Forever Evil: Análisis definitivo

49
4057
Aviso de Spoilers: El artículo que sigue a continuación trata información de actualidad en Estados Unidos, por lo que puede desvelar detalles argumentales que todavía no han sido abordados en la edición española.

Parece que fue ayer cuando publicabamos la reseña del primer número de Forever Evil. Pero no, no fue ayer. Fue hace nueve meses. Eso es lo que hemos tenido que esperar para que Geoff Johns y David Finch publicaran la última entrega de esta maxiserie de siete números que debutó en pleno Mes de los Villanos. Forever Evil, o Maldad Eterna como ha sido traducido en nuestro país, heredaba muchas de sus tramas del evento inmediatamente anterior más conocido como Trinity War, que analizamos convenientemente en su momento, y a su vez deja un escenario ligeramente distino a su paso por el Universo DC, donde las intrigas y las especulaciones (además de los deja-vu) están a la orden del día. A la serie principal se le han unido (principalemente) tie-ins de dos series regulares, tres miniseries satélites (una de las cuales desemboca en un especial) y un crossover adosado entre otros cuatro títulos de la editorial que también venían de un crossover previo. Para desgranar todo el evento y como no podía ser de otra manera, desde Zona Negativa os ofrecemos un extenso artículo de análisis y opinión donde esperamos estar a la altura del evento. Sea cual sea. Eso sí, antes de comenzar y aunque la edición patria está a punto de alcanzar la cuarta entrega, debemos mencionar que si continuais leyendo podreis encontraros con spoilers. Bastante gordos. Dicho lo cual, empezamos.

Forever Evil, por Sergio Robla
 
Forever Evil 1

Números: Forever Evil #1-7
Guión: Geoff Johns
Dibujo: David Finch
Tinta: Richard Friend
Color: Sonia Oback
Portadas: David Finch
Editorial: DC Comics
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 3,99 $
Valoración:

 

Se hace difícil no hacer mención a lo ETERNO que se ha hecho este crossover, porque no nos podemos quitar de encima la sensación de que esta historia empezó con Trinity War, hace un año. Pero mientras Trinity War tenía un ritmo endiablado en el que no dejaban de suceder cosas importantes para la trama (y era una trama muy sencilla pero relatada de un modo adictivo), Forever Evil se convierte en su absoluta antítesis, repleta de finales de número anticlimáticos, de personajes de relleno, escenas forzadas por la necesidad del guionista, desarrollo argumental nulo y situaciones que no llevan a ninguna parte.

Aparentemente la conquista de la Tierra por parte del Sindicato del Crimen tenía que dar para una historia muy interesante, o interesante sin más, o un poco interesante… pero todo lo que nos podía interesar ha sido extirpado del evento. ¿La Liga de la Justicia ha sido derrotada? Le dedicamos dos viñetas. ¿El Sindicato ha huido de su universo tras cinco años asediados por una fuerza desconocida? No lo mostremos. ¿Owlman convence a Nightwing para que le ayude contra el Sindicato? No importa, nadie lo recordará cuando termine la saga. ¿Cyborg regresa derrotando a Grid? Que suceda fuera de cámara (en Justice League, eso sí). ¿Que Cyborg reaparece portando toda la información necesaria para salvar a la Liga? La credibilidad de esta historia se desmorona por momentos… ¿Que nos pasamos meses esperando el anunciadísimo “destino final” de Nightwing? Seguid esperando, por mucha escena tensa que pretendamos encontrar, nada se resuelve en esta historia.

Preparaos para siete “intensos” números con el Sindicato del Crimen muerto de aburrimiento, mientras Johnny Quick y Atómica son los únicos que saben cómo pasarlo bien, y Lex Luthor reúne un aburrido grupo de villanos para derrotarles. Ese es el argumento. Porque el concepto, en esencia, es ese: los villanos (algunos) se unen contra un mal común. Por desgracia el grupo es un desastre a ojos de los lectores, a pesar de que teóricamente son los favoritos del guionista… personalidades excesivamente parecidas, química nula entre ellos, dinámicas pragmáticas ante todo, y un Capitán Frío que da más pena que risa, porque se le retrata como el graciosete del grupo… ¬¬’

¡En ocasiones suceden cosas!
¡En ocasiones suceden cosas!

Parece mentira que esto sea obra de Geoff Johns, de quien los momentos de mayor gloria han sido los de mejor trabajo de personajes. Da la sensación de que todo esto no sea idea suya, sino de un Dan Didio que odia a Nightwing y esto solamente responde a un ancestral plan para cargárselo en el sentido más amplio del término. Y es extraño un trabajo tan desganado por parte de Johns, capaz de hacer maravillas en trabajos de encargo, cualquiera diría que finalmente ha encontrado la horma de su zapato y se ha topado con las malditas diferencias creativas que tantos disgustos nos están acarreando en DC desde forever.

Johns crea un evento que no quiere ser evento, que él se esfuerza en sabotear, relegando las partes realmente interesantes y trabajadas a Justice League, la serie en la que él tiene auténtico poder de decisión. Todo se mueve, gracias a unos rechinantes engranajes, en base a las necesidades editoriales. Es decir, según el escenario que se quiere dejar a posteriori, cosa que no tiene por qué ser mala, pero uno se da cuenta de que nada es orgánico, la máquina se fuerza en contra de su movimiento natural.

Notaréis que de la historia en sí he dicho poco, y es porque si digo más la cuento toda. El único personaje que evoluciona, y de una forma muy forzada, es Lex Luthor, que de repente ve la luz de forma vergonzosa en alguien tan supuestamente inteligente. De paso se arruina el Luthor que conocíamos, en contra incluso del que el propio Johns ha definido en anteriores historias, sin duda preparando el evento del año que viene. Otra necesidad editorial…

Aún tengo dudas en cuanto Tierra-3… ¿Por qué es Tierra-3 si nadie ha hablado de una Tierra-2? ¿Por qué esa asociación entre maldad y promiscuidad? Mirad los dos hijos Wayne, los dos Grayson, la actitud abiertamente sexual de Superwoman, la relación entre Johnny Quick y Atómica… ¿Por qué sólo escaparon Alfred y Atómica? Dudas que van desde el cráter en el guión o los caprichos editoriales…

A la mezcla sumamos un Batman constantemente enfadado y claramente inferior a Luthor, y una Catwoman que únicamente aporta… bueno… que es la única mujer en la historia a parte de Superwoman, pero ni como contrapunto al Hombre Murciélago sirve. Sobra. Probad a leer el cómic ignorando las participaciones de Selina y veréis el peso que tiene. El misterio del encapuchado se convierte en un Deus Ex Machina disfrazado. Está presente desde el principio pero hasta el clímax no tiene ningún peso argumental y, de hecho, su ausencia no variaría el resultado de la batalla, en la que Luthor seguiría siendo el máximo triunfador del enfrentamiento. Por cierto, ¿cuál era la utilidad de la capucha? Más caprichos…

La absurda máquina para “proteger” a Nightwing es para llevarse las manos a la cabeza.

Aviso de Spoiler

En busca de un golpe de efecto y para jugar con las expectativas de los lectores, Ultraman encarga a Grid que mantenga a Dick A SALVO, como quería Owlman, pero encerrado en algo más efectivo que una silla en el cuarto de la limpieza de la Atalaya, así que este echa mano de tecnología de Apokolips y construye una trampa en la que quedará encerrado cualquiera que trate de liberarle y morirá en una explosión a menos que sea Dick quien muera antes. Llamadme tiquis-miquis, pero hasta mi smartphone es más listo que Grid.

Pero bueno, con esto llenamos unas cuantas páginas, tenemos todos los foros hablando (y mal) del tema, porque el anuncio de la serie Grayson no era suficiente, tratamos de encontrar un suspense que añadir a la revelación de la identidad del hace-meses-que-no-me-importa encapuchado, y cuando ya nadie se acuerde de que Forever Evil no había terminado, os lo explicamos todo. Un desastre, de veras.

En el apartado positivo tenemos un David Finch que… perdón, se me escapa la risa. Aún recuerdo la cara de Ultraman después de que le golpease el rayo de Black Adam… Quería decir que pasando directamente al último número tendremos toda la acción que esperábamos, el resto son meros trámites, y realmente cumple como clímax. Pero un clímax de una mala historia no es suficiente para salvarla, o no siempre. La lástima es lo comentado, que si no es por la oportuna presencia del encapuchado (ensacado) hubiera sido muy diferente, viendo un enfrentamiento con el Sindicato bastante breve.

También es de agradecer que técnicamente la estructura del guión es muy independiente, autorreferencial, de modo que detalles como el efecto del rayo es explicado mucho antes de que sea necesario, o el pasado de Luthor que se explica y tiene su efecto en los momentos apropiados. Estos son los detalles del buen Johns, por lo menos sabemos que sigue vivo.

Al margen de mi opinión en cuanto a Luthor quedan en el aire ideas bastante interesantes para el futuro, y son ideas que encajan bien, algunas que sorprenden y que dan solidez y valor a su final. De lo que dudo es que los retrasos hayan sido motivados por reescrituras de guión, la simpleza del conjunto y el resultado final me hacen pensar que todo estaba bastante decidido de antemano. Antes me creo que obligar a Finch a dibujar más páginas y más viñetas por página hayan sido los culpables. Si le obligas a cambiar algo ya ni hablamos… Pero Finch es uno de los grandes enchufados de DC juntos a otros ilustres como Tony Daniel, y es difícil no darle lo que quiere…

En fin, como evento el resultado ha sido malo, pero como cómic, la miniserie de Forever Evil ha sido una decepción de proporciones épicas. No me hagáis hablar más…

Aunque… esa página final me ha hecho olvidar el resto de la miniserie. No sé si eso es bueno o malo, pero tengo unas ganas locas de ver cómo continúa la historia. No, no es ironía. Ha logrado despertar mi más histérica alma de fan, eso no lo puedo negar.

