Kerberos empapado
Cuando llevas un tiempo leyendo manga ya te haces un gusto. Una preferencia por ciertas obras y tramas. Hay quien se mete obras añejas entre pecho y espalda las veces que sea necesario, hay quien va a las obras cortas que en un tomo concentran la esencia de una historia. Los hay también que gustan de series de acción al estilo Alita: Ángel de combate, Ghost in the Shell o Dimensión W con una protagonista encantadora que te partiría el lomo como tengas el karma tirando a malo. Es lo que esperaba al meterme en Kerberos, que igual con un diseño de la protagonista femenina más adulto al estilo de Oh!great entraba como un chute de adrenalina.
Solo decir que ha habido mucha más rain que silver en toda la obra. Resumiendo el “argumento”, un escuadrón especial está encargado de defender unas instalaciones “secretas” donde se almacena el psi (Ψ), un material que conduce la electricidad sin pérdidas a temperatura ambiente, pero que parece también confiere poderes si has estado en contacto con él o bajo la lluvia plateada. Al final ni bronce ni clasificación para las regionales ha tenido. Para los que valoráis vuestro tiempo, es una serie olvidable como ninguna, sin ningún interés ni en el guion, ni en la trama ni en los personajes. Quizás lo más salvable sea el dibujo del coreano Berry Star.
Personajes insulsos, que no se solucionan ni metiendo a un cowboy dopado o a una Bayonetta de Hacendado. En verdad, hasta lo hace peor así porque parece un álbum de coleccionismo de cromos. Y sí, en One Piece, My Hero Academia o Gintama abundan esta mezcolanza de diseños de personaje, pero o bien son series largas con un worldbuilding de infarto, porque es una firma para reconocer a todos los personajes o porque, directamente se la pela todo y van al humor más sencillo. Ninguno de los casos es lo que tenemos en esta serie con una lista de personajes que bien se pueden contar con los dedos de las manos de un carpintero.
Algo que también va a escamar a más de uno es que la serie se encuentra en hiatus indefinido, así que Moztros cerrara la serie en los tres tomos que hay actualmente, editorial que no tiene culpa del parón ni del guion, quizás solamente en la elección de este experimento. Y no es que el final del tercer tomo deje buen sabor de boca o solucione alguno de los numerosos sinsentidos de esta serie.
Contradicciones por todos lados. Unos entrenamientos en realidad aumentada que han de costar riñón y medio de cada soldado sirvan para volver a ver una y otra vez que la prota se paraliza con el agua y que aún con este “pequeño” defecto la saquen en todas las misiones futuras sin ningún cambio o restricción (cuchillas de plasma sí pero para un chubasquero no hay presupuesto). Que al soldado mazado de turno se le rompe el brazo en el primer capítulo, en el tercero y en el penúltimo, y no le afecta para hacer nada en ningún momento. Que la prota teme la lluvia y el agua hasta el punto de quedar inmovilizada y disociar, pero en el segundo tomo la enseñamos bañándose tan rica y delicadamente en su piso porque es una escena necesaria del todo. Que está terminantemente prohibido que el grupo se vea fuera de la misión pero lo hacen más de una vez y aquí no ha pasado nada. Que el alivio cómico del grupo se ve afectado por el psi y pierde todos los recuerdos, o se vuelve agente doble pero 2 viñetas después ya se acuerda hasta de qué tipo de humor usa para meterse con las otras dos cabezas empanadas del cerbero. Qué pintarán guerreros incas y monstruos marinos defendiendo un material. Hablan de un psi que sirve para transmitir la energía sin pérdidas, pero lo tienen que defender con la vida. Llamadme loco pero si sirve para transmitir la electricidad, ¿no va andar suspendido el psi en todos los cables del país a merced de quien lo quiera mangar? ¿O es un dispositivo de emisión sin cables? Pero entonces tiene que tener un receptor de psi en cada industria y casa? Ningún sentido. Y ya cuando esta cosa da poderes como el de la hiperacusia o el de la personalidad múltiple se vuelve negativo el sentido.
Pero todo, todo sería perdonable si no fuese por una ligera cosa. Un muy pequeña, minúscula, ínfima, microscópica, casi inexistente. Del mismo tamaño que su argumento. Y es que es eso… la serie no va de absolutamente nada. Su parecido más cercano sería Godeath, que también de 3 tomos tienes una obra de acción con cero guion, pero al menos te dan una obra cerrada con hilo argumental coherente, no un montón de conceptos que suenan bien en la cabeza de un guionista. Por lo que estuve viendo no tiene nada que ver con el autor de Suicide Line (Arechi) aunque compartan pseudónimo. Por lo único que recomendaría esta serie es si está alguien escribiendo una obra de acción y quiere tener un ejemplo de cómo no llevar una trama desparramada por todos los lados, o si la está dibujando cómo empezar con personajes sencillos y equipamientos vistosos, aunque nada novedosos.
Lo mejor
• El dibujo mantiene un estándar bueno, la norma de los manga de acción
Lo peor
• Ni la historia ni el argumento va ni llega a ningún lado
• Los personajes, todos, son más planos que Otae.
Guión - 2.5
Dibujo - 6
Interés - 1
3.2
Aguado
Una serie de acción que solo por esta parte no obtiene la salvación que buscaba Moztros. Inacabada, con un guion muy diluido y unos personajes muy olvidables, Kerberos solo nos da un dibujo aceptable para aprender para la siguiente misión.
