Edición U.S.A.: The Walking Dead: The Best Defense TPB (#25-30); Image Comics.
Edición España: julio de 2006; Planeta DeAgostini Cómics.
Guión: Robert Kirkman.
Dibujos y entintado: Charlie Adlard.
Grises: Cliff Rathburn.
Formato: tomo recopilatorio de 136 págs.
Precio: 7’50 €.
Trece meses se antojan como un plazo de espera excesivo para la publicación de la continuación de un cómic serializado. Más aún si el cómic al que nos referimos se titula Los Muertos Vivientes, y las mentes pensantes encargadas de dar forma a este drama post-apocalíptico responden a los nombres de Robert Kirkman y Charlie Adlard. Un tercero imparcial podría pensar que los acontecimientos relatados en Lo que más anhelas permanecen sumidos en el olvido de quienes siguen esta colección con regularidad, pero precisamente aquellos que han tenido la ocasión de leer los anteriores tomos recopilatorios de The Walking Dead podrán dar fe de hasta qué punto el fruto del talento, el esfuerzo y la ilusión de Kirkman y Adlard permanecen grabados a fuego en sus retinas, deseosas de deleitarse (y aterrorizarse) nuevamente con La mejor defensa, la más reciente entrega de un título que no ha tardado en hacerse merecedor de entusiastas –y casi unánimes- elogios procedentes de lectores, crítica y medios especializados.
SINOPSIS: “Tras padecer los más indecibles rigores, la comitiva liderada por Rick Grimes parece haberse asentado en la antaño inhóspita prisión, lugar que, irónicamente, se presenta como la más firme esperanza de reconstruir sus vidas. Sin embargo, la tensa calma se ve sacudida por un hecho inesperado: ante la atónita mirada de los presentes, un helicóptero sufre un accidente en las proximidades de la cárcel. Semejante acontecimiento propicia que Rick, junto a otros dos acompañantes, se disponga a explorar la zona en busca de posibles supervivientes. La improvisada expedición les conducirá hacia un misterioso pueblo. ¿Habrán logrado sobrevivir sus habitantes?.”
Una y otra vez, sin concesiones para que el lector recupere el aliento, Kirkman logra salir airoso y reforzado de aparentes callejones sin salida argumentales que reconduce hasta centrar la atención en una nueva reflexión que no hace sino continuar arrojando luz sobre el detallado, exhaustivo y desasosegante mapa de la desesperación humana que, en definitiva, viene siendo esta colección. Como hemos comentado en anteriores ocasiones, pese a tratarse del hilo conductor de la historia, la presencia de los zombies es un mero pretexto para incidir en el análisis del comportamiento de un grupo tan reducido como representativo de personas que, ante situaciones desesperadas y traumáticas, sacan a relucir sus más bajos instintos, potenciando el instinto de protección y supervivencia, recurriendo a la violencia desmedida frente a amenzas hasta entonces desconocidas o castrando inconscientemente los condicionamientos y convencionalismos sociales asimilados durante toda una vida.
Bien es cierto que algunas de las peculiaridades más características de Los Muertos Vivientes –la posibilidad de recurrir a una pluralidad casi ilimitada de escenarios y la presencia de un reparto eminetemente coral-, juegan a favor de su guionista, pero no menos cierto es que estas circunstancias, en manos menos hábiles y osadas propiciarían que un interesante punto de partida se redujera a una fallida y forzada sucesión de tópicos, estirados hasta el infinito. Y nada más lejos de la realidad: el atrevimiento de Kirkman, sumado a su talento innato para reinventar géneros, deriva en cambios de rumbo periódicos, necesarios y fluidos en su transición, sometiendo a algunos de los personajes más destacados a una serie de acontecimientos realmente inesperados que en su conjunto, favorecen la evolución de unos caracteres que, no lo olvidemos, partían de un esquema estereotipado. Es decir, el verdadero pavor, el aspecto más inquietante de este cómic, reside en la plasmación de las reacciones de los protagonistas, mostrándonos sus conflictos internos, y el modo en que éstos son exteriorizados
En esta ocasión, pese a un inicio relativamente sosegado, terminan desatándose una serie de violentos acontecimientos narrados con una crudeza, desesperación y salvajismo hasta ahora inusitados. Una violencia que, tanto en su vertiente física, como en la psicológica, rehuye de pretensiones poéticas, estéticas o incluso lúdicas. Porque no nos dejemos llevar a engaño: aunque deudora de muchas de las películas que han popularizado el género zombie, Los Muertos Vivientes no soporta paralelismo con las cintas de serie B que provocaban una arrítmica alternancia entre sobresaltos y sonoras carcajadas, derivadas de la contemplación de las más crueles mutilaciones, agresiones, y demás actos que alcanzaban desproporcionadas cotas de surrealismo. Este cómic va un paso más allá para reivindicar una vez más el poder de la sugestión sobre lo evidente y explicito, planteando un cúmulo de situaciones y sensaciones contradictorias que eclosionan al ritmo de los versos de Bruce Springsteen (“57 channels and nothing on…”), en una de las escenas más impactantes de la colección.
