Gotham Central 01: En el cumplimiento del deber

 

Edición original: Gotham Central núms. 1 a 10 USA
Edición nacional/ España: ECC Ediciones
Guión: Ed Brubaker, Greg Rucka
Dibujo: Michael Lark
Entintado: Michael Lark
Color: Noelle Giddins, Matt Hollingsworth, Lee Loughridge, Digital Chameleon
Formato: Cartoné, 240 páginas
Precio: 23,00 €

 

Aprovechando que ECC Ediciones acaba de reeditar el primer tomo de Gotham Central, agotado desde hace unos meses, hemos decidido traer la serie a Zona Negativa, ya que era una deuda imperdonable que teníamos pendiente de cubrir. Si bien esta serie merece un buen artículo retrospectivo y analítico, de momento hay que conformarse con la reseña del primer tomo de la colección, de forma que os pique el gusanillo por si aún no la conocíais. Cuarenta números durante tres años, desde 2003 a 2006, forman esta colección, que ECC ha publicado en cuatro volúmenes. El quinto y polémico volumen, que quizás algún día analicemos, en principio no tiene nada que ver con la colección, salvo personajes y autores en común. Esto quiere decir que la colección acaba en el cuarto tomo, algo que debéis tener claro si queréis adquirir esta serie.

Gotham Central viene avalada por tres nombres que son sinónimo de calidad: Ed Brubaker, Greg Rucka y Michael Lark. Los dos primeros son los guionistas y escritores de las magníficas historias de esta serie, mientras que Michael Lark es el dibujante. Y por si fuera poco, fue nominada a varios Eisner en 2003: Mejor escritor para Brubaker y Rucka (por separado), Mejor serie nueva y Mejor entintador/dibujante para Michael Lark. Finalmente, al año siguiente ganó el Eisner a la mejor historia serializada por “Media Vida”, así como un premio Harvey también por la misma. Estos galardones son la prueba de que con Gotham Central estamos ante una gran serie, reconocida además, aunque en mi humilde opinión menos de lo que se merece.

En estos diez primeros números recopilados en este tomo vamos a encontrarnos tres excelentes historias: “En el cumplimiento del deber”, “Motivo” y “Media Vida”. En la primera de ellas, escrita por Brubaker y Rucka, que ocupa los dos primeros números y que da título al tomo, nos vamos a meter de lleno y de golpe en el día a día del Departamento de Policía de Gotham City, con el extraño caso de la desaparición de una niña, en el que además se toparan con el peligroso Mr. Frío con sorprendentes resultados. En “Motivo”, escrita por Brubaker en solitario y que ocupa los siguentes tres números, tendremos la resolución de este caso, y ni si quiera os voy a plantear una breve sinopsis para no desvelaros nada. Con respecto a “Media Vida”, la historia con la que se cierra este primer tomo de Gotham Central, primeramente hay que decir que es la mejor historia de estos primeros números, y por ello se llevó los merecidos premios anteriormente comentados. En esta historia escrita por Greg Rucka tendremos de protagonista a la detective Renée Montoya, quien es forzosamente sacada del armario ante sus compañeros de trabajo por un misterioso y anónimo desconocido que le quiere hacer la vida imposible, y en la que además se verá envuelta, implicada y acusada en un crimen del que evidentemente no es culpable.

Tres grandes historias, que podríamos dividirlas en dos básicamente por su temática y longitud, son las que, como habéis visto, componen estos diez primeros y brillantes números. Rucka y Brubaker saben dotar a la historia de interés gracias a un excelente desarrollo de los personajes, los cuales se quedan para siempre en tu memoria como por ejemplo Marcus, Sawyer o la propia Montoya. Y estos personajes son los protagonistas de una serie que nos relata la cotidianeidad de un cuerpo policial en la ciudad más peligrosa posiblemente del multiverso de DC Comics. Esto quiere decir que no hay un día aburrido en esa comisaría, por lo que su rutina es bastante caótica y, por supuesto, peligrosa y violenta. Es sencillamente un tebeo policíaco que supera ampliamente cualquier serie de televisión actual del género, y podría estar perfectamente entre las mejores ficciones de la historia en esta temática. Si a esto le añadimos que diferentes personajes y villanos de Gotham fuera del cuerpo policial hacen sus pequeñas apariciones que le aportan un plus muy entretenido e interesante a la historia, hacen que Gotham Central sea una colección eternamente recomendable.

Y hablando de series, si alguno os estáis preguntando si este cómic es igual que la serie de televisión Gotham la respuesta es no. Si bien es cierto que guardan algunas similitudes en tanto en cuanto son historias centradas en el Departamento de Policía de Gotham City resolviendo crímenes de diferentes villanos de la ciudad, la serie de TV se centra más en estos villanos y sus “tejemanejes” y no tanto en el cuerpo policial, salvo quizás en Jim Gordon. Por no hablar de que Gotham está ambientada en el pasado, antes de que Batman como tal existiese, ya que Bruce Wayne es solo un niño que acaba de perder a sus padres, explorando así los orígenes de los muchos y variados personajes del batverso. Aún con todo, si seguís la serie de TV estoy completamente seguro de que Gotham Central os va a encantar.

Michael Lark es el dibujante de estos primeros números, y seguiremos disfrutando por fortuna de su trabajo hasta el número veinticinco. Lark es un artista que ha trabajado en las tres actuales grandes editoriales americanas, en obras como Batman: Nueve Vidas o colecciones como Daredevil, Terminal City o la actual Lazarus con su compañero y amigo Greg Rucka. El trabajo de Lark en Gotham Central, que viene acompañado por el color de Noelle Giddins, Matt Hollingsworth, Lee Loughridge y Digital Chameleon, es sencillamente sublime. Es por ello que Brubaker y Rucka insistieron tanto en que Lark fuera el encargado de ilustrar estas historias, las cuales conjugan perfectamente con el dibujo del mismo. Lark, que puede recordar a Sean Phillips en ciertos momentos, aunque bajo mi punto de vista está incluso un escalón por encima, es el artista perfecto para cualquier historia policiaca o de género negro, como bien demuestra en Gotham Central y, sin embargo, no ha hecho tantos trabajos de ese tipo como el propio Phillips. Viñetas pequeñas y cuadrangulares destacan en el trabajo de Lark en esta serie, así que no esperéis splash-pages espectaculares, porque quizás tampoco venían al caso. Abundantes sombras y viñetas de acción con efectos clásicos en una excelente narración gráfica son otras de las características del dibujo de Lark, que tiene muchos matices, a lo que hay que añadir por cierto los colores monocromáticos de los coloristas que encajan a la perfección con la historia y el arte de Lark. La edición de ECC incluye por cierto, unas cuantas páginas de bocetos de Michael Lark al final del tomo que son de agradecer.