Me llamo barro aunque Miguel me llame.
Barro es mi profesión y mi destino
que mancha con su lengua cuanto lame.
La voz que no cesa. Vida de Miguel Hernández guionizada por Ramón Pereira y Ramón Boldú que también se encarga del dibujo se reedita este año, ya que es el 75 aniversario de la muerte del poeta. En una edición ampliada y en cartoné de la mano de Astiberri Ediciones dentro de su Colección Sillón Orejero. La anterior edición corrió a cargo de EDT en 2013.
Ramón Pereira es un guionista y poeta español nacido en 1980. Ha escrito guiones de cómic en las revistas Gothiclands, Boom y La Cripta.
Ramón Boldú es un dibujante español nacido en 1951. Es conocido por sus cómics de carácter biográfico como Bohemio pero abstemio. Memorias de un hombre de segunda mano, El arte de criar malvas, Sexo, amor y pistachos, La vida es un tango y te piso bailando y Los sexcéntricos. De la creación al calvario.
La voz que no cesa es la historia de un humilde cabrero que quería ser escritor, un poeta que vivió una vida corta pero intensa de superación frente a las adversidades del establishment literario, la guerra y su miseria. La vida de Miguel Hernández con sus alegrías y penas, sus miserias y desgracias…
La voz que no cesa trasmite verdad como todos los cómics de Ramón Boldú y a pesar de contar una historia muy dramática siempre quedan momentos para la sonrisa, con ese humor irónico que tiene toda su obra. Tal vez parece que la historia se aleja de sus temas habituales pero el más importante esta presente en toda la obra. Que no es otro que del de contar la historia para evitar que los poderosos la manipulen, que es algo que se lleva haciendo en este país desde hace casi 90 años. No es raro oír que
La obra nos relata toda su vida y su trágico final. Lo hace mediante el dialogo de Miguel Hernández y un gorrión, basándose en El gorrión y el prisionero, cuento que el poeta dejó sin acabar. Lo hace integrando de manera magistral sus versos en la narración, es la parte que más brilla de la obra, donde tanto Boldú como Pereira dan lo mejor de sí mismos. La forma de contarlo consigue replicar con imagenes las emociones que nos transiten los versos. La novela gráfica es un precioso homenaje al poeta y su obra, con una parte de celebración de la misma pero durante toda la obra está presente la sombra de la tragedia, un pesimismo que lo inunda todo. Y que se deja ver en detalles por todo el cómic, calaveras, cielos negros, etc…
Ramón Pereira y Ramón Boldú hacen un excelente trabajo dando humanidad al mito, bajándolo del pedestal y dándole voz. Una voz que nos enseña su candidez, su amor por su mujer, por su hijo e incluso por el amor mismo y su serenidad ante sus últimos momentos. Serenidad dada por saber que no se ha traicionado y que su voz no cesará nunca.
A un admirador de la obra de Boldú como yo, se me hace raro ver su arte con un objetivo distinto al de contar su vida. Antes de comenzar a leer esta obra tenía mis dudas de que fuera a ser capaz de separar su trazo de su vida. Lo consigue y con nota. Así vemos como Miguel Hernández va derribando obstáculos, ya sea su padre, su contexto o sus creencias y va forjando el poeta que será inmortal por mucho que les duela a algunos.
En el aspecto gráfico nos encontramos el estilo característico de Boldú la influencia del undeground americano de los 70, con esas viñetas cargadas de texto y letra que son marca de la casa. En esta obra el trazo es más contenido, menos suelto. Leyéndolo no podía evitar la sensación de que la obra ganaría mucho si hubiese sido pensada para el color, y más viendo la maravillosa portada de esta nueva edición.
Necesaria reedición de Astiberri Ediciones con su calidad habitual. Se han incluido páginas nuevas de su estancia en la cárcel y de su triste final. Además de una fantástica nueva portada muchos más adecuada que la de la anterior edición.
Necesario homenaje a un poeta que corre el peligro de quedar olvidado. Imprescindible para todos los amantes del cómic, la poesía pero sobre todo de la libertad y la honestidad.
Guión - 8
Dibujo - 7.5
Interés - 9
8.2
Poesía
Precioso homenaje a una figura que no nos podemos permitir olvidar.