Guerreros Valientes Vol. 1-2

 

Edición original: Bravest Warriors Nº 1-8 USA (BOOM! Studios, 2012-2013).
Edición nacional/ España: Norma Editorial (2014-2015).
Guión: Joey Comeau.
Dibujo: Mike Holmes y Ryan Pequin.
Color: Lisa Moore, Mirka Andolfo, Josh Ulrich, Tyson Hesse y Studio Parlapà.
Formato: Tomo rústica de 120-116 páginas.
Precio: 12,50€/u.

 

¡Ey, colegas! Me ha chivado un monstruo mancha lo mucho que flipáis con Hora de Aventuras. Sí, esa loquísima serie de televisión, llena de acción y cosas chulas protagonizada por los insuperables Finn el Humano y Jake el Perro. Ese universo lleno de princesas, villanos súper absurdos, amistades cañeras y chuches de toda clase, raza y condición, surgido una inesperada mañana de la chanante y matemática cabeza de Pendleton Ward. Todo gracias al perjudicial abuso de azúcar y otras sustancias de las que hacen tantas cosquillas a nuestro organismo. También debéis estar al tanto de los cómics de Hora de Aventuras con los que los «matabostezos» Ryan North, Shelli Paroline y Braden Lamb no han dejado de alucinarnos con sus historias situadas en el mágico (pero con una explicación científica) País de Ooo. Pues bien, puede que sea traumática para vosotros esta revelación, y recalcamos lo de puede, pero cabe la posibilidad de que Hora de Aventuras no sea lo que más mola de todas las cosas molonas. Hay más galaxias y rincones fantásticos por explorar, ¿por qué pues salvar princesas, espada en mano, si podemos viajar en pandilla por planetas de un sistema galáctico, envidia del mismísimo George Lucas, combatiendo la desigualdad, el sexismo y la tristeza a golpe de pistola láser? Si te interesa sigue leyendo, en caso contrario quizás seas demasiado viejo o aburrido, o las dos cosas, para emociones y propuestas tan maduras y devastadoras.

Pregunta directa al mentón: ¿ya conoces a los Guerreros Valientes? No, no hay excusa posible para convalidar tamaño error en tu propia continuidad espacio-tiempo. Pero todavía estas a tiempo de subsanar la metedura de pata. Los Guerreros Valientes son un concepto que nació como una serie de animación para el canal de youtube Cartoon Hangover, el responsable de la idea original Pendleton Ward delegó en Breehn Burns el trabajo de escribir y dirigir los capítulos del show producido por Frederator Studios. La descripción del resultado en modo pereza extrema: una versión de Hora de Aventuras en clave de ciencia ficción. La descripción con un poco más de detalle y mimo: la historia de un cuarteto de jóvenes héroes del año 3085 en pleno desarrollo hormonal (lo que en nuestra época conocemos como adolescentes) que viven aventuras a lo largo, ancho, alto y bajo del universo haciendo el bien y contribuyendo a la diversión de todos los extraterrestres que se cruzan en su camino. El grupo está formado por su líder Chris Kirkman, la aguerrida Beth Tezuka, el sentimental Wallow, y su computadora de mano Pixel y, finalmente, el inventor de imposibles Dani Vazquez. También cabe mencionar al quinto miembro no oficial del grupo, Ciruela, y Catbug, una adorable mascota mitad gato y mitad mariquita.

Ya si eso hacéis una maratón de la serie, allí captaréis mejor las sutilezas y matices de las personalidades de sus protagonistas y el desquiciante y pixelado tono de sus aventuras. Después de saldar vuestra deuda podéis volver a la altura de esta misma línea para darnos las gracias. De nada. Y, por cierto, si este tipo de animación de aspecto «cookie», pero neurótica y desenfrenada en su corazón, te hace sentir brutal y te flipa pepinos recuerda que también tiene su propia cabecera de cómics. Y ahora te leo la mente. ¿Están los cómics de Guerreros Valientes a la altura de la leyenda? Tanto como para necesitar un prospecto sobre sus efectos secundarios (aunque no se incluye en su edición original). Los guiones de Joey Comeau, el encargado de manejar los hilos a este lado de la realidad, son tan imaginativos como un sándwich de diez pisos con un huevo frito en la cúspide sobre la joroba de un orangután albino. Puede que no llegue a la altura de lo que Ryan North y compañía hacen en las viñetas de Hora de Aventuras pero llega para un buen colocón de surrealismo directo al cabezón. El ingenio se aprecia no tanto en las tramas sino en sus diálogos, con un índice de pullas cercano a la masa crítica que hay que manejar con mucha precaución pues pueda llegar a saturar por su insistente persecución del molonismo extremo.