Charlie Adlard parece haber asumido su papel de sustituto de Tony Moore con grandes dosis de ilusión y autosuperación, mejorando con cada número hasta hacerse por completo con las riendas de la colección. Sabedor de estar ante una gran oportunidad de consolidar su dilatada carrera con un proyecto exitoso, el dibujante, brillante en su función, hace de la sencillez, economía y sobriedad de su trazo la más poderosa de las armas, poniendo de manifiesto un estilo mucho menos caricaturesco que el de Moore, alejado de estridencias, optando por centrarse en los personajes y cuanto acontece a su alrededor. Todo ello en glorioso blanco y negro, aderezado por los grises de Bill Crabtree, pues los autores no albergan ningún tipo de duda acerca del apartado artístico de la obra, pues parecen plenamente conscientes (“Nunca colorearé Los Muertos Vivientes. Está perfecto tal y como está.”) de que gran parte de su atractivo, y probablemente su capacidad de transmitir y comunicar sensaciones, sentimientos y emociones a los lectores resida, precisamente, en la reducida gama cromática por la que han optado.
Tanto en su literalidad, como en su sentido más metafórico, esta obra plantea numerosas preguntas, que al parecer continuarán formulando Kirkman y Adlard, pues por fortuna para su cada vez más numerosa legión de incondicionales, el guionista de Kentucky afirma tener a punto una planificación argumental a largo, larguísimo plazo («…como una película de zombies que nunca termine…”). Esperemos que así sea, de modo que podamos acompañar a estos muertos en su caminar durante mucho, mucho tiempo…
Por cierto, como curiosidad, comentar que con esta entrega de la colección, Planeta DeAgostini aprovechó la oportunidad para promocionar el cómic Girls, de Jonathan y Joshua Luna, regalando el primer tomo recopilatorio de dicha serie. Pese a que en mi opinión no se trata de material de gran calidad, a caballo regalado… ojalá esta iniciativa prospere y trascienda de la categoría de mera anécdota.
Reseñas de la colección anteriormente publicadas en Zona Negativa:
– Los Muertos Vivientes: Días pasados.
– Los Muertos Vivientes: Muchos kilómetros a las espaldas.
– Los Muertos Vivientes: Seguridad tras los barrotes.
– Los Muertos Vivientes: Lo que más anhelas.
Un saludo y hasta la semana que viene! (eso espero)
Espero que los publiquen con mas frecuencia, porque acabas de leerte un tomo y ya tienes mono.
La mejor serie desde hace mucho tiempo. 30 números y seguimos con mono… ¡y que no pare! Kirknan for president ya.
A mí con esta serie me pasó un poco como con «Y, el ultimo hombre»
Los primeros números me parecen ejemplares. Una obra maestra absoluta del género.
Luego la cosa se estabiliza, los personajes se definen, aumentan, empiezan las relaciones e interacciones entre ellos y las comeduras de coco. Perfecto, también mola, está muy bien escrito y desarrollado. Mantiene el interés.
Pero se queda ahí. Es es todo. Si te mola esa velocidad de crucero que establece Kirkman, de puta madre, sino, como es mi caso, te aburres y abandonas.
He vuelto a darle/s alguna que otra oportunidad pero me sigo encontrando lo mismo. Aburri-burri más estiramientos decompresivos.
Pero en ambos casos (LMV y YEUH) les reconozco el talento a sus autores y me parecen buenas series. Pero a estas alturas, algo sobrevaloradas.
el unico defecto que le encuentro a esta serie, es que no tiene un final prefijado…o asi lo dice cuando responde a las preguntas en los correos de la edicion americana…que es la que sigo. Por lo demas, posiblemente la mejor serie de terror en años…si alguien sabe de alguna serie mejor, que no dude en recomendarmela pues soy un fanatico del autentico miedo ( no del gore barato, eso no es dar miedo).
Fletcher!!
Yo me hye leido los 5 volúmenes publicados. Mi hermano no se fiaba mucho y le dije: «Prueba el número uno, a ver si te gusta». Pues en un solo dia se ha leído los 5 volumenes todos seguidos y ha flipado!
Para mi gusto, empieza a estancarse y a perder interés velozmente. Si en los primeros tomos la interralación entre los peronajes y su unión como comunidad frente al horror era el elemento carcaterístico d ela serie y su mayor logro, con este quinto tomo se aprecia (adivinada ya en números anteriores) la entrada de lleno en el esquema de serie televisiva: nos encontramos un nuevo grupo de gente que resultan ser unos capullos asesinos. No comprendo por qué en este tomo buscan con tanata alegría nuevos humanos si cada vez que encuentran un nuevo grupo sólo les traen problemas. Precisamente, lo que más me sorprendió del inicio de la serie fue que no seguía esa estructura madmaxniaca de los grupos macarra/ciberpunk luchando por el poder. Ahora ya sí lo hace. Y además, alarga esas historias (¿recordáis cuántas cosas pasaban en los dos primeros tomos y las pocas que pasan en éste?) siguiendo el signo de os timepos. Una pena.
