Edición original: The walking dead: Fear the hunters (#61-66); Image Comics.
Edición España: agosto de 2010; Planeta DeAgostini Cómics.
Guión: Robert Kirkman.
Dibujo: Charlie Adlard.
Entintado: Cliff Rathburn.
Color: blanco y negro.
Formato: tomo recopilatorio de 136 págs. encuadernado rústica.
Precio: 7,50 €.
No parece demasiado aventurado presuponer que Robert Kirkman afronta los últimos meses de 2010 con la satisfacción y tranquilidad propia del alumno aplicado que no solo lleva las tareas al orden del día, sino que además aspira a cerrar el ejercicio en curso rozando la matricula de honor. Dentro de este año triunfal, destaca el buen funcionamiento de Haunt –serie de dudosa calidad, creada junto a Todd McFarlane–, la envidiable salud de la excelente Invencible, la condición de socio de Image Comics que ostenta desde 2008, o la reciente fundación de Skybound, sello destinado a la promoción de nuevos talentos del mundo del tebeo, a los que la editorial proporcionará no solo libertad creativa, sino también unas interesantes condiciones económicas: a saber, adelantos, participación en los posibles beneficios obtenidos a través de la venta de merchandising e hipotéticas adaptaciones a otros medios. Movimientos, todos ellos, que han contribuido a reafirmar al autor natural de Kentucky como uno de los nombres propios más influyentes del panorama norteamericano.
Más allá de lo comentado, la valoración de la relevancia de Kirkman dentro de la industria del cómic parece remitir de forma inevitable a su creación más destacada, que una vez más, le ha proporcionado no pocas alegrías: durante los últimos meses, Los muertos vivientes se ha consolidado como título dominador de algunos de los galardones más importantes del Noveno Arte, tal y como acreditan los Premios Harvey de 2010 al Mejor Escritor y a la Mejor serie regular, o el Premio Eisner obtenido por sus guiones al frente de dicha colección. Y por si ello no fuera suficiente, a punto está de estrenarse la adaptación televisiva de la colección de la que os hemos venido informando durante los últimos meses (1, 2, 3, y 4), así como la novelización de la historia, por cuenta de Jay Bonansinga.
Por estos lares, el entusiasmo que suscita Los muertos vivientes no parece menor, tal y como acreditan los elogiosos comentarios que suele suscitar cada nuevo arco argumental, así como las nominaciones y galardones –el más reciente, en los Premios de la Crítica, concedidos en el marco de las Jornadas del cómic de Avilés de 2010– que acumula desde la publicación del primer volumen, hace ya un lustro. En este contexto, cabe suponer que numerosos lectores recibieron el nuevo recopilatorio de la colección –publicado por Planeta DeAgostini Cómics durante el pasado mes de agosto– con suma impaciencia, acudiendo a la librería especializada de turno con la determinación propia del zombi que acecha a su víctima.
Recapitulando acontecimientos recientes
En las páginas de En lo que nos hemos convertido, anterior entrega de la serie, pudimos comprobar cómo la cordura de Rick Grimes se deterioraba a pasos agigantados, no solo debido a las secuelas psicológicas del traumático asesinato de su esposa Lori y la hija que ambos esperaban –Creados para sufrir–, sino también por el curso de los nuevos acontecimientos: la llegada de Gale, Abraham y Rosita implicó un cambio en la dinámica de grupo, la obtención de nueva información acerca de los “caminantes” y el establecimiento de un nuevo destino: Washington. Pero antes de dirigirse a la capital norteamericana, Rick decidió visitar Atlanta, su antigua ciudad para, acompañado de Abraham y Carl, tratar de hacerse con los suministros de la comisaría de policía en la que prestaba sus servicios.
El viaje se complicó sobremanera debido al asalto nocturno de tres desalmados, que con sus brutales amenazas desataron los instintos de protección más salvajes de nuestro protagonista. Tras el incidente y el ejercicio de sinceridad acometido por Abraham, la comitiva llegó a su destino, donde Rick se topó de nuevo con un desquiciado Morgan Jones –a quien conocimos en Días pasados–, obligado a tomar una serie de decisiones dramáticas. Juntos, regresaron al encuentro del resto del grupo, sin poder evitar que un multitudinario “rebaño de caminantes” les siguiera el paso. Como consecuencia, el resto de integrantes de la comunidad –encabezada por un Dale deseoso de encontrar estabilidad en un paraje perfecto para iniciar una nueva vida junto a Andrea y los gemelos–, se vieron obligados a huir de nuevo, sembrando fuertes dudas acerca del liderazgo de Rick…
Teme a los cazadores: cuando se desata la brutalidad
“No hay vuelta atrás, después de algo así…”, decía Abraham en el anterior tomo recopilatorio. Efectivamente, esa vueltra atrás a la que alude el rudo personaje es cada vez más improbable; los protagonistas de la colección, estos “muertos en vida” a los que Kirkman y Charlie Adlard obligan a afrontar infinidad de penurias, parecen abocados a adentrarse en los más en oscuros recovecos del sufrimiento, hasta alcanzar un punto de no retorno en el que se diluye su cordura, y las más básicas inhibiciones, inherentes a la condición humana. Todo ello provocado por el instinto de supervivencia y protección, y por tratar de mantener viva la esperanza de recuperar cierta normalidad en sus vidas… algo harto difícil, teniendo en cuenta que estamos ante personajes marcados por el dolor, rotos, quebrados en sus ánimos, traumatizados, desconfiados, hastiados de una situación incomprensible, y tensos, alerta ante cualquier nueva amenaza. Como alerta están los lectores, ante las dosis de sufrimiento condensadas en las páginas de cada nuevo tomo de la colección. Sentimientos extremos, provocados por escenas de esas que se quedan grabadas en la retina, secuencias que invitan a cerrar el libro y dedicarse a otros menesteres menos perturbadores… ah, pero ahí radica el éxito de Los muertos vivientes, precisamente en el hecho de provocar en el lector una contradictoria montaña rusa de emociones, que van desde la repulsa hasta la impaciencia, pasando por la empatía con determinados personajes a cuyo crecimiento y/o degragación hemos asistido durante los últimos años. El resultado, un cóctel tremendamente adictivo, que una vez has degustado, parece imposible resistir la tentación de volver a probar.
