Otro periodo vacacional que se nos va quedando atrás y nuevo miercoles con «firma invitada». Para esta ocasión contamos con Juan Luis Rincón, WWfan, andaluz famoso en el éter comiquero español por sus asertivas declaraciones y su gusto por el debate que, aparte de ser un asíduo de DC Comics a Gritos, también mantiene su propio blog. Haciendo honor a la fama que le acompaña, Juan Luis Rincón nos sirve un retrato ácido y divertido del panorama creativo en los USA repleto de «puntos calientes» y espacios para la disensión. Como siempre, gracias Juan Luis!!
«Esperaba con bastante impaciencia el New Avengers 14, donde se abría un breve arco argumental con un personaje repescado que siempre me había gustado, Jessica Drew alias Spiderwoman con el gran Frank Cho (Liberty Meadows) de dibujante.
Pensaba encontrarme con un tebeo donde una mujer bellísimamente dibujada contorneara durante 22 páginas un cuerpo escultural sobre los rascacielos norteamericanos.
Vaya por Dios, se me olvidó lo más importante, que ese tebeo lo guionizaba el autor estrella de Marvel. Nada más ni nada menos que el majestuoso, maravilloso y genial Bendis. El irritante autor de los monólogos insustanciales y los diálogos monosilábicos donde dice retratar el habla de la gente (gente subnormal, supongo) mejor que nadie.
Y en lugar de lo que me esperaba me encontré con lo mismo que me hubiera encontrado si ese guión lo hubiera dibujado cualquier otro. Una estrella que rara vez hace un cómic fuera de su parque natural de extraños animales se ve supeditado a hacer lo que bien podría haber hecho un dibujante del montón (de hecho tengo la sensación que Bendis escribe como si lo fuera a dibujar él, o sea, a base de copiar fotos chiquititas con mucho texto que impidan ver sus deficiencias como dibujante). Muchos primeros planos, mucha cháchara y poco lerele, desaprovechando todas las virtudes del bueno de Frank.
Evidentemente ausencia casi total de mallas. Que joder, esto de que haya personajes que lleven trajes de superhéroes es una subnormalidad, aunque estemos haciendo tebeos de superhéroes.
Pero si esto fuera el mayor problema, pues bienvenido sea.
Es que este no es más que un caso de los miles que se dan hoy en la industria norteamericana. Hemos pasado en apenas unos años del dibujante estrella que no necesitaba de guión, simplemente le valían unas splash-pages al guionista estrella que escribe guiones sin dibujos. O necesita tanto de un dibujante que da igual que sea bueno, malo, regular, narrativo, una sucesión de fotocopias o calcos hechos con el ordenador o quince mocos pegados en una cartulina.
Al menos respiramos tranquilos. Si tenemos un guión escrito por Bendis, Rucka, Azzarello o más cómo estos guionistas salidos de la nada y elevados por las pagadas por las editoriales revistas tipo Wizard, sabremos que nos encontramos con un gran tebeo y si nos parece insuficiente, esperemos a leernos la etapa completa cuando dentro de 40 números terminen lo poco que han contado, si es que quedaba algo que contar, claro, porque entre que la historia está mil veces contada (sin estirar el chicle me refiero) y que lo poco que tenían en el coco lo han anunciado y vociferado hasta la saciedad en cada entrevista pues apañados estamos…
Un tebeo de Bendis da igual que lo dibuje el mejor dibujante del mercado que un manco. Tiene un efecto «churro«, ya se sabe que da igual quiénes lo hagan. El sabor será igual aquí que tres calles más para abajo. Y eso es de todo menos «alta cocina».
Son las mismas viñetas supeditadas a un montón de texto.
Y si al menos contara algo nuevo y diferente, pues qué bien…Pero para que me cuenten que a Jessica Drew los de Hidra la tienen chantajeada, que le han dado los poderes y que no puede ser de los buenos, coño, eso no contarme nada nuevo. Eso lo han hecho constantemente con el personaje desde que apareció con la Cosa por primera vez.
Para que me cuenten que la prensa ha descubierto la identidad de Daredevil (el único superhéroe desgraciado que ya van 3 veces las que le hacen público su nombre, ya le podría tocar a Batman)…
Me encanta Dylan Dog, tengo los 11 números hasta la fecha (en la que escribo) de Aleta, todos los de Ediciones B y todos lo de la editorial Zinco.
No me sé el nombre de ningún guionista. Ni el de ningún dibujante.
Y quillo. DISFRUTO. En serio. No es necesario saber de pé a pá hasta el día que se depiló las piernas un autor para disfrutar de los tebeos. No necesito saber el nombre de quien escribe esto. Tampoco si va a aparecer otros personajes de Bonelli en forma de crossover, si el que sustituirá al que ha escrito el guión de este número ha hecho antes Martin Mystery o si es su primer acercamiento al género. No necesito que las historias se vayan alargando hasta la saciedad. Si quedará mejor si sale en HC, si es mejor alejar a Dylan de las historias de misterio y hacerlo costumbrista o hacer evolucionar al personaje aprendiendo además a tocar el acordeón. No quiero que me cuenten un número donde Dylan simplemente haga un concierto y salude a los invitados sin misterio que resolver. No es lo que busco en este tebeo. Lo que busco lo encuentro…
¿Por qué?. No creo que simplemente sea porque da la casualidad de que todos los “anónimos” autores sean lo mejor que ha pasado por el cómic. Creo que simplemente es porque lo que más importa es la historia que están contando. Y parecerá una tontería, pero funciona. Unas veces mejor, otras veces peor, pero funciona casi siempre.
