Este mes comenzamos con Norma, que nos trae menos novedades USA de lo habitual, pero no por ello poco importantes. Regresa Head Lopper, el Cortacabezas se embarca en una nueva aventura junto a nuestra bruja favorita en una serie que por aquí nos apasiona. De la misma manera que lo hace Clase Letal, uno de los mejores trabajos de Rick Remender, con el único e inimitable Wes Craig, que está llegando poco a poco a su conclusión. Por último regresamos al universo de Archie en compañía de Katy Keene, recuperada por su reciente (y cancelada) serie de televisión. Que no nos importe eso, aquí todo está dirigido por Mariko Tamaki y eso ya son palabras mayores.
–Head Lopper 4, de Andrew MacLean, 22 €, Image Comics
–Clase Letal 10, de Rick Remender y Wes Craig, 18,50 €, Image Comics
–Archie y Katy Keene, de Mariko Tamaki, Kevin Panetta , Laura Braga y Matt Herms, 19,50 €, Archie Comics
Robert Kirkman y Las Tortugas Ninja siguen siendo las grandes estrellas de ECC en esta sección. Además de un nuevo tomo del imprescindible Invencible, comienza DIE!DIE!DIE!, una hilarante serie junto a Scott M. Gimple y Chris Burnham, cuyo primer tomo ya había publicado Planeta, sobre tres hermanos asesinos y… bueno muchas otras cosas. A ritmo vertiginoso siguen con la publicación de Oblivion Song, este mes toca el de formato integral. De los cuatro hermanos ninja hay doble sesión, un capítulo más de la serie nueva y el penúltimo de la original, para todos los gustos. Aunque la sorpresa del mes se la lleva Jeff Lemire, del que podremos disfrutar de otras de sus obras como autor completo en el ámbito independiente.
– DIE!DIE!DIE! de de Robert Kirkman, Scott M. Gimple y Chris Burnham, 22,50€, Image Comics
– Invencible 7 de Robert Kirkman y Ryan Ottley, 34€, Image Comics
– Oblivion Son 2 de 3 de Robert Kirkman y Lorenzo de Felici, 31€, Image Comics
– El soldador submarino de Jeff Lemire, 25€, Top Shelf
– Las Tortugas Ninja 8 de Kevin Eastman y Varios artistas, 17,50€, IDW
– Tortugas ninja: La serie original 5 de Kevin Eastman y Peter Laird, 21,5€, IDW
Por un pequeño retraso, Astiberri ha pasado a este mes Revientacráneos y el chico esqueleto, del universo Black Hammer, pero no dejan de lado la habitual novedad indie USA del mes, concretamente llega el último tomo de Invisible Kingdom, la space-opera ganadora de un Eisner, amadrinada por Karen Berger y con unos autores de lujo. ¿Hace falta decir más?
– Revientacráneos y el chico esqueleto, de Jeff Lemire y Tonči Zonjić, 19€, Dark Horse
– Invisible Kingdom 3. En otros mundos, de G. Willow Wilson y Christian Ward, 19€, Dark Horse
Moztros ya entra en su tercer mes en España y continúan con sus grandes licencias. En lo que se refiere a Valiant volvemos con nuestro mercenario favorito para ver cómo Tim Seeley termina su etapa en Bloodshot, esta vez no solo con el noventero Brett Booth sino que habrá artistas como Mark Laming o los españoles Pedro Andreo y Ramón F. Bach. Este mes no hay tomo nuevo de la serie regular de los Power Rangers, pero sí una limitada llamada Alma de Dragón, dedicada al Ranger Verde y también con su guionista, Kyle Higgins, a los mandos.
– Power Rangers: Alma de Dragón, de Kyle Higgins y Giuseppe Cafaro, 15€, BOOM! Studios
– Bloodshot Volumen 2, de Tim Seeley y Varios artistas, 15€, Valiant
Dos integrales la mar de interesantes llegan este mes, tres si contamos que Mage se ha retrasado. El primero es precisamente un retraso de febrero, los famosos Proyectos Manhattan de Hickman y Pitarra, aunque no es de extrañar que el que más ilusión hace es el de Madman por los Allred, toda una delicia para los sentidos. La parte de Aftershock sigue con la línea de novelas gráficas de la editorial, esta vez es el turno de Horde, secretos familiares por Marguerite Bennett y Leila Leiz. Pero sin duda hay dos estrenos muy importantes en estas novedades y ambos son de BOOM! Studios. BRZRKR ha sido todo un hito en ventas y aquí nos llega en el poco habitual formato de grapa mensual, por Keanu Reeves (sí, el actor), Matt Kindt y Ron Garney. Por otro lado Siete Secretos es la esperada obra de creación propia de Tom Taylor con dibujo de Daniele Di Nicuolo. Un gran mes.
