Joker’s Asylum

Si un superhéroe se mide por la talla de sus enemigos, no hay duda de que Batman es el mayor superhéroe de todos los tiempos.

La ciudad de Gotham es el lugar de residencia de algunos de los más pintorescos, psicóticos, homicidas y desalmados personajes de, me atrevo a decir, la historia de la ficción. Bajo la apariencia de frágiles cuerpos se esconden las mentes más retorcidas y manipuladoras que han existido. Obsesionados con el poder y los más bajos instintos, estos villanos buscan la total destrucción de Gotham y de su protector.

Si hiciéramos un repaso por cada uno de los enemigos del Caballero Oscuro, podríamos llenar folios, porque estos son personajes complejos, llenos de matices, luces y sombras. Todos ellos han experimentado distintas aproximaciones por parte de diversos escritores; incluso el cine o la televisión nos han mostrado otras caras de ellos. Algunas de estas aproximaciones han sido en profundidad, otorgándoles un protagonismo que nunca han conseguido con plenitud, aunque eso no quiere decir que no sean merecedores de él.

Uno de los casos más claros es el «Arkham Asylum» del genial guionista escocés, Grant Morrison. En ella nos acercamos un poco más a la perturbada mente de estos criminales, para quienes su venganza contra Batman se ha convertido en su mayor e, incluso, única motivación. Dementes y desquiciados, pero al mismo tiempo aterradoramente lúcidos, urden tramas, preparan trampas y elaboran planes para acabar con la figura de su mayor enemigo.

Recientemente, DC ha llevado a cabo un proyecto que pretende ofrecer una nueva visión de algunos de estos villanos. ¿Qué pasaría si el Joker se hiciera con el control de un programa de televisión y lo aprovechara para contar algunas de las más escalofriantes y significativas historias de sus compañeros criminales? De esta manera y bajo tan singular premisa se esconde Joker´s Asylum, una miniserie de cinco números en los que, bajo la guía del Payaso más perturbado de DC, descubriremos un poco más sobre Dos Caras, El Pingüino, Poison Ivy y El Espantapájaros. Cada uno de estos números contará con su propio equipo creativo; permitiendo que dibujo y guión se amolde con mayor precisión al personaje.

“Bienvenidos! Bienvenidos, reclusos, al Asilo del Joker! Si no estás fuera de tus cabales cuando entres… lo estarás cuando salgas”.

Con estas palabras que pone Arvid Nelson, guionista y creador de «Rex Mundi«, en boca del Joker, da comienzo una de las más curiosas historias sobre la galería de villanos de Batman.

Durante el transcurso de un programa de televisión, el Joker y sus esbirros hacen acto de presencia, secuestrando a público y trabajadores, por igual, e iniciando su particular espacio televisivo. Innovadora y original, la historia creada por Nelson es, como él mismo dice, “algo fresco”. Sin lugar a dudas, su mayor inspiración ha sido el Joker de Ledger, en El Caballero Oscuro; cuya interpretación realista del villano, ha hecho que Arvid vea en el payaso a un personaje «más luminoso y divertido«.

Siguiendo la línea de programas de televisión como “Historias de la Cripta”, Joker´s Asylum nos transporta a distintos escenarios; todos ellos, con el Joker como único nexo de unión. “¿Quién mejor para introducir a los enemigos de Batman que el Joker?”.

Nelson siente una especial predilección por la figura de Batman; personaje que considera un icono gracias a la fuerza de sus contradicciones: “Está comprometido con la justicia pero trabaja al margen de ésta (y a veces en contra). Lucha contra la Ocuridad, pero es la Oscuridad”.

Esta historia, escrita por J.T. Krul, y dibujada por Guillem March, tiene como protagonista a uno de los villanos más curiosos de toda la galería de El Hombre Murciélago. Su peligrosidad, muchas veces pasada por alto, proviene, no sólo del hecho de ser mujer (en palabras del guionista), sino también por el cómo llegó a convertirse en lo que es. Ambos hechos llevan, tanto al lector como a los personajes, a simpatizar con ella; llegando a olvidar que, como defensora de la Madre Naturaleza, Poison Ivy es un terrorista ecológico. Su causa es justa, pero no sus métodos. Se considera a sí misma la “mano de la Naturaleza”, en nombre de la cual, lleva a cabo sus crímenes.

Poison Ivy responde a la idea de que cada personaje es un héroe dentro de su pequeño mundo egocéntrico. Para ella, su labor es la de juez y verdugo para aquellos que se lo merecen; y en esto, precisamente, es en lo que se basa la historia. Todo gira en torno a una lista, creada hace años por la supervillana, y en la que aparecen personas que deben ser castigadas por sus crímenes contra la Naturaleza. Mientras Poison Ivy elimina los nombres de la lista, Batman trata de adelantarse a sus movimientos.

