Edición original: Kiss Me, Satan! #1-5.
Guión: Victor Gischler.
Dibujo: Juan Ferreyra.
Color: Juan Ferreyra, Eduardo Ferreyra.
Formato: Grapa, 32 páginas.
Precio: $3,99.
«Cassian Steele es el capo de la mafia de hombres lobos en el Big Easy, y tiene un problema. La vieja bruja Verona sabe su secreto y se ha escondido. Cassian la quiere muerta. Así que envía un mensaje: un contrato abierto. El primer monstruo que convierta en cenizas a Verona consigue un gran premio. Lo que nadie sabe es que su protector es Barnabus Black, un demonio que intenta desesperadamente recuperar su halo«.
Continuamos recuperando miniseries y arcos argumentales que ya han sido previamente analizados – al menos en sus correspondientes debuts – en los especiales de Mundo Independiente dedicados a las reseñas de números #1. El caso que hoy toca es Kiss Me, Satan!, una miniserie de 5 números de la que aquí dijimos – nada más salir a la venta su primera ejemplar – cosas como estas: «este mes se ha publicado otra miniserie de 5 números dibujada por Juan Ferreyra. Si no conocéis a este autor, podéis entrar en su página web y mirar unas cuantas muestras de su arte, aunque lo mejor es que probéis con el tebeo que hoy os presentamos o con Colder. Ferreyra es un artista con un trazo algo brusco, pero con muchísima fuerza. Sabe trasmitir y, sobre todo, sabe sorprender. En Kiss Me, Satan vuelve a encontrarse con seres sobrenaturales y escenas de acción, todo ello mezclado con escenas de calma. No importa lo que pida el guionista, Ferreyra cumple con su papel, y sobresale con sus dibujos. Lo mejor: las líneas de movimiento. Parece mentira que un recurso tan sencillo aún siga dando tanto de sí. La escena del protagonista saltando de la silla mientras dispara es simplemente espectacular.
Ahora hablemos del guion. Si el dibujo es bueno, el argumento le va a la zaga. Lo que había leído con anterioridad de Victor Gischler no era gran cosa, pero con esta miniserie ha conseguido algo que mucha gente intenta, pero en lo que fracasa estrepitosamente. Y es que Gischler ha redefinido el mundo de los hombres lobo al fusionarlo con la mafia y añadirles la mala leche que se merecen. El resultado es una historia que puede poner en el punto de mira a estos seres sobrenaturales.»
Ya han pasado unos cuantos meses desde que concluyó esta miniserie y no todo lo que dijimos en su día se mantiene… Porque lo que parecía una cosa ha resultado ser otra… ¿Qué pretendo insinuar con esto? Pues habrá que esperar un poco para descubrirlo. Antes de eso, desde Mundo Independiente queremos recordar la entrevista que hicimos en su día a Juan Ferreyra y que podéis leer aquí. No solo es un artículo extremadamente interesante. Se dio el caso que Ferreyra fue amable hasta cotas insospechadas e incluso él y Diego Cortés – a quien se nombraba en la entrevista – se pasaron por Zona Negativa para responder a los lectores… Gracias a ello sabemos curiosidades sobre Kiss Me, Satan!, como estas:
Sobre la interacción con el guionista: «Con Victor fue distinto porque casi todo el guión de la serie, salvo el 5° numero, estaba ya escrito, así que no hubo muchas interacciones. Es más, la serie la iba a dibujar otra persona, ya había diseñado al personaje principal y a las brujas. Yo pedí poder rediseñar todo a mi gusto y pude hacerlo, las brujas fueron rediseñadas y todo el resto es mío, salvo al personaje principal Barnabus Black que como Dave Johnson ya había hecho la tapa del número uno, no lo pude cambiar. Una lástima porque el personaje me parece muy genérico, un poco aburrido, tenia lindas ideas para él«.
Sobre el fenómeno de los hombres lobo: «En realidad, me interesa muy poco el mundo de los hombres lobos, ¡jaja! y los vampiros menos todavía. Me interesa mucho más intentar inventar monstruos nuevos. Lo bueno de Kiss Me, Satan es que no se toma la historia muy en serio, tiene mucho humor y eso me gusta. Y me causa gracia también es que la primera historia que hice cuando tenía 11 o 12 años era de un grupo de tipos mezcla de los Goonies e Indiana Jones que peleaban contra los monstruos clásicos, hombres lobo, momias, vampiros, el monstruo de Frankenstein, etc«.