Sería interesante reflexionar sobre algunas cuestiones…
¿Es tan importante la historia que nos cuentan en los tebeos USA o lo es más los tejemanejes editoriales de idas, venidas, entrevistas en Wizard, Newsarama, Comics Continuum, fichajes, muertes, resurrecciones, crossovers, contratos en exclusivas?.
¿Nos avergonzamos de leer superhéroes?.
Dylan siempre espera a que alguien lo contrate, lo contratan, Groucho hace mil chistes malos, Dylan se enrolla con la preciosidad de ese número, le da a la música cuando quiere pensar en solitario y termina descubriendo todo. Oye, y a pesar de que haya unos patrones repetitivos, el tebeo funciona.
El Coyote todos los episodios busca mil métodos para capturar al Correcaminos y se gasta un dineral en productos ACME para que termine siendo víctima de sus propias trampas.
Y no pasa nada.
Sin embargo los lectores de superhéroes hemos “evolucionado” tanto que no queremos historias de tipos cuadrados en mallas y bellas mujeres en bañador peleándose con supervillanos y conquistadores del espacio. No queremos que la línea del bien y el mal sea de espectro blanco y negro y nos gusta ver a nuestros héroes oscuros. Si es muy puro es un simple gilipollas, un boy scout o un perdedor.
Y coño, es que parece que el nombre del autor estrella ha de anteponerse a todo. Si El Correcaminos fuera un cómic de superhéroes, algún tarado de estos sin talento y con mucho ego seguro que ya hubiera hecho evolucionar lo que ha funcionado durante tanto tiempo. El Coyote, ya muy dañado por los golpes recibidos decide no gastarse más el dinero en productos ACME y decide gastarse ese dinero en Burger Kings, termina sus días engordando de tanta comida casera.
ACME, sin su gran cliente va a la ruina y mil trabajadores son despedidos, produciéndose graves altercados en las localidades colindantes.
El Correcaminos, sin nadie que le persiga, no tiene necesidad de utilizar su velocidad y va perdiendo poco a poco esa habilidad suya, llegando incluso a padecer de artrosis.
Oye, hemos perdido clientela. Eso no es lo que nosotros queremos ver cuando me pongo delante del televisor a ver el Correcaminos.
Bueno. Para los que han querido que las historias del Correcaminos sigan por donde está, tenemos el universo normal. Lo que no sabemos es, llegado a este punto qué hacer para recuperar a los personajes… Tendremos que hacer unas Crisis Temporales.
Y para los que quieran ver un Correcaminos nuevo siendo fiel al clásico, sacaremos el Ultimate Correcaminos. Que será como antes, pero el Coyote llevará chupa de cuero y el Correcaminos, calzado Nike.
Lo importante es lo que cuenta. No quien lo cuenta. Quizás por eso de lo mejor del tebeo de superhéroes que se haya hecho sean las adaptaciones de la serie de dibujos animados de Superman o Batman (de la que sabemos el nombre de 3 autores mal contados y más por futuras obras realizadas y que investigando descubrimos que empezaron por aquí).
Para mí, cualquier trabajo en equipo debe ser eso, un trabajo en equipo.
No es lo mismo un director que otro, un guionista que otro, un actor que otro, una actriz que otra.
Lo mismo pasa con el guionista y el dibujante en los cómics.
No es lo mismo que un dibujante de storyboard haga los dibujos para una peli de Almodovar (o M. Night Shymalan) que para una de Peter Jackson. Uno tiene un ritmo más pausado, con una cámara fija. El otro utiliza los picados, contrapicados, la acción.
Seguro que Shymalan no escribe igual para él que para otros directores y si no me creen compare la narrativa de El Bosque, Señales y demás con la de Stuart Little.
No es lo mismo hacer un guión para Bruce Timm que para Jim Lee, no es lo mismo Alex Ross que Maleev, no es lo mismo Brian Hitch que George Pérez, tampoco Pacheco que Frank Cho.
Un buen guionista debería saber aprovechar las virtudes de cada autor, y, sobre todo, en un medio como el del cómic con tanta importancia que tiene el dibujo, que será, quieran o no quieran los guionistas, los responsables finales de la estética de la obra.
Serán los «directores de cine», «creadores de efectos especiales», «directores de fotografía», «cámaras», etc. O sea, los que van a narrar el tebeo, los que van a contar el cuento que otro escribió porque supuestamente lo deben contar mejor.
Yo me imagino al archiconocido Andrew Niccol diciéndole a Steven Spielberg cuándo debe utilizar un plano corto, un plano cenital, un contrapicado, etc. y me parto el culo de la risa.