–Los proyectos Manhattan (integral) nº 01, de Jonathan Hickman y Nick Pitarra, 45 €, Image Comics
–Horde, de Marguerite Bennett y Leila Leiz, 12,95 €, Aftershock
–Madman Integral 1, de Michael Allred y Laura Allred, 60 €, Dark Horse
–BRZRKR, de Keanu Reeves, Matt Kindt y Ron Garney, 4.50 €, BOOM! Studios
–Siete Secretos, de Tom Taylor y Daniele Di Nicuolo, 16,95 €, BOOM! Studios
Unos pocos meses ha tardado Panini en traernos el segundo tomo de esa enormidad llamada Reckless, Brubaker y Phillips son compra segura. El Millarworld llega a su cita mensual con una nueva entrega de la famosa Jupiter´s Legacy, una esperada secuela que veremos si está a la altura. Por otro lado nos sorprende mucho que sea esta editorial la que se ha hecho con los derechos de la nueva obra de Rick Remender, El Cabronazo, aunque «Flipando en colores» es como nos hemos quedado al ver la traducción (el original es «The Scumbag: Cocainefinger«). En el terreno de las adaptaciones llega una aventura de Overwatch centrada en Tracer… ¡con Mariko Tamaki!
–Reckless 2: Amigo del Diablo, de Ed Brubaker y Sean Phillips, 20 €, Image Comics
–El Cabronazo 1: Flipando en colores, de Rick Remender y Varios artistas, 22 €, Image Comics
–Jupiter’s Legacy: Requiem 1, de Mark Millar y Tommy Lee Edwards, 20 €, Image Comics
–Overwatch. Tracer – London Calling, de Mariko Tamaki y Babs Tarr, 20 €, Image Comics
Volvemos a tener a Cartem por aquí, que continúan la publicación de los cómics de Hard Case Crime, especializada en género negro. De la misma manera, siguen con una historia de Max Allan Collins (Camino a la perdición) con dibujos de Terry Beatty (Johnny Dynamite, Mike Danger). En este caso se trata de una serie que será recopilada en cuatro tomos.
– Ms. Tree: Una madre de armas tomar 1, de Max Allan Collins y Terry Beatty, 25€ Hard Case Crime
Dolmen entra de nuevo en el Magazindie y esta vez lo hace para traernos un cómic del gran Barry Windsor Smith. The Freeboters fue una serie publicada a mediados de los noventa que Fantagraphics recopiló en 2005, con el añadido de un número más. Una historia de fantasía heroica que destaca por su dibujo y sus personajes.
– The Freeboters (Los Filibusteros), de Barry Windsor Smith, 29,95€, Fantagraphics
Aleta nos tiene preparadas dos novedades USA para abril, dos que ya conocemos bien de su catálogo. Por un lado Revival, tras haber acabado de publicar la serie en formato rústica vamos con la edición más lujosa de tapa dura. Un precioso trabajo de Mike Norton y Tim Seley que se complementa con Battlefields, el séptimo tomo de la obra de Garth Ennis junto a Carlos Ezquerra en esta ocasión para volver sobre los pasos del Sargento Stiles.
–Revival Compendium 2, de Tim Seley y Mike Norton, 34,95€ Image Comics
–Battlefields Vol. 7, de Garth Ennis y Carlos Ezquerra, 12,95€ Dynamite Entertainment
Penguin nos lleva al terreno más alternativo para tropezar, en el buen sentido, con Matt Madden, un autor que tiene mucho que decir, a pesar de llevar más de dos décadas publicando. La obra la definen como «una narrativa de acertijos posmoderna que es a la vez lúdica y penetrante». Sí, sabemos que es publicidad, pero llama mucho la atención.
