Ayer comenzó de manera oficial el verano con hogueras y fiestas por toda la geografía del país. Así que para celebrar que ya estamos en la estación más cálida del año y pasar la reseca os ofrecemos nuestra selección de los cómics imprescindibles de junio. Comenzamos nuestra lista con una obra que nos recuerda los problemas que todos pasamos durante la pandemia y nos ayuda a combatir los prejuicios contra los migrantes. También tenemos la vuelta al cómic por todo lo alto de unos de los juguetes más molones de los ochenta. Desde Japón nos llega una obra que nos enseña lo sanadora que puede ser la música. El tocho del mes está protagonizado por la última gran etapa del grupo de operaciones encubiertas de los mutantes. Desde más allá de los pirineos nos llega un western tan atípico como lleno de calidad. Desde los tabloides estadounidense nos llega una selección de la serie en la que vio la luz el marinero más pendenciero de las strips. Volvemos a Japón para adentrarnos en una serie que combina el humor con la ciencia-ficción y las historias de samuráis. La siguiente parada es en la ciudad imaginaria más famosa del cómic estadounidense donde veremos como uno de los villanos más antiguos del hombre murciélago trata de recuperar su imperio criminal. Cerramos la selección con la maravillosa nueva versión del marinero más fascinante del cómic europeo. Una maravillosa selección de cómic que no merecen ser incluidos bajo ningún concepto en ninguna sanjuanada.
Imprescindibles de junio.
Realidades paralelas.
El invasor, de José A. Pérez Ledo y Alex Orbe; Astiberri.
Han pasado varios años desde la pandemia, pero parece que han pasado muchos más y da la sensación de que hay una enorme prisa por olvidarlo. Por suerte, Pérez Ledo y Orbe lo han situado como unos de los temas principales en El invasor, su segunda colaboración tras Los enciclopedistas.
Se trata de una obra imprescindible para conocer como pasaron esos días quienes no tenía un lugar al que llamar hogar, como le sucede a Omar, un inmigrante que nos permite conocer una realidad que no ocupa espacio en los medios mucho más preocupados por criminalizarlos. Él protagoniza la historia junto a Carol, dos personas que, pese a vivir en la misma ciudad se mueven en realidades completamente ajenas, pero a las que la pandemia unió y que se hacen un hueco en nuestros corazones gracias a la sensibilidad, humanidad y el afán por combatir prejuicios que transmite este cómic.
Un reinicio por todo lo alto.
Transformers, de Daniel Warren-Johnson; Moztros.
Si el mes pasado pudimos disfrutar de Void Rivals, la serie donde Kirkman y De Felici daban pistoletazo de salida al nuevo Universo Energon, este nos metemos a fondo con la serie principal, que supone el regreso a nuestras librerías de Transformers. Si esto no es suficiente, la serie está realizada completamente por uno de los autores más queridos de la actualidad en lo que a cómic de acción se refiere: Daniel Warren Johnson. El creador de grandes obras como Extremity o Do a Powerbomb, que se ocupó de miniseries de Wonder Woman y Bill Rayos Beta, se ha declarado un fan de Optimus Prime y compañía, algo que, unido a la fuerza de su dibujo y la agilidad de sus guiones, no son más que buenas noticias para esta franquicia.
El jazz es un diálogo que no necesita palabras.
Blue Giant, de ISHIZUKA Shinichi; Distrito manga.
Si la adolescencia es un canto a la libertad, mejor ponerle música de fondo que resuene con ese cúmulo de emociones. Dai es un estudiante normal de instituto al que le apasiona el baloncesto. Terminando esta etapa de su vida se encuentra igual de perdido que la mayoría, hasta que el resonar de un saxo tenor y la libertad del jazz cala fondo en su ser.
Tanto es así que al terminar el último curso decide emprender la carrera musical para llegar a la cima y ser el mejor intérprete del mundo. Un camino en el que las viñetas desgarrarán la senda del artista, con la necesidad ingente de horas de ensayo, descubrimiento del talento y búsqueda de ese golpe de suerte para despuntar entre todos los músicos. Todo a base de improvisación.
Lo imposible es posible.
Marvel Omnibus. Imposibles X-Force, de Rick Remender, Phil Noto, Billy Tan, Esad Ribic, Jerome Opeña, David Williams, Greg Tocchini y Rafael Albuquerque; Panini.
En los Imposibles X-Force Rick Remender nos presenta diversos caminos que podemos recorrer y que nos llevan a un destino. No se trata de una sola historia, tenemos delante varios arcos argumentales que se despliegan como un enorme abanico multicolor. Como si tuviésemos ante nosotros un mapa marcado con una clarísima X que nos indica dónde está ese tesoro que buscamos, el arquitecto de historias que es Remender, nos relata un viaje, una epopeya llena de conceptos noventeros y de ciencia ficción.
