Desde que en 1961 dos visionarios llamados Stan Lee y Jack Kirby crearon a Los 4 Fantásticos, el famoso cuarteto ha alternado períodos de gran éxito con otros de duro ostracismo. Pero nunca han dejado de ser uno de los más importantes iconos de Marvel Comics.
Hoy en día estamos viviendo la que posiblemente es una de sus mejores etapas, al menos en lo que a su nivel de popularidad se refiere. A ello ha contribuido de forma decisiva el estreno de la película dirigida por Tim Story, acompañada del despliegue mercadotécnico propio de las grandes producciones de Hollywood. De esta forma, Mr. Fantástico, La Mujer Invisible, La Antorcha Humana y La Cosa han abandonado el anonimato al que el público mayoritario, ajeno al mundo de los cómics, los tenía sometidos.
El indudable tirón de la película también ha tenido su reflejo en la oferta editorial de publicaciones relacionados con La Primera Familia de Marvel, que ha aumentado de forma considerable. En las estanterías de cualquier librería especializada, e incluso en los kioscos, podemos encontrarnos con hasta 3 series regulares de Los 4 Fantásticos (Los 4 Fantásticos, MK: 4, y Ultimate Fantastic Four), tomos recopilatorios, y adaptaciones al cómic de la película. Todo un sueño para el fan de los 4F.
Pero de entre todos estos cómics brilla con luz propia la colección clásica: Los 4 Fantásticos. Desde hace casi dos años estamos disfrutando en España de la que en mi opinión es la mejor etapa de la serie, tras las ya míticas de Stan Lee, Jack Kirby y John Byrne.
Los artífices de esta obra, recibida con entusiasmo por gran parte del público y crítica responden a los nombre de Mark Waid y Mike Wieringo
Curtido en labores de edición, Mark Waid (Alabama, EE.UU., 1962), no tardó en saborear las mieles del éxito como guionista, gracias a su trabajo en títulos como Flash (donde ya coincidió con Wieringo), Impulso, o Kingdom Come, que supuso su salto al estrellato. Desde entonces, y ya consolidado como uno de los grandes guionistas del cómic mainstream, ha mostrado su talento en multitud de series: JLA, Capitán América, X-Men, Empire, Ruse, Crux, Los 4 Fantásticos, o Superman: Birthright.
Recientemente ha firmado un contrato en exclusiva con DC, con lo que su futuro parece más alejado que nunca de “La Casa de las Ideas”.
Mike Wieringo (Vicenza, Italia, 1963) cuenta con más de 10 años de trayectoria profesional en el mundo del cómic. Lejos queda ya su debut, al frente de una miniserie de Doc Savage, pero desde entonces no ha dejado de ofrecer muestras de su buen hacer con los lápices. Su espaldarazo definitivo lo obtuvo con la serie regular de Flash, donde coincidió con Waid. Otras obras destacables de Ringo! son: la serie limitada protagonizada por Pícara, Robin, una brillante etapa al frente de Sensational Spiderman, Tellos (creada junto a Todd DeZago), y Adventures of Superman, desde donde dio el salto a Los 4 Fantásticos.
Poseedor de un estilo inconfundible, reconoce en su trabajo la influencia del anime japonés y de los dibujos Disney. Además, no duda a la hora de mostrar su admiración por el trabajo de dibujantes como, Joe Madureira, Jeffrey Scott Campbell, Humberto Ramos, Chris Bachalo o Jason Pearson.
“…Recuerden su primera aventura juntos, cuando el científico Reed Richards se embarcó con su prometida Susan Storm y con el hermano de ésta, Johnny, en una nave espacial pilotada por el aviador Ben Grimm. ¿Están al tanto, supongo, de lo que sucedió luego?”
Así comienza esta brillante etapa de Los 4 Fantásticos. A lo largo de 36 números (27 de ellos dibujados por Wieringo), este equipo creativo ha sabido recuperar el sabor clásico de la colección, devolviéndole unos niveles de calidad y aceptación popular que nuca debió perder.
Como viene siendo habitual en el comic-book USA, la serie se estructura en números unitarios y, sobre todo, en arcos argumentales que favorecen su posterior recopilación en tomos. De entre ellos destacan:
– El primer número guionizado por Waid, todo un derroche de talento y habilidad para tomarle el pulso a una colección en apenas 24 páginas.