Aviso de Spoiler

La mejor página de la serie es la última (y no sólo porque se termina)
La mejor página de la serie es la última (y no sólo porque se termina)

Pero he de ser honesto, no se trata de un evento completamente fallido. Forever Evil es, a mis ojos, un mal cómic, pero ha creado un escenario en el que otras muchas historias han podido desarrollarse. El resultado y la calidad han sido desiguales, como veréis a continuación, pero sí se puede decir que las oportunidades han sido aprovechadas, pese a tener que lidiar con imposiciones editoriales. Ha tenido algunos problemas de cara a los lectores, como el anuncio del «destino» de Nightwing desde el primer número, y estar después mareando la perdiz durante meses sin hacer nada con ello. Eso no ayuda a congraciarse con unos lectores veteranos en esto de los eventos.

En el lado negativo del evento tenemos que la idea del mal trinufando y héroes y villanos plantando cara fue explorado en Crisis final, que ya tiene unos años pero que aún es demasiado reciente como para ignorarla, y que ya por entonces se dedicó un mes a los villanos de la editorial. Da la sensación de que estén tratando de dar forma nueva a unas ideas ya existentes, pero la redundancia no es buena. Tal vez Didio ha llegado al punto de haber olvidado realmente qué pasó antes de Flashpoint y toda idea le parece novedosa en The New 52, pero un poquito de memoria no estaría de más.

Justice League, por Sergio Robla
 
Justice League 024

Números: Justice League #024-029
Guión: Geoff Johns
Dibujo: Ivan Reis, Doug Mahnke
Tinta: Joe Prado, Christian Alamy y otros
Color: Rod Reis y otros
Portadas: Ivan Reis
Editorial: DC Comics
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 3,99 $
Valoración:

 

Tras el Mes de los Villanos y la reveladora narración de la llegada del Infiltrado (Outsider) a este universo y sus maquinaciones para traer al Sindicato del Crimen, la serie mensual de Justice League dedicó sus números a explicar algunas historias complementarias a Forever Evil. La mitad de ellos estarían dedicados a los miembros del Sindicato, y los demás al regreso de Cyborg a la lucha después de que su parte robótica se separara de su parte orgánica y asumiese el nombre de Grid (Red).

Sorprendentemente, siendo el mismo guionista, Geoff Johns, que la miniserie principal del evento, estos tie-ins ofrecen una calidad mucho mayor que la misma. Gráficamente, por descontado es una mejora. No puedo negar mi afición por los dos responsables gráficos de estos números de Justice League, Ivan Reis y Doug Mahnke, por lo que en este aspecto me resulta difícil mostrarme objetivo (mención a parte para el hecho de que Reis es capaz de mostrar a alguien que está amordazado, con barba y con un saco en la cabeza… ¡sonriendo! ). Sin embargo es el guión el que sorprende por la distancia en la calidad. Se tratan de historias duras, directas, pero delicadas cuando necesitan serlo, con peso, sentido y una necesidad por ser explicadas.

A Ultraman y Owlman les dedicará un número a cada uno, recreándose en las versiones retorcidas de los orígenes de Superman y Batman. Enfermizos y fascinantes por igual, se hace fácil empatizar con estos villanos de carácter tan icónico como el de sus contrapartidas heroicas. Seguidamente tendremos uno en el que se explicará los orígenes del resto del Sindicato, a excepción de la ahora misteriosa Superwoman… ¿Por qué borraría su ficha?

Estos tres números cumplen a la perfección su cometido como tie-ins, complementando la historia principal pero aportando más a la historia que un simple trámite, explicando relatos que valen la pena ser contados, con desarrollo de personajes y con espacio suficiente para más todavía, apuntando al origen de cierto elástico héroe que hace su primera aparición en The New 52. Un derroche de talento, la verdad, Johns se explaya todo lo que quiere sin quedarse corto de espacio, gestiona a la perfección el que tiene para explicar su historia y el momento en que transcurre cada capítulo en relación a Forever Evil.

Los siguientes tres números entrarán más a fondo en la saga, poniendo a Vic Stone en primer plano, y nos mostrarán cómo será reconstruido como una versión nueva de Cyborg (por favor, que no habéis nacido ayer, claro que no es un spoiler) y su enfrentamiento con Grid con la ayuda de los Metal Men. ¿Cómo? ¿Los Metal Men? Yeah! Después de la aparición de Platino unos meses atrás se han ganado un origen completo y detallado, así como un debut como grupo por todo lo alto en un momento de gran necesidad.

Pero a ver… no es normal que una breve y bastante predecible aventurilla de los Metal Men emocione más que los mejores momentos de Forever Evil. Algo está fallando, pero no volveremos a tocar este tema. Centrémonos en lo que tenemos entre manos, que no es sino media docena de cómics de calidad notable, con gran trabajo de personajes y mucha acción. Las páginas de Vic convenciendo a su padre para que le ayude tienen más alma que la mayoría de producción de DC actual. Y estamos hablando, nuevamente, de una escena estereotípica, pero tan bien llevada que es fácil meterse en la piel de los personajes. Y dado que la condición de Vic no es nada común se puede decir que es un logro que resulte tan fácil hacer que empaticemos con él. Y por si fuera poco, se nos presenta también la nueva Doom Patrol, aunque no será algo oficial todavía.

La Casa de Il es un dechado de amor
La Casa de Il es un dechado de amor

Pero es que esto lo logra con cualquiera, a excepción de los más perversos miembros del Sindicato, que simplemente disfrutan haciendo daño. Pero conocemos a Ultraman desde su nacimiento, y entendemos el porqué de su forma de ser, por terrible que sea, con su fijación por ser el más fuerte, y comprendemos la locura y el desequilibrio de Owlman, que solamente quiere una familia. La solitaria inteligencia artificial de Grid, la terrorífica curiosidad científica de Deathstorm, el miedo de Power Ring… todo son elementos pequeños en el conjunto de la historia pero que aportan verosimilitud a lo que sucede alrededor, aportan un propósito para los personajes que la propia Forever Evil omite, dejándola en comparación como algo tremendamente superficial.

Estos números de Justice League, pese a tener más de un cliffhanger que se desarrolla después en la miniserie principal del evento, se sostienen por sí mismos, principalmente por su calidad, ya que no nos deja con ganas de más, sino que satisfacen tal y como son e invitan a que los releamos. Si habéis seguido Forever Evil, por lo que más queráis, no dejéis pasar estos números. No os defraudarán.

Justice League of America, por Tomás Martinez
 
Justice League of America Forever Evil

Números: Justice League of America #8-14
Guión: Matt Kindt
Dibujo: Doug Mahnke, Eddy Barrows, Tom Derenick
Tinta: Eber Ferreira, Allen Martinez
Color: Hi-Fi
Portadas: Eddy Barrows, Eber Ferreira
Editorial: DC Comics
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 2,99 $
Valoración:

 

El presente volumen de la Justice League of America nunca gozó, desde sus comienzos, de una identidad propia. Siendo honestos, la serie nunca fue concebida para brillar por sí misma haciendo honor a su nombre sino que ha estado siempre al servicio de los planes editoriales de los tipos de los despachos de la planta de arriba. Así bien, lo que comenzó siendo un prometedor lanzamiento con unas ventas estratosféricas (no sin ayuda de un buen puñado de portadas alternativas) ha terminado siendo un completo sinsentido que sólo ha servido como excusa para “colar” a personajes secundarios de la editorial a los pobres ingenuos que creímos estar ante un nuevo volumen de una cabecera tan clásica que tiene más años que yo y todos mis hermanos juntos. Si, como decía, al principio nos prometían una serie “rebelde” con un equipo de secundarios de lo más variopinto en un equipo con carácter oficial, al final la careta de la serie se rompió en pedazos y lo único que nos pudimos encontrar fue una serie sin dirección alguna cuyo frente iba dirigido a ser una –forzada– parte más del evento Trinity War. Sus consecuencias pronto se hicieron notar con Forever Evil, Geoff Johns se bajó –previsiblemente– del barco en esta colección y el marrón de hacer un tie-in absolutamente forzado fue a parar a Matt Kindt, al cual creo que nadie debería culpar del presente despropósito que supone, de largo, lo peor del evento al que pertenece.

Es algo evidente que DC Comics tiene bastante preocupación por cómo –no– funcionan sus personajes secundarios. Mientras Batman se erige como estandarte de la editorial y su presencia no deja de aumentar mes tras mes y personajes como Wonder Woman, Superman o Flash siguen funcionando no sólo en el papel, los secundarios brillan a fogonazos y sus ventas en solitario o formando grupos entre ellos son francamente preocupantes. Pero eso no es lo más grave, el gran público (ese que no lee cómics pero al que le interesa todo lo que los superhéroes pueden ofrecer en otros medios) es el gran objetivo de las compañías en estos años y en los venideros y es ahí donde estos personajes cojean y mucho. Diciéndolo con otras palabras: no te disfraces de Booster Gold en la fiesta de disfraces de superhéroes que organizan tus colegas de trabajo o facultad porque nadie va a saber de qué diablos vas disfrazado.