– Ex-Libris de Matt Madden, 24€, Uncivilized Books
Este frío mes de abril no es de los más moviditos en cuanto a estrenos USA, pero como siempre, tenemos cosillas interesantes. El guionista Rich Douek, del que os recomendamos encarecidamente La Carretera de los Huesos, estrena serie de terror juvenil en Afteshock junto al madrileño Carlos Olivares. También tenemos a Christian Ward, artista de Rayo Negro, que se pasa al lado del guion en la historia de vampiros Blood-Stained Teeth. Y hablando de vampiros, la escritora Sarah Gailey se pasa a lo nuevo de Buffy tras su debut comiquero en Eat the Rich. Además, más Russell en Ahoy, cositas de Gerry Duggan y Tim Seely y, sobre todo, más Philibaker con más Reckless.
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No queremos resultar repetitivos, pero qué le vamos a hacer, si hay algo nuevo de Reckless tenemos que destacarlo. Hace ya unos años que Ed Brubaker y Sean Phillips decidieron dejar el modelo de publicación seriado y pasarse a las historias completas en formato novela gráfica, pero nada ha cambiado: siguen siendo la hostia. El dúo noir por excelencia sigue cultivando historias magníficas logrando algo tan singular como hacer siempre lo mismo y hacerlo siempre bien. Ejemplo de ello es su más reciente proyecto, las historias de su personaje Ethan Reckless, un solucionador de problemas poco ortodoxo con el que el equipo creativo de Criminal nos adentra en una nueva aventura en cada tomo. Su estreno fue un rotundo éxito, tanto en su país de origen como en nuestras tierras, donde desembarcó recientemente de la mano de Panini, pero fue solo el comienzo. En tan solo dos años, Phillibaker ha alcanzado la sorprendente cifra de cuatro entregas nuevas dentro de esta saga noir, una cifra que a tenor de lo que se sabe, parece que seguirá aumentando.
The Ghost in You es el título de esa cuarta entrega, un nuevo volumen de 144 páginas en el que esta vez, el foco cae en un personaje distinto al habitual. Con Ethan fuera de la ciudad, es su socia Anna la que debe hacerse cargo de un nuevo cliente que se ha presentado solicitando sus servicios. Una exitosa actriz le encarga probar que la mansión que está remodelando no está embrujada, una excéntrica misión que llevará a Anna a toparse de lleno con uno de los asesinatos sin resolver más misteriosos de la historia de Hollywood. Una sinopsis con sabor a The Fade Out, uno de los mejores trabajos de la pareja, que a buen seguro continuará con su racha de melocotonazos.
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Rathraq
La serie de Rumble se publicitaba como “Un espantapájaros dios guerrero entra en un bar…” y esa frase no podía ser más acertada. Denota misterio, confusión, acción y un punto de comedia, todo lo que define a esta magnífica colección nacida en Image Comics, en 2014, y salida de la mente de John Arcudi y James Harren, que cautivó a todos aquellos que se acercaron a ella ya desde su número uno. Y de él hablamos hoy, de
Rumble nos sitúa en la actualidad, en una ciudad normal pero con un submundo plagado de criaturas extrañas, monstruos y demonios. Ahí es donde entra Rathraq, el supuesto héroe de la historia, una antigua deidad cuyo cuerpo han robado y resucita en un espantapájaros. La mayor parte de la trama irá sobre esto, la búsqueda de su cuerpo, mientras derrota a sus enemigos con grandes espadas y hace nuevos aliados. En un principio se puede decir que la serie se mueve hacia el terror y la acción, empieza con esta figura del espantapájaros, tan recurrente en el género del terror, que entra en el bar y destroza el brazo de un amable cliente que estaba charlando con el camarero, formando una historia con un tono muy oscuro en el que la figura principal no es solo la de Rathraq, sino la de Bobby, el atemorizado camarero. Pero el terror desaparece en el momento en que el espantapájaros se presenta a Bobby y se encuentra con Del, el mejor amigo de este. Así, en Rumble encontramos mucho humor, una pizca de drama y buenas dosis de combates épicos ya que, aunque se sitúa casi todo en el presente, no tardarán en ir contando retazos del pasado del gran guerrero. Es precisamente en la mitad del primer tomo el que da este vuelco, dejando de lado gran parte del terror inicial pero dando a conocer una mitología inmensa, digna de las grandes mentes creadoras que tienen sus autores. Pero esta parte no solo cambia el tono que el lector podía percibir en sus primeros números sino que centra a los personajes, unos personajes que en un principio parecían totalmente estereotipados brillan ahora con luz propia, consiguiendo que haya varios protagonistas, varias vidas interesantes capaces de rivalizar con la de Rathraq, no por ser especiales sino precisamente por ser muy mundanas. Y es que si hubiera que definir esta historia “amistad” sería una palabra mucho más certera que el resto.