Estamos hablando de historias en las que nuestros héroes deberán sobrevivir a una plaga de payasos zombis, luchar contra la Tristeza, en mayúsculas, resolver el caso de la fuga de cerebros del Concurso de Miss Multiverso Adolescente y/o poner fin a una cruda guerra civil planetaria de extraterrestres plátano divididos por el sexismo. En sus ratos libres los Guerreros Valientes se machacan los pulgares con los videojuegos y celebran luchas clandestinas de cupcakes. El tema de la cuestión de género está muy presente en el cómic, muchas veces tratado con una evidente mala baba, pero nunca con finalidades oscuras y moralistas porque sus protagonistas están tan perdidos y desorientados como decidos están a cambiar el mundo y no dejarse llevar por sus sentimientos. «Ya habrá tiempo de hablar de sentimientos cuando nos muramos». Y todo esto pintarrajeado por Mike Holmes y coloreado por Lisa Moore, una pareja que resulta ser la mejor en lo que hace, aunque lo que hace se parezca demasiado a la serie de animación y alguien pueda pensar que eso no tiene excesivo mérito. Pero la serie desprende buen rollo por todos sus poros, una corrosiva creatividad pegajosa que podéis ojear también en su larga colección de portadas variantes realizadas por pintamonas (en plan guay, ¿eh?) como John Martz, Aaron Renier, Jon Boam, Zack Sterling, Bob Flynn, Marc Bell, Jim Rugg o Tessa Stone. ¡Puro flipe, tíos!

Los recopilatorios de las aventuras de los Guerreros Valientes, copiando lo visto en Hora de Aventuras, vienen con una buena guarnición de historias cortas dibujadas y escritas por el segundo comandante del lápiz a bordo de esta nave: Ryan Pequin. Este extraño espécimen de dibujante aprovecha para probar cada uno de los estilos existentes en el multiverso demostrando la capacidad de adaptación de estos personajes, y también la esquizofrenia de su autor que junto al portadista Tyson Hesse es el que más se encuentra en la onda. En el primer tomo de la serie tenemos los relatos extra siguientes: Domingo Láser, con los Guerreros Valientes en su día de fiesta; Catarro Espacial, en donde nuestros héroes hacen frente a un virus y un monstruo con forma de venado hormonado; Guerrero Valiente (por Dani), sobre el que sobran palabras; y Realidad Virtual, en el que Chris y compañía prueban un videojuego en el que se deben derrotar a Ben «Franklinstein» y Abraham Lincoln. En el segundo tomo: Una monada despiadada, homenaje a La invasión de los Ultracuerpos; ¿Dónde está Marigato?, cuyo título no necesita más sinopsis; Vamos a abrir el baúl de los recuerdos, con los Guerreros Valientes repasando su historial de vacaciones desastrosas; y, finalmente, El secreto de Beth, descubriendo que a cierta heroína le gustan cosas muy chungas.

Para pasar un rato chulo los Guerreros Valientes cumplen con su misión pero eso no convierte sus aventuras en apropiadas para todo tipo de públicos. Es de sentido común que si te gusta Hora de Aventuras, y no le haces ascos a la ciencia ficción, la más cercana a Douglas Adams y su Guía del autoestopista galáctico (intergaláctico en Latinoamérica), estos cómics pueden incluso convertirse en una lectura de cabecera para ti. Pero tu cuerpo debe pedirte marcha porque estos Guerreros Valientes exigen mucho malgasto de energía, si no estás preparado para «rockanrolear» a todo ritmo con un grupo de protagonistas en la edad del pavo no te apuntes a la experiencia, puede dejarte severas secuelas, como intentar criar una manada mixta de bebés aliens y critters con las instrucciones recomendadas para un gremlin. Para dejarlo más claro: consumid con responsabilidad porque el reseñista –la RAE no acepta esta palabra en su diccionario, la más cercana es reservista- no se hará cargo de la factura médica. Bastante tiene con haber tenido que rectificar unas treinta y cuatro veces el nombre de estas historietas por su insistencia en llamarlos Guerreros Secretos. Pero no son lo mismo, los Guerreros Valientes no tienen nada de comedidos, solo mucha comedia, cómics que conquistan por placaje y avasallamiento -ver los chistes malos a pie de página- y un sentido del ingenio que les hace pasarse de vueltas casi antes de haber sido concebidos en ellos un argumento y/o planteamiento. Están simpáticos, vamos.