Este tie-in está concebido por los tipos de los despachos de arriba a los que me refería en el primer párrafo con una premisa muy clara: Stargirl y el Detective Marciano tienen que ser conocidos por la gente. Hay que auparlos, darles luz. Así que, ¿Por qué no aprovechamos el tie-in de Forever Evil? Dicho y hecho. Y además así matamos dos pájaros de un tiro: cubrimos un tie-in más del evento, en el que caerán unos cuantos completistas, y sacamos a la luz el origen de estos dos personajes –idéntico, por cierto, al que ya tenían previo al reinicio–. Por lo tanto, con esta directiva, la historia de este tie-in dentro del marco de Forever Evil es ridícula per se: tras el ascenso del Sindicado del Crimen en la Tierra, todos los superhéroes de ambas Ligas de la Justicia se encuentran presos en en el interior de la mente de un Firestorm a punto de explotar donde se tienen que enfrentar a sus peores miedos. Así, veremos como Wonder Woman se encuentra envuelta en una guerra sangrienta, Superman vaga sólo por el espacio, Flash apenas da a basto para salvar a todo el mundo con su velocidad, Simon Baz observa como la gente lo odia por su raza y Shazam disfruta pudiendo destruir todo lo que quiere sembrando el caos sin temer las consecuencias como buen niño que es. Como Stargirl es una joven sin miedos y J’onn es un ser psíquico muy poderoso, en principio no caerán bajo esos trucos mentales de modo que irán visitando al resto de héroes a lo largo de la prisión durante un par de números en los que ambos se darán cuenta –inexplicablemente– de todo lo que sucede.

El arte de Eddy Barrows es sin duda lo mejor del tie-in
El arte de Eddy Barrows es sin duda lo mejor del tie-in

Si hasta ese momento todo estaba pillado por los pelos en demasía (¿Por qué están encerrados en Firestorm? ¿Cómo es eso posible? ¿Qué finalidad tienen que se enfrenten a sus miedos si Firestorm está destinado a explotar?) lo que viene a continuación se convierte en un sinsentido mayúsculo. Ambos protagonistas consiguen escapar de la prisión y se dirigen hacia el lugar donde se encuentra Firestorm cara a evitar que éste explote. Por el camino conoceremos sus orígenes pues ambos están “conectados” mentalmente con su pasado, les veremos pelear con villanos como Deathstroke o Clayface no se sabe muy bien por qué –el combate con Despero roza el ridículo por momentos– y veremos como Stargirl se “gradúa” como superheroina adulta con pleno derecho a formar parte de las altas cotas de la editorial rechazando ayudar a su familia en pos de salvar el mundo. Y cuando pensábamos que todo este tie-in era una broma de mal gusto llega el último número con un retraso de dos meses (debido al retraso de la serie principal) para contarnos un final ridículo digno de un sueño de Antonio Resines. Resulta que todo había ocurrido dentro de la prisión mental que Despero había establecido en la cabeza de Firestorm. En realidad, ambos personajes nunca llegaron a salir de la prisión. Además, nos enteraremos en el último número que Steve Trevor les salva (esto se ve en otro tie-in) y seremos testigos del destino de algunos superhéroes del grupo –aunque apenas nos importe, pues apenas nada ha cambiado– siendo testigos en las últimas páginas del nacimiento de una Justice League United cuya serie empezó… ¡hace dos meses!

A pesar de la negatividad con la que uno puede enfrentarse a un tie-in ridículo como este, aún se salvan algunas cosas. Eddy Barrows nos ofrece en la mayor parte del evento un arte magnífico, estableciéndose como uno de los referentes entre los dibujantes de la editorial por méritos propios. Sus lápices no son sólo lo mejor de este tie-in, sino que es tan terriblemente bueno que a uno se le queda cara de tonto al ver hasta que punto se puede desaprovechar un dibujante tan bueno en una serie tan mala. Suyo es el motivo por el que esta serie no se lleve un cero enorme. Además de sus dibujos, cabe destacar los colores de Hi-Fi que lo acompañan cual fiel escudero y los fill-in que cubren el evento, todos ellos a la altura, destacando a un Doug Mahnke cuya racha de buen hacer lleva ya unos cuantos años. Por otra parte, el guiño a la serie de Green Lantern / Green Arrow de Dennis O’Neil y Neal Adams con Oliver Queen imaginándose luchando contra el crimen callejero junto a Simon Baz es un buen detalle y parece llevar impregnada la firma de Matt Kindt, al cual sólo podemos dar una palmadita en la espalda por haber intentado hacer algo interesante con esta premisa impuesta aunque finalmente no le salga absolutamente nada bien. Sólo nos queda regañar a DC Comics y hacerle ver que ha de poner más atención en este tipo de productos porque a veces sobrepasan lo ridículo y la palabra sacacuartos alumbra todas y cada una de las viñetas que lo pueblan.

Forever Evil: A.R.G.U.S., por Sergio Robla
 
Forever Evil A.R.G.U.S. 1

Números: Forever Evil: A.R.G.U.S. #1-6
Guión: Sterling Gates
Dibujo: Neil Edwards, Philip Tan, Javier Pina
Tinta: Jay Leisten, Jason Paz
Color: Nathan Eyring
Portadas: Brett Booth (#1,#4), Jeremy Roberts (#3,#5), Mikel Janin (#2,#6)
Editorial: DC Comics
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 2,99 $
Valoración:

 

En su momento nos llamó la atención de la aparición, en el alba de The New 52, de una organización que nada tenía que ver con lo que conocíamos del anterior Universo DC, aunque tenía mucho que ver con las que conocíamos. Amanda Waller y Steve Trevor son los lugares comunes que nos recuerdan a la versión más reciente de Checkmate, al Escuadrón Suicida, a Task Force X… Entonces, ¿hacía falta crear algo nuevo? Tal vez no, pero en esta miniserie descubriremos que no se trata de la enésima organización gubernamental de seguridad, sino que estamos ante algo nuevo en el Universo DC. Ya no estamos hablando de las diferencias objetivas, técnicas, entre organizaciones, sino de que A.R.G.U.S. tiene una historia y un trasfondo propios que no se podían trasladar a otras. Pero no nos acerquemos tan pronto a los spoilers

Con el anuncio de esta miniserie como parte de los tie-ins de Forever Evil se hizo rápidamente evidente el propósito de la misma: relatar “la otra” lucha, los esfuerzos de esa organización que nació de las cenizas de la batalla con Darkseid con el propósito de protegernos de amenazas de este calibre, llenando un vacío argumental y dando respuestas que inevitablemente íbamos a formular dado el escenario planteado por el evento principal.

Sin embargo pronto la historia muta en algo muy diferente que, aunque cumple con el propósito explicado, también trata de ganar entidad (e interés) por sí misma tocando otros argumentos que se distancian de la conquista del Sindicato del Crimen lo suficiente como para explicar una historia independiente. Así, Steve Trevor se erige en el protagonista de Forever Evil: A.R.G.U.S., primero tratando de preservar lo que queda de la organización tras un desastre que coincidió con la llegada del Sindicato, así como poniendo a salvo al presidente de los EE.UU., y luego buscando una forma de salvar a la Liga de la Justicia. Por el camino tendremos el inesperado aunque poco sorprendente regreso del Doctor Luz, todavía a mitad de su larguísimo origen como villano, como antihéroe, o lo que sea pasada esta historia. También Trevor se encontrará con Cheetah después del impresionante y prometedor Wonder Woman #23.1, en el que John Ostrander definió una interesante dinámica entre Barbara Minerva y Mark Shaw, también miembro de A.R.G.U.S., pero el asunto, como casi todo en esta historia, se resuelve en un par de viñetas.

Y es que ese es el gran problema de este cómic: Steve Trevor se embarca en un gran juego de pistas buscando un modo de rescatar a la Liga, donde cada descubrimiento le lleva a otra búsqueda, y donde todo se resuelve demasiado de prisa, restando sensación de urgencia o dificultad ante el problema que se trata de solucionar. Solamente vemos que, sin error, a cada final de capítulo Trevor estará más cerca del éxito. Esta certeza resta emoción.

La decepción final llega cuando busquemos la resolución de esta historia. Se nos remite a Forever Evil y Justice League, donde Trevor hace una brevísima aparición para pasar el testigo de lo descubierto a Cyborg y seguidamente cae fuera de combate por un ataque de la Sociedad Secreta. Todo en apenas una página. Y en Forever Evil, por descontado, Cyborg es el único presente y poseedor de la valiosa información, reduciendo a Trevor a una mención “está inconsciente pero a salvo”. Así, si Forever Evil: A.R.G.U.S. te gustaba o interesaba, encontrarte con este final te dejará el ánimo por los suelos, y si eras de los contrarios dichas escenas no harán sino reafirmarte en tu posición de poco interés.

Pero no quiero que mis palabras os lleven a un equívoco. El cómic me ha gustado, se deja leer sin tener que esforzarte por ello, y el juego narrativo es adictivo en el mejor sentido del término, pero la falta de resolución, de personajes de interés, de argumentos relevantes, supondrán un lastre para el disfrute de un lector que busque ampliar la historia de Forever Evil de alguna forma. Pero si ya erais seguidores de Steve Trevor antes sin duda disfrutaréis de esta miniserie de otra forma.

Los misteriosos Crimson Men, de familiar uniforme y familiar emblema
Los misteriosos Crimson Men, de familiar uniforme y familiar emblema

El máximo interés, al margen del evento, radica en la subtrama que está creciendo en torno a A.R.G.U.S., a sus auténticos orígenes y a la guerra secreta que se libra con los Crimson Men (una gente con unos uniformes de tremendo parecido al de Jakita Wagner). La amenaza de esta organización se presenta silenciosamente en la primera página, y paso a paso, tras un análisis de lo que creíamos saber de A.R.G.U.S., se definen como sus antagonistas pasados, presentes y futuros. Sterling Gates hace un meritorio esfuerzo por unir todos estos elementos al evento que está en marcha mientras explica algo que pueda ser importante para todos, ya sea editores, otros guionistas, lectores y él mismo, y lo cierto es que, dadas las circunstancias, no podía haberlo hecho mejor. Forever Evil: A.R.G.U.S. tiene un poco de todo para todos, y es una pena que la necesidad de la miniserie central obligue a esta a dejar demasiados cabos sueltos, pero estaremos atentos al progreso futuro de esta historia.