Hay que partir de la base de que ambos autores ya habían trabajado juntos en universo Hellboy, pero los dos habían participado por separado en diferentes series de Conan y hay un poco de ese personaje en Rathraq, una parte en su historia pasada, aunque recuerda más a guerreros ligados a mitologías de religiones politeístas, pero hay mucho del gran guerrero bárbaro en el dibujo, ahí sí que recuerda a Conan, pero ya no solo en su pasado sino en su estilo de lucha en el presente.
No obstante James Harren solo desarrolla una parte de la serie, aproximadamente la mitad de la colección, ya que en 2017, y tras un parón de más de un año, John Arcudi decide seguir pero con otro autor, el español David Rubín. Harren y Rubín tienen algo en común, los dos son grandes autores que trabajan mucho las páginas de sus obras, además de que tienen un estilo propio, sus dibujos son únicos y reconocibles, pero este estilo es muy diferente entre ambos por lo que la tarea de Rubín es doblemente complicada, igualar la calidad de Harren y hacer que, con su cambio de estilo, la serie siga manteniendo su identidad. Ni que decir tiene que lo consigue. En Rumble se le ve maduro, se nota que ha evolucionado con los años y tiene calidad como para sustituir a uno de los grandes.
El desarrollo de los personajes y la potencia de los diálogos nos llevan mucho más allá de la búsqueda del cuerpo de Rathraq, motor inicial de la historia. Pero este, su pasado y su relación con quienes le rodean le hacen un maravilloso personaje con una evolución impresionante a lo largo de toda la serie.
En España la publicación llegó de manos de Astiberri, en formato tomo de tapa dura con el habitual buen hacer de la editorial. Los seis que componen la colección. Todos ellos absolutamente imprescindibles para pasar un rato maravilloso acompañados de Rathraq, sus amigos y los cuerpos desmembrados de sus enemigos
300
La historia se repite, el relato se traslada de generación en generación, pero lo hace con los matices propios del momento. Fue Heródoto, padre de la historiografía, el primero en recoger la hazaña que tuvo lugar en las Termópilas. Numerosas han sido las veces en que la gesta ha sido contada. Una de ellas, la película El león de Esparta (Rudolph Maté, 1962), marcó para siempre a Frank Miller cuando tan sólo era un niño. Algo que resultó clave para que décadas después 300 viera la luz. También en la primera mitad de la década de los sesenta, el guionista Héctor Germán Oesterheld y el dibujante Alberto Breccia se acercaron al célebre combate entre espartanos y persas con Mort Cinder. La historia, titulada La batalla de las Termópilas, se acerca más al realismo que el cómic de Miller, haciendo que ambas lecturas sean complementarias sin resultar redundantes.
Publicado por Dark Horse en 1998, 300 probablemente sea la última gran obra de Frank Miller. Fogueado con Daredevil, obras como El retorno del caballero oscuro, Batman: Año Uno o Sin City le situaron en el olimpo de los grandes autores. Precisamente, tanto en TDKR como en Elektra Asesina le acompañó Lynn Varley (ex mujer de Miller) como colorista y decidieron repetir colaboración en 300. Un acierto absoluto a tenor del resultado. 300 es una joya artística que cuenta con la particularidad de su formato apaisado en su edición en tapa dura. Miller dio rienda suelta a su peculiar trazo. Todo ello apuntalado con el color de Varley ofrece al lector una obra pictórica inigualable. El poderío plástico y estético de 300 es, sin duda, uno de sus puntos fuertes, pero para poderlo catalogar de obra maestra no es suficiente. Las virtudes del cómic se cuentan a manos llenas.
