Edición original: Action comics #594-595 USA, Booster Gold #23 USA, Superman #12 USA, Action comics Annual, Superman Annual 1.
Edición nacional/ España: Septiembre 2013.
Guión: John Byrne, Dan Jurgens.
Dibujo: John Byrne, Dan Jurgens, Arthur Adams, Ron Frenz.
Entintado: Keith Williams, Roy Richardson, Karl Kesel, Dick Giordano, Brett Breeding.
Color: Tom Ziuko, Petra Scotese.
Formato: Cartoné. 176 págs.
Precio: 17,95€.
Este nuevo tomo dedicado al Superman de John Byrne recupera un buen puñado de historias aparecidas durante 1987 donde podemos ver al héroe de Krypton cruzando su camino con Batman, enfrentándose con Booster Gold o colaborando con el Detective Marciano. En esta ocasión, un variado grupo de dibujantes, entre los que encontramos a Dan Jurgens y Arthur Adams, se encargan de ilustrar los guiones del canadiense.
La recuperación del Superman de Byrne es una buena noticia para cualquier aficionado al personaje o a los cómics de superhéroes en general ya que permite disfrutar de una de las mejores etapas que ha tenido el personaje y de uno de los momentos más relevantes de la reinvención del Universo DC tras la revisión de toda la continuidad que supuso el evento de las Crisis en las Tierras Infinitas. La dificultad que tiene esta recuperación es que lo que se conoce como el Superman de Byrne en realidad son dos series que se publicaron simultáneamente, Superman y Action Comics, además de los cruces con otras series, por lo que el conjunto total de cómics a recuperar es amplio y variado. La edición que está haciendo ECC (siguiendo la edición USA) es exhaustiva y está publicando todo el material de John Byrne de aquella época, lo que produce situaciones como la que se da en este tomo, en la que cuatro de los seis números incluidos se publicaron en Diciembre de 1987 y sólo tres de los seis están dibujados por John Byrne. Esto tiene su parte buena ya que permite disfrutar de casi la totalidad de las aventuras del personaje de aquellos años (faltan las Aventuras de Superman de Ordway) pero también tiene sus inconvenientes ya que a este ritmo, las tramas secundarias que se desarrollan en varios números se acaban eternizando.
La primera historia recogida en este tomo es un cruce entre las series Action Comics y Booster Gold en el que asistimos a un plan de Lex Luthor que aprovecha la rivalidad entre ambos héroes para destruir a Superman y responsabilizar de ello a Booster Gold. Es la típica historia en la que primero los héroes se enfrentan y luego se unen para derrotar al villano en su variante de suplantación de identidad. La gracia de la historia está en contraponer dos personajes con una visión tan diferente del uso de los poderes: mientras Superman actúa de forma altruista ayudando a quien lo necesite, Booster Gold vende sus servicios a quien pueda pagarlos. Otro elemento que permiten comprobar estos números es la enorme diferencia que había entre el dibujo de John Byrne y el de Dan Jurgens (quien años más tarde se encargaría de la serie de Superman) en aquella época, siendo el de Byrne mucho más dinámico y elegante.
La siguiente historia es un número único de la serie Superman en la que Byrne narra el romance que vivió un joven Clark Kent, antes de convertirse en Superman, con Lori Lemaris, una sirena que vive de incógnito en la superficie. El material en el que se basa esta historia es puro Silver Age pero Byrne tiene la habilidad de transformarlo en una historia sobre un amor imposible entre dos personas únicas y especiales pero que aun así no pueden estar juntas. La sensibilidad de la historia queda perfectamente reflejada en la última viñeta en la que el relato del amor imposible entre Superman y la sirena se convierte en la canción de ballena para que sea recordado en todos los océanos.