Forever Evil: Arkham War, por Ivan Rivas
 
Forever Evil 1

Números: Forever Evil: Arkham War #1-6, Forever Evil Aftermath: Batman vs. Bane #1
Guión: Peter Tomasi
Dibujo: Scott Eaton
Tinta: Jaime Mendoza, Scott Hanna
Color: Hi-Fi
Portadas: Jason Fabok, Blond, Scott Eaton
Editorial: DC Comics
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 2,99 $
Valoración:

 

Vivir en Gotham City es todo un reto para cada uno de sus ciudadanos. El gothamita medio, al que llamaremos John en nuestro historia, se pregunta 3 veces al día por qué demonios sigue viviendo en esa ciudad. Cada uno tiene sus razones: por estar cerca de sus padres, porque le tiene cariño a su ciudad natal, porque están todos sus amigos…sean cuales sean, han de ser razones poderosas. Cataclismos, asesinatos en masa, destrucciones varias, derrumbes, invasiones…acontecimientos que hacen que las ganas de seguir adelante sean cada vez menores. Pero John debe compartir algo con su conciudadano Bruce Wayne. El Presidente de Industrias Wayne nunca ha hincado la rodilla y sigue creyendo en que Gotham puede levantarse una y otra vez después de cada uno de estos desastres, tanto bajo su identidad de empresario como de vigilante enmascarado. Así visto, a John no le pareció nada extraño cuando todas las comunicaciones se vieron invadidas por un mensaje que decía «Este mundo es nuestro» y una extraña Liga de la Justicia salía bramando que habían eliminado a la otra Liga y que la Tierra les pertenecía. A ver esto, John suspiró y pensó: «ya empezamos«. Sus dudas entonces no serían si viviría o moriría, a eso ya estaba acostumbrado, sino que serían si tendría o no que ir al trabajo al día siguiente. «Al menos si lo pierdo habrá trabajo en la construcción«, pensaría.

Así es la vida en Gotham City, donde la Ley Marcial se impone día sí día no. A tal punto se ha llegado que una Gotham sin ley o bajo amenaza de destrucción total se ha convertido en tal cliché que hasta Christopher Nolan decidió que ése sería el leit motiv de The Dark Knight Rises. No es extraño, pues, que en el brainstorming previo al lanzamiento de Forever Evil y todas sus miniseries anexas a alguien se le ocurriera contar una historia de que pasaría en Gotham mientras Batman se encontraba desaparecido en combate y los miembros del Sindicato del Crimen se proclamaban como reyes del mundo. Para tal labor se eligió a Peter Tomasi, uno de los guionistas relacionados con Batman con menos carga de trabajo, al no estar involucrado en Batman Eternal. Para acompañarle se eligió a Scott Eaton, uno de esos dibujantes Marca DC cuyo trabajo es tan poco criticable como destacable. Obviamente se le eligió porque los editores sabían que podría cumplir esas fechas que a otros tanto les ha costado. Además los lápices de Eaton casan con la línea que actualmente impera en el Universo Batman comandada por Jason Fabok, con la salvedad de que a Eaton le gustan las figuras más exageradas. Aunque es cierto que ese Bane a lo Hulk es algo ya común en las series de Batman. Así le vimos también en Talon (Garra). De hecho, ya que esa fue la última serie en la que Bane tuvo cierto protagonismo, este Arkham War bebe de líneas argumentales presentes en la difunta serie. Quizá todos estos dibujantes podrían volver a echar un vistazo al Bane de Graham Nolan, su co-creador, para darse cuenta de que se puede tener una presencia brutal sin dejar de ser humano.

Un nuevo Batman surca los cielos de Gotham en Arkham War #4
Un nuevo Batman surca los cielos de Gotham en Arkham War #4

La forma en que la premisa de Forever Evil afecta a la ciudad de Gotham viene a ser una suerte de deja vu’s de historias ya leídas. Los presos de Blackgate se fugan y los super villanos de Arkham Asylum hacen lo propio tomando las calles de la ciudad y repartiéndosela como si de una tarta se tratase (ejem….Tierra de Nadie….ejem). A partir de ahí el lector es testigo de batalla tras batalla entre unos y otros cuyo resultado final poco importa. De entre toda esta marabunta de truhanes ansiosos de poder destacará pronto Bane ayudado por un ejército de Garras del Tribunal de los Búhos. En esas discurren los dos primeros números hasta que en el tercero, tras una conversación de Bane con el Pingüino éste le dice que los internos de Arkham no le temerán a él, que Bane no es Batman. A partir de ahí Bane lo tiene claro. Se disfraza de Batman y aquí paz y después gloria. Unas batallas más por aquí, unas peleas más por allá, super villanos hinchados de Veneno (oh, novedad), que te doy, que me das…Y al final gana quién tiene que ganar. Bane se hace con ciudad y para celebrarlo se pone en el último número un abrigo a lo Dark Knight Rises, en un giro de los acontecimientos que todo fan de las películas siempre está deseando (sigh). Y si el lector ya podía sentirse bastante defraudado con el contenido general de la miniserie, la cosa empeora cuando se pasa la última página y se descubre que la historia no concluye. Para leer la resolución de la historia DC Comics se sacó de la manga el Forever Evil Aftermath: Batman vs. Bane.

Y éste último número acaba siendo fiel reflejo del resto de la historia. Diez páginas con grandes viñetas de Batman y Bane pegándose, más otras tantas de conversaciones que tampoco llevan a ninguna parte. Es decir, Arkham War es un pobre complemento de Forever Evil. De hecho, nada tiene que ver con los acontecimientos que se suceden en la miniserie de Geoff Johns y en Justice League, el otro puntal de la historia. Peter Tomasi escribe en piloto automático una historia que parece atraerle tan poco como a cualquier lector. Da la impresión de que el guionista, igual que cualquiera que haya leído sus mejores números en Batman y Robin, está deseando que le devuelvan su juguete favorito (Damian) para dar de nuevo lo mejor de sí. Aquí no lo ha dado. Pero ni falta que hacía… ¿verdad?

Forever Evil: Rogues Rebellion, por Jordi Molinari
 

Números:: Forever Evil: Rogues Rebellion #1-5
Guión: Brian Buccellato
Dibujo: Patrick Zircher, Scott Hepburn, André Coehlo
Color: Nick Filardi
Portadas: Declan Shalvey
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 2,99 $

 

No sabría decir, si en todo su conjunto, la galería de villanos de The Flash es superior a otras como la de Batman o a la de Spiderman. Pero como grupo, los Villanos – en esta mini, la traducción oficial de los Rogues por parte de ECC, la siento más que nunca poco precisa – son el grupo de antagónicos más carismáticos y entrañables, sin duda alguna. Por encima de cualquier encarnación de los Seis Siniestros o cualquier otra agrupación del pasado o del presente, de cualquiera de ambas casas editoriales. Y si alguien tenía alguna duda, ya sea por desconocimiento, ya fuera por cómo podría haberles afectado el nUDC, Forever Evil: Rogues Rebellion demuestra porque un puñado de personas sin poderes – o incluso con ellos -, son los que desearía tener de rivales un superhéroe, y si no lo fuéramos ser parte de ese grupo. La mini enlaza con lo narrado en The Flash #23.3: The Rogues, y empieza con los efectos devastadores de The Flash #23.1: Grodd y Forever Evil #1 en Ciudad Central.

Por ello, la primera mitad del primer número va a cargo de Patrick Zircher. Pero tras ello, se va junto a Brian Buccellato para sus números finales en The Flash. Así pues, los dibujos y tintas recaen principalmente en Scott Hepburn – quien haría previamente The Flash #23.2: Reverse Flash -, sin perder un ápice de calidad. Además recibe la ayuda de André Coelho en el tercer y cuarto número, quien no desentona para nada, al mantener un equilibrio entre el estilo más caricaturesco de Hepburn y uno más realista estilo Zircher. Capitán Frío (Captain Cold), el Maestro de los Espejos (Mirror Master), Ola de Calor (Heatwave), Hechicero del Clima (Weather Wizard) y Trickster – a este, por alguna extraña razón, no han sabido/querido traducirle el nombre – contemplan una desolada Ciudad Central, y empiezan demostrando que son unos Villanos distintos, pese a su desprecio natural hacia los policías. Tras ello, van a comprobar cómo está Lisa Snart, también conocida como la Patinadora Dorada (Golden Glider), hermana del Capitán Frío y novia del Maestro de los Espejos. Esto termina desembocando a que esta particular banda de criminales se rebele contra el Sindicato del Crimen.

La miniserie es una historia de contrastes. Entre las grandes peleas contra otros grupos numerosos de villanos, y las peleas donde aparecen miembros del Sindicato del Crimen. En este punto, quizás no hacía falta dedicar más de medio número en recrear una escena que también ocurre en Forever Evil. Obviamente aquí tiene más repercusión, y se agradece que salga en ambos sitios. Pero da la sensación que se alarga para limitar a tratar la primera amenaza a posteriori. Y si no fue la intención del guionista, si hubiera sido el deseo de muchos lectores. Pero también es un contraste, entre los momentos de acción, y los momentos más personales de cada uno de los protagonistas. Aunque en más de una ocasión, Booch sabe ligar perfectamente ambas cosas. Especialmente se redime con Alex Walker, quien no había sido tratado de forma muy placentera en la mayoría de apariciones en la serie regular de The Flash. Pero hay otro miembro clásico, que reaparece al final, que es con quien más se me gana el guionista. Y no sólo a nivel personal del personaje, sino que es sin duda el mejor número para definir que son los Villanos. O al menos, de los muchos momentos que podemos disfrutar durante la miniserie, sin duda mi preferido.