Sigue la serie en USA tras el numero 36?
Mastere, la serie, efectivamente, continúa. A mi me parece una auténtica gozada, no deja de sorprenderme la capacidad de Kirkman para evitar que la colección pierda interés (en este punto no coincido con Rorschach y Pikodoro). Es cierto que algunas tramas están un poco estiradas, pero sigue siendo probablemente la lectura más gratificante de cuantas sigo con regularidad.
Uns saludo!
En los USA ya van por el numero 38.
LA MEJOR SERIE HOY POR HOY EN LOS COMICS!!!!
Nadie me recomienda nada???
jo
HEY!…la zona negativa deberia hacer unos articulos recomendando obras segun generos…no estaria mal!!!
PERO LA IDEA ES MIA!!!!…je je je
Fletcher!!
Ufff… pues no sabría decirte. Lo cierto es que creo que Los Muertos Vivientes es el único cómic de este género que sigo. A bote pronto, se me ocurren como sugerencias «Hellblazer», y tal vez la nueva serie de Kirkman «The Astoundishing Wolf-Man» (aunque esta última aún no la he leído).
Lo de los artículos recomendando cómics por géneros no es mala idea, y aunque la mayoría pertenecerían al género superheróico, se le puede dar un par de vueltas al tema…puede que salga algo interesante… ;P
Un saludo!
hombre…creo que hay mas de un genero aparte del superheroico…ciencia ficcion, magia, policiaco, western, misterio, terror…mientras no nos centremos en el comic USA solamente…entre el europeo y el japones debe de haber mucha joyita que se me habra pasado por alto…
Fletcher!!
No, me refereía a que suele ser el género por excelencia en Zona Negativa, pero claro que podemos ccomentar otros géneros, estilos, y tendencias.
Como dije antes, tomo nota y a ver si en las próximas semanas se nos ocurre algo.
genial!
Fletcher!!
Weno, ahora Panini edita en tomito el Vault of horror, dibujado por Corben, adaptando historias de Poe. Yo, como fan de ambos, no me lo pienso perder… xo echo de menos mas comics de terror en el mercado.
Fletcher, si no has leido el manga «Uzumaki» te lo recomiendo muy mucho. Son 6 numeros y se me llego a poner la piel de gallina leyendolo xD
También es una putada que Planeta no incluya las portadas en el interior (creo que es la única serie donde no salen, y no lo entiendo); nos han escamoteado 25 en total desde que empezó y es una pena…
Salu2
La serie de los Muertos Vivientes, es uno de los poquisiimos comics que espero y ansio (al menos hasta ahora)… Y la trama aun me tiene enganchado. Reconozco q el primer número no me llamo para nada la atención… Pero al leer el segundo ¡Clikc!… Quise seguir leyendo… Una lastima q no tenga una periodicidad mensual… o algo parecido pq la publican cuando les viene en gana…
¿Ha salido ya el tomo número 5?… Joder, pues en mi tienda de comic aun no ha llegado… Maldita sea.
Wenas, solo decir q soy un acerrimo fan del genero zombie, xro me refiero al weno, no al gore barato como decian x ahi arriba (tambien m gustan otros muxos generos xro no es plan d entrar en ello ahora) y cuando vi el 1º d estos comics lo compre con algo d timidez, m esperaba poca cosa,al abrirlo ley el prologo x asi llamarlo d kirkman, y mis esperanzas crecieron enormemente, y al leerlo m di cuenta d q habia dao un una joya, m he ido pillando todos sgeun han ido slaiendo, incluyendo el ultimo, q m lo ley demasiado ndeprisa para mi gusto, he de decir q estoy de acuerdo en q ha habido cambios significativos en este ultimo nº y puede q no todos para mejor, xro sigo teniendo fe en la genial inventiva d kirkman y tenga ganas d ver como desarrolla estos ultimos acontecimientos en los siguientes numeros, hablando d lo cual estaria bien saber cuando va a salir el 6º aunke supongo q x ahora no se tienen noticias al respecto.
A los fans del genero les recomiendo el amanecer de los muertos, no es una gran maravilla xro no esta mal, y 28 dias despues, la 1ª mitad d la pelicula es para mi casi una obra d arte dentro d este genero, y el resto d la peli tampoco esta nada mal, tengo ganas d ver 28 semanas despues, xro una no he tenido la oportunidad, una pena, finalemtne resident evil 1 no esta mal para los seguidores del juego, xro la 2 tiene una 1ª media hora brillante, q pasa a ser un bodriazo d muxo cuidao cuando aparece en moto la «prota´´ y la tierra de los muertos vivientes esta interesante, aunke no es q m gustase excesivamente.
Finalmente decir q me he leido «Girls´´, como ya han dixo arriba la regalaban cn el comic y… weno, es una curiosa paranoia mental d los autores