Empeñados en el “más difícil todavía”, Kirkman y Adlard aprovechan Teme a los cazadores para desarrollar hilos argumentales planteados con anterioridad –¿es Rick el candidato más adecuado para liderar esta comunidad… o tan solo el único dispuesto a asumir (a regañadientes) tal responsabilidad? ¿cómo puede afectar a mentes infantiles padecer experiencias como las que les ha tocado vivir?–, junto a otros de nuevo cuño, aunque siguiendo temáticas y estructuras recurrentes: la irrupción de nuevos personajes que se suman al grupo de supervivientes, la aparición de la enésima amenaza externa y… demás acontecimientos que no tenemos la más mínima intención de spoilear 😉
Cabe destacar que es éste otro de los volúmenes en los que se contienen escenas no aptas para los lectores más sensibles. Sin llegar a los extremos impactantemente descriptivos de Esta triste vida, apenas son necesarias una decena de páginas para recibir el primer puñetazo en la boca del estómago; en este caso, más por las implicaciones subyacentes y por dejar lugar a la imaginación –como las mejores obras de terror y suspense– que por recrearse en detalles explícitos. Sencillamente espeluznante. Al igual que la desagradable secuencia que, durante el tercer número de los recopilados, comienza a revelar la amenaza a la que en esta ocasión se enfrentan nuestros protagonistas. En relación al desarrollo dramático, quizás llama la atención el comportamiento especialmente violento, y descarnado de determinados personajes; pero bien pensado, esta circunstancia puede entenderse con la evolución natural de su particular escalada de deshumanización; y la confirmación der que, tal y como apuntaba Abraham, estos “muertos andantes” no tienen la posibilidad de desandar el camino recorrido: “después de hacer eso, no puedes ser el mismo”…
Lo que es indiscutible es que la tensión dramática continúa con el crescendo infinito al que parece condenada esta colección. Algo tremendamente meritorio, atendiendo al hecho de que con este volumen se alcanza la 66ª entrega de la numeración original. Cinco años y medio sin mostrar síntomas de agotamiento, manteniendo intactas la curiosidad por conocer el devenir de los acontecimientos, y el interés por saber qué sigue a continuación de los puntos suspensivos inmediatamente posteriores al “continuará” que cierra cada tomo recopilatorio.
Charlie Adlard: talento en la sombra
La recolección de comentarios elogiosos y galardones por parte de esta colección ha sido casi una constante desde la aparición de su primera entrega; pero el destinatario de dichas felicitaciones casi siempre es Robert Kirkman. Evidentemente, el “padre de la criatura” merece cuantos reconocimientos ha recibido, pero no es menos cierto que no siempre se ha valorado el trabajo de Charlie Adlard en su justa medida.
Elegido como el encargado de sustituir a Tony Moore tras el primer arco argumental de la serie –Días pasados–, el historietista británico optó por un enfoque mucho más contenido que el de su predecesor. En sus propias palabras: “Cuando empecé a encargarme de Los Muertos Vivientes, que es principalmente un libro dramático, y no de terror, pensé que sería apropiado hacerlo de un modo realmente sobrio, de modo que el lector pudiera concentrarse en la historia, en lugar de ser distraído por ejercicios estilísticos vacuos.”. Partiendo de esta premisa, Adlard ha venido haciendo uso su habitual mecánica de trabajo, en la que prima la inmediatez de las primeras impresiones –“si la idea adeciada no se me ocurre dentro de los diez primeros segundos, probablemente nunca lo hará”–, y la ausencia de bocetos previos, más allá de los diseños iniciales presentados a Kirkman, para que éste diera su aprobación a las interpretaciones estéticas que tenía en mente.
Salta a la vista que uno de los puntos fuertes de Adlard es su dominio del claroscuro, su perfecto juego de luces y sombras del que hace uso desde sus primeros encargos para la mítica revista 2000AD. Una habilidad que tal vez esté de algún modo relacionado con sus estudios de cinematografía. En este proyecto –con diferencia, el más exitoso en su carrera profesional–, cuenta con la inestimable colaboración del colorista Cliff Rathburn, quien por los requerimientos estéticos de la colección se limita a la aplicación de tonalidades grises, con las que añadir matices al trabajo de Adlard. El propio Rathburn se encarga de definir sus funciones: “No lo llamaría coloreado, requiere mucha menos meditación. (…) Intento centrarme en la profundidad y en las fuentes de iluminación, y asegurarme de que las tonalidades grises no rebasan el 50% de los tonos negros. Si se diera el caso, la línea de dibujo y el tono gris ‘sangrarían’ juntos en el momento de la impresión, haciendo que la página se empastara.”
