Edición original: Swamp Thing núms. 15 a 20 USA, Vertigo, agosto a diciembre 2001.
Edición nacional/ España: ECC Ediciones, Febrero de 2015.
Guión: Brian K. Vaughan.
Dibujo: Giuseppe Camuncoli.
Tinta: Marc Hempel, Cameron Stewart.
Color: Alex Sinclair.
Portadas: Greg Staples, John Totleben
Formato: Rústica, 144 págs. A color.
Precio: 13,95€.
«Tefé Holland culmina en África la búsqueda del Árbol del Conocimiento y se sitúa ante una verdadera encrucijada. Pero, para llegar allí, tiene que cerrar antes algunas de las heridas abiertas en el camino. Entre otras, enfrentarse al DDI, derrotar al misterioso asesino vegetal conocido como Kudzu, rescatar a sus padres adoptivos y reconciliarse con su verdadero progenitor, la Cosa del Pantano.
En este volumen, Brian K. Vaughan (Y, el último hombre, Ex Machina) cierra por todo lo alto su etapa como guionista al frente de la serie y, junto al dibujante Giuseppe Camuncoli (Hellblazer de Peter Milligan), firma una obra que exhibe su gusto por los dilemas morales, los personajes torturados y las situaciones límite.»
Llegados al último tomo podemos dar un vistazo global de la etapa de Brian K. Vaughan al frente de Swamp Thing, y la primera con Tefé Holland como protagonista. Ya en la primera reseña mostré mi disgusto por el planteamiento de la serie, y en la segunda admití que el problema había sido ese forzado arranque, pero que la serie albergaba otras virtudes que hacían pensar que ese problema había sido superado. ¿Y ahora? ¿Ha valido la pena el viaje? Pues sí y no… Veamos qué hemos encontrado en esta resolución.
En este tomo concluye la línea argumental “Cosecha roja”, iniciada en el anterior, en la que se resuelven la gran mayoría de tramas que se han ido desarrollando en la serie, salvo el McGuffin principal de la búsqueda del Árbol del Conocimiento. De hecho suceden tantas cosas que se nota que el tiempo apremiaba y que la amenaza de la cancelación sobrevolaba el título, por lo que Vaughan se apresuró a cerrar la historia en cuanto pudo. De hecho, los capítulos finales, tras “Cosecha roja”, podían haberse utilizado en cualquier momento, lo cual evidencia que el resto de la serie ha sido prácticamente relleno. Esa cualidad general de la mayoría de capítulos es lo que considero que ha lastrado toda la serie, esa sensación constante de que lo que se está leyendo no tiene ninguna relevancia.
Justamente los números destacables de toda la serie son aquellos que han tenido una exploración de los personajes o alguna clase de desarrollo de los mismos, más allá de la lucha entre el hombre y la naturaleza, que en el fondo no ha sido nada interesante. Porque de eso trata “Cosecha roja”, de hacer tangible esa lucha que por lo general ha sido de lo más tópica y manida. Por fin Tefé y sus compañeros de viaje se enfrenta a esos enemigos que la persiguen pero de los que no sabía nada, y en el choque metemos también esos aliados que desconocía, el asesino Kudzu (sí, también primer y único enfrentamiento, visto y no visto) y una máquina sacada de la manga que anulará el poder de un elemental. Muchas cosas para tan pocas páginas, hacen pensar en un abuso de la improvisación, pero como hemos dicho, responde a la voluntad del guionista de cerrar su historia antes del cierre de la serie, pero que probablemente sean conceptos que hubiera desarrollado en mucho más números.
Hay que conceder que Vaughan no ha dejado cabos sueltos ni misterios sin resolver. A lo largo de casi toda la serie hemos asistido al acoso de una misteriosa némesis que se ocultaba en las sombras. Y bueno, la revelación de su identidad ha sido una gran sorpresa, y en ese sentido es digno de aplauso, pero el lector espera que el misterio gire en torno a algo relacionado con la mitología de la Cosa del Pantano o, al menos, con algo que hayamos visto en la serie. No entraremos en terreno de spoilers cuando se trata de un punto positivo, pero lo cierto es que ha sido una sensación agridulce.
Igualmente la resolución del conflicto que ha movido la historia desde el principio es decepcionante por pobre. A lo largo de toda la serie hemos visto a Tefé hacer de todo con sus poderes de elemental, a las plantas y a la carne, por lo que reducir el clímax de la historia a una decisión que conocíamos desde el principio y de la que únicamente nos faltaba conocer la respuesta, se antoja pobre. Lo aceptamos, porque al fin y al cabo no nos han engañado, pero en el fondo esperamos que lo que lo hubiesen hecho, y que hubiese alguna sorpresa en la manga.
Review Overview
Guión - 5
Dibujo - 6
Interés - 6
5.7
Un gran tramo final precedido por una necesaria clausura de tramas que van desde lo intrigante a lo trivial, pasando por lo gratuito y poco interesante. Y una resolución final decepcionante por esperada en una historia que contiene las semillas de lo que luego sería Y, el último hombre