El final del viaje.
«Sea como sea… Qué hermosa es la mar.»
Con esta frase que cierra Calle des Martyrs, el segundo volumen de La sangre de las cerezas recientemente publicado en España por Astiberri, François Bourgeon (París, 1945) pone el final a la historia de Clara/Zabo y Klervi, las protagonistas del último ciclo de esa imprescindible epopeya que es Los pasajeros del viento (Astiberri) con la que el autor francés nos conquistó hace 43 años. Una saga que supuso un antes y después en el cómic histórico de aventuras francobelga que, tras su aparición, abrazó sin complejos las historias más adultas, poliédricas y comprometidas social y políticamente.
En esta segunda entrega de La sangre de las cerezas, Zabo aprovecha el viaje en tren hasta Bretaña para relatarle a Klervi sus vivencias tras la masacre con la que se puso fin a la Comuna de París. Un periodo que marco por completo su vida por la brutalidad que los soldados ejercieron contra ella, al igual que contra el resto de los participantes de la Comuna, y la posterior condena que supuso su deportación a Nueva Caledonia, junto con más de 150 mujeres con las que emprendió una larga y peligrosa travesía, en un periplo que duraría diez largos años.
A diferencia de lo que sucedía en el anterior álbum, en esta ocasión la mayor parte de la historia está contada en una analepsis que nos permite conocer el pasado de Zabo tras la caída de la Comuna, algo que provoca que ella sea la absoluta protagonista dejando de lado su relación con Klervi que era el motor de la primera para, aunque en las últimas páginas se retoma esa historia para darle un final inesperado.
Entre las muchísimas cualidades que adornan esta saga esta la creación de personajes femeninos complejos y tridimensionales, unas características que cumple a la perfección Zabo y Klervi, que no tiene nada que envidiar a la fabulosa Isa, la inolvidable protagonista del primer ciclo de la serie. Al igual que ella, las protagonistas siguen luchando por encontrar una libertad que la sociedad les niega, como a todas las mujeres de la época, y para una nueva vida en la que ellas marquen su propio destino lucharan con todo su empeño. Ellas, al igual que muchos de los personajes que pululan por la obra, encarnan a los más modestos del bando de los vencidos, aquellos que son simplemente un número en los libros de historia. Unas personalidades de las protagonistas que se construyen gracias a sus palabras, más que a sus acciones, puesto que nos encontramos ante una obra en la que, aunque suceden muchas cosas, las protagonistas no participan directamente en la acción, pero si viajan, conversan y son testigos y objetivos de la violencia. Quizás esos diálogos son excesivamente largos en algunas viñetas, que bien podrían haberse dividido en varias para que fueran más fluidas.
Cuando hablamos de una obra de Bourgeon sabemos que nos encontramos ante un trabajo en donde la labor de investigación es impecable y nos transporta sin ningún problema a la época y lugares en los que transcurre La sangre de las cerezas. Una obra que nos posibilita conocer los diferentes sucesos históricos que suceden como la represión a los participantes en la Comuna, los vaivenes políticos de Francia y la luchas entre las diferentes corrientes políticas que surgieron a finales del s. XIX. Unas teorías que conocemos gracias a las mujeres que comparten viaje en barco con Zabo. Esa parte tan realista se entremezcla con acierto con ese tono de folletín y novela de aventuras que ha caracterizado la serie desde sus inicios creando una lectura tan absorbente como los clásicos de Dumas o Víctor Hugo.
Esa misma minuciosidad en la investigación histórica de la época, se refleja en un dibujo en la que cada detalle de los barcos, vestuario e impedimenta nos recuerda dónde y cuándo transcurre la obra. Como ya sucedía en la anterior entrega, el principal defecto del apartado gráfico es el abuso de referencias fotográficas para las caras de los personajes, que hace que sus expresiones resulten algo rígidas y acartonadas. Pero por lo demás estamos ante un trabajo solido, aunque no llega al nivel de los trabajos de juventud del autor francés.
Esta segunda entrega de La sangre de las cerezas supone el final de un maravilloso viaje comando por mujeres fuertes, decididas y que no se dejan doblegar. Una historia que ha repasado algunos de los conflictos que han marcado el mundo en que vivimos con una sabia mezcla entre la precisión histórica y el sentido de la aventura, en la que François Bourgeon siempre ha tratado a sus lectores como personas adultas y maduras capaces de comprender que la vida no es, ni ha sido, nunca en blanco y negro, pero que la libertad es algo por lo que siempre merece la pena luchar. Aunque este último ciclo no brilla a la misma altura del primero, vista la serie en global podemos afirmar que estamos ante una de las cimas del cómic histórico y ante un autor único e irrepetible, pese la enorme cantidad de obras que tratar de imitar la grandeza de esta serie imprescindible. Ser pasajero del viento que ha guiado el viaje de Isa, María, Zabo y Klervi es una experiencia en la que cualquier lector debería embarcarse y dejarse llevar por esa maravillosa búsqueda de libertad.
Lo mejor
• Clara/Zabo es un personaje tan maravilloso como su bisabuela Isa.
• Las escenas marítimas.
• Las relaciones entre todas las mujeres que aparecen.
Lo peor
• El acartonamiento de algunos de los personajes principales por el excesivo uso de referencia fotográficas.
Guión - 8
Dibujo - 8
Interés - 9
8.3
Final
François Bourgeon cierra con acierto una de las grandes series del cómic de aventuras respetando las señas de identidad que la hicieron una joya imprescindible.
Gracias por la reseña y la valoración, que comparto al 100%.
Soy un gran fan del trabajo de Bourgeon y este me ha parecido un gran álbum, incluso superior al anterior. La construcción de personajes es magistral y la forma en la que te adentra en el momento histórico es asombrosa. En algunos momentos peca de demasiado expositiva pero consigue despertar el interés y realmente agradezco que conocer así un periodo de la historia que me era desconocido.
A nivel de la propia historia, se agradece el pasaje del exilio, recuperando ese contexto marítimo y de tierras exóticas que enlaza con la historia de Isa y que Bourgeon tan bien domina
Increible como a pesar de la edad el autor mantiene un apartado gráfico de 10 con viñetas que son auténticos cuadros de museo, para mi su mejor saga con una mezcla de personajes carismáticos, aventura y contexto histórico que lo hace adictivo, el contraste entre drama y esperanza nos ha acompañado durante todo el camino de forma permanente con un final que me ha encantado.