Lo más curioso del asunto es que, si atendemos a las palabras del dibujante, la compenetración de este equipo creativo –Kirkman incluído–, surge de la confianza mutua y de la delimitación clara de funciones, más que de un intercambio de impresiones: “Lo mantenemos bastante separado. Confío en la escritura de Robert, él confía en mí… Cliff hace lo suyo… No veo los tonos hasta las pruebas finales, pero ¡realmente no hay nada de lo que preocuparse! Simplemente confiamos en que cada uno haga el mejor trabajo posible, exigido por los descabellados márgenes de tiempo de que disponemos”. Pero no son los plazos de entraga los causantes de los mayores quebraderos de cabeza en Adlard, sino la abudante presencia de conversaciones en las páginas Los muertos vivientes: “Curiosamente, lo más difícil no es mantener un calendario mensual –encuentro eso bastante sencillo–, sino mantener el drama visualmente intersante… es un tipo de libro de ‘bustos parlantes muy dramático, y de ahí vienen desafíos muy particulares. ¡Pero me gustan los deafíos! La acción es sencilla; son los momentos tranquilos los que constantemente hacen la vida interesante.”.
Y lo cierto es que este talentoso dibujante puede respirar tranquilo: a buen seguro que muchos lectores consideran que mes a mes sale airoso de cuantos desafíos le plantea Kirkman… ¡y con nota!
La tensa espera…
Tan solo tres apuntes finales, antes de dar por terminado el presente artículo; comentarios destinados a los lectores más impacientes, que ansían nuevas entregas de esta colección: por una parte, señalar que esta vez la espera será más breve de lo habitual, ya que dentro de apenas dos semanas, y coincidiendo con la ccelebración del Salón del Manga de Barcelona, Planeta DeAgostini Cómics publicará Vivir entre ellos, duodécimo tomo recopilatorio de Los muertos vivientes. Por otra parte, poner en conocimiento de aquellos que echaban en falta la inclusión de las portadas originales en los tomos editados por Planeta -me incluyo dentro de este colectivo-, que atendidiendo a la sección de Consultas y FAQs de su web oficial, la editorial catalana baraja la posibilidad de publicar un volumen en el que recopilarlas. Y finalmente, decir que el estreno en España de la adaptación televisiva impulsada por Frank Darabont se producirá el el 5 de noviembre. Pero teniendo en cuenta dicha fecha, ¿a qué se referirá la campaña promocional ideada por Fox España, alusiva al 26 de octubre? (tal y como reza este póster visto en la C/ Luna, Madrid) Habrá que estar atentos al blog oficial de que dispone la serie por estos lares…
- Página web oficial de Robert Kirkman.
- Página web oficial de Charlie Adlard.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 1: Días pasados.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 2: Muchos kilómetros a las espaldas.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 3: Seguridad tras los barrotes.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 4: Lo que más anhelas.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 5: La mejor defensa.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 6: Esta triste vida.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 7: La calma antes de….
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 8: Creados para sufrir.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 9: Aquí permanecemos.
- Reseña de Los muertos vivientes vol. 10: En lo que nos hemos convertido.
Un saludo y hasta la semana que viene! (eso espero)
Excelente reseña David – como siempre – a mi este último volumen me ha gustado especialmente y me tiene intigradísimo la actitud de Rick, ¿realmente está sonado o hay algo más? Y que decir ‘del momento’ de este volumen tela tela, sin lugar a dudas una de las mejores series del panorama actual.
¿Como es posible que un texto sobre los Muertos vivientes esté generando tan poquitos comentarios?
¿Será que hace ya demasiado tiempo desde la aparición del último tomo? ¿Será que la peña está mas pendiente de la serie de la tele que de la inminente aparición del siguiente? ¿Será que a estas alturas ya está mas que sobado proclamar que es el mejor tebeo mainstream de los últimos años? ¿Será porque no sale Batman ni lo escribe Morrison?
Vaya, si para el Salón del Manga se publica el tomo 12 le vamos a ir pisando los talones a los TPBs USA (el vol. 12 salió este agosto en EEUU). Como se nota que la serie funciona y se preveen más ventas a raíz de la serie de TV. Respecto al cartel, sólo puedo elucubrar, pero tal vez se trate de la emisión de algún making off.
Y termino opinando sobre Adlard. Me gusta que se reivindique este autor, yo siempre lo he defendido a la par que opino que si la serie goza de tan buena salud, probablemente sea debido al amplio nivel de confianza que hay entre su equipo creativo.
Muchas gracias, Raúl. Diría que está traumatizado, muy tocado y a punto de reventar. Harto, y aparentemente decidido a asumir cualquier tipo de medida, por drástica que sea. También tengo ganas de comprobar cómo evoluciona.
Ocioso, creo que una mezcla de todo lo que comentas, comenzando por mi retraso en la reseña de un tomo que lleva publicado desde hace un par de meses (mea culpa… el próximo intentaré comentarlo antes).
Raúl (Martín),pues sí: se ve que funciona, pero el pisar los talones de la edición americana (el próximo tomo de Image se publicará a mediados de noviembre) implica que en breve volveremos a la rutina pretérita; es decir, que tocará esperar muuuuchos meses entre tomo y tomo de Planeta, me temo. Sigh… Totalmente de acuerdo en cuanto a la confianza que se intuye entre los integrantes del equipo creativo. Y concretamente en relación a Adlard, Moore me parece un bien dibujante, pero creo que el británico es mucho más consistente y comedido, centrado en lo que pide la historia.
Un saludo!
Mi relación con Charlie Adlard empezó con unos números que dibujó de Expediente X. Decir que me parecieron horribles sería quedarme corta. Luego me reencontré con él en Mars Attacks, donde, aunque no me gustaba mucho, tenía algo que pegaba muy bien con el tono de la historia. Y así llegamos a Los Muertos Vivientes. No es que no me imagine a otro dibujante para esta serie, es que no quiero a otro dibujante.
