Mark Waid es un icono dentro del mundo del comic. Es un gran guionista a pesar de que últimamente no está en su mejor momento. Quizá, y solo quizá sea que su cabeza está en otro sitio, o bien que está agotado a nivel creativo. A pesar de lo dicho entre sus obras prima la calidad, siendo el objeto de esta reseña un ejemplo de su buen hacer. Tal y como expuse en la reseña de Heroes Return. Los Vengadores, la historia calamitosa de años atrás fue causa directa del nacimiento de Heroes Return. Entre las series incluidas en el «renacimiento» se encuentra el Capitán América.
Waid ya había tenido entre sus manos al Capitán América tras el fin de la era Gruenwald. Nos regaló unos números de gran nivel. Si bien y a pesar del éxito fue tratado con poca delicadeza y con Héroes Reborn tuvo que abandonar el escudo. Afortunadamente entró Liefeld en la colección. Imagino el impacto que ha causado esta frase en los seguidores de ZN. Pero os aseguro que al final del artículo daré la explicación de semejante afirmación.
Mark Waid parece sentir algo especial por Steve Rogers, y debemos recordar que ha tenido por tres veces la batuta del héroe de las barras y estrellas. La última etapa portando el escudo lo fue tras la marcha de Nick Spencer. Su labor no ha sido fácil a los guiones puesto que ha reintroducido al personaje en el Universo Marvel por dos veces. Una de ellas tras la muerte a manos de Onslaught, y la segunda tras Imperio Secreto.
Lo que nos ofrece Panini Comics es el inicio de una serie del Capitán América que rezuma el mismo aire nostálgico y de cierta atmosfera clásica al igual que los Vengadores y los Thunderbolts de Busiek.
Waid escribe a Steve Rogers con un halo de sobriedad, elegancia y sobretodo grandeza que hace del personaje un icono y una inspiración para los demás. El guionista también lidia con uno de los temas habituales del Capitán América y que mejor le sienta, la tensión entre Steve Rogers y el manto y escudo del héroe.
El autor trata de una manera magistral un aspecto interesante en la figura de un icono. Se trata de una mirada interesante a cómo se siente Steve sobre los excesos de ser una celebridad y los efectos que tiene o despierta en el público en general, tanto extranjero como nacional. Waid trata el aspecto de «relevancia social» que tiene el Capitán América, algo que no tiene por qué ser del todo bueno. Si bien el tema del sueño americano y el héroe que es adorado son buenos temas, el resultado puede suponer para algunos lectores ciertamente sermoneador. Al respecto no podemos olvidar el momento en el que se encontraba el personaje, tras pasar el calvario de Heroes Reborn, donde se perdió la esencia del mismo. Waid que había rescatado al Capitán América fue injustamente apartado del proyecto, aunque a la postre fue lo mejor que pudo ocurrirle. Así las cosas el guionista de nuevo debe cimentar el significado de lo que es ser el Capitán América, aunque suene sermoneador y repetitivo. Una vez sentado lo anterior se opta por la aventura de superhéroes más tradicional.
Otro de los momentos clave del primer año de esta serie es la pérdida del escudo del Capitán América. Lógicamente tras años de ser una extensión del propio héroe su desaparición provocará una cierta inestabilidad en el mismo. Tras el uso del escudo clásico de los años 40, finalmente portará el que actualmente utiliza en la etapa de Ta-Nehisi Coates. Es interesante ver esta situación que hasta ese momento no había sido tratada como tal, puesto que como Nómada no hacía uso del mismo.
