Edición original: diciembre 2008 – mayo 2009 – DC Cómics
Edición España: abril 2010 – Planeta deAgostini Cómics
Guión: Andrew Kreisberg
Dibujo: Mike Norton
Entintado: Josef Rubinstein, Bill Sienkiewicz
Portada: José Omar Ladrönn
Color: David Baron
Precio: 17,95 € (Tomo en tapa blanda)
Nuevo formato para que contar y cantar a este lado del Atlántico las aventuras de Flecha Verde, ahora que, después de tantos años viviendo en pecado (o del pescado), él y Canario Negro dieron trágico final a su historia de amor casándose. La pareja, que bien podría protagonizar buena parte de los temas de un disco cualquiera de Pimpinela, tiene una cabecera conjunta que refleja el nuevo estado civil de Oliver Queen y Dinah Lance (Queen) y después de varias experiencias en grapa, ahora prueban suerte con los cada vez más numerosos tomos.
Como punto de partida, hay que reconocer el hecho de que la relación entre el arquero y la soprano (ejem) ha sido siempre un elemento narrativo sumamente atractivo. Ya en sus orígenes, se presentaron como una pareja más que alejada de los tópicos sobre la materia que existían en el ámbito de los superhéroes. Dinah no era la novia a la que socorrer, sino una aventurera que podía tratar de tú a tú a Oliver, y de hecho fue otro de esos detalles con los que la siempre recordada sucesión de aventuras que unieron a Flecha Verde con Linterna Verde y con el equipo creativo compuesto por Dennis O´Neill y Neal Adams intentó tocar temas de la actualidad de entonces. Allí se dejaba caer de forma más bien patente que Ollie y Dinah eran una pareja con todas sus consecuencias. Su relación sirvió de modelo para que, en Marvel, el inolvidable Mark Gruenwald juntara a Ojo de Halcón con Pájaro Burlón, hasta el punto de que esta relación haya corrido en ocasiones paralela a su fuente de inspiración, aunque ésa, como suele decirse, es harina de otro costal.
Cualquiera que haya seguido con cierta asiduidad la colección del Robin Hood deceero (la cual lleva toda esta década asomándose intermitentemente en las librerías de por aquí) habrá podía comprobar que la relación de éste con Canario Negro dista mucho de ser tranquila. Todo lo contrario, se trata de personas con un fuerte carácter que chocan constantemente y que, pese a todo no pueden estar demasiado tiempo separados el uno del otro. Su historia está salpicada de rupturas y reconciliaciones, motivadas por la tendencia de Oliver a meter la pata por ser un poco cabeza loca y por la consecuente decisión de Dinah de decir “hasta aquí hemos llegado” y largarse tomando una puerta que, por decisiones editoriales, ya parece giratoria. En cierta forma, bien podría decirse que la ¿necesidad? de mantener este añejo pero inestable vínculo ha impedido que los personajes evolucionen o que, habiéndolo hecho, mantengan el estatus adquirido mucho tiempo.
Tomemos como ejemplo el primer tomo de los dos que, hasta el momento, ha editado Planeta. Recoge un arco argumental en el que Andrew Kreisberg y Mike Norton presentan a una nueva villana de para la galería del arquero. Su aparición coincide con la finalización del proceso que iniciara el guionista Judd Winick, de despojar a la parejita de aquellas “adiciones” que podrían estorbar a la dirección establecida para sus aventuras. Vemos partir a Connor Hawke, profundamente cambiado, después de verle lucir el manto de su progenitor (sin él y junto a él) durante quince años. Vemos partir a Mia Dearden, la lenguaraz exprostituta con la que Kevin Smith tomaba el pelo a Queen y se reía de todas las inconsistencias del personaje y de su mundo. De repente, el entorno de la parejita es mucho más pobre, lo que resulta paradójico si tenemos en cuenta que, de un tiempo a esta parte, ya no parece haber problemas para crear superhéroes-franquicia (y si no, véanse los casos de Linterna Verde, Batman o el Capitán América). Tres cuartos de lo mismo pasaría con Canario Negro, que tendría que deshacerse de gran parte del equipaje adquirido durante sus años en Aves de Presa. La situación toma tintes casi ridículos cuando toca hacer la misma operación de “machuca-y-limpia” con los adversarios del arquero esmeralda. Alguno, que había sido un rival virtualmente imbatible en épocas anteriores, es despachado y dejado fuera de combate con una facilidad casi ridícula, usando un truco (empleado y choteado en sagas como Onslaught o series como Dragon Ball) para indicar que el nuevo enemigo es más peligroso, hábil y “seispesetas” que todos los anteriores. Para dar sensación de equilibrio, aparece también otro adversario dirigido a fastidiar a Canario Negro, pero el personaje, el argumento y el desarrollo son tan tópicos que más de una persona sentirá la sensación de transitar por terreno más que trillado. El resultado final es un tebeo que se consume rápidamente, que está hecho con cierto oficio (sobre todo en la parte gráfica, donde los lápices de Mike Norton son complementados a la tinta por dos maestros del oficio como son Josef Rubinstein y el singular Bill Sienkiewicz) pero que se olvida rápidamente, al ser más de lo mismo. Quienes sean aficionados al dúo protagonista, bien juntos o bien cada uno por su lado, tendrán en mente etapas y series bastante mejores, y una prueba del relativo fracaso que ha supuesto este proyecto viene dado por el hecho de que la línea marcada en el mismo no va a tener mucha continuidad.