Si la progresión sigue así ya me imagino tirándole el sujetador estilo groupie dentro de unos años
Es que su evolución ha sido brutal; y personalmente reconozco que siento debilidad por los dibujantes que manejan tan bien los juegos de luces y sombras (Sean Phillips, Tim Sale, etc).
Recuerdo que en Viñetas desde o Atlántico 2009 una de sus páginas originales formaba parte de la expo «Guionistas americanos», comisariada por Jaume Vaquer. Resultó curioso comprobar sus dimensiones, mucho más reducidas de lo habitual. En este link podéis echar un vistazo a un buen montón de originales de Adlard.
David Fernández ha comentado: comenzando por mi retraso en la reseña de un tomo que lleva publicado desde hace un par de meses (mea culpa… el próximo intentaré comentarlo antes).
Naaa, es una serie que no obliga a reseñar inmediatamente. Podría ser incluso contraproducente porque a algún comentarista se le podría escapar algún spoiler. Mejor dejar pasar el tiempo hasta que nos lo hayamos leído todos. Además ¿qué podemos hacer? ¿bajarte el sueldo?
Lo importante es que cada tomo tiene su entrada, y eso es un trabajazo.
Tiegel ha comentado: Mi relación con Charlie Adlard empezó con unos números que dibujó de Expediente X.
¿Estais liaos o algo?
Si la progresión sigue así ya me imagino tirándole el sujetador estilo groupie dentro de unos años
¡Ah, vale! Es un wishful thinking por tu parte. 😛
(Cuando vino a Avilés las chicas decían que está muy bueno. Y además toca la batería, que siempre le da un puntito)
Sobre la evolución de Rick y su avance firme e inevitable hacia la locura…A ver, si cualquiera de nosotros pierde los nervios si no encuentra el boli, ¿como va a estar el hombre si le ha pasado casi todo lo que le puede pasar? Seguramente lo único que impide que se pegue un tiro sea su hijo, y teniendo en cuenta como acabó el último tomo, vete tú a saber como deriva la cosa.
En principio el único que no puede morir para mantener un cierto hilo de continuidad en la trama sea Rick, pero muchas veces pienso que es mas prescindible que el chaval.
Y termino opinando sobre Adlard. Me gusta que se reivindique este autor, yo siempre lo he defendido a la par que opino que si la serie goza de tan buena salud, probablemente sea debido al amplio nivel de confianza que hay entre su equipo creativo.
Yo sigo pensando que es una serie de sobresaliente,y no digo de matricula de honor precisamente por el daño que le hace Adlar al comic,un autor que si me apuras much mucho,puede ser correcto,nada comparado con el alarde de genialidad del primer volumen dibujado por MOORE.
Ya lo he dicho en otras ocasiones,es una pena que hayan elegido a un dibujante que no pasa del «correcto» para dibujar un comic tan complicado a nivel grafico,esto hace que no se distingan bien los personajes,que las expresiones faciales esten dejadas al azar,niños con gigantismos poque no dibuja proporcionado…En fin,una suerte que detras haya un guion tan potente y un argumento que nos siga enganchando.
Adlard está como sacado de otra época. Si este año que ha sido de los más flojos de la edición USA se ha llevado todo el reconocimiento posible en todos los aspectos posibles, menos en el dibujo, y teniendo en cuenta que Adlard tiene un año para lucirse en la serie, no digo nada por no spoilear a nadie, más la serie de tv… va a ser brutal y Adlard se llevará ese premio que muchos reclamaban.
«Es que su evolución ha sido brutal; y personalmente reconozco que siento debilidad por los dibujantes que manejan tan bien los juegos de luces y sombras (Sean Phillips, Tim Sale, etc).»
Vaya, que dos tipos para comparar, y está al nivel y todo… el Deodato cuando se pone serio también hace ese contraste(cuando dibuja en plan realista), y Miller es un buen ejemplo cuando le da por hacer eso, lo que pasa que el dibujo de ellos es menos clásico. Los originales de ese tipo de dibujantes suelen ser los más espectaculares.
Lo que está claro es que vais a alucinar con el devenir de la serie. Muy interesante y con un enfoque diferente a partir de ese tomo.
Menos acción, un Adlard menos oscuro, un Rick más locuelo, una sensación de que puede pasar cualquier cosa, unos cliffhangers criminales, un Kirkman impresionante a los guiones haciéndose de rogar…
«Excelente reseña David – como siempre – a mi este último volumen me ha gustado especialmente y me tiene intigradísimo la actitud de Rick, ¿realmente está sonado o hay algo más? Y que decir ‘del momento’ de este volumen tela tela, sin lugar a dudas una de las mejores series del panorama actual.»
Ese momento impacta más por lo que no saca explícitamente. En cambio, otras cosas como la decapitación complicándose de Tyresse o el trabajo de Michonne con Mr. Goodfeeling, impactaba más enseñando todo. Kirkman saber ver esas cosas… El mejor tomo hasta el momento de la edición española para vosotros cuál es? Yo voto por el 8 o el 9… y me da que el 15 va a dejarnos picuetos.
Una reseña excelente, David. Enhorabuena, me has tenido enganchado con el texto desde la primera frase.
Sin lugar a dudas es el cómics más apasionante de los últimos tiempos. Pero, mi pregunta: ¿Cómo lo hará Kirkman para finalizarla? ¿Y cuánta cuerda tendrá esta tensión narrativa?
Apocalipticos saludos a todos.