Cuando voy a ver una peli de Peter Jackson yo quiero espectáculo visual.
Cuando voy a ver una peli de Tim Burton yo quiero ver un cuento maravillosamente ilustrado.
Cuando voy a ver una peli Shymalan se que voy a ver una peli pausada, con temática fantástica, final sorpresa y más de una lectura.
Luego tendrán sus fallos cada uno, su película mejor, su película peor, me gustará más uno, me gustará más otro. Pero cada director tiene su sello por encima de si el guión lo ha hecho Paco, Pepe o Fernando, está basada en una historia real, es una adaptación literaria o se lo ha sacado él mismo de la chistera.
Cuando voy a leer un tebeo de Frank Cho me gustaría encontrarme con algo diferente a lo que hace Alex Maleev.
Cuando voy a leer algo de Cho quiero ver chatis güenas bien dibujadas. En DC seguro que le daban X la última mujer en un mundo donde sólo hay hombres.
Cuando veo algo de Maleev sé que me voy a encontrar dibujos calcados y retocados con ordenador.
Cuando voy a leer algo de Jim Lee quiero ver algo espectacular, no un Superman charlando con un cura.
Dicen que el guionista debe ser la estrella porque lo más importante en un cómic es el guión y que ellos se compran los tebeos según el guionista que escriba.
Digo yo que siendo el cómic tan primo hermano del cine, será igual… ¿No?.
No. Yo no voy a ver una película por el director, yo voy a verla por el guionista.
Yo sigo todo el trabajo de Jeff Nathanson, independientemente si guioniza para Spielberg que para Jan de Bont.
Claro, picha, y yo me lo creo.
¿Sabría usted decirme el nombre de al menos 10 guionistas, sin mirar en internet que hayan colaborado con Tim Burton, Steven Spielberg (incluso como productor y sin contar mis ejemplos) o Martin Scorcese, por ejemplo?.
Dicen que no es cierto que el dibujante sea el responsable final de la obra.
Que cuando digo lo de “Serán los «directores de cine», «creadores de efectos especiales», «directores de fotografía», «cámaras»” estoy falseando la realidad porque hay guionistas que dan guiones detallados con el método DC…
Hay un caso incluso de un guionista bastante famoso (se dice el pecado pero no sé si me está permitido que cuente el pecador) que dijo que hiciera un plano cenital y pusiera al fondo, en el horizonte no se qué cosa, demostrando una capacidad de visualización de la escena realmente magistral…
Un guionista en el 90% de los casos tiene una visión más pobre que la que pueda tener un dibujante. Quieran o no quieran.
El método está bien si el guionista tiene esa visión, si ha trabajado como dibujante previamente y entiende el lenguaje o si, como en el caso de Whedon o el Stracynski, por ejemplo, su conocimiento del lenguaje de primeros planos, planos medios, etc. es incuestionable. Si es un gran guionista o el dibujante uno que empieza.
Y por supuesto todo esto no significa que los guionistas sean unos pringaos, que no merezcan ni que aparecezca su nombre, que siempre el dibujante es lo mejor de lo mejor, etc. Y que hay casos como el de Moore o Morrison que son incuestionables y merecen ser reconocidos por encima casi siempre del dibujante. Pero son por eso, porque sus guiones se salen de la media, rompen esquemas, cuentan cosas nuevas, etc.
Y ojo, que eso no quita tampoco que Watchmen es a día de hoy lo que es gracias a que Gibbons hizo una labor sobresaliente al ilustrar el grandísimo guión de Alan Moore.
Estoy seguro que Byrne, el mejor Byrne, Bolland o Pérez no hubieran dado la obra tal y como fue.
¿Mejor o peor?.
¿Fort Apache hubiera sido mejor película si la hubiera dirigido Howard Hawks en lugar de John Ford?.
En resumen. El guionista es importantísimo en el sentido que crea las estructuras bases, los cimientos con su historia que luego tendrá que ser bien reflejada por el dibujante. Y que está muy bien que se reconozca entre el fandom que hay una serie de guionistas capaces de romper esquemas, de contarnos historias que ningún otro sea capaz, etc.
Pero gente que se dedica a hacer lo que otros ya han hecho mil veces sólo son productos momentáneos, ficticios y alimentados por las editoriales que están desesperadas por crear nuevos ídolos en los que apoyar e incentivar sus escasas ventas.
Porque a muchos se les ha olvidado que lo más importante no es la prensa rosa del cómic, lo más importante es que alguien cuente una historia, que entretenga desde la primera a la última página. No que entretenga antes y después de leerla con mil comentarios en internet. Que hay quienes se merecen el reconocimiento y los hay quienes tienen el ego más grande incluso el hueco en su cerebro.
El guionista de comics que no es un genio, simplemente debería dedicarse a contar las mejores historias posibles para que un dibujante, alguien con capacidad real de saber contar en este medio, plasme sus ideas, esa historia en el papel.
Lo demás son chuminadas.»
Juan Luis Rincón