Dado a lo que apuntábamos antes y su final, claramente es una miniserie que no hace falta leerse para entender la historia principal. Pero si eres lector de The Flash, seguramente te gustará leerla. Porque a diferencia de otra miniserie, donde la ciudad se despierta el día siguiente como si no hubiera pasado «nada», aquí las consecuencias se notarán en The Flash. Y es de agradecer que sea un complemento a Forever Evil, sin obligarte a leerla, pero que lo que ha pasado allí tenga continuidad. Eso le da un plus a su compra. Por contra, nos apena que no saliera de aquí una serie regular para los protagonistas. No porque deje más cabos sueltos que respuesta, sino porque se lo valen. Aunque las ventas indiquen lo contrario.

Forever Evil: The Blight (Pandora, Justice League Dark, Constantine & Phantom Stranger) por Jordi Molinari
 

Números:: Justice League Dark #024-29, ToS: The Phantom Stranger #014-017, Constantine #009-012, ToS: Pandora #006-009
Guión: J.M. DeMatteis & Ray Fawkes
Dibujo: Mikel Janín (Justice League Dark #024-027), Vicente Cifuentes (Justice League Dark #028-029), Fernando Blanco, Miguel Sepulveda & Diego Olmos (ToS: The Phantom Stranger), Aco & Beni Lobel (Constantine), Francis Portela & Staz Johnson (ToS: Pandora)
Tinta: Vicente Cifuentes, Guillermo Ortego & Jordi Tarragona (Justice League Dark #025-027)
Color: Jeromy Cox (Justice League Dark), Brad Anderson (ToS: The Phantom Stranger, Constantine), Hi-Fi (ToS: Pandora)
Portadas: Mikel Janin (Justice League Dark), Guillem March (ToS: The Phantom Stranger), Howard Porter (Constantine), Julian Totino Tedesco (ToS: Pandora)
Formato: Grapa, 32 páginas
Precio: 3,99 $ (Justice League Dark), 2,99 $ (ToS: The Phantom Stranger, Constantine, ToS: Pandora)

 

Forever Evil: Blight fue un intento, o al menos eso quiero pensar, de capitalizar la “línea Dark” que había funcionado bastante bien desde el nacimiento del nUDC. Era algo comprensible, al tener los principales superhéroes incapacitados, ver si de lugares más recónditos y oscuros podía surgir una forma distinta de combatir el mal. Y esta línea/franquicia necesitaba un crossover propio. Bueno, no lo necesitaba realmente, pero sí que pensaban eso los editores. A fin de cuentas, en mayor o menor medida, el resto de líneas que habían funcionado, habían tenido algún que otro cruce entre sus series – no entraremos a valorar la calidad de los mismos, y los efectos que tuvo para cada una de las series implicadas -. Así que con la llegada de Forever Evil, decidieron sacarse de la chistera un mega-crossover que involucraba 4 series durante 4 meses, en un total de 18 números, contando un par extra de la Liga de la Justicia Oscura antes de empezar realmente.

Y aunque el crossover se llama Forever Evil: Blight, se podría dividir en 2 partes. Blight la primera, Project Thaumaton la segunda. Lo primero un efecto colateral de los sucesos de Trinity War, lo segundo es algo directo de los sucesos de Forever Evil, si bien no afecta para nada al desenlace del evento. Y es que a diferencia del resto de minis, que con mayor o menor efecto terminaban con un “la resolución final se verá en Forever Evil #7”, aquí la cosa terminó por su cuenta. Quizás si lees Forever Evil: Blight, tengas curiosidad de saber qué pasó con el resto de superhéroes que estaban en el final de Trinity War. Quizás incluso, saber cómo acabó Forever Evil. Pero si lees Forever Evil, difícilmente te saldrá una duda que se tenga que resolver leyendo Forever Evil: Blight, sobre todo si no estabas leyendo alguna de las series involucradas en el crossover de 18 números. Pero si las estás/estabas leyendo, o a raíz de Forever Evil deseas leer más sobre la “línea Dark” del nUDC, ¿Qué se puede encontrar uno? ¿La inversión saldría a cuenta?

La respuesta es que, cuantas menos series de las involucradas comprases antes del cruce, menos te saldrá a cuenta la inversión. Ojo, no es una mala historia. Pero hay demasiados puntos de vista, demasiados números para una trama que avanza tan poco. Además, plantean a Blight como un ser súper-poderoso, cuando luego termina siendo el malo intermedio. Y para más inri, es mucho más atractiva la segunda parte. O lo que es lo mismo, está mucho más desaprovechada el potencial que había. Quizás un orden inverso de las historias, con más números dedicados al Proyecto Thaumaton. O para ser exactos, para todos los magos/místicos capturados, o aquellos que guardaban relación con ellos. Eso sin contar el chiste de mal gusto de empezar la trama con los 3 miembros de la Trinity of Sin, y cuando uno espera que por fin profundizarán en la versión nUDC de The Question, este se va tan rápido como llega al cruce sin repercusión alguna. En ese sentido, uno no sabe como tomarse cierta «revelación» al final del cruce con respecto a Pandora. Uno ya no sabe si van en serio, o sólo lo sueltan para dejar contentos a cierta parte de aficionados. Es posible ques los editores desean que llegue pronto septiembre, para enterrar a Pandora bajo llave en un baúl, e intentar no preocuparse del asunto hasta que los aficionados se den cuenta de la broma sin gracia que es todo esto.

Luego, sobre el desenlace final…

Aviso de Spoiler

Empezamos con un John Constantine enamorado de Zatanna, que sólo desea rescatarla a ella. Si es a más pues vale, pero sólo a ella. Y hay toda una manifestación de mini-demonios propios por ahí. Bien, pues en el último número, uno de esos mini-demonios resulta que se ha convertido en un John Constantine, que ama a Zatanna y se sacrifica para salvarla a ella y al resto. Y el verdadero John Constantine, entonces, decide dejar a Zatanna y al resto a su suerte – después de haberse enfrentado a Blight y a Nick Necro & Felix Faust – de forma totalmente egoista. Quizás el Constantine del final es más lógico/coherente al John al que uno está acostumbrado, pero es un cambio al final que es mucho más injustificable, que el «deus ex machina» del final de la parte de Blight.

Ray Fawkes resta más que suma al buen hacer de J.M. DeMatteis, y sobre el apartado gráfico – prácticamente 100% español en los lápices/tintas -, pues ninguno de los artistas regulares de las series pueden hacerlo sin ayuda parcial/total. Y el gran activo de todo este conjunto, que era el fenómeno Mikel Janín, deja el cruce y Justice League Dark en los 2 últimos números. Y por más bien que lo haga Vicente Cifuentes, son unas botas muy difíciles de llenar, especialmente cuando en el conjunto global sobresalían tanto. Como historia apenas cumple. Como catalizador de la «línea Dark», falla a niveles estrepitosos. Y eso sin duda, es la peor noticia de todas.

Orden de Lectura. Equivalencia USA-ECC Ediciones

El pasado mes de Noviembre, cuando la edición americana apenas superaba el ecuador del evento y mucho antes de conocerse el retraso que iba a sufrir la serie, ECC Ediciones publicaba en su página web un desglose del orden de publicación de este evento así como otros de los muchos crossovers que salpicaban el catálogo editorial de DC Comics en plena temporada invierno-primavera. Así pues y aunque en nuestro país estamos a menos de una semana de que se publique su cuarta entrega, no está de mal recordar el orden de publicación (y fechas) de todas las series satélites. Es el siguiente:

Miniseries del evento:

     Maldad Eterna: La Rebelión de los villanos.
    Contenido: Forever Evil: Rogues Rebellion núms. 1 a 6 USA.
    Fecha de publicación: Julio de 2014.

     Maldad Eterna: Arkham en guerra.
    Contenido: Forever Evil: Arkham War núms. 1 a 6 USA.
    Fecha de publicación: Agosto de 2014.

     Maldad Eterna: ARGUS.
    Contenido: Forever Evil: A.R.G.U.S. núms. 1 a 6 USA.
    Fecha de publicación: Septiembre de 2014.

Series regulares asociadas al evento:

     Liga de la Justicia -> Números 24 a 28 -> Abril-Agosto de 2014.
     Liga de la Justicia de América -> Números 9 a 13 -> Abril-Agosto de 2014.
     Escuadrón Suicida -> Julio de 2014.
     Jóvenes Titanes -> Agosto de 2014.

Plaga: un mini-evento dentro de un evento de DC y publicada en dos series regulares de ECC más un especial inicial.

    Trinidad del pecado: Maldad eterna – Prólogo a Plaga.
    Contenido: Trinity of Sin – Pandora núms. 4 y 5 USA, y Trinity of Sin – Phantom Stranger núms. 12 y 13 USA.
    Fecha de publicación: Mayo de 2014.

     Liga de la Justicia Oscura núm. 7: Plaga, parte 1.
    Contenido: Justice League Dark núm. 24 USA, Justice League Dark núm. 25 USA, Trinity of Sin – The Phantom Stranger núm. 14 USA, Constantine núm. 9 USA y Trinity of Sin – Pandora núm. 6 USA.
    Fecha de publicación: Junio de 2014.