Javie, no podría estar más en desacuerdo con tu opinión. Pero ya se sabe: cuestión de gustos.
JackHawksmoor, me cuesta elegir, pero personalmente prefiero lo implícito frente a lo explícito. Algunos de los tebeos que comentas me parecieron excesivos. En todo caso, nivelazo de la serie.
Guzmán Díaz Alonso, muchas gracias por tu comentario! Por lo que ha comentado Kirkman en alguna que otra entrevista, parece que no tiene intención de ponerle un final a la serie; vaya, que la considera totalmente abierta. Veremos cuánto aguanta, porque aunque el nivel mostrado hasta ahora es tremendo, no es menos cierto que abusa un poco en cuanto a la repetición de estructuras argumentales.
Un saludo!
Kirkman ha dicho varias veces que aquí la película de zombis no termina nunca, lo que no quiere decir que llegado un punto se replantee eso. Personalmente, creo que podría acabar con la muerte de Rick, aunque el mundo siguiera infestado de muertos vivientes. Al fin y al cabo, esto es más la historia de Rick que cualquier otra cosa. Incluso podría convertirlo en zombi y tenerlo así unos cuantos números antes de acabar definitivamente con él.
Ocioso, no te pongas celoso. Hay Charlie para todas!
No me parece justo que se diga que Kirkman repite estructuras argumentales. Suelen pasar cosas diferentes con diferentes personajes. Es el apocalipsis Z y solo queda refugiarse donde puedan y sobrevivir. Si esperais que pase algo diferente, decirme.
Para mí no se repite tanto, es un grupo itinerante que se acomoda donde puede, y que huye cuando tiene que huir, que hace todo lo posible para sobrevivir, con una tensión que tan bien maneja Kirkman y tan bien plasma Adlard con ese tono de dibujo. Esa es no es la repetición, es la premisa y la constante de la historia.
Totalmente deacuerdo con JAVIE. Ojalà continuase dibujando Moore la serie porque el primer número fuè muy bueno gràficamente.Adlard no pasa de correcto
Kirkman no piensa cerrar la serie hasta que, según sus propias palabras, la serie no venda absolutamente nada, o su salud le impida continuar con ella, ni explicar las causas del holocausto zombie. Dijo que es la historia de Rick y acabaría con él, pero hace poco replanteo que quizás en el caso de morir Rick, la serie podría continuarla Abraham o su hijo, personajes con mucha fuerza, ya que cualquier cosa puede pasar y cualquier personaje puede morir. Concretamente, puso esos dos ejemplos, y practicamente solo tienen esa fuerza Michonne o Glenn, pero estos dos no son líderes naturales.
En otro orden de cosas… creeis que Lori murió con Judith en la masacre de la prisión, verdad? No se sacará de la manga Kirkman que el grupito de Woodbury metió dentro de la prisión al bebé o a Lori después de salvar al gobernador y alguna de las chicas de Rick sigue viva? Porque Lori vale que queda partida en dos por la bala, pero el bebé no pudo salvarlo el grupito aunque se quedara sin balas dentro de la prisión? Es que es un elemento que puede reintroducir Kirkman en la historia y nadie se esperaría ni de lejos…
David Fernández
Javie, no podría estar más en desacuerdo con tu opinión. Pero ya se sabe: cuestión de gustos.
Tengo curiosidad David,¿En que puntos no estas deacuerdo exactamente? ¿Crees que se puede comparar a Adlar con Moore?¿Que sientes cuando comparas el dibujo del primer volumen con el resto,y ya puestos,que sientes cuando los personajes se vuelven confusos por esa falta de claridad al dibujar?
En lo que si estoy deacuerdo contigo es, en que esto es cuestión de gustos,por poner un ejemplo que creo que se asemeja a esta situacion,cuando hablamos de hellboy hay mucha gente que considera que Mignola no es un dibujante de verdad,sin embargo ami me encanta su trabajo,pero claro,Mignola es bueno en su universo,en TWD estamos ante un comic puramente mainstream y que requiere de una calidad tecnica de la cual el dibujante carece,si quieres ejemplos te puedo citar algunas paginas que he encotnrado especialmente sangrantes para la vista del lector.
creeis que Lori murió con Judith en la masacre de la prisión? No se sacará de la manga Kirkman que el grupito de Woodbury metió dentro de la prisión al bebé o a Lori después de salvar al gobernador y alguna de las chicas de Rick sigue viva? Porque Lori vale que queda partida en dos por la bala, pero el bebé no pudo salvarlo el grupito aunque se quedara sin balas dentro de la prisión? Lo siento ,JackHawksmoor, pero despues de hacer multiples y complicadas recreaciones en 3D con los datos de los que dispongo, he llegado a un fatal resultado: Nadie sobrevivio en la prision. Como muy bien apuntas, Lori murio en el acto por el disparo directo con una recortada y debemos recordar que Judith tenia pocos dias de edad, y si ya fisicamente los bebes recien nacidos son muy vulnerables, añadiendole el disparo y la posterior invasion de los zombies que se metieron en la prision, lo mas seguro es que se diera un banquete con todos los muertos de la refriega (que eran bastantes para saciarse por unas horas), asi que en respuesta a tu pregunta he de decir no, no creo que haya un giro argumental tal grande porque no seria facil de explicar…
>>>¿Que sientes cuando comparas el dibujo del primer volumen con el resto,y ya puestos,que sientes cuando los personajes se vuelven confusos por esa falta de claridad al dibujar?>>>
Que Moore es menos realista que Adlard.