– Sentiente: curiosa historia en la que los 4F se enfrentan ¡a una ecuación! (bueno…no exactamente, pero ya lo descubriréis).
– Impensable: supone el ansiado retorno del Dr. Muerte, precedido por un espeluznante prólogo.
– Acción de Autoridad: curiosa y atrevida analogía con acontecimientos políticos de rabiosa actualidad.
– El más allá: sorprendente y precioso homenaje a…¡Lo siento, pero no me perdonaría reventaros el final de esta saga! 😉
A lo largo de estos 36 números, Waid se vale de una habilidad y un tacto envidiables para acercarse con mimo y respeto a unos personajes que atesoran décadas de historia a sus espaldas, sin que ello implique renunciar a aportar planteamientos innovadores y originales. Éste hábil guionista deja claro desde el primer número que lo que hace especiales y diferentes a los 4F es que son una familia. Personas unidas por lazos de sangre, amistad, amor, afecto, camaradería y complicidad, a quienes el destino les ha otorgado poderes sensacionales.
Pero pese a ostentar estos poderes, lejos está de su ánimo convertirse en un grupo de justicieros al uso, como otros tantos que pueblan el Universo Marvel. No cabe duda de que si la situación lo requiere echarán una mano para salvar a la Humanidad (o al Universo) de cualquier tipo de amenaza, pero será mas fácil encontrarlos en un laboratorio, una expedición científica, o surcando universos antaño inexplorados en su afán de perseguir el conocimiento, que patrullando las calles de La Gran Manzana.
Construyendo la casa desde los cimientos, Waid se encarga de dotar a los personajes de la profundidad psicológica que necesitan. En un alarde de coherencia, las situaciones que irán viviendo tendrán repercusiones en su evolución personal: Reed sufrirá las consecuencias de su enésimo enfrentamiento con el Dr. Muerte, Sue se mostrará de nuevo como el lazo de unión del grupo, Johnny comenzará a asumir responsabilidades, y Franklin sufrirá las secuelas de una experiencia traumática. Tal vez podamos encontrar la excepción en “la adorable Cosa de ojos azules” que en esta ocasión pierde parte de un protagonismo que no hace mucho tiempo monopolizaba. Pero lo cierto es que se agradece que el guionista no recurra al manido tópico del complejo de monstruo que arrastra Ben Grimm, quien en esta etapa parece tener bastante asumida su constitución rocosa y anaranjada.
En el apartado gráfico, Mike Wieringo se revela como un estupendo complemento de Waid, pues su peculiar estilo encaja a la perfección con el tono amable y divertido de la serie, si bien cuando la ocasión lo requiere, acierta plenamente al otorgar matices dramáticos e incluso trágicos a los personajes. Si algo puede achacársele es su lentitud en el tablero de dibujo, que ha provocado la colaboración de dibujantes tan solventes como Mark Buckingham, Howard Porter o Casey Jones para suplir sus ausencias.
Pero no todo ha sido un camino de rosas en esta etapa. Sin ir más lejos, el periplo de Waid y Wieringo estuvo a punto de verse interrumpido tras el arco argumental Acción de Autoridad. La causa: las continuas injerencias en el apartado creativo por parte de Bill Jemas, por aquel entonces director de Marvel. El mandamás de La Casa de las Ideas llegó a despedir a Waid, ante la indignación de los fans de la colección, y de su colega Wieringo, quien amenazó con abandonar la serie.
Por suerte, tras la dimisión de Jemas, Waid recuperó su puesto. ¿Cómo afectaron estos acontecimientos a Los 4 Fantásticos? El cambio más notable fue la creación de una nueva colección centrada en los mismos personajes, pero bajo el sello Marvel Knights. El título: “MK: 4”, donde Marvel reubicó a Roberto Aguirre-Sacasa y Steve McNiven, contratados para suplir a un equipo creativo que, de facto, nunca llegó a abandonar la serie.
En definitiva, una lectura muy recomendable, tanto para los incondicionales de esta colección como para aquellos que deseen aproximarse por primera vez a unos personajes que en cuanto les das la más mínima oportunidad, te atrapan. Acción, diversión, aventuras y problemas domésticos a través de unos guiones inteligentes y un dibujo sencillamente espectacular.
“Quizá lleven bastante tiempo en activo, pero lo único viejo de Los 4 Fantásticos es que nunca dejan de conducirnos hacia lo nuevo” (Fantastic Tour #489)
Un saludo y hasta la semana que viene! (eso espero)