     Constantine núm. 3: Plaga, parte 2.
    Contenido: Justice League Dark núm. 26 USA, Trinity of Sin – The Phantom Stranger núm. 15 USA, Constantine núm. 10 USA y Trinity of Sin – Pandora núm. 7 USA.
    Fecha de publicación: Julio de 2014.

     Liga de la Justicia Oscura núm. 8: Plaga, parte 3.
    Contenido: Justice League Dark núm. 27 USA, Trinity of Sin – The Phantom Stranger núm. 16 USA, Constantine núm. 11 USA y Trinity of Sin – Pandora núm. 8 USA.
    Fecha de publicación: Agosto de 2014.

     Constantine núm. 4: Plaga, parte 4.
    Contenido: Justice League Dark núm. 28 USA, Trinity of Sin – The Phantom Stranger núm. 17 USA, Constantine núm. 12 USA y Trinity of Sin – Pandora núm. 9 USA y Justice League Dark núm. 29.
    Fecha de publicación: Septiembre de 2014.

Encuesta de opinión

Tras este análisis, llega el tiempo de pulsar la opinión generalizada del evento. Para ello no podía faltar una de nuestras ya clásicas encuestas. Así pues, ¿cómo valoráis Maldad Eterna?

¿Cuál es tu opinión de Maldad Eterna?

  • Cero estrellas - Un despropósito continuo que no hay por donde cogerlo. ¡Que venga el Anti-Monitor ya! (29%, 132 Votes)
  • Dos estrellas - Tiene sus momentos pero no cumple con las expectativas. (27%, 123 Votes)
  • Tres estrellas - Geoff Johns levanta el evento al final y mola y todo (16%, 75 Votes)
  • Cuatro estrellas - Lex Luthor mola y gracias a él Forever Evil es lo mejor que de TheNew52 (12%, 53 Votes)
  • Una estrella - Ay, David Finch... Ay... (11%, 49 Votes)
  • Cinco estrellas - Uno de los mejores eventos de DC Comics de su historia (6%, 26 Votes)

Total Voters: 458

Cargando ... Cargando ...
Subscribe
Notifícame
49 Comments
Antiguos
Recientes
Inline Feedbacks
View all comments
Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 12:49

¡Un gran análisis!

-Forever Evil, totalmente de acuerdo con el Sr Robla.
-Justice League, idem, aunque le quitaría una estrellita. Quiero ver a esa nueva Doom Patrol.
Como el evento se desarrolla en realidad entre los dos, lo dejaría en dos estrellas y media. Alargado, desigual, con unos cuántos golpes brillantes de Johns, pero como suele suceder, más interesante por el escenario que crea que por su propio desarrollo a trompicones.
-JLA: lo puto peor. El sueño de Resines hecho cómic.
-Argus: ¡Pagafantas superestar! Na, un rollo e inconsistente en cúanto a dibujo.
-Arkham War: infumable, lo peor que he leído de Tomasi, que suele ser un artesano correcto.
-Rogues: la mejor miniserie, y no pasa de pasable.
-Plaga: empieza espectacularmente, con un par de números magníficos de la JL Dark, y va perdiendo gas a medida que se alarga y se alarga y se alarga y entran en juego dibujantes de relleno. Los números de DeMatteis muy por encima de los del paquete de Fawkes.

NobTetsujin
NobTetsujin
Lector
27 mayo, 2014 13:05

Hola, soy Geoff Johns y como me molan más los villanos que los héroes voy a poner a estos haciendo el ridículo y a los otro supermolantes (bueno, a intentarlo). Y luego voy a poner a Lex Luthor de tío supermajo.

Y pá esto, 7 números en los que pasan dos cosas y llenos de disparates.

Igverni
Lector
27 mayo, 2014 13:09

Lo peor que, supongo, puedo decir sobre este Evento es que… no me interesó nada!

Me ojee el 1er número, y la pinta de desastre me echó para atrás!
Y eso que un amigo me dejó toda la Justice League hasta la Trinity War, y a pesar de algún altibajo, leido de un tirón no está mal… pero este Forever Evil (sobre todo por el dibujo de Finch) ni aunque me lo dejen y pueda leerlo gratis, prefiero emplear mi tiempo en algo más productivo!!

y esto cada vez me pasa más con los tebeos de DC… una lástima.

Igverni
Lector
27 mayo, 2014 13:10

Por cierto, chicos.
Gracias a todos por vuestro detallado análisis!
Os lo habeis currado, como siempre 🙂

Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 13:39

En resumen, algo así como un Siege deceíta, pero encima más largo.
Y propongo montar una petición en Change.org para solicitar que se regale el personaje de Pandora a la marvelosa competencia, para que Bendis la una o bien los Guardianes de la Galaxia, para que se lime las uñas con Angela, o a los Más-nuevos-Xmen para hacerse novia de Ultimate Spiderman.

Rasputin33
Rasputin33
Lector
27 mayo, 2014 14:31

El caso es que todavía no han explicado cómo Pandora unió tres universos y cuál era la supuesta amenaza por la que hizo eso.

Nacho Teso
Autor
27 mayo, 2014 15:03

No he seguido la serie, soy un Marvel Zombie y apenas leo nada de DC de vez en cuando. Pero cada vez que leo artículos como este, me pregunto qué cojones estará pasando en las oficinas de Batman Comics.

Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 15:07

«#7
ntg2410
27 mayo, 2014 de 15:03
No he seguido la serie, soy un Marvel Zombie y apenas leo nada de DC de vez en cuando. Pero cada vez que leo artículos como este, me pregunto qué cojones estará pasando en las oficinas de Batman Comics.»

Algo así como:

http://37.media.tumblr.com/e6af4e9b2dbad1c76750d75cecef5c92/tumblr_n4vc2a8Xwf1s9x79go1_r1_400.gif

Antoine
Antoine
Lector
27 mayo, 2014 15:38

Yo comencé Forevel Evil con ganas, el primer número me pareció decente a pesar de Fich, pero he ido perdiendo el interés mes a mes hasta llegar al último por pura inercia. Además, creyendo que eran tie ins intrascendentes, me salté todo los números de Liga de la Justicia, con lo cua con un montón de cosas del último número me con cara de WTF?

Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 15:53

«No es que no hayan explicado como Pandora fusiona tres universos, no»

Eso saldrá en Heroes Return.

Daniel Gavilán
27 mayo, 2014 16:40

En resumen, algo así como un Siege deceíta, pero encima más largo

Y bastante peor, a todo se dicho.

Continuando con lo que le comentaba al señor equis hace unos días, la ruptura con la continuidad anterior es otro de los factores que juegan en su contra, y lo que bien podría haber sido una continuación de JLA Tierra 2 y Crisis Infinita sabe más a refrito de viejas glorias con sabor a pasado de fecha. Le tengo que dar la razón, eso sí, en que está mejor que Ultimatum. Aunque del tío que hizo la Guerra de los Sinestro Corps cabía esperar bastante más que las sobradas de baratillo -«pistola congelante no, de frio…»- de baratillo que nos ofrece en algunas de estas páginas.

p.s.: Dentro de las manías personales, otro aspecto que no me gusta demasiado de la saga y que va siendo demasiado habitual con Johns son los roles que se le otorgan a las mujeres. Entre los úteros con patas, corderos propiciatorios, putimalas (dicese de las villanas que son villanas porque les gusta traginar con el prota -porque todo el mundo sabe que como reza la lógica de los cómics, si a una mujer le gusta traginar, es necesariamente villana-) y la ¿Wonder Woman? que hizo llorar a Azzarello, la serie serie da para unos cuantos artículos de Mujeres en Frigoríficos

para solicitar que se regale el personaje de Pandora a la marvelosa competencia

Dejese. En Marvel ya tenemos a la original e instransferible, y ya les cuesta bastante trabajo saber que hacer con ella http://www.expertcomics.com/enr//wp-content/uploads/2013/01/2534666-prv13278_pg2_super.jpg

es que no han explicado como demonios Flash viajand 20 años en tiempo para evitar que se muera su madre y luego deshaciendolo provoca unos cambios imposibles en el universo desde el origen del mismo y hasta en su misma estructura

Bueno, en esto si que voy a romper una lanza a favor de DC, dado que estas cosas mientras menos se toquen es mejor (de hecho, muchos de sus fallos históricos han venido precisamente de complicarse la vida intentando dar respuesta a estas preguntas).

Tampoco es un tema que necesite demasiadas explicaciones, porque viene a ser como lo de Kang y el multiverso en Marvel: Flash viaja 30 año en el tiempo, salva a su madre y altera toda la historia del UDC, afectando a acontecimientos anteriores a la muerte de esta. ¿Cómo es posible? La línea del UDC no es un sistema cerrado, y al reescribir un acontecimiento concreto repercutiría sobre todos los viajeros del tiempo que nacieran después de ella, lo que a su vez reescribiría de forma distinta el pasado para todos los que viajasen a épocas anteriores a su muerte. Vamos, que no sería un punto de inflexión de influencia lineal, si no un efecto dominó que daría lugar a un sin fin de consecuencias a lo largo de todo el espacio tiempo

Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 16:51

«#12
Daniel Gavilán
27 mayo, 2014 de 16:40
En resumen, algo así como un Siege deceíta, pero encima más largo

Y bastante peor, a todo se dicho.»

Como un político español, le voy a responder con un «¡y tú más!:

Fear Itself.

Sergio Robla
Admin
27 mayo, 2014 16:53

Diomedes, creo que estás mezclando cosas. Lo que hizo Flash creó el mundo de Flashpoint, nada más. Hasta ahí es medianamente factible, aunque a mi parecer muy discutible. Fue lo de Pandora lo que lo cambió todo, en principio porque se fusionan tres líneas temporales con sus respectivos orígenes, historia y demás zarandajas. Ahora, sí encima quieren meter Tierras paralelas ya le podemos decir adiós a una posible explicación, porque tratar de poner orden es simplemente una locura. Trataron de vendernos una continuidad respecto a lo anterior, pero esto solamente tiene visos de sostenerse si no lo hacemos.