Para Krul, el éxito de Batman radica en el hecho de que el personaje representa a cada hombre o chico cuyo miedo al abandono sale a la luz de forma extrema y desgarradora. Bruce es alguien que se sobrepuso a ese temor tras la muerte de sus padres, volviéndose más fuerte.”Nadie quiere ser Superman, pero sí Batman”. Para el guionista, El Señor de la Noche es una mezcla entre James Bond, Sherlock Holmes y Bruce Lee.

Este número, obra de Jason Aaron (Saclped) puede que sea una de las mejores interpretaciones que se han hecho de Oswald Cobblepot, alias el Pingüino. Junto al dibujante Jason Pearson, en la historia vemos cómo este villano accede a la única cosa que nunca ha tenido, pero que siempre ha querido: el amor verdadero. Aquí, Oswald se enamora de una chica pero, como el propio guionista aventura, “Cuando el Pingüino abre su corazón, ¿qué oscuros secretos saldrán a flote?”.

Es cierto que el Pingüino nunca ha supuesto una amenaza física para Batman. Sin embargo, su intelecto es algo que debe ser tomado en consideración, y no sólo por su capacidad para construir paraguas que lanzan fuego, o entrenar pájaros para que roben bancos; sino porque Oswald Cobblepot es un genio del mal, una mente criminal y un psicópata que esconde sus actos bajo movimientos “educados y gentiles”.

La historia sirve a Aaron para explorar el lado oscuro que todos tenemos. Cobblepot puede parecer, a simple vista, un gordito trajeado y sin escrúpulos; pero en el interior es un niño solo y cabreado con el mundo que se ríe de él.

El guionista Joe Harris narra la historia de uno de los más dementes villanos del Universo DC como si de una película de terror de los años 80 se tratara. Crane es, para Harris, “un asesino como Mike Myers o Freddy Kruger”; un psicópata cruel y despiadado al que le gusta jugar con sus víctimas. “Un comerciante del miedo”.

El Espantapájaros amenaza de tal forma que saca la oscuridad que todos llevamos dentro. Para ello, estudia el origen del miedo de cada uno, lo que proporciona un mayor control sobre sus víctimas. Los miedos que este villano saca a la luz y utiliza en nuestra contra son aquellos que reprimimos. Para el guionista, este personaje es realmente interesante desde que Batman es una caja a punto de estallar.

Lo que hace único a Jonathan Crane sobre el resto de villanos es que éste, a diferencia de los demás, no sólo está loco, sino que intenta asustar; intenta matar a través del miedo.

Esta historia, “graciosa y perturbada narrativamente”, profundiza en la mente de este villano que, pese a su aspecto débil y para nada amenazante, esconde un enorme potencial y una gran capacidad para causar el mal.

Para Harris, lo mejor de Batman es su dualidad. El Señor de la Noche es complicado y metódico; y junto a su capacidad para ser brutal y violento, el Hombre Murciélago es, meticulosamente cuidadoso y deductivo.

David Hine, guionista de «Spawn«, y el dibujante Andy Clarke, firman esta historia en la que, por primera vez, y aunque sea algo paradójico, hablando de este personaje, se nos presentan las dos caras de la misma moneda.

Holman Hunt, bombero voluntario cuya cara fue quemada durante un incendio, acude al Asilo de Arkham como parte de su programa de ayuda a las personas que han sido víctimas de quemaduras. Su único y principal “paciente” es Dos Caras. Sin embargo, Harvey Dent no necesita consuelo. Es feliz como es. Y por eso se propone demostrar que su forma de ver las cosas es tan buena como la de Hunt. El villano considera que, en las mismas circunstancias, Hunt pensaría igual que él, y le tiende una trampa para ver su reacción. Curiosamente, este bombero tiene desfigurado el lado de la cara contrario al que tiene el recluso de Arkham.

Para Hine, Dos Caras es la perfecta destilación de «Dice Man«, libro escrito en 1971 por George Cockcroft bajo el nombre Luke Rhinehart. La historia trata sobre un psiquiatra decide llevar a cabo el experimento de tomar todas sus decisiones a partir de un dado; sin culpabilidad, dejando todo al destino.

El mayor problema para Batman que ve el guionista es que, con estos villanos, las batallas no son físicas, sino psicológicas, por lo que acaban desgastándole seriamente. Por eso, Hine asegura que “algún día, Batman tendrá su propia celda en Arkham”.

Entrevista con Arvid Nelson.
Entrevista con J.T. Krul.
Entrevista con Jason Aaron.
Entrevista con Joe Harris.
Entrevista con David Hine.