De la edición española, llaman la atención la curiosa mezcla “espánglica” del título y el hecho de que Bill Sienkiewicz, que solamente ha entintado uno de los números del tomo, vea su nombre puesto por delante de Mike Norton. Los autores de culto tiran mucho, pensaría el editor, aunque se trata de un trabajo de corte garbancero, en la línea de aquéllos en los que trabajaba sobre los lápices de Sal Buscema en cierto título arácnido noventero.
Si es verdad que esta étapa no ha sido destacable (que ganas de que reediten el Green Arrow de Mike Grell algún día), la nueva étapa con J.T Krul mejora con respecto a está, tanto en guiones como en el aspecto gráfico, aunque tampoco llega a la calidad de Mike Grell, si mejora sustancialmente esta última étapa dando la sensación de que nos esperan grandes cosas en esta colección. Aunque he leido muy malas críticas de J.T Krul en esta página debido a la reciente miniserie de Arsenal, hace poco tuve la oportunidad de leerla y a mi me encantó (con el pero de la escena en que escapa de la camilla, que es ridícula), si es verdad que es muy manido el coger a un personaje, deprimirlo con una tragedia personal y volverlo mas oscuro, pero me gustó la forma en que lo hizo J.T Krul y a mi me convenció. Me gustan este tipo de personajes fuertes y valientes en unos aspectos y debiles en otros, son menos predecibles e interesan mas que los heroicamente predecibles. Estos dos ultimos tomos que se han publicado en España han sido un parentesis distraido, a la espera de algo mejor que llega con J.T Krul.
No cuesta nada poner Flecha Verde antes que Grin Arrou.
La Miniserie de Arsenal Fue Mala, La Muerte de Lian Fue Gratuita, aunque la culpa fue de Robinson mas que de Krull, la Alucinacon con Lian fue …. en Fin a otra Cosa. rEste tomo demuestra lo mucho que cambia Dc de Opinion, Separandolos de Nuevo ella volviendo a Birds de Prey y el aprovechando el Brillante Day de Geff Jons sin los Secundarios de Toda la Vida Mia, Coner, Shiva y recuperando como ciclo argumental a los Padres.
Este Tomo Cuenta Historia que una Vez leida se olvidan incluso en DC
Ey, en este tomo escribí yo 😀
Pues a mí me gustó mucho. Lo leí hace mil, pero tengo buen recuerdo. Y del siguiente, también.
lo q me calienta a mi es poner un nombre en ingle y el otro en españo.
y aparte de las traducciones del !%·$&·$%! q hace planeta deagostini
saludos
la culpa fue de Robinson mas que de Krull
Cierto, pero salta a la vista que fue el «mandao» de Didio, que se cargó los planes que tenía para formar un equipo paralelo de la Liga de la Justicia con Hal al mando.
No creo que en esta serie Canario Negro haya perdido nada de su bagaje de Aves de Presa. Y menos mal, ya que en esa serie es donde el personaje fue realmente desarrollado. Ahora que Gail Simone lo ha retomado continúa con su historia sin verse afectada en nada por lo sucedido en Green Arrow & Canario Negro.
creo que fui el unico que cogió el chiste del pecado y el pescado… de los clásicos Les Luthiers, o me equivoco? xD
Don Isu: efectivamente, es de «San Ictícola de los peces». Hay otra sacada de la «serenata astrológica» que aparece en «Todo porque rías».
En cuanto a la serie, creo que da la sensación de ir dando bandazos. Los acontecimientos de lo que pasa en los números siguientes recuerdan demasiado a las cabronadas que le hicieron a Hal Jordan antes de convertirse en Parallax. No me da muy buena espina, no.
¡Tomos! Al ritmo que llevamos, pronto no recordaremos cuál era la diferencia entre Norma y Planeta 😛