La arrolladora fuerza narrativa de Miller encaja como anillo al dedo en este cómic histórico que en realidad no lo es tanto. Más allá del evento en sí, al autor no le interesa ser realista, Miller retuerce la leyenda de los espartanos, polarizando ambos bandos porque a la historia le conviene. Rápidamente nos pone en situación y va directo al grano, sin guardarse absolutamente nada. La toma de decisiones difíciles, sin importar las consecuencias, es el leitmotiv de la trama. Pocas recreaciones, sean del medio que sean, poseen la carga épica que este cómic destila.
No necesita de muchas páginas para mostrarnos la construcción del héroe. Mezclando mito y realidad, el autor estadounidense relaciona la estrictísima formación de Leónidas con la crucial batalla que tendrá lugar cuarenta años después. La capacidad estratégica para doblegar al lobo en su infancia, atrayéndole al desfiladero, acabará coronándole y servirá como plan maestro para poner en jaque a las huestes de Jerjes. De nada servirá la superioridad numérica de su enemigo en las Termópilas. El estrecho paso igualará las fuerzas y el ADN espartano primará por encima del resto. Cabe destacar que, en España, es Norma Editorial quien tiene los derechos de 300.
A pesar del cuestionable rigor histórico y de las muchas licencias que se toma Miller en beneficio de la épica, también se replican citas textuales del trabajo de Heródoto. Algo que, por otra parte, ya hizo Oesterheld en el mencionado Mort Cinder. Tanto el amenazante “Nuestras flechas taparán el sol” como su réplica “Entonces lucharemos en la sombra” fueron ocurrencias del historiador griego. Sin embargo, la imagen drag de Jerjes es marca de la casa Miller lo que provocó no pocas reacciones negativas tachando a su autor de xenófobo. La sexualización del personaje es más que evidente y el subtexto en algunos diálogos no deja lugar a la duda.
La crudeza y la brutalidad son elementos inherentes en la obra de Miller. Los espartanos son los abanderados de la libertad, aquellos destinados a encender la llama que guíe a posteriores generaciones, mientras que los persas arrasan todo cuanto pisan bajo el manto de un Rey arrogante que se cree un Dios. Delirios de grandeza que ponen a la religión, de manera simbólica, a la altura del betún. Los éforos, sacerdotes de viejas costumbres, son retratados como seres deformes y corruptos al igual que el jorobado Efialtes, particular Judas de la función. Por lo tanto, tenemos un escenario compartido entre razón y religión. De manera inevitable, están condenados a enfrentarse.
Los espartanos son como son porque tienen que serlo, una ordenada falange sin grietas de debilidad. Miller pone en relieve los valores de los espartanos, pero no los idealiza en exceso ya que los comprende como un pueblo paradójico. Tampoco oculta Miller que en Esparta había esclavos ni las rencillas existentes entre las diferentes polis griegas. Sin embargo, sí pone de manifiesto que el sacrificio realizado por Leónidas y sus hombres sirvió como elemento cohesionador para que dichas Ciudades-Estado se unieran un año después para poner contra las cuerdas, una vez más, al temido ejército persa.
Ganadora de tres premios Eisner y dos premios Harvey, 300 gozó de gran popularidad entre los seguidores del medio convirtiéndose en obra de culto a la velocidad de la luz. Sin embargo, realmente trascendió en el año 2007 cuando se llevó a la gran pantalla. Dirigida por Zack Snyder y protagonizada por Gerard Butler, la cinta consiguió ser una de las más taquilleras de aquel curso, además de contar con el respaldo de buena parte de la crítica. Muy posiblemente nos encontremos ante una de las mejores adaptaciones cómic-cine de la historia. El mimo y el respeto es más que evidente, aunque en esta versión cinematográfica se extiende la trama de Esparta, ganando Gorgo mucho más protagonismo. Además, tenemos a un Leónidas más humano mientras que en las tropas persas se introducen elementos de fantasía que no vimos en el cómic. Años después seguirían ampliando este universo con 300: El origen de un imperio, en salas de cine, y Xerxes, en el mundo de las viñetas. Pero eso ya es otra historia. Marchamos.
