La sensualidad de los mitos.
“La inmortalidad es un castigo.”
A través de los sugerentes y elegantes azules y los tonos tierra de sus pinceles en Los amantes de Shamhat, un trabajo que formo parte de la selección oficial del Festival del Angoulême de 2022, Charles Berberian (Bagdad, 1959) nos transporta a la tierra que le vio nacer, aunque nos lleva a una época mítica situada muchos años antes, pero que hoy en día nos parece tan alejada de la realidad actual del país como el Irak que el autor conoció en su niñez que desde entonces ha vivido infinidad de conflictos que lo han cambiado por completo borrando todo rastro de esta historia llena de dioses y pasiones que conocemos como La epopeya de Gilgamesh, la obra épica más antigua conocida. En este cómic recientemente publicado por Ponent el autor conocido sobre todo por ser el cocreador junto a Philippe Dupuy de la fascinante serie costumbrista El señor Jean (ECC) nos ofrece una sensual y personal recreación de la historia del héroe sumerio rellenando los huecos que hay en su mitología y aumentando la importancia de Shamhat en la trama que mantiene una relación muy compleja con Gilgamesh.
Hacía muchos años que en España no podíamos disfrutar de una historia en la que el autor galardonado en 2008 con el Gran Premio de Angoulême por toda su trayectoria ejerciera también como dibujante y en este trabajo nos demuestra que sus lápices siguen conservando esa elegancia estilizada que sirve para dotar de un cariz etéreo a los protagonistas de esta historia que también están llenos de una sensualidad paladeable. Una belleza serena que contrasta de manera brutal con la explosión de colores que vemos en un entorno natural reflejado con un marcado expresionismo que se antoja tan indómito y salvaje como la propia naturaleza.
Para sus diseños de los personajes ha tomado como base las estatuas encontradas en la zona que están expuestos en el museo de Louvre que, como nos cuenta en uno de los artículos que hay en esta estupenda edición repleta de extras, fue donde le surgió la inspiración para esta obra. En particular la estatua de Ebih-Il, a la que es capaz de dotar de movimiento y una vivida mirada de ojos color lapislázuli llena de intensidad y misterio, un personaje que se convierte en el narrador de las desventuras del mitológico rey de Uruk.
La historia de Gilgamesh es el ejemplo más antiguo del viaje del héroe y cuya influencia se puede ver en todas las mitologías de la zona, desde las clásicas hasta las judeocristianas, aunque en su versión Berberian opta por dejar un poco de lado la parte más centrada en las proezas y sus viajes en pos de la gloria y la inmortalidad para relatarnos el triángulo amoroso lleno de aristas que se forma entre Gilgamesh, Enkidu y Shamhat. Unas relaciones en las que el sexo es clave y está representado de una forma mucho más cercana a la libertad y naturalidad con la que lo vivían los orientales que con la mojigatería mucho más propia de la moral occidental cristiana. Una representación más humana de los personajes que conforman el mito que tiene su reflejo en un héroe que, pese a sus orígenes divinos, tiene unas evidentes debilidades humanas como la soberbia, la envidia y la arrogancia. Cambiar para ser alguien mejor son el verdadero reto que debe superar para convertirse en la figura mítica que está destinado a ser. Esa humanización de los personajes también está presente en su forma de hablar, que a veces resulta algo extraña y tal vez demasiado moderna. Esa es la principal pega que podemos encontrar en la obra junto con la cierta sensación de premura que vemos en la parte final del cómic.
La vuelta de un autor de la enorme talla de Berberian a nuestras librerías siempre es una noticia que hay que festejar ya que es una garantía de una forma de entender el cómic atrevida, original y alejada de la formulas prefijadas y las modas. Su versión de la epopeya de Gilgamesh se aleja del original para ofrecernos una mirada nueva y desprejuiciada de uno de los mitos sobre los que se asienta nuestra cultura.
Lo mejor
• El contraste entre la delicada belleza de los personajes principales y la belleza feroz de la naturaleza.
• La capacidad de Berberian para dotar de vida y movimiento a la imaginería sumeria que conservamos.
Lo peor
• El tono de algunos diálogos resulta algo estridente con el resto del relato.
Guión - 7.5
Dibujo - 8
Interés - 7.5
7.7
Personal
Charles Berberian nos trasporta a la Sumeria de Gilgamesh para darnos una particular versión de la epopeya del héroe sumerio.