Los dos anuales recogidos en el tomo, el del Action Comics y el de Superman, son dos historias autoconclusivas de muy diferente índole. El de Superman presenta a la versión post-Crisis de Titano, el simio gigante, y lo aprovecha para explicar una historia de denuncia sobre la experimentación con animales. El dibujo es de Ron Frenz, que cumple bastante bien, sobre todo en las escenas de lucha entre Superman y Titano. Más interesante es el anual de Action Comics, ya que supone la primera aventura conjunta de Superman y Batman desde que se conocieran en la miniserie de relanzamiento de Superman. Batman recurre a Superman para que le ayude a acabar con una plaga de vampiros en un pueblecito de Carolina del Sur. A parte de la interacción entre ambos personajes también asistiremos a como la vida Superman también puede depender de la sangre fría y los recursos de Batman. Otro punto interesante de este anual es el dibujo de Arthur Adams, en uno de sus escasísimos trabajos para DC. En esta ocasión Adams realiza un trabajo ligeramente diferente al que acostumbraba a hacer en Marvel, con figuras menos estilizadas y más contundentes. En parte, este acabado es responsabilidad de Dick Giordano, cuyas tintas no le sientan tan bien al detallado dibujo de Adams como lo hacen las de Terry Austin, por ejemplo.
El tomo se cierra con otra historia de Action Comics donde hace su debut Silver Banshee y en la que veremos como su poder es capaz de derrotar incluso a Superman, quien necesitará la ayuda del Detective Marciano para deshacerse de ella. Este es un número bastante flojo en cuanto a guión ya que apenas sirve para introducir al personaje de Silver Banshee aunque no se cuente nada de su origen o sus motivaciones y en el que la trama de la derrota de Superman se resuelve en una viñeta con una rápida justificación traída por los pelos. En cambio el dibujo de este número es de los mejores del tomo y sirve para constatar que Byrne también es bueno en la faceta del diseño visual de personajes, ya que el de la villana es muy elegante y contundente en su simplicidad.
Los guiones de Byrne en todas estas historias siguen la misma tónica que tomó desde el inicio de su etapa con historias cortas y sencillas, de carácter bastante aventurero y ligero en contraposición con las historias más complejas y oscuras que estaban realizando otras estrellas de la época como Frank Miller o Alan Moore. Quizás este enfoque haya hecho que estos números no hayan envejecido tan bien como otros de la misma época pero continúan siendo cómics bien hechos y entretenidos que se disfrutan con facilidad.
Anda que como se monte otra bronca alrededor de Byrne. Si es que vais provocando…
Buen artículo, sólo decir que el número de Silver Banshee a mi me gustó mucho en su día, no sé si ahora al releerlo como dice Alejandro me resultaría rollete pero vamos, que esta colección debería estar en todas las estanterías. Desgraciadamente para mí ya me compré el coleccionable de Superman en tomitos finos y no me gusta repetir materiales.
Yo me quedé en los números de Millennium (buen retconeo que se marcó allí el bueno de Byrne), que si no me equivoco tocarían en el próximo volumen, así que si puedo compaginar bien la edición de Zinco con ésta, igual me subo en el volumen 7.
@Retranqueiro: no tenía intención de reseñar este tomo pero con la polémica del otro día me acordé que lo tenía pendiente y aquí está. Como fan de Byrne que soy creo que tenía que dar mi opinión para defender al canadiense, respetando todas las opiniones.
@Jerónimo: efectivamente el siguiente tomo contiene los números de Millenium.
De todas formas cuando se habla de aquellos años de Byrne no hay margen para la opinión. Fué el mas grande y ya está.
Estoy yo como para decir que me ha encantado el Byrne de su última DOOMSDAY.1…
«y toda la etapa posterior de Stern, Gammil, Pérez y compañía a partir de argumentos de Byrne es probablemente mi etapa favorita de Superman.»
Si señor, Mundo Guerra, Brainiac, Gangbuster, Morgan Edge, Intergang, Bibbo!! y unos secundarios cojonudos, vamos que no hacia falta casi ni que saliese Superman, aparte Gammill es una de mis debilidades, que bien dibujaba este tio. Solo he podido conseguir una pagina suya de esta etapa, pero sigo buscando, debilidad compulsiva por Gammill:
http://www.comicartfans.com/gallerypiece.asp?piece=998896
Esa etapa demoledora (Del 86 al 90) puede darle más de una lección de humildad y narrativa a la soberana mierda que hizo Morrison con Superman y que ha continuado Lodbell.
Excelente lectura, a pesar del paso del tiempo no resulta anacronica, y si es superior al nuevo reboot de Morrison… por cierto les consulto: esto es lo mismo que saco hace unos años Planeta DeAgostini?
Gracias.
Slds!
1.ver el comentario de reverend dust….para darte cuenta que es del 2013.maaaal.
2.la mascarada de ocioso fastidiada por un avatar «chivato».
(aunque la verdad es que harpo encaja mejor,la verdad).