Con el “Regreso de los Héroes”, el universo Marvel volvió a estar interconectado y para ello tendremos la participación bastante asidua de los Vengadores. Esto que parece ahora obvio se había perdido. Siendo que esta interconexión ha sido siempre pilar del universo Marvel, encontraremos muchos Vengadores pasando por estas páginas. Incluso tendremos un capítulo del crossover “Vive como un Kree… o muere”, donde Pájaro de Guerra (Ms. Marvel/Capitana Marvel), tendrá un papel muy importante. En esta historia el guionista crea ciertas similitudes con los campos de concentración nazis, lo cual influye ostensiblemente en nuestro personaje. Este crossover discurrió en los siguientes números: The Invincible Iron Man vol.2 #7, Captain America Vol.3 #8, Quicksilver Vol.1 #10, The Avengers Vol.3 #7. El tomo reseñado hace una mera alusión al tema en una página para poder entender el número afectado. Igual hubiese sido bueno incluirlo al completo puesto que se me hace difícil que se recupere la serie de Mercurio. Invito a Panini Comics a que se edite dentro de le recopilación de Iron Man (de la mano de Busiek) dentro de este formato.
La reflexión que deja el autor sobre “¿Qué pasaría si el sueño americano, se convirtiera en la pesadilla del mundo?”, es ciertamente interesante, y podríamos incluso darle una vuelta de tuerca a fecha de hoy, veinte años después con lo que vemos a diario en las noticias.
En cuanto a la parte gráfica encontramos dos grandes autores. Aunque suene herético el arte de Andy Kubert es superior al de Garney. Ron parece inconsistente en estas páginas y da la sensación que el problema radica no en los lápices sino en el entintado. Lamentablemente esta problemática empeora a medida que avanzan los números. Sus lápices son buenos pero el acabado necesita mejorar. Insisto que puede que el problema no sea del dibujante. Kubert por otro lado está sublime, con un trazo poderoso. Siempre se le ha achacado su influencia noventera, con personajes musculados, caras duras, rígidas y con poca expresividad facial, pero no es menos cierto que siendo hijo de su tiempo es un gran dibujante. Sus páginas son muy potentes y cargadas de detalle. Las comparaciones son odiosas, pero siendo ambos autores distintos e igual de profesionales, en estos números destaca con creces Andy Kubert.
Como conclusión solo cabe recomendar esta obra. Equipo solvente, argumento que sin ser la cumbre en la historia del Capitán América ofrece entretenimiento, una edición muy buna por parte de Panini Comics, y una relación calidad precio aceptable (dentro de una línea que puede ser de costo elevado), son los puntos que hacen de esta edición un must have.
No debemos olvidar que fue el formato Colección Extra Superheroes la anterior reedición. Lógicamente si comparamos el precio de aquel primer tomo que eran 15,00 euros podemos quedar espantados. Pero la nueva edición por 32,00 euros es superior en tamaño (18,3 X 27,7 frente a 15 X 23), edición en tapa dura y una calidad que no es comparable. Son 12 números por lo que a razón de los famosos 3,00 euros por grapa entra dentro de lo aceptable teniendo en cuenta que es un tomo en tapa dura con tamaño superior. Se incluyen tres complementos que son ciertamente interesantes y que hacen de contexto a una época que se echa de menos.
Al principio he llevado a cabo una afirmación ciertamente delirante. La explicación llega ya. Liefeld fue la prueba viviente de que Marvel necesitaba a Waid, Busiek y otros autores similares. Era imperiosa la necesidad de volver a coesionar el Universo Marvel. Heroes Reborn fue el fondo del hoyo, del cual se produjo el rebote de la mano de grandes autores que relanzaron a la Casa de las ideas en una década maravillosa llena de calidad. De ahí mi afirmación, Liefeld fue por lo tanto lo mejor que pudo ocurrir para poder abrir los ojos y ver un horizonte de esperanza.
El retorno esperado de Waid
Guión - 7
Dibujo - 7
Interés - 8
7.3
El Capitán América ha regresado listo para servir como el Centinela de la Libertad una vez más.
Gracias por la reseña de esta obra que me parece imprescindible para cualquier fan del personaje.