Stray Dogs, de Tony Fleecs, Trish Forstner y Brad Simpson
¿Y si os decimos que Stray Dogs es una miniserie cuyo equipo creativo era conocido hasta ahora principalmente por su trabajo en My Little Pony? ¿Y si os decimos que el cómic está protagonizado por lindos perritos? ¿Y si os decimos que Image Comics describe esta obra como una mezcla entre La dama y el vagabundo y… El silencio de los corderos? ¿Y si os decimos que estamos ante uno de los cómics más escalofriantes de los últimos años?
Con guion de Tony Fleecs, dibujo de Trish Forstner y color de Brad Simpson, Stray Dogs nos presenta a una perrita llamada Sophie. Un día, Sophie se despierta en una casa extraña junto a un nuevo dueño y muchos otros perros desconocidos. Sophie no recuerda qué ha pasado ni dónde está su anterior dueña, pero hay algo que le huele a chamusquina y está dispuesta a averiguar qué es.
Stray Dogs plantea un mundo en el que los perros se pueden comunicar de forma perfectamente coherente como si de humanos se tratase. Si bien esta propuesta no nos resultará nueva, la gracia en este caso es que se le aplican algunas reglas adicionales que son propias del funcionamiento del cerebro canino. La más importante de ellas tiene que ver con su memoria: desde las primeras páginas de la historia se establece que a los perros les cuesta mucho mantener recuerdos concretos más allá de olores, órdenes o dónde duermen, por ejemplo. En cierto sentido, es como si el equipo creativo de esta obra, conocido principalmente por sus trabajos en My Little Pony, hubiese querido pervertir a propósito el cuquismo forzado de dichos cómics en una especie de desahogo —por no decir exorcismo— creativo.
De este modo, se desarrolla una historia de misterio en torno a los recuerdos que los perros protagonistas han ido perdiendo y cuyo tono tiende hacia el de un desgarrador relato de terror psicológico. La incapacidad de los perros para mantener sus recuerdos durante más de unas pocas horas crea una espiral de confusión e impotencia a la vez que ofrece una reflexión sorprendentemente impactante sobre cómo los recuerdos definen nuestra vida.
Publicada a lo largo de 2021 y compuesta por cinco números, Stray Dogs es una de las obras más originales de los últimos años. Su terrorífica propuesta, combinada con una habilidosa ejecución, es capaz de generar escalofríos y tensión en el lector como pocos cómics del género… además de sacarnos alguna que otra lagrimilla por el camino.
Acompañada de un dibujo que resulta especialmente inquietante porque imita a propósito el estilo de las películas de animación clásicas de Disney para subvertir las expectativas de los lectores, esta miniserie es una de las obras más potentes que el mercado independiente norteamericano nos dio el año pasado; un jugosísimo inédito por el que deseamos que alguna editorial española apueste en un futuro cercano.
El equipo recomienda…
– Edu Sesé: El soldador submarino de Jeff Lemire, ECC Cómics.
– Igor Álvarez Muñiz: Head Lopper 4, de Andrew MacLean, Norma Editorial.
– Raúl López: Madman Integral nº 01, de Michael Allred y varios artistas, Planeta Cómic.
– Juan Luís Daza: Battlefields Vol. 7, de Garth Ennis y Carlos Ezquerra, Aleta.
– José María Vicente: Ms Tree: Una madre de armas tomar, de Max Allan Collins y Terry Beatty, Cartem Cómics.
– Mariano Abrach: El soldador submarino de Jeff Lemire, ECC Cómics.
– Sergio Fernández: Revival Compedium 2, de Tim Seeley y Mike Norton, Aleta.
– Alfonso del Pino: Madman Integral nº 01, de Michael Allred y varios artistas, Planeta Cómic.
¿Que tal The Scumbag (aka El Cabronazo)?
A ver si ECC reedita Murder Falcon de Warren Johnson…
La edición de Planeta está descatalogada?
Aún se puede encontrar en algunas tiendas, pero sí, está descatalogada. Ahora mismo los derechos de Skybound son de ECC y Murder Falcon aún no la reeditó. Pero acabará saliendo. Sin ir más lejos, sacan ahora el Die! Die! Die! