La batalla final entre Batman y el Joker en Endgame

 

Edición original: Batman #35-40 USA (DC Comics).
Guión: Scott Snyder.
Dibujo: Greg Capullo.
Entintado: Danny Miki.
Color: FCO Plascencia.
Formato: Grapa.

 

¿Os acordáis de Death of the Family? Pues Endgame es todo lo que no le dejaron hacer por aquel entonces, y además con efectos reales sobre Batman y sus allegados. Vale, pero… ¿esto es bueno o es malo? Pues es Scott Snyder desatado, con todo lo bueno y todo lo malo que eso significa. Lo malo, es que te logra colar un virus entre los miembros de la Justice League, sólo para mostrar que malo es el Joker, quien está de vuelta. Pero claro, hablamos de que infecta a Clark y Diana, quienes a su vez estaban siendo inmunes al Amazo Virus. No sólo demuestra tener más eficacia que el propio Lex Luthor, sino que además lo logra colar a propósito, no es un accidente como en el arco de la Justice League. No sólo eso, logra tirar de mitología para sacar una contramedida eficaz contra Wonder Woman, algo que el Batman de Geoff Johns fue literalmente incapaz de lograr, más allá de confiar que Superman podía encargarse de ella.

Aun así, hay que decir que se siente una contramedida más acorde con el personaje y su mitología, que el que se sacó de la manga Mark Waid en JLA: Tower of Babel – mejorado ligeramente en la película de animación Justice League: Doom, pero seguía siendo una contramedida mortal. Finalmente la pelea principal es entre Batman y Superman, porque es lo que está ahora de moda. Aunque el elemento principal de esta pelea no es la pelea en sí, sino donde ocurre y cierto elemento visual que tendrá sus repercusiones más adelante. Porque Endgame no es el final de la etapa de Scott Snyder y Greg Capullo, pero si es que es la culminación de todos los elementos tratados en los anteriores arcos. Court of Owls. Death of the Family. Zero Year. Los anuales. Batman Eternal. Todo el camino conduce a Endgame.

Y es que el Joker había regresado antes de lo que pensábamos, a plena vista. En este sentido, hay que aplaudir la jugada del guionista en Endgame, quien ha logrado marcarse un tanto con Eric Border. Visualmente era más llamativo el Gravedigger de Grant Morrison, pero el trabajo con el reemplazo de Oberon Sexton fue menos elaborado, y muchos estuvieron más emocionados por el hecho de tener a Dick/Batman y al Joker trabajando conjuntamente, que por la sorpresa de tal revelación. Pero no era con lo único que quería jugar Snyder, así que a través de una acertada versión Nuevos 52 del – ahora doctor – Paul Dekker aka Crazy Quilt. ¿Puede uno creer las divagaciones de un loco? Bueno, dicen que sólo los niños, los borrachos y los locos dicen la verdad, pero eso no es así. Por un motivo u otro, no mienten, pero que uno crea en algo no significa que realmente esté diciendo la verdad, sólo su verdad. Para apoyar la teoría del Joker inmortal/eterno de Endgame, tenemos a un Jim Gordon que acaba mucho peor, que en su encuentro con el villano en Death of the Family. Porque entonces estaba de guasa, pero aquí es el hombre pálido. Quería cortarle una mano a Alfred entonces, y aquí finalmente Scott Snyder se termina saliendo con la suya. Y es esos momentos donde, tras tantos conflictos en los últimos 4 años, por tener editores “haciendo” de escritores, que uno se pregunta hasta que punto no hacían un incomprendido trabajo, limitando ciertos aspectos de los guionistas.

Mucha gente tiene problemas con el concepto “Batgod”, incluso hay guionistas que a veces tienen problema para eludirlo o para hacer creíble este concepto. Pero hay uno más complicado aún, o al menos que parece más olvidado, y es que Bruce Wayne es el mayor detective del mundo. Y aun así, parece que no logra nunca encontrar nada por sí mismo. Quizás es lo que se podría pensar también en Endgame, cuando Batman no le queda otro remedio para averiguar la verdad sobre el Joker, que recurrir a la Corte de los Búhos. Aunque al respecto, hay un giro posterior que hace recuperar parcialmente la fe en Batman como detective. ¿Hemos comentado ya que Snyder pasa olímpicamente de lo que escribe Geoff Johns en la Justice League? Otro ejemplo en Endgame lo tenemos cuando tiene que reclutar a los principales villanos de Gotham City, pues si gana el Joker no habrá ciudad para nadie. Aunque al menos, en esta ocasión a diferencia de Forever Evil, además de villanos cuenta con aliados propios. Los cuales confían en él olvidando lo que pasó en Death of the Family, porque realmente, no pasó nada más aparte que Batman dejó caer al Joker para que se muriese – aunque fuera culpa del Joker, por no querer dejar que Batman le jodiera la broma -. Bueno, eso y que realmente si sabía la identidad secreta de Batman, aunque no es algo que venga de nuevo, es de esas confirmaciones que quizás no hacían falta explicitarlas de tal modo.

La pelea final llega en el último número de Endgame, donde tenemos un Fastball Special, otra jugada de Bruce Wayne al Joker, y sobretodo… mucho gore. No un gore como el que encontramos en el Mortal Kombat X, ya que los dibujos de Greg Capullo no llegan a esas cuotas, y menos si tenemos a Fco Plascencia coloreando de forma tan viva. Quien ha acompañado a la serie desde Batman #1, pero dio un salto de calidad desde Zero Year. El cambio también se nota para bien con el cambio de entintador, pues tras finalizar Death of Family, llegó Danny Miki. Y todos estos cambios, se agradecen visualmente con respecto a la anterior historia con el Joker. Finalmente, si para entonces teníamos “final feliz”, aquí es todo lo contrario, no hay un “Deus Ex Machina” – ¿recordáis la armadura de Apolo? -. El Joker cree conocer mejor que nadie a Batman, pero no puede estar más equivocado, y ambos pagan el precio de tal equivocación. Sin duda el nuevo statu quo establecido tras Endgame no durará demasiado, aunque no parece que vayan a ser Scott Snyder y Greg Capullo los encargados de volver a lo de siempre. Al menos, bajo la luz pública.

ENDGAME TIE-INS

Además de la historia principal, James Tynion IV estuvo jugando con el Joker/Eric Border y su supuesta inmortalidad, tanto en los back-ups del Batman #35-39 – con un dibujante distinto en cada ocasión – como en el Batman Annual #3, junto a Roge Antonio y los colores de Nick Filardi – quien se prodiga bastante en estos tie-ins -. Y ciertamente, cuando se trata de historias cortas o auto-conclusivas, el pupilo de Scott Snyder saca muy buena nota. Otro tema ya son las series regulares, donde lo sufrimos especialmente en Red Hood and the Outlaws, pero en Endgame juega muy bien con el mito y los juegos mentales del Joker. Además, para promocionar otras series, y posiblemente a sabiendas que iban a retrasar Batman #40 para sacarlo días antes del Free Comic Book Day, sacaron 4 one-shots relacionados tangencialmente con Endgame.

El número de Batgirl es sublime, especialmente al ser un número silencioso, una técnica que no es nada fácil sacar adelante. Pero Cameron Stewart y Brenden Fletcher aprovechan muy bien la situación, en este número con un notorio arte completo por parte de Bengal, para no sólo justificar la compra y promocionar, pese a la situación, su All-New Batgirl, sino además hacer un guiño al Batgirl: Futures End #1, el último número escrito por Gail Simone y dibujado por el talento español emergente Javier Garron. Centrándose más en la parte del Joker “eterno”, tenemos el número de Gotham Academy. El número sirve para no sólo promocionar las historias de Becky Cloonan y Brenden Fletcher, sino para dar a conocer a otros guionistas/dibujantes, como Clio Chiang, Joy Ang y Vera Brosgol – con los colores de Sonia Oback -. El punto más flojo serían las páginas dibujadas por Jeff Stokely, aunque no desentonan mucho con los otros estilos del número, no refleja la gran calidad gráfica de la serie regular, aunque los aficionados pueden añadir este número al resto sin problemas.

No podríamos decir lo mismo con los otros 2 one-shots de Endgame. El de Arkham Manor no es una mala historia, pero tiene 2 problemas principales. El primero, es que está escrito por Frank Tieri. No me malinterpretéis, no es que haga un mal trabajo en este número. Puede servir para entender parcialmente la elección de villanos que ayudan a Batman durante Endgame. Pero es que Arkham Manor era una historia de Gerry Duggan. Y la serie tenía marcado un estilo que no queda reflejado para nada en este one-shot, a diferencia del de Batgirl. Tampoco ayuda el apartado gráfico, hasta 3 dibujantes diferentes para completar el número. Y lo peor, que las que mejor se ven visualmente, son las páginas que no están dibujadas por Félix Ruiz, sino las de Roberto Viacava con Walden Wong o las de Christian Duce. Y nuevamente, no se respeta el apartado gráfico que había, no encaja junto a los números dibujados por Shawn Crystal. Ahora bien, si no tienes interés en la efímera serie regular, puede quedar más complementado como parte de Endgame. Más respeto visual, salvando las distancias, lo encontramos en el número de Detective Comics. La primera mitad dibujado por Roge Antonio y la segunda por Ronan Cliquet, hay el esfuerzo para intentar asemejarse a los dibujos de Francis Manapul. Pero como historia de Detective Comics, más allá que sale Lonnie Machin, poco enlace se le ve con la serie principal. Eso sí, al menos aquí vemos que también ayudan durante Endgame tanto Spoiler como Batwoman, pero da la impresión que es más un prólogo a We are… Robin que otra cosa. Brian Buccellato sin duda ha estado más inspirado en otros números.

FUTURO

¿Qué le espera a la serie de Batman tras Endgame y a la vuelta de Convergence? Pues el Robo-Batman. Si creíais que Scott Snyder y Greg Capullo podían ser “peligrosos” sin un férreo control editorial, esto es lo que ocurre cuando directamente les das carta blanca. Inspirarse en Dan Slott y lo que hizo con Superior Spiderman podría ser algo terrorífico, pero afortunadamente eso ya se hizo – a su manera – hace más de 20 años con el personaje de Azrael. Aquí será más bien el intentar llenar el hueco dejado por el superhéroe, el intentar ser Batman sin ser Batman. La última vez que Batman desapareció del mapa, todos se dieron hasta en el carné de identidad para coger la capucha. Ahora, con Dick Grayson “muerto”, Jason Todd des-obsesionado del manto y con Tim Drake intentando ser él mismo, la situación no se repite. Aunque si un guiño a cierto futuro, pues este nuevo Robo-Batman está financiando por Powers International. ¿Qué tiene esto de especial? Pues además de ser un apellido ya mencionado en la Court of Owls o en Zero Year por The Riddler, los Powers fueron los responsables de la muerte de Warren McGuinnis, el padre de Terry McGuinnis aka Batman Beyond – al menos en el universo animado, en lo que respecta la nueva serie regular pues… -. No vamos a revelar quién lleva la versión mecha de Batman, aunque a estas alturas es bastante evidente. No sabemos si es la idea más estúpida de la historia de Gotham City, pero estamos aquí para verla desarrollar y valorarla cuando llegue el momento.