Sobre tu afirmación sobre Liefeld, entiendo lo que pretendes decir y el revulsivo que fue para que Marvel cambiara la forma de hacer las cosas, pero creo que en el caso concreto de esta serie fue terrible (y no por lo malos que fueron sus cómics) sino porque cortaron la dinámica que llevaban Waid y Garney en la serie antes del Reborn y que no se recuperó cuando los dos volvieron a la serie. No lo sé, pero estoy convencido de que las historias que tenían en mente Waid y Garney para el personaje hubieran sido muy diferentes de no haber habido un Heroes Reborn por el medio y de tener la necesidad de reafirmar, una vez más, el papel del Capitán América dentro del Universo Marvel. Yo creo que ya habían hecho un gran trabajo en este sentido con su primer arco argumental antes de Reborn (con Craneo Rojo y el Cubo Cósmico), y lo que hicieron en Return no tuvo tanta fuerza. A mi parecer, la serie no coge fuerza hasta la llegada de Kubert.
Se sabe si recuperaran en este formato toda la etapa de esta época, incluida la etapa completa de Jurgens?
Gracias Alejandro por tu comentario. Estoy contigo. De la lectura de estos números y sobretodo de la parte con Garney se percibe como si existiese una especie de «falta algo». Siendo muy buenos números no tienen la pegada previa a Reborn. Voy a intentar averiguar lo que preguntas porque mi deseo es que se cubra por completo incluyendo Jurgens. cda vez que recuredo a Liefeld se me eriza todo el pelo de mi cuerpo. Por dios ¿cómo pudieron caer en semejante elección?. Está explicado y estudiado, pero sigo alucinando.
Un abrazo!!!!!
Lo de Liefeld en Capitán América no tiene nombre. Me imagino la cara de los editores y del director artístico de Marvel cuando vieron el infame dibujo promocional (el de los pectorales imposibles). Cualquiera que viera ese dibujo se debió dar cuenta que aquello iba a ser un fracaso
Bueno, eso se dice fácil desde el futuro, pero en aquella época Liefeld vendía como churros y era uno de los dibujantes más populares del medio. Ahora nadie compraba sus cómics.
Me parece que de aquí a 20 años mucha gente va a coger los cómics de Snyder del presente y dirá lo mismo. Pero hoy es el cómic más vendido de EEUU. Incluso alguno de Cates no se que hará pensar en un par de décadas. De hecho muchos de los que lo compran hoy muy probablemente negarán haberlo hecho alguna vez. El comprador de cómic es un ente muy curioso.
Yo viví aquello años «en directo» y recuerdo cuando apareció la susodicha imagen promocional del Capi de Liefeld en la revista Wizard y en los correos de los lectores de Forum y el cachondeo era generalizado. Aquello no auguraba nada bueno y encima había mucha gente mosqueada porque cortaron la etapa Waid-Garney que estaba recibiendo unas críticas excelentes y había conseguido recuperar el interés por el personaje.
De todas formas, lo que intentaba decir, es que esto fue una decisión de los mandamases de Marvel que poco debían entender de cómics y fueron a fichar a los artistas que más habían vendido en el último lustro sin pensar en la calidad de su trabajo. El papelón lo debieron tener los editores que tuvieron que cargar con esta faena y que lidiaron con el arte de Liefeld .
Es sencillo de entender: Liefeld vendía y Marvel estaba arruinada por lo que necesitaban un superventas para levantar el negocio de nuevo. A parte del contrato que le hicieron, que si les hubiese pedido un dinosaurio vivo, Marvel se lo habría dado.
No creo que quedaran satisfechos con lo que les mostraba, pero Youngblood a pesar de las criticas negativas vendió muy bien en sus primeros números y con todo lo que le habían pagado para que volviera, tiraron para adelante.
Lo mejor es que ahora parece que NADIE compraba los cómics que dibujaba Liefeld o McFarlane. Sus compradores se han evaporado como lágrimas en la lluvia. No se como es posible que vendieran millones si nadie les compraba los tebeos porque eran muy malos. Habría que estudiar el hecho. Y ojo, que no digo que concretamente Alejandro los comprara, pero que me resulta curioso como ahora todo el mundo dice «no se como les publicaban esto» «no entiendo quién compraba estas porquerías».
