Happiness

 

Edición original: Shogakukan.
Edición nacional/ España: Milky Way Ediciones.
Guión: Usamaru Furuya.
Dibujo: Usamaru Furuya.
Formato: Tomo B6, rústica con sobrecubierta, 272 páginas en B/N.
Precio: 8’50 €.

 

¡Ay la felicidad! Esa sensación aparejada a una condición subjetiva de satisfacción y alegría. Tanto se ha hablado y debatido sobre ella. Desde una perspectiva occidental la pregunta sobre la felicidad es esencial en el surgimiento de la ética en la antigua Grecia, como decía Aristóteles, todos estamos de acuerdo en que queremos ser felices, pero en cuanto intentamos aclarar cómo podemos serlo empiezan las discrepancias. Más tarde todo tipo de corrientes filosóficas darán respuesta a qué es y para qué sirve la felicidad. Los epicureos la entenderán como la autosuficiencia en el placer moderado, para los estoicos será la fortaleza en la aceptación de una existencia determinada, para los racionalistas será la adecuación de la voluntad humana a la realidad y así un largo etc. Pero, ¿qué es la felicidad desde una visión oriental? Oriente es siempre más intimista, buscará la felicidad a través de la introspección o del autoconocimiento y justificará llegar al sentimiento de más de una manera. Este manga, es un claro y extremo ejemplo de que hay gente que puede ser feliz a través de la humillación, la desesperación, las obsesiónes o de la resignación.

Happiness es una recopilación de historias autoconclusivas, bastante perturbadoras, bajo la pluma del genio polifacético Usamaru Furuya, uno de los autores de las últimas generaciones de mangakas con más variedad de recursos. El tomo lo abre la cara de una muchacha diciendo el título en japonés (ha-pi-ne-su), dividida cada sílaba en una página, siendo como esos librillos que si pasas las páginas rápido el dibujo parece moverse o hablar, como es en este caso. Tras esta pequeña muestra de genialidad abre la colección de historias Manoseada, pisoteada y finalmente brota una flor de intensos sentimientos donde se relata la relación de una alumna con su profesor y la total desesperación y sumisión de la chica con tal de estar con él. La continua Lolita 7. En este caso tenemos a otro profesor, uno que deja de dar clases por sufrir el acoso de sus alumnos, el cual se refugia dibujando lolitas, y para ello usa de musa a la imagen de su prima de pequeña. Un relato que muestra la obsesión por lo infantil que en ocasiones roza la pedofilia. La canción del diablo es el relato más lisérgico y gracioso del tomo. Cuenta la historia de un par de amigas, y como una de ellas, obsesionada por Lucifer, quiere casarse con él y arrastra a la otra a un viaje de lo más loco e imaginativo. Una de las historias, junto con la siguiente, donde más se muestra el potencial de Furuya. ¿Y si…? es otra historia de adolescentes. Dos muchachas, un juego y en realidad nada es lo que parece. Un relato sobre la existencia y un juego gráfico de lo más fresco. Sigue este viaje por las zonas más oscuras del alma humana con Happiness, la narración que da nombre al manga. Dos jóvenes que sufren abuso escolar se conocen y proponen un plan para acabar con su sufrimiento, matar a las personas que les hacen daño y después, suicidarse, pero no todo es tan sencillo, ¿o sí?. Más tarde nos encontramos con La habitación de las nubes, un drama cruel lleno de violaciones y abusos, donde una joven un tanto inocente busca su sitio en el mundo y el porqué de su existencia. Entre tumbos y tumbos, la vida se mostrará dura e implacable con ella. Una triste odisea donde solo el amor aportará algo positivo en su vida. Pero todo se acaba, y el amor también. Luego está Indigo Elegy, donde un par de amigos de lo más diferentes, uno alocado y algo payaso; y el otro elegante y serio, están enamorados de la misma chica, y entre la habilidad de uno y del otro, crean estupendos dibujos de ella. Pero la idea de ella está muy alejada de lo que realmente es. La única historia no dramática (por ello descuadra algo en esta recopilación). Cierra el tomo, Under-dol, un relato que sintetiza todos los elementos turbios de las demás historias, combinando los abusos, la humillación, la resignación, el suicidio o la apatía. Nuestra protagonista, que se gana la vida siendo una idol underground verá cambiar su vida cuando uno de sus admiradores la secuestra.

Como se ha podido leer, las temáticas con las que trabaja Furuya son bastante extremas. Con un dibujo realista y evocador que acompaña en todo momento a la historia y un ritmo narrativo perfecto en los relatos más largos.

Sobre el autor, decir que nació en Tokyo el 25 de enero de 1968. Se graduó en la Tama Art University, una universidad privada considerada como una de las mejores del país, en la que se graduó en pintura al óleo y donde también desarrolló un claro interés por la escultura y por la danza Butoh (un estilo de baile que bebe del absurdo y de lo grotesco). En cuanto a su interés por el manga, lo tenía desde la escuela primaria, tiempo durante el cual realizó el curso por correspondencia del famoso mangaka Osamu Tezuka, desarrollando su propio estilo que, al llegar al instituto, había evolucionado hacia una estética más oscura y underground; aunque al ingresar en la universidad siguió cambiando de lo figurativo a lo más abstracto. En 1994 publicó su primera serie, Palepoli, en Garo. Y aunque había planeado dedicarse a la ilustración al acabar su graduación de la universidad, fue tal su éxito como dibujante de manga que se ha dedicado a él a tiempo completo.

Le preguntaron a Usamaru Furuya en una entrevista si tenía alguna habilidad especial, a lo que el mangaka contestó: “puedo realizar algunas acrobacias locas con mi vieja bicicleta”. Y yo añado que otra de sus habilidades es crear buenos mangas, como dice Marc Bernabé en su blog “este tomo es una obra indispensable en tu “Usamaru Furuya-teca”. ¡Qué gran autor!”. Touché.