Y ya sin más preámbulos, vamos a hablar de esta miniserie como obra completa.. y sobre qué se mantiene fiel a su primer número y qué no…
Kiss me, Satan! parecía ser una historia sobre hombres lobo pero al final resultó ser algo completamente diferente. En realidad es una narración sobre una cacería. En el primer ejemplar, una bruja descubre algo que la pone en el punto de mira de los licántropos y debe huir de ellos para salvar la vida. A partir del segundo ejemplar, ella, sus discípulas y el protagonista de Kiss me, Satan! se enfrentarán a todo tipo de monstruos, en una aventura en la que no hay lugar para el aburrimiento.
Si en la primera reseña de esta miniserie puse en un altar a Juan Ferreyra – un altar del cual sigue siendo merecedor – hoy toca hacer lo mismo con el guionista, Victor Gischler, porque a pesar de saltarse la prometedora premisa de explorar el mundo de los licántropos, en los cinco números de Kiss Me, Satan! consigue acumular tal cantidad de situaciones impactantes y personajes asombrosos que no exagero cuando digo que con la labor de Gischler, otros se habrían montado un universo. Así tal cual. De hecho, esto incluso podría llegarse a valorar como algo negativo porque se introducen tantos conceptos y situaciones que al final nada parece estudiarse en profundidad, pero… ¿Ya hemos dicho que la historia trata sobre una huida a la desesperada? Justamente es el cúmulo de situaciones el que transmite la sensación de desesperación al lector. Es más, Gischler sabe jugar a la perfección con las escenas de impacto – y eso incluye el sexo explícito -, de manera que el ritmo desbordante se mantiene desde la primera escena a la última. Corrijo. No se mantiene. Aumenta, porque en Kiss Me, Satan! presenciamos un ritmo in crescendo que, como no podía ser de otra manera, finaliza en
Aviso de Spoiler |
.
Y si el guion es espectacular, el arte le va a la zaga. Los dibujos de Ferreyra son simplemente asombrosos. Lo mejor de todo es que el dibujante sabe cuándo ha de lucirse y cuándo debe dejar que la historia prosiga su ritmo sin destacar sobremanera. Por eso cada vez que hay un momento clave, el dibujo de Ferreyra enfatiza su fuerza y transmite exactamente lo mismo que la historia: grandeza.
Resumiendo, Kiss Me, Satan! me ha parecido deplorable y no se la recomiendo a nadie. Nah, es broma. Kiss Me, Satan! no es la obra maestra que se puede deducir de esta reseña ya que quizá el tono ha sido demasiado positivista, pero dentro del género en el que está ubicada y comparándola con el resto de obras similares, lo que hoy reseñamos está a un nivel muchísimo más alto que la media. Recomendado para los amantes de los cómics de acción, de misterio, de la línea Vertigo en plan «light» y del buen dibujo en general.
Ferreyrómanos, ¡queremos más! Lo último que he visto suyo son las futuras portadas de Constantine. Espero que eso signifique que ya ha entrado en los radares de las Big Two y podamos empezar a verle de forma más regular por ahí. ¡Suerte, señor Ferreyra!
Gracias Por la reseña Enrique! Muy Buena!Muchisimas gracias por ponerle tanta atencion a nuestro trabajo, se agradece!
En cuanto a trabajos, sigo con prometheus, estoy en el #2, tambien termine el #1 de Colder para su volumen 2, y termine una historia corta y tapa para una antologia, tambien estoy haciendo tapas para constantine, hice la tapa del #15, #16 y tegno que hacer la del #17 y #18.
abrazo!
Muchas gracias a todos por los comentarios!!!
Y acabo de ver la lista de nominados a los Eisner, o sea que aprovecho la ocasión para felicitar a Juan Ferreyra por la nominación de Colder!!! Muchísimas felicidades!!!
Muchísimas ganas de leer la continuación, todo lo que comentas y lo que mi bola de cristal avecina para el 2015, que suele acertar siempre pero no cuando lo digo en voz alta, así que me callo.
Bueno, Mr.Ferreyra, mis más sinceras felicitaciones por partida doble:
Por esta serie, que es una pequeña maravilla (ahora estaría bien que se decidieran a publicarla por estos lares) y, como comenta Mr.Ríos, por esa nominación a los Eisner.
Les deseo la mejor de las suertes.
Y ese Super Elvis, Mr.Ferreyra ¿como va ese Elvis? 😉
Rockeros Saludos