Guión: Ed Brubaker, Greg Rucka
Dibujo: Greg Scott
Edición Original: Gotham Central Nº 16 a 18 USA
Fecha Edición: junio de 2006
80 páginas, color.
6,5 €
Planeta DeAgostini
Gotham es una ciudad peligrosa donde el crimen forma parte de las vidas de los habitantes. Si Metropolis es la parte más luminosa y de Nueva York, Gotham es su oscuridad, un lugar donde la corrupción es algo asumido por la mayoría de sus habitantes. Es el hogar de Batman, por supuesto, pero también lo es de gente más cercana a nosotros que el Cruzado Enmascarado.
En la línea de la reciente NYX de Marvel, la misma Marvels o, a otro nivel, Superman Identidad Secreta, Gotham Central juega con el concepto de tratar de forma tangencial el universo superheroico conocido, verlo a través de los ojos de gente «normal», gente como nosotros, nada de superhéroes protagonistas. Esta serie está ambientada en la comisaría central de Gotham, y sus protagonistas son esos hasta ahora bastante anónimos policías que han de enfrentarse a un mundo irreal donde los criminales son peligrosos sociópatas disfrazados y los héroes les van a la zaga, policías que Greg Rucka se encargó de reivindicar en su paso por Detective Comics, sembrando el terreno para Gotham Central.
Después de trabajar juntos en el crossover Officer Down, Rucka se asoció con el también guionista y conocedor del universo batmaniano Ed Brubaker para crear esta serie noir en la que los peligros a los que se enfrenta Batman cada día se hacen mortalmente reales a ojos del lector, y los personajes casi saltan de las páginas gracias a la excelente caraterización de los mismos. Rucka se encarga del turno de día y Brubaker del de noche. Hasta el momento Gotham Central ha estado cerca del mundo bizarro de las series de Batman, quizá por temor a un cierre prematuro, incluyendo recurrentemente villanos de la galería del Murciélago, aunque de vez en cuando nos ha sorprendido con capítulos intimistas que se alejan no sólo de lo superheroico sino también de lo policíaco, centrándose en los personajes, las personas, más que nada.
La vida está llena de decepciones, el arco argumental recopilado en este tomo, se centra excepcionalmente de un caso de lo más mundano y, además, con unos detectives que no son precisamente las estrellas de la serie, pero que precisamente por ese distanciamiento añaden riqueza al cómic. Esto puede resultar confuso para el lector, pues los protagonistas son prácticamente unos desconocidos y el caso no tiene nada de especial, pero mirando más allá nos damos cuenta del objetivo de la historia… Nos encontramos en mitad de las secuelas de la ola de asesinatos que el Joker orquestó en la historia anterior, con una baja en el GCPD, y es necesario dejar respirar a los personajes principales antes de entrar nuevamente en historias más ambiciosas como las que vendrán a continuación. Por otro lado, la calidad humana que desprenden los protagonistas de La vida está llena de decepciones hacen de su lectura un placer y, como digo, el poder ver personajes periféricos con sus dilemas e inquietudes, con sus compromisos y sus decisiones, engrandecen el escenario.
Una pena la ausencia de Michael Lark, el tercer miembro del equipo de creadores que se unieron para dar a luz esta genial serie. La crudeza y realismo de sus dibujos era la ideal para el tono de esta serie negra, consiguiendo retratar con igual eficacia a los héroes disfrazados en mitad de estas historias. Greg Scott no lo hace mal, no… es sólo que no es Lark. Las comparaciones, ya se sabe… Scott sigue en el estilo de todos los dibujantes de Gotham Central, pero no pasa de aceptable.
La vida está llena de decepciones se mueve entre pequeños desengaños, cosas que no controlamos y que aunque no cambiarán nuestras vidas nos hacen menos felices, pequeñas cosas que nos minan la moral. En esta historia vemos como diferentes personajes se enfrentan cada uno a su manera a estas decepciones y como, inevitablemente, depende solamente de nosotros vencerlas. En el próximo arco argumental volveremos a los orígenes…
Leído. Un título menos del que preocuparme para los próximos meses.
Los de Norma estaban bien, pero esto va de caída libre.