JackHawksmoor, no sé si es justa o injusta, pero es mi opinión, que creo que no tiene nada de despectiva hacia la colección. Quiero decir… llevo 5 años reseñando esta colección y mis impresiones han sido casi siempre MUY positivas. Simlemente apunto que, aunque de momento no se resiente la calidad de la serie, Kirkman repite estructuras argumentales. No relata sucesos idénticos, pero sí establece ciertas pautas que se repiten cíclicamente.
Javie, con todos los respetos para quien piense lo contrario, simplemente considero que Adlard es un historietista mucho más completo a todos los niveles que Moore (quien, ojo, no me desagrada): narrativamente más preciso, sobrio, comedido y acertado a la hora de elegir el tono gráfico de la serie (el cuasicaricaturesto de Moore no encajaba tan bien con la historia narrada), y con un manejo mucho más interesante de la iluminación. ¿Menos vistoso? Pues depende del sentido de la estética que tenga cada cual. A mí me gusta mucho, muchísimo más, y en ningún momento he sentido la confusión que comentas. Pero insisto en que todo ésto es muy subjetivo.
Y lo de que hay gente que considera que Mignola no es un dibujante de verdad… pues me dejas de piedra. Creo que eso no es cuestión de opiniones, sino negar lo innegable, como aquellos que dicen que Quitely o Pope «no saben dibujar» (no es la primera ni segunda vez que leo un comentario en esa línea, lo cual me parece un tanto aberrante).
David,lo primero no es necesarios que te excuses por dar tu opinión,la cual es igual de respeteable que la mia.
Dicho esto,y si te soy sincero, me cuesta muchisimo trabajo pensar solo en comparar a los dibujantes,la sensación que tuve al leer el primer numero con Moore fue simplemente la de saber que estaba leyendo lo mas grande que se habia echo ultimamente,que paso cuando compre el segundo numero,pues que desde las primeras paginas dije:
Que raro,vaya bajon que ha dado moore,luego mire la portada y me percate que habian cambiado al dibujante,es mas,recuerdo los foros de comic incendiados en esa epoca tachando a kirkcman de habernos vendido el primero numero con un gran dibujante y luego seguir la coleccion con uno de segunda(que poca memoria tenemos)
Te voy a decir cual es mi principal problema con el dibujante,que no es otro que el mismo que tengo cuando leo scalped,no soporto caras deformadas,fallos anatomicos,gigantismo de cabeza o enanismos de cuerpo….Es decir,lo que muchos llamais underground yo lo llamo dibujar mal.
Luego sigo con el ritmo narrativo que voy a cenar.
Entonces queda claro que por mucho que conversemos, jamás no nos pondremos de acuerdo en cuando a preferencias relativas a dibujantes de cómic (lo cual no es, ni mucho menos, algo negativo): creo que el de Guéra en Scalped es uno de los trabajos más impresionantes que se están haciendo actualmente. Me queda a duda de si te refieres a él, o alguno de los encargados de los fill-in, porque jamás me atrevería a decir que Guéra dibuja «caras deformadas», o «comete fallos anatómicos».
>>>Es decir,lo que muchos llamais underground yo lo llamo dibujar mal.>>>
¿Underground? ¿Pero eso no es lo de Crumb y Gilbert Shelton? ¿Qué tiene que ver con Adlard?
No no ,perdón David,lo de Scalped lo ha entendido mal o yo lo he explicado mal(mas bien creo que es lo segundo)
Con lo de las caras deformadas me referia a TWD,he nombrado el dibujo de scalped como ejemplo de grafismo mas «alternativo» por otra parte esta pertenece a VERTIGO lo cual hace que se entienda como una constante de lo mas normal.
Lo que no puedo entender es que a la gente le guste ver a sus personajes mal dibujados,cuando ya lo han visto de una forma espectacular.
Yo sigo diciendo que lo de ver editadas las portadas en un tomo recopilatorio es prácticamente seguro, dado el éxito que está teniendo la serie por estas tierras y que además ya lo tienen previsto también en los USA, o sea que paciencia.
Lo peor de seguir la serie en tomitos es la espera entre uno y otro; ahora que la edición española ha alcanzado por fin a la americana, habrá que conformarse con uno (o dos como mucho) al año. Para casos de colecciones concretas como esta sería mucho mejor editar primero en grapa y recopilar después, más adelante, en tomos…
Y por cierto, David, genial el artículo ^__^
No te sigo, Javie, en serio. Pero creo que es evidente que a mí no me parecen ni mucho menos mal dibujados, y que no creo que Moore sea espectacular. Pero eso, que cada cual con su gusto.
Muchas gracias, Bade Runner! 😉
¿No me sigues?
Quizas sea el momento de empezar a citar paginas y viñetas concretas para que me sigas.
Tengo que reconocer que cuando llegó Adlar pensé que el dibujo había pegado un bajonazo. El pavo que estaba antes tenía un grafismo mas claro mientras que el nuevo dibujaba todas las caras iguales.
Porque sí, ahí le doy la razón a Javie, en los primeros tomos me resultaba imposible distinguir a las dos hermanas y a la mamá que se volvió loca. Confundía a las tres. No hablemos de la prole del granjero, que tras la matanza no sabía quienes eran los que habían quedado vivos y quienes muertos.
Podríamos argumentar que es algo que favorece a la historia creando un estado de confusión; los supervivientes como seres sin personalidad propia, intercambiables; que si desde el punto de vista de los zombis los humanos son todos iguales…¡pamplinas!
A Adlar no se le da bien hacer caras distinguibles unas de otras. Se ve claramente que Kirkman se da cuenta y desde el principio hace que los personajes se dirijan unos a otros por su nombre permitiendo al lector saber quién está en la viñeta. Si no fuera así estaríamos perdidos.