Solo de la mano de un autor como es el guionista de Clase Letal o Ciencia Oscura en las que dejaba patente su maravillosa habilidad para marcar el ritmo de una historia, se consigue encajar una aventura fragmentada de una manera tan imposible, tan “uncanny”. No os perdáis esta maravilla mutante.
Vuelve Anthony Pastor.
La mujer de la estrella, de Anthony Pastor; Yermo.
Anthony Pastor es un autor casi desconocido, pero absolutamente recomendable. Está dotado de un universo artístico tan atípico como atractivo y nos ha dejado pruebas de ello en Los casos de Sally Salinger, una excelente saga de serie negra.
Ahora con La mujer de la estrella se adentra en otro entorno paradigmático; el western. Conserva el protagonismo femenino y las ganas de explorar los límites argumentales y narrativos de los géneros para ofrecernos un relato sobre la resistencia y la disidencia en un entorno completamente hostil. Cercana a Las aventuras de Jeremiah Johnson de Sidney Pollack o a Dead man de Jim Jarmusch, esta obra consigue aflorar a la superficie del mercado más generalista a un autor muy interesante, pero oculto. Todo un logro de Yermo Ediciones.
Antes de Popeye.
Thimble Theatre. Selección de planchas dominicales (1925-1930),, de Elzie Crisler Segar; Diábolo.
E. C. Segar comenzó su strip titulada Thimble Theatre en diciembre de 1919, las dominicales en 1925 y la primera aparición de Popeye se produjo el 17 de enero de 1929. En su primera década, Thimble Theatre era una serie aún titubante, pero ya se apreciaban las principales características que definirían la tira en décadas posteriores, sobre todo bajo la batuta de Segar; salvajismo, surrealismo y humor. Popeye, al principio un secundario, le fue robando el protagonismo – y la novia – al primer titular de la serie, un tal Harold Hamgravy.
El título de este recopilatorio no engaña, es una selección de las dominicales más destacadas de este lustro inicial. Una delicatessen reservada a los más aficionados a estos productos, pero una excelente noticia que podamos encontrarlo en nuestras librerías.
¡Comedia buena de kintamas!
Gintama (3 en 1), de SORACHI Hideaki; Planeta Cómic.
Regresa el hijo pródigo en edición 3 en 1. La mejor comedia nipona de todos los tiempos que aúna gags sobresalientes, historia, drama, batallas épicas, parodias otaku y censurado de partes íntimas de una forma única.
La trama nos coloca en el periodo Edo cuando han tomado tierra diferentes sociedades alienígenas con su tecnología puntera, lo que deja casi obsoletos la tradición samurai y el código bushidō . Nuestro chico para todo Gintoki se ha tenido que adaptar para no morir de hambre y bajo su ala ha reunido al sensato Shinpachi y la “extranjera” Kagura, más poderosa que Arale. Luego se le unirán al roster 400 más, con unas historias para terminar llorando de risa, de emoción y de tristeza. Las tres todo en uno.
El lado salvaje de la ornitología.
El Pingüino 1, de Tom King y Rafael de Latorre; ECC.
En la extensa y variada galería de villanos de Batman, hay uno en particular que ha evolucionado con el tiempo de manera notable. Desde su primera aparición en Detective Comics 58 (1941) ha sabido adaptarse a los nuevos tiempos hasta encontrar su lugar como ente criminal que se mueve por las grietas del sistema corrupto de Gotham.
Con este trabajo, centrado en su figura, Tom King y el dibujante Rafael de la Torre, construyen un escenario donde narrar el resurgir de las cenizas de Cobblepot para alcanzar su estatus perdido. Un viaje de violencia, egos desmesurados, teñido de drama y sangre, luces y sombras, del que podemos disfrutar en este primer tomo de los seis cómics que dan inicio a una serie de doce números.
La nueva vida de Corto.
Corto Maltés. La reina de Babilonia, de Martin Quenehen y Bastien Vivès; Norma.
El enfoque que proponen tanto Martin Quenehen como Bastien Vivès en su revisión de la serie Corto Maltés es arriesgado, pero apasionante. Los autores ponen toda la carne en el asador en este segundo álbum y pasan cosas; muchas y extremadamente significativas.
La reina de Babilonia es un cómic excelente que apasionaría al propio Hugo Pratt, ponemos una mano en el fuego por ello. Si, además, tenemos en cuenta que se trata de uno de los mejores trabajos gráficos del autor de La blusa, se puede entender que estamos ante algo realmente excepcional.
Norma Editorial se marca un punto positivo apostando por esta versión de la serie, pese a las polémicas que envuelven a su dibujante, editándola además con una cierta puntualidad. Imprescindible…