Ya digo que los siguientes mejoran, mucho, al menos comparado con este arco argumental. Esto es un alto en el camino. Mala suerte para Planeta empezar con esta historia…
ésta serie no me dice nada ya… no sé k esperaban… pero dl rollo sin duda… me kedo con Sam y Twich, mas humor y mas acción… k son comics d mallas joer… no olvidemos esto…
Vaya. Había leído cosas muy buenas de esta serie, que no compré por lo precios de NORMA. Y Brubaker me gusta (sí pagué por los de Catwoman). Por eso compré sin pensarmelo este tomo. Y no volveré a hacerlo. Ha sido como leer un episodio cualquiera de CSI. Y yo no pago 6 euros por un episodio de CSI. Ni siquiera la veo gratis. Bueno, salvo cuando no tengo nada más que hacer. Una lástima.
Aun no me he leido este numero, pero estais juzgando una serie cojonuda por tres numeros. Si no le dais otra oportunidad, alla vosotros. Antes de quitarosla de enmedio, yo me leeria los tres tomos de Norma, puro comic de serie negra de muy alta calidad, y la seguiria a partir de ahi. Comprendo que el hecho de que no dibuje Lark puede influir, y mucho, a la hora de comprar la serie, pero los guionistas hacen un trabajo genial. Y por si os lo estabais preguntando, no, no me pagan DC, Norma ni Planeta, simplemente recalco lo bueno que a mi, personalmente, me parece esta serie. Saludos.
«k son comics d mallas joer… no olvidemos esto… »
Estas completamente equivocado. Gotham Central es comic de serie negra, no de superheroes, aunque de vez en cuando aparezca alguien del universo batmaniano. Pero para gustos, los colores. Saludos.
Totalmente de acuerdo con JOsé Alvaro, no es de supers y es buenísima. No he leido este arco, pero aunque baje de nivel, el de la serie es tan alto que a buen seguro que vale la pena no dejarla.
No sé porqué siempre se tiene que atacar al cómic de superhéroes tradicional para alabar determinados tebeos que dentro del «género» se salen de la estructura clásica.
Un tebeo cojonudo de serie negra es Balas Perdidas, mejor que los mejores números de Gotham Central.
E infinitamente mejor que ESTE número en particular.
Sí, los de Norma estuvieron bien. El segundo, a mi entender en especial (para aquellos que me acusan de atacar siempre a Rucka), pero este es maaalo.
Pero de ahí a que es un buen tebeo porque no son buenos contra malos en mallas va un abismo…
Vamos a ver, Gotham Central es una serie que está de puta madre. Los tres tomos que sacó Norma son muy buenos, con un Michael Lark en estado de gracia y unos Brubaker y Rucka (al que detesto, mira por donde) muy entonados.
Como alguien ha mencionado, Planeta ha tenido la mala suerte de cotinuar la serie justamente en una minisaga de transición que ni está dibujada por Lark ni está protagonizada por los personajes más representativos.
Allá vosotros si no pensais seguir la serie, pero ya os digo que es muy buena. Y cuando se vaya Lark lo sustituye Kano, lo que tampoco está nada mal.
De todas formas, entre los saldos de Norma, había un pack con los tres tomos de Gotham Central a muy buen precio (así es como los conseguí yo).
Yo me lei los tomos de Norma, y me encanta. Es una serie negra muy buena. Y esa relacion de odio-dependencia con Batman es muy buena.
Hay que darle un voto de confianza a esta genial serie.Aunque supongo que se notara(y mucho) la ausencia del genial Michael Lark ,cuenta con dos guionistas que saben lo que quieren y eso se nota.No he tenido la oportunidad de leer el ultimo pero lo que edito Norma es realmente bueno.Y nose yo si no saldria airosa de unas comparaciones directas,frente a comics de culto como balas perdidas la verdad.Y ,si encima nos dicen que este es el arco más flojo de lo publicado ,pues que menos que esperarse un poco .
A mi me parece una serie policiaca bastante buena, con un guion muy bueno con algunas escenas memorables como las primeras paginas del primer tomo con mr. frio, o las fugaces apariciones de batman. El dibujo me parece genial, nunca me ha disgustado Lark, pero aquí esta que se sale.
Es cierto que en el tomo de Planeta la historia decae un poco, sobretodo la segunda parte, y la calidad del dibujo sufre un bajon notable, pero por el momento voy a seguir fiel a esta serie.
Pues me leí hace poco este tomo, después de que me lo había saltado siguiendo vuestras recomendaciones, y no me ha parecido malo en absoluto en cuanto al aspecto argumental. Como bien dice Sergio en su atinada reseña, se siguen las repercusiones de lo que fue Blancos Fáciles de una manera muy íntima e interesante.
y no creo que sea comparable con Balas pérdidas, una serie que dejé hace mucho, porque ésta se centra más en la vida de los policias que en otra cosa.