadero gusto.
Muy ilustrativa en cuanto al funcionamiento y trato tanto en la casa de las ideas como en Image.
La evolución gráfica y mediática de Ríos desde la primera mini de Strange (de la que reconozco no me gusta el estilo) hasta Pretty Deadly es increíble. Sin olvidar el trabajo de Bellaire, claro, que es cojonudo también y ambas encajan a la perfección.
Un placer.
Muy buena entrevista por cierto, por la parte final se ha hecho en verano no?¿ xD
Pues me alegro mucho de que a Emma Ríos le vaya así de bien. En su miniserie del Dr. Extraño ya se le veía una dibujante con muchísimo futuro pero con Pretty Deadly creo que ha superado cualquier previsión, de lo mejor de la industria.
Hay cosas bastante interesantes que rescatar de la entrevista. Sobre todo me ha resultado ilustrativa su visión de las diferentes editoriales/sellos (Imagen, Dark Horse, Vertigo, Icon).
Grandísima artista y genial entrevista. Eso sí en cuanto a gustos madre mia ..decir que te horrorizó Interestellar o que no te enganchas a Walking dead, me ha dejado atónito , pero bueno, a gustos colores y a olores la flores
Yo The Walking Dead no lo he visto, pero el resto de sus opiniones las comparto en su mayoría.
Perdón yo me refería a Muertos Vivientes, el cómic, la serie es terrible , me he confundido. Pero de todas formas que siendo dibujante de comics no te guste Nolan es bien extraño
No veo la correlación entre ser dibujante y que te guste Nolan. De todas formas se centra en que no le gustan sus planteamientos (y yo estoy de acuerdo, Nolan es de un conservador que asusta).
No hay correlación alguna, cierto, pero por todo la origanlidad visual y guion la mayoria de artistas lo deberian encontar una buena fuente de inspiración. No se dónde ves conservadorismo en Interestellar, Origen o Memento, hablamos del mismo Nolan?si hay algo que le define es precisamente no ser un tio conservador.