La Moda de los Superhéroes: Los Guardianes de la Galaxia de Brian Michael Bendis y Steve McNiven

La reimaginación del futurista grupo de superhéroes creado por Arnold Drake y Gene Colan a finales de los sesenta que se marcaron Dan Abnett y Andy Lanning a lo largo de su etapa al frente de la franquicia cósmica fue una de las más lúcidas e interesantes que nos ofreció la pasada década. Sirviéndose de las fracturas espacio temporales que vienen asolando al universo Marvel de un tiempo a esta parte para recrear a Los Guardianes de la Galaxia en nuestra época, los guionistas de Guerra de Reyes reunieron a personajes cósmicos de diferentes épocas para crear un supergrupo por el que militaron gente como el Star Lord de Steve Englehart, el Mapache Cohete de Bill Mantlo y Keith Giffen, Gamora y Drax el Destructor de Jim Starlin, Groot y Adam Warlock de Stan Lee y Jack Kirby, Bicho de Michael Golden y el citado Golden, Mantis de Steve Englehart y Don Heck, Dragon Lunar de Bill Everett y Mike Friederich, la Phila-Vell de Peter David, el Mayor Victoria (de los creadores de los Guardianes originales) y Paul Azaceta y los terrícolas Cosmo y Jack Flag.

Siendo más una excusa para reunir una flamante liga de héroes cósmicos que un verdadero remake del grupo original, estos Guardianes de la Galaxia tuvieron su germen en la miniserie Star Lord durante Aniquilación: Conquista (en la que Peter Quill reclutaba a una suerte de «Legión Lunática» para defender al imperio Kree de la amenaza de Ultron y la Falange). Con cierto ramalazo a lo «Doce del Patíbulo», la miniserie de Keith Giffen y Timothy Green II gustó tanto que sirvió de base para dar forma al grupo que Abnett y Lanning bautizarían con el nombre de la añorada serie de Drake y Colan. Los Guardianes de la Galaxia eran una suerte de milicia independiente que velaba por la seguridad del cosmos sin depender de ninguna autoridad interplanetaria conocida.

Sin ser tan marciales como los Nova Corps de Xandar, ni tan «contraculturales» como los Saqueadores Estelares, sus diseños seguían la línea de los que realizara Green para la miniserie de Star Lord, transmitiendo esa sensanción de «batallón rebelde» formado por un ecléctico elenco de guerreros unidos por las circunstancias. Los uniformes de Star Lord, Mapache Cohete, Mantis, Groot y Bicho fueron los más fieles a esta base (sustituyendo el aguamarina y blanco por azul militar y rojo bermellón), mientras que con el resto de incorporaciones se limitaron a mantener sus diseños más recientes aplicando un patrón de color similar al de sus compañeros. De esta forma, Drax el Destructor y Gamora mantuvieron los diseños de las mini-series de Aniquilación (convirtiendo al primero en una suerte de «Riddick», mientras que la segunda asaltaba impunemente el armario de Zorra Plateada) mientras que Adam Warlock proseguía con el diseño que reapareció en Conquista, sin que acabará de encajar con su esencia como personaje.

En esta nueva versión, Steve McNiven ha llevado los diseños a su terreno, manteniendo un patrón común sin repetir el corte «miliciano». El dibujante de Civil War parece haber buscado un aspecto más espacial, cubriendo sus cuerpos con unas ergonómicas armaduras hipertecnológicas que combinan una malla base con una enfermiza cantidad de piezas, puntos de unión y acoples que sin duda harán que cualquiera que no se McNiven se tenga que emplear a fondo a la hora de dibujarlos. Acercando el uniforme estándar del grupo a las armaduras de su nuevo fichaje -Iron Man-, la recreación gráfica de los Guardianes de la Galaxia toma como eje el nuevo uniforme de Star Lord (que reinventa su diseño clásico incorporándolo al campo de las armaduras espaciales de McNiven) haciendo que tanto el de Gamora como el de Mapache Cohete sean variaciones con colores invertidos que cambian el azul, negro y amarillo de Quill por blanco y negro más unas trazas de rojo.

Drax y Groot son los que más se alejan de este aspecto, conservando únicamente algunos elementos decorativos en los pantalones del primero (que sigue lanzándose a pecho descubierto por el espacio, como los verdaderos machos). Sin embargo, el antiguo gobernante del Planeta X pierde todo tipo de interés por el decoro, moviéndose con sus raíces al aire sin importarle lo gráfica que pueda ser su falta de uniforme. En parte es lógico si tenemos en cuenta la actitud «kamikaze» que va a tener en las misiones del grupo si nos atenemos a su papel en el primer número de la colección (tampoco es plan cubrirlo con una armadura si va a explotar cada dos por tres). Lo único que escapa de esa tendencia «naturista» en este back to the basics que le ha querido aplicar McNiven son esos enormes focos enredados entre sus raíces, como si la navidad acabase de llegar a las profundidades del cosmos.

Presentes en todos los uniformes salvo en el de Drax, si son baterías de energía o simples focos de posicionamiento para hacerlos visibles en mitad del espacio -para así evitar ir desperdigando miembros de aquí a la nebulosa de Cabeza de Caballo- es algo que solo sabe el propio McNiven, quien además ha añadido propulsores a botas, guanteletes y placas pectorales para dar algo de sentido a su maniobrabilidad en el espacio. El añadido final son unos cascos cerrados con visor transparente que hacen que estos diseños se muevan entre el que el propio McNiven realizó para la versión Ultimate del Capitán Marvel y los que podemos ver en los últimos blockbusters de ciencia ficción espacial.

Faltándoles unos cascos un poco más cerrados para poder pasar por compañeros de ROM en los Caballeros del Espacio, los Guardianes dan su bienvenida a Tony Stark, quien luce una nueva armadura especialmente creada para internarse con ellos en el espacio y que -sin perder sus colores habituales- incorpora ciertos elementos que lo acercan al resto de sus compañeros. De hecho, la máscara de esta nueva armadura es prácticamente la que tenía el casco de Star Lord en su última etapa, dando forma a un diseño que aparenta contar con refuerzo extra de cara a sus viajes espaciales (placas sobre placas que se levantan sobre otras placas) y que se mueve a medio camino entre la armadura Stark Resiliente y Mister Miracle.

Y esto es básicamente todo lo que podemos decir a cerca de los nuevos diseños de los Guardianes de la Galaxia en el relanzamiento de sus aventuras a manos de Brian Michael Bendis y Steve McNiven. Ahora os toca a vosotros decidir si preferís este estilo a lo «soldado Stormtropper» de la Guerra de las Galaxias sobre el de miliciano de space opera pulp que tenían en el anterior volumen, si os gustan ambos o sin ninguno os acababa de convencer especialmente. Se abre la sesión.