Otro detalle es que a medida que se van introduciendo nuevos personajes, sus físicos siempre tienen algún rasgo distintivo.
¿Es por eso Adlar un mal dibujante? Bueno, es limitado cuando se trata de perfilar con suficiente finura los rostros de los personajes, pero en cambio es capaz de dotarles de suficiente expresividad.
Ese trazo suelto, incluso basto, le va como anillo al dedo a la serie y consigue crear el ambiente necesario. ¿Os imaginais a Coipel o George Perez haciendo TWD? Como que sería otra cosa ¿no?
Es probable que existan muchos dibujantes que lo harían mejor, pero estoy casi seguro de que no podrían solucionar la papeleta de forma muy distinta.
Ya os decía que cuando llegó Adlar me pareció que el dibujo bajaba muchos enteros. En una relectura de la serie muchos tomos después volví a encontrarme con Tony Moore y la sensación fué que no pegaba. Era demasiado convencional. Dibujaba «mejor», pero no transmitía lo mismo que Adlar.
Usease, que estoy de acuerdo con Javie en lo de las caras intercambiables, pero no puedo estarlo con su concepción de lo que es un buen dibujo. Un estilo espectacular o realista es perfecto cuando es eso lo que buscas, pero no es la opción mas apropiada en todas las ocasiones. Un dibujo no es mejor cuanto mas se pegue a la realidad, porque eso sería como decir que gente de la cuerda de Adi Granov son mejores dibujantes que Kirby o Ditko. ¡Y eso sí que no!
Un dibujo es una abstracción de la realidad. ¿Que sentido tiene mimetizarla? Recordemos al inmortal Goethe (música rimbombante): «Si dibujo un perro exactamente como es, tendré dos perros, pero no tendré una obra de arte»
Porque al final habíamos quedado en que el comic es arte ¿no? ¡Ah, bueno!
Primero te agradezco el que me entiendas,empezaba a sentirme como el loco que chilla en el manicomio y nadie le rpesta atención.
Segundo ( y esta ya va al pecho sin anestecia) te contradices tu solo en una cosa,te lei antes que decias algo asi como que este era el mejor comic mainstream de los ultimos tiempos,pero sin embargo dices que no verias a coipiel por ejemplo(autor mainstream por exelencia) detras de los guiones de TWD,como si los guiones de kirckman tuvieran una complejidad inusitada,es decir,no nos engañemos,este tio no es tarantino,es cierto que tampoco es pijamero,pero yo creo que la fuerza que le daba Moore a las viñetas suplian en parte esos bajones logicos que da la historia.
Javie, meto esta serie dentro del mainstream porque lo publica una editorial grandota, pero la verdad es que de mainstream tiene muy poco. Que está serializado y sale en grapa, pero no lo veo precisamente para todos los públicos por mucho zombi que asome por ahí. Entender la complejidad de los comportamientos y reacciones de los personajes no está al alcance de cualquier adolescente aficionado al terror.
Los guiones no son especialmente complejos, pero sí son tremendamente ingeniosos y van siempre dos pasos por delante del lector. A kirkman no le da miedo quemar etapas y situaciones mucho antes de lo que esperaría el lector mas impaciente y resabiado, o matar a personajes que en manos de otro guionista habrían sido estrujados durante otros cien números.
Estoy seguro de que Moore no era mas espectacular. Un dibujo mas claro, eso seguro, pero mucho menos efectivo que Adlar.
Pero a ver… Coipel, Tarantino, undeground, mainstream… es que mezclas churras con merinas, Javie. Comentas autores y tendencias que no tienen absolutamente nada que ver entre sí.
¿¿¿Y dices que Moore suplía bajones lógicos de la historia??? Primero, ¿qué bajones lógicos? Segundo, ¿de verdad crees que Moore es TAN buen dibujante? No sé, es que aún siendo de mi agrado, no lo tengo en tan alta estima…
En cuanto a lo de «como si los guiones de Kirkman tuvieran una complejidad inusitada»… el desarrollo argumental no es especailmente complejo desde un punto de vista estructural. Pero el de Kentucky es un manipulador emocional de primera: pocos, poquísimos autores logran transmitir sentimientos extremos como él. Y aunque en ocasiones peque de «tramposo», estamos hablando de una serie que ha rebasado las 60 entregas manteniendo un nivelazo. Lo único que creo se le puede echar en cara es que la solvencia demostrada en Image (Invencible también me parece una gran colección) no ha sido puesta de manifiesto cuando tuvo la oportunidad de trabajar en Marvel.
>>>dices que no verias a coipiel por ejemplo(autor mainstream por exelencia) detras de los guiones de TWD,como si los guiones de kirckman tuvieran una complejidad inusitada>>>
No veo qué tiene que ver. Una serie de terror necesita un dibujo sucio. From Hell no podría ser dibujada por Dave Gibbons o Brian Bolland, del mismo modo que a TWD le sienta perfectamente un Adlard mejor que un Moore, que es demasiado cartoon, demasiado caricaturesco…
Lo que sí que es cierto es que en sus dos primeros tomos Adlard no lo hacía ni la mitad de bien que como lo hace ahora.
Totalmente de acuerdo con Tachuela: no es el mismo Adlard el de Muchos kilómetros a las espaldas que el de Teme a los cazadores. La evolución es evidente, aunque sigo pensando que tiene unas bases mucho más sólidas que las de Moore. Y que desde un primer momento supo cuál era el tono más adecuado para la serie; un tono que ha ido desarrollando y puliendo.