Sergio Robla
Admin
27 mayo, 2014 16:56

Vamos, que la intención de Flash era dejar las cosas como estaban, pero pasó Pandora por allí y…

Marcos Martín
27 mayo, 2014 17:02

Pues yo me lo he leído de cabo a rabo y me ha entretenido, pero como a Sergio Robla, si entras a analizar el evento en sí hay muchas cosas que no tienen sentido. Hay personajes que sobran y la actitud de algunos chirria. No he leído los tie ins salvo las series de la JL y la JLA, siendo esta última de lo más infumable de todo el evento.

Por otro lado no sabía que Star Girl y el Detective Marciano tendrán protagonismo en las pantallas, pero si es así, definitivamente creo que las dos grandes editoriales se han plegado a las peticiones de los departamentos cinematográficos. Poco a poco la libertad creativa se limita en Marvel y DC y si antes ya iban un poco justos con lo qué contar, ahora es mucho peor si desde las oficinas imponen los personajes que deben protagonizar las historias ¿Pensáis que La Viuda Negra, el Capi, Thor, Superman o Batman van a sufrir grandes cambios en los próximo años? Yo lo dudo muchísimo. Me temo que la evolución de esos personajes se verá limitada desde ya. Con el tiempo consideraremos aberraciones cosas como el hijo negro de Furia y cosas por el estilo.

Eso sí, lo bueno que tiene Johns es que siempre te deja algo con lo que pensar.

Aviso de Spoiler

La candidata elegida por Power Ring y esa viñeta final, por ejemplo, son sus perlitas de final de evento. Pero claro, aquí ya entramos en lo que se avecina. ¿Una nueva Crisis? ¿En serio? Espero que no porque es que entonces me parecerá lo más patético que ha hecho DC después de este reinicio de las Nuevas 52. Nada original, sólo repetir una y otra vez lo que funcionó en su momento. Que dejen a la gente escribir sus historias sin que se las impongan desde las oficinas.

Ocioso
Ocioso
Lector
27 mayo, 2014 17:04

¿Por qué leéis estas cosas?

Nacho Teso
Autor
27 mayo, 2014 17:13

No os liéis tanto con lo de Flashpoint. El problema es que la gente asume que el tiempo es una estricta relación entre causa y efecto, pero, en realidad, desde un punto de vista ni lineal ni subjetivo, el tiempo es una gran pelota de wibly wobly timey wimey.

Daniel Gavilán
27 mayo, 2014 17:50

Fear Itself

Ya estamos metiendo el dedo en la llaga 😛

Y ya que habláis de los Metal Men, como fan del grupo desde hace ya tiempo he de decir que no me acaba de convencer la versión de Johns. Tampoco esta mal, pero lo que cambia (Will Magnus, Mercury…) lo hace para peor, y lo que conserva (los Metal Men) se presenta de forma bastante genérica y poco aprovechada en comparación con etapas anteriores del grupo. A ver si en futuras apariciones brillan más

Dynamo
Dynamo
Lector
27 mayo, 2014 18:24

Corrígeme si he entendido mal, pero ¿Forever Evil parece un tie in de la liga de la justicia más que lo contrario?

Mr. X
Mr. X
Lector
27 mayo, 2014 18:40

»
#17
Ocioso
27 mayo, 2014 de 17:04
¿Por qué leéis estas cosas?»

Iba a contestar «porque está en la continuidad», pero…. en fin… 😉

Terrific Lines
Terrific Lines
Lector
27 mayo, 2014 19:45

Este es el orden de lactura y lo demás son tonterías:

– Trinity War al completo
– Forever Evil #1
– Justice League #24 a #29
– Forever Evil #6 y #7
– Justice League #30

Del resto podéis pasar, pero con esos números no sólo tenéis la historia al completo, sino que además mola.

Mención a parte el Rogue Rebellion, especialmente recomendada para quienes les molan los Rogue (muy buena historia), pero innecesaria para el Forever Evil éste.

Forever Evil como evento ha sido un desastre y se ha visto afectada por un montón de rellenos innecesarios y retrasos varios; pero a cambio nos ha dejado varios momentos muy (muy) chulos y un panorama (sorpresa final aparte) bastante interesante.

Lo mejor (dejando fuera la Trinity War): los números de la Justice League, especialmente los #28 al #30. Brutales, de lo mejor en superhéroes que puedas encontrar actualmente.

Saludos!

Jordi Molinari
27 mayo, 2014 20:20

Por cierto, veo que ha terminado Forever Evil, y nos seguimos peleando Mr.X y yo sobre Steve Trevor y su aparición/aportación en A.R.G.U.S. – mención aparte al final relacionado con el desenlace final de Forever Evil, eso es un facepalm unánime.

Y no Marcos Martín, Tomás comenta DC Comics, no Warner Bros. No eligieron darle protagonismo a MM y Stargirl porque saldrán en un futuro en el cine, aunque en el caso de Martian, no lo descartaría que así fuera.

Yo creo – y así recuerdo haberlo explicado en alguna entrevista – que Kindt llegó pensando que podría usarlos a todos, y cuando le dijeron que no iba a poder usar ninguno. Y en vez de sacarse unos Metal Men a lo Johns, logró convencer para que al menos les dejaran escribir a MM y a Stargirl.

Supongo que el primero se sentían un poco culpables por haberle relegado por Cyborg, y en 2 años no haberle sacado provecho – a ambos -, y a Stargirl… siempre será la niña bonita de los ojos de Johns, al estar basado en su fallecida hermana. Y al final no hemos hablado de su también «tie-in» en Suicide Squad.

Mucho mejor sin duda que su trabajo en JLA. Aunque tengo discusiones si fue o no mejor que los 4 números de Alex Kot…

Terrific Lines
Terrific Lines
Lector
27 mayo, 2014 20:26

Gracias por explicarme lo que Tomás comenta (o no comenta), Jordi, pero no entiendo qué tiene eso que ver conmigo o con mi comentario…

Saludos!

Snow
Snow
Lector
27 mayo, 2014 20:30

y ahora empieza el Dark Reign deceíta?

Terrific Lines
Terrific Lines
Lector
27 mayo, 2014 20:37

Todo lo contrario, Snow, los superhéroes han vuelto y los buenos han ganado por partida doble (en el Justice League #30 encontrarás más respuestas).

Y Dark Reign fue lo que Marvel le copió a DC de cuando Luthor fue presidente de los USA…

Saludos!

Nacho Teso
Autor
27 mayo, 2014 20:43

Dark Reign molaba.

Jordi Molinari
27 mayo, 2014 20:56

Perdona Terrific, tienes razón, se me ha ido la pinza – as always -, me refería a Marcos 😛

El Asombroso Espaiderman
El Asombroso Espaiderman
Lector
27 mayo, 2014 21:12

«Y Dark Reign fue lo que Marvel le copió a DC de cuando Luthor fue presidente de los USA…»
Como dato curioso, decir que en Tierra x ya aparecía Osborn de jefazo, antes de lo de Luthor presidente.
Así que no se yo quien copia a quien 😉

Nacho Teso
Autor
27 mayo, 2014 21:28

Yo no lo decía comparativamente a lo actual, verdaderamente disfruté Dark Reign.

Daniel Gavilán
27 mayo, 2014 23:47

Dark Reign molaba

Fue una etapa que tenía muchas de las cosas que siempre criticamos: Cantidades demenciales de crossovers. La práctica totalidad de las series Marvel metidas en una única macro-trama argumental. Fill ins y bailes de dibujantes…

Y aun así me atrevería a decir que fue el punto álgido de los Vengadores de Bendis y de la segunda etapa de Joe Quesada al frente de Marvel Cómics en general. O yo al menos le tengo un inmenso aprecio a muchas de las cosas que se publicaron por aquel entonces, que aparte de tener una de las etapas más divertidas de los Nuevos Vengadores, Asedio y los Vengadores Oscuros, fueron los años de El Más Buscado del Mundo de Fraction y Larroca, Capitán Britania & MI 13 de Cornell, El Hijo Americano, El Desafío y las primeras bases para Superior en Amazing Spider-Man, el Motorista Fantasma y Lobezno Arma X de Jason Aaron, SWORD y Ares de Kieron Gillen, Ojo de Halcón de Andy Diggle, Elektra de Zeb Wells y Clay Mann, Guerreros Secretos y Cuatro Fantásticos de Jonathan Hickman, Thor de Staczynski y Gillen, Punisher de Remender, La Reunión de David López, Guerra de Reyes de Andy Lanning y Dan Abnett, Puño de Hierro de Swierczynski, Zodiaco de Joe Casey y Nathan Fox, Increíble Hércules, el Caballero Luna de Greg Hurwitz, los Agentes de Atlas de Jeff Parker, y una pequeña debilidad mía como es La Caída de los Hulks.

Good times, que se suele decir en estos casos.

Daniel Gavilán
28 mayo, 2014 0:01

p.s.: Paradójicamente, también supuso una de las etapas más tediosas de los X-Men, encabezada con la Patrulla-X de Matt Fraction en pleno apogeo del mandato de Axel Alonso al frente de los mutantes. Lo bien que nos vino que Nick Lowe ocupase su lugar, y que a él lo promoviesen como Nuevo Quesada

Terrific Lines
Terrific Lines
Lector
28 mayo, 2014 0:07

Joerl, Espaiderman, has ido a pillar la serie que su propio autor (Alex Ross) describe como una copia de Kingdom Come de DC: » That’s why I ended up doing the same thing for Marvel with the «Earth X» series.» 😀

http://www.comicbookresources.com/?page=article&id=7045

Y muy malo tiene que ser lo actual para que haga bueno el despropósito de Dark Reign…

Saludos!