Pues todo el mundo.
Conozco a más de uno que abomina de los 90 pero en casa tiene todas las grapas de Spawn y después se compró los recopilatorios de Planeta a 40€ el tochal.
Bueno, ja sabes hay que respetar la continuidad y el completismo y el si no tengo la dosis de mi personaje favorito es que me muero.
A ver Vansalth yo reconozco que en la epoca que Forum hizo el relanzamiento mutante, o sea los equipos oro, azul y el X-Force compre mas o menos el primer año de estas series: con Jim Lee, Portaccio y Liefeld o sea unos 12 numeros por barba hasta que lo deje y me enganche al Spiderman de la epoca que derivo en la Saga del Clon. Los deje porque eran tna malos de guion que el ya quemado Claremont de los ultimos tiempos parecia Shakespare a su lado. De los de Image solo compre The Maxx de Kieth y de Spawn años despues recolecte en tomos lo que hizo Moore, Morrison y Gaiman por los escritores (aunque no son sus mejores comics, obviamente) se me olvida el Batman vs Spawn. En esa epoca compraba muy pocos comics actuales y me dedicaba a buscar material de Zinco y hacerme con todo el DC y Vertigo bueno de la epoca. Te aseguro que me dejaban la grapa de Spawn de la epoca y no me gustaba igual que el Spiderman suyo… prefiero a Larsen que a McFarlane si no tengo mas remedio que quedarme con uno de los dos. Si que seleccione cierto material de Image mas adelante porque habia historias de Warren Ellis y otros autores que me gustaban… pero poco mas. Durante años no habia mucho donde elegir, al menos ahora hay bastante mas calidad y variedad para comprar que antaño… a lo mejor no te gusta lo que se hace ahora en supers pero creeme que a habido etapas que eran mucho peor que estas… aunque ahora se pasan con los precios
Buenos días!!! Yo soy un confeso comprador de los 90: Youngblood, Brigade, Cyberforce, Supreme, Wild C.A.T.S., Team Yougblood. Spawn no, que me aburrió hasta la saciedad pero me flipé con él. Todo ello no es óbice para decir que visto con la madurez son maaaaaaaaalos salvo mis añorados Wild C.A.T.S., y eso que Matt Broome me mató vivo. En fin no se puede renegar de años en lo que las portaditas fosforitas lo petaron. Nunca y digo nunca, he vendido nada de lo que tengo, salvo Youngblood. Los vendí por manía absoluta. Por lo demás, el Capi fue una aberración de las buenas. Y digo esto porque X-Force era muy tremenda por lo que supuso, pero coged esos número y mirad bien el dibujo. Gandalf lo dijo muy claramente: Huid insensatos!!!!!
Yo de Liefeld no tengo nada pero de McFarlane tengo su Spiderman y reconozco que me gusta. Igual que me gusta como dibuja Jim Lee y sus cien mil rayitas.
Te confieso que yo Spawn siempre estoy tentado a comprarlo, pero entre que los tochales son caros y que lleva 300 números sin que la colección lleve a ninguna parte lo dejo siempre en la tienda. Siempre hay material nuevo o pendiente que me interesa más, pero la tentación sigue ahí jajajaja.
Yo era (y soy) gran fan de Jim Lee por lo que en aquellos años compré casi todo lo que salía de WildStorm.
También fan de los mutantes por lo que me tocó sufrir a Liefeld en X-Force. Nunca entendí que veía la gente en ese dibujo tan horrible. La llegada de Greg Capullo a la serie fue una bendición
He preguntado y no hay nada oficial, pero bueno conociendo la política de Panini Comics en España, si estos venden continuará.
Uno de mis primeros tebeos Marvel. Recuerdo esta etapa con muchísimo cariño, me encanta.