Es un caso comparable al de Invencible: inicialmente, Corey Walker estableció el tono de la serie; posteriomente, Ryan Ottley le sucedió, y en un primer momento le costó pillar el punto de la colección. Pero creo que ahora nadie se acuerda de Waker…
«Que Moore es menos realista que Adlard.»
Jaque mate. XD Mira que Moore es bueno, pero Adlard para mi gusto no sólo es mejor, sino que va más acorde con el tono de la serie.
«Quiero decir… llevo 5 años reseñando esta colección y mis impresiones han sido casi siempre MUY positivas. Simlemente apunto que, aunque de momento no se resiente la calidad de la serie, Kirkman repite estructuras argumentales. No relata sucesos idénticos, pero sí establece ciertas pautas que se repiten cíclicamente.»
No, si sé a lo que te refieres, pero es para mí es como decir que un cómic mainstream repite estructura porque siempre tiene que ir el bueno a salvar el mundo o a que alguno no domine el mundo. Más o menos cíclicamente en colecciones largas que venden mucho se repiten estructuras argumentales. No te criticaba a ti, ya sé que TWD en concreto te debe gustar mucho por la manera en que escribes sobre ello. Aprovecho para decirt congratulations. Y recomendarte que sigas la edición USA también si tienes mucha ansia, por la red. Luego te compras el tomo y listo, es lo que hago yo. Es que no puedo resistirme a ver que pasa con Rick y su grupo de locuelos tanto tiempo…
Creo que el 26 de octubre es cuando estrenan en exclusiva en España el episodio piloto en el Festival de las Series que se hace en Madrid por esas fechas.
JackHawksmoor, no me convence demasiado la comparación con el esquema «bien vs. mal» de los tebeos pijameros. Concretamente me refiero a acontecimientos menos genéricos: «adición nuevo miembro a la comunidad – llegada a un lugar aparentemente apacible en el que asentarse – enfrentamiento a amenaza externa – suceso traumático – éxodo obligado» y vuelta a empezar. Quizás es banal, mi comentario, ni idea, pero veo una repetición de esquemas bastante evidente. Aunque insisto en que de momento no se resiente ni la calidad, ni el interés, ni la tensión dramática.
Por otra parte, estoy tentado a seguirla al ritmo USA, pero tengo un problema: odio el visionado de los tebeos en la pantalla del ordenador. No consigo centrarme, ni meterme en la lectura del mismo modo que cuando sostengo el tebeo entre mis manos. En ese sentido, soy 100% analógico, así que intento reducir las series que sigo de ese modo al mínimo, limitándome a los casos en que no me queda más remedio (por querer preparar artículos, ediciones inéditas en España, material difícil de encontrar, etc).
Kishiro, dudo mucho que se estrene antes que en EEUU. Pero ahora que comentas lo del festival de las series en Madrid, creo haber leído en algún sitio que iban a proyectar el avance de 10 min que se pudo ver en la Convención de San Diego. Es probable que se refieran a eso…
«Por otra parte, estoy tentado a seguirla al ritmo USA, pero tengo un problema: odio el visionado de los tebeos en la pantalla del ordenador. No consigo centrarme, ni meterme en la lectura del mismo modo que cuando sostengo el tebeo entre mis manos. En ese sentido, soy 100% analógico, así que intento reducir las series que sigo de ese modo al mínimo, limitándome a los casos en que no me queda más remedio (por querer preparar artículos, ediciones inéditas en España, material difícil de encontrar, etc).»
A mí me pasa lo mismo, no es lo mismo el formato digital que el físico, para nada.
Tu comentario sobre la repetición de esas estructuras argumentales… llevas razón y no es banal, pero una serie tan coconut me parece que merece que mientras tal cosa no sea un problema no se haga sangre de ello. Mucha gente, de todas formas, opina lo que tú. Muuuuuuuuuuuuuucha gente, así que algo de razón llevas y puede ser un problema en un futuro. Brindemos porque todavía no lo es, David. Larga vida a Kirkman!!!
Yo diría que el esquema de los muertos vivientes no tiene ningún problema, porque de hecho lo encontramos en miles de millones de historias y nadie se ha quejado hasta ahora. Las novelas de detectives suelen repetir esquemas, los álbumes de Astérix, o incluso en la música (ese trillado estrofa-estribillo-estrofa-estribillo-cambio de tonalidad-regreso-fin).
La gracia está en que el autor se dé cuenta y juegue con esas estructuras para sorprender al lector.
David, offtopiqueando un poco. ¿Por qué en el (muy buen) texto que has escrito para el tomo del Batman de Tony Daniel que sale em Noviembre habéis destripado algo que yo sé, pero puede que otros lectores no, como quién se esconde detrás de Máscara Negra? de piedra me he quedao al leerlo en la página de Planeta XD
Armin, en el artículo al que haces referencia, esa revelación va precedida del siguiente comentario:
«Pero, a la hora de analizar la primera de las historias recopiladas en el presente tomo, es necesario hacer referencia a otro personaje; una alusión que irá precedida de la recomendación de leer este tomo de forma previa a las líneas que siguen a continuación.»
No me gusta spoilear, ni siquiera advirtiéndolo de forma previa, pero en este caso tenía que hacer referencia a ese tema.
Mis disculpas pues, no recordaba la advertencia cuando leí el texto, mea culpa.
😉 No pasa nada. Pero eso: tampoco te creas que me mola entrar tan de lleno en spoilerazos de ese calibre, pese a las advertencias.
Un saludo!
?alguien sabe si se va a sacar alguna recopilación tapa dura de esta colección???