Liga de la Justicia Num. 42

 

Edición original: Convergence: Justice League núms. 1 y 2 USA
Edición nacional/ España: ECC Ediciones
Guión: Frank Tieri
Dibujo:.Vicente Cifuentes
Entintado: Vicente Cifuentes
Color: Monica Kubina
Formato: Grapa, 48 págs. A color.
Precio: 3,50 euros

 

ECC ha tomado la decisión de usar las escasas grapas que publica para dar salida a aquellos tie In relacionados con Green Lantern y la Liga de la Justicia, sacándolos de los tomos que recopilan estas miniseries. Tan solo la grapa de Batman se ve liberada del crossover, mientras las demás incluyen entre sus páginas obras que siguen acarreando los sin sabores ya comentados en anteriores reseñas y que se concretan siempre bajo el prisma de la inconsistencia.

El que ahora tratamos tiene varios puntos a su favor. El primero es que rompe el férreo esquema visto en otras entregas. No es algo que resulte tan novedoso que haga que la lectura del mismo cambie por completo, pero si permite al menos salir un poco del viciado círculo por el que otros guionistas se han movido sin mucho acierto. Frank Tieri nos trae una Liga compuesta por mujeres, Supergirl, Vixen, Zattana, Jesse Quick, Jade y Mera, compartiendo un momento muy concreto de sus vidas, cuando la cúpula de Telos aísla la ciudad. Arrancamos por tanto antes de estar encerradas y sin poderes y a partir de este punto Tieri va desarrollando una historia sencilla, donde polariza el bien y el mal en un enfrentamiento entre hombres y mujeres. Por cómo se desarrolla la historia está claro que se trata de algo intencionado y para nada casual, dejando claro que esta Liga femenina es capaz de lidiar con amenazas tan enormes y detestables como son los atlantes capitaneados por el Aquaman de Flashpoint.

Esta guerra de sexos es capaz de mover la historia de forma dinámica, viéndose tan solo lastrada por los pobres dibujos de Cifuentes que, carente de todo sentido del ritmo, la expresión y la plasticidad hace lo que puede con el fin de ilustrar el guion de Tieri.

Por desarrollo ya hemos dicho que la historia se sale de la norma, pero es su final el que deja claras todas sus intenciones. Alejado de los finales abiertos y sin rumbo Tieri marca un final contundente que por desgracia no se ve reflejado en la serie central de Convergencia.

Así pues este número, aun pecando de una enorme falta de ritmo visual, destaca por encima de la media al proponernos un escenario arriesgado en cuanto a concepto, aunque no inédito, ya que hemos visto un combate similar en el tie In de la Speed Force, entre Flash y las amazonas de Flaspoint, siendo el de la Liga el que mejores resultados consigue.

Pero Tieri fracasa a la hora de darnos los matices, lo que hace que esta Liga sea diferente y se limita a uniformizar las diferentes personalidades de sus componentes. Hubiera ganado mucho la historia si hubiera desarrollado más las particularidades de cada personaje y eso habría elevado la calidad de la historia. La polarización que hace a la hora de plantearnos el escenario de batalla se transmite también a las actitudes de los personajes. Crueldad para ellos, inteligencia para ellas. No es nada malo, suaviza la curva de dificultad a la hora de escribir la historia, pero dados los pasos que da Tieri es una lástima que se deje por el camino el expandir todo ese cúmulo de emociones con los que podría haber jugado. Las dudas, la rabia, la confianza, la voluntad, la fiereza, la independencia… todas esas importantes características están ahí, pero ocultas bajo el velo de la fuerza que estos personajes poseen por sus poderes. No hay fisuras en sus personalidades y eso las convierte en algo demasiado frío para unos personajes con tantos matices y forma de ser tan marcadas.

Aun con todo lo expuesto no podemos obviar que se trata de un cómic que despunta entre los demás por el minúsculo cambio de estilo que Tieri imprime a la historia, sin que por ello se pueda estar hablando de un cómic redondo. Falla en el concepto y en la forma, falla en el dibujo y acierta en su valentía al tratar de salirse fuera de lo establecido. Un cómic entretenido, que nos muestra que es posible hacer las cosas de otra forma, pero que sigue anclado en los fallos de base que tiene todo el evento de Convergencia de principio a fin.