Terrific Lines
Terrific Lines
Lector
28 mayo, 2014 0:15

En todo caso, volviendo al Forever Evil (o mejor dicho, al post-Forever Evil), es evidente que la intención de Johns es llevar al personaje y esta situación por caminos totalmente nuevos en el universo DC. Vamos, que esto nunca lo hemos visto antes en cómic.

Evidentemente todo cambia (o mejor dicho, todo vuelve) y raro es que al personaje lo dejen así, pero este Lex Luthor mola y no tiene pinta de querer tocar la moral al resto de héroes. Más bien todo lo contrario.

Por mi bienvenido no sólo a la Justice League, sino al bando de los buenos.

Saludos!

TON-EL
TON-EL
Lector
28 mayo, 2014 0:51

Completamente de acuerdo con la reseña, la miniserie central es un mojón de cuidado, no aporta absolutamente nada. Todo suena a situaciones ya vistas en otras historias con otros guionistas (Busiek, Morrison) se nota que no hay espontaneidad y todo esta dirigido editorialmente. Echare un ojo a los Tie-Ins (a los buenos) pero sin mucha ilusión la verdad.

Tildoras
Tildoras
Lector
28 mayo, 2014 11:57

Yo ya lo dejé por imposible y me extraña que aún algunos de vosotros tengáis la ilusión de encontrar libertad creativa en historias escritas por gente que escribe sobre personajes que son propiedad de otros y que además basan su principal elemento de éxito en que dichos personajes sean siempre reconocibles e inmóviles dentro de un status quo.

En fin, de ilusiones también se puede vivir.

Daniel Gavilán
28 mayo, 2014 12:41

En realidad todo buen editor debe saber que esto funciona con un contínuo tira y afloja.

Y de la misma forma que no se puede dar luz verde a cualquiera que llegue en plan «Voy a hacer una etapa en la que Spider-Man acaba hasta los huevos de todo el mundo y se dedica a matar a todos los que le han puteado a lo largo de su vida» o «vamos a hacer que Batman tenga la edad real que tendría hoy en día para hacerlo más realista y ver como actuaría en la comunión de sus nietos» porque hay que mantener una coherencia interna, también hay que saber apostar por las propuestas de tus creativos, porque es la única forma de mantener viva la llama de tus personajes y mantenerlos frescos e interesantes.

Tomás Martínez
28 mayo, 2014 15:45

Yo creo que los que leemos este tipo de tebeos no lo hacemos por ver la libertad creativa de la que disponen los autores sino para ver como, con la poca que tienen, son capaces de –en ocasiones– crear buenísimas historias que más que historias en sí mismas son laberintos que les permiten llegar de un punto a otro bailando con los mandatos de los de arriba.

Ocioso
Ocioso
Lector
28 mayo, 2014 16:14

Todo eso de la falta de libertad creativa me suele sonar a excusa. Estoy seguro de que si hacemos un Top loque sea de obrones maestrones del género descubriremos que la inmensa mayoría se consiguieron sujetos a las mismas limitaciones y dentro de series regulares.
«¡Hoyga, pero es que siempre ha sido con series desauciadas como DD o Hulk!»
Vale Warren Ellis, pues ponte a guionizar Iron Patriot. ¿Qué pasa, que estas series están muy mal pagadas, no?

Brian Blaquesmith
Brian Blaquesmith
Lector
28 mayo, 2014 17:06

Casi nadie quiere libertad creativa en el mundillo de los de superheroes. Y a los que quieren, ahi tienen la nueva pelicula de Fantastic Four…

Sergio Robla
Admin
28 mayo, 2014 20:55

Como comenta Tomás, yo a lo que me refiero es a que no es una cuestión de libertad creativa, sino a ser capaz de crear algo de calidad dentro de unos parámetros impuestos. En ese sentido Johns siempre ha sido muy bueno, a mi parecer, pero en esta ocasión no ha conseguido nada medianamente cercano a lo que nos tiene acostumbrados. De hecho no recuerdo un trabajo de Johns peor que este. Y no hablo de que me guste o me deje de gustar lo que explica, sino a lo que he comentado en el post: buena caracterización, desarrollo de personajes, buen ritmo, etc.

mac
mac
Lector
30 mayo, 2014 6:18

Intentando ser racional (y no sólo decir «fue un verdadero desastre de principio a fin, lo peor en la historia de DC comics de todos los tiempos»), debo decir -y repetir- que hay un problema de fondo para todo lo que está sucediendo en New 52: no existe un universo DC establecido, canónico, aún y todos, pero todos los eventos, tienen que ver con universos paralelos, futuros posibles o pasados muy lejanos. Aún no conocemos cómo son todos los personajes en el hoy y ahora y los guionistas no saben hacer otra cosa que narrar historias de ellos en «otro» contexto (si es que ya no era suficiente el «otro» contexto que se le dio a todos los personajes pos reboot).

¿Es Lex Luthor realmente un villano en New 52? Morrison lo mostró como un cobarde personaje secundario, Lobdell dijo que era un villano y lo tenía encerrado en una futurista prisión, Diggle lo hizo regresar a la acción atacando a Superman… poca cosa para ser un villano tan villanesco cuya aparente bondad pos FE sea un impacto mundial… ¡Si hasta parece que fue villano, pero en otra vida!

New 52 sigue siendo un universo de comics hecho para los viejos lectores, que por morbo o gusto real (los menos) quieren saber las diferencias entre el nuevo universo y el viejo. No se sostiene por sí mismo, no es interesante para nuevos lectores (lo que despierta el interés de los nuevos lectores en todos los casos es algo que podía haberles despertado interés antes del reboot), y sus sagas no tienen ni la mitad del impacto que podrían tener si se hubiesen hecho en el universo pre-reboot.

Johns (tan culpable como DiDio de todo lo malo que pasa en la editorial, aunque le pese a los fans de Johns) y el propio jefazo han perdido el rumbo completamente, dejando de lado las tramas para centrarse en acontecimientos puntuales de impacto, y DC va camino a ser una editoral de interpretaciones libres de los personajes. Ya tenemos Injustice, Infinite Crisis (comic del juego), los comics virtuales (Adventures of Superman, etc.), el universo beyond, comics del DCAU, Smallville, y New 52, que poco a poco -como ya mencioné- se subdivide en sagas de futuros o universos paralelos… y ninguno de todos esos universos, de todas esas interpretaciones de los personajes, es predominante sobre los demás.

Regresando a Forever Evil: no sé si lo mencionaron, pero lo que simboliza un poco el sinsentido de toda la saga, es que todo transcurre en unas horas. La mayor invasión multiversal de todos los tiempos, y muchos se la perdieron porque justo era hora de la siesta o dormían de acuerdo a sus husos horarios. Fue un blitzkrieg multiversal.

Y encima, pésimamente desarrollado (a excepción del primer número, quizás) y totalmente carente de puntos de interés (más allá del morbo sobre Grayson). Lex Luthor héroe (Johns feliz), la JL en el estómago de Firestorm unos minutos, y un Crime Syndicate que en el fondo sólo eran un grupete de perdedores

Eclipso: The Darkness Within parece una obra de arte al lado de este súper promocionado evento basura (en serio, ¡léanlo y verán!).

¿Los 90 la peor década de los comics? ¡Ja! ¡Esperen a que terminen los 2010 y ya veremos!

Bamf!
Bamf!
Lector
30 mayo, 2014 12:18

Soy un Marvel Zombie que cada día lee MÁS DC. Y cada día que pasa lee MENOS nuDC.

Con estos eventos me pasa como con la típica peli mega-blockbuster/remake/secuela cutre, etc. Siempre que alguien me dice lo mala que es, contesto «¿pero… por qué la has visto? ¿No era obvio por el trailer o por el cartel…? ¿O por la intención?»

Yo veo la primera portada de «Forever Evil» (igual que me ocurrió con «Fear Itself», «Siege» y demás) y digo:

«Vengahastaluegooo…»

Bamf!
Bamf!
Lector
30 mayo, 2014 12:20

«¿Los 90 la peor década de los comics? ¡Ja! ¡Esperen a que terminen los 2010 y ya veremos!»

Mac, Creo que en los 2010 las maravillas se equiparan a las grandes mierdas, pero lo cierto es que en mi anterior comentario iba a hacer una referencia a los 90 muy similar, jajaja…

Bamf!
Bamf!
Lector
30 mayo, 2014 12:20

Que el número de maravillas es igual al número de grandes mierdas, quiero decir. Que hay equilibrio. Joder qué mal me explico hoy.

Daniel Gavilán
31 mayo, 2014 16:55

Claro, debe ser eso, será por eso que COIE con sus 3-4 grandes problemas dejó tan mal poso y punto de partida y Flashpoint ha dejado las cosas claras de verdad y a toda la comunidad DCera vibrando de pasión y placer.

Creo que no me has entendido, Diomedes.

No estoy diciendo que la Crisis en Tierras Infinitas sea peor que Flashpoint / Los Nuevos 52. Ni en siete vidas.

Lo que estoy diciendo es que los cómics que surgen para «dar explicaciones» generalmente solo sirven para dejar las cosas peor, como ya dejó bien claro Hora Cero.

Cuando tus cómics dejan de contar historias para convertirse en instrucciones con las que explicar a los lectores como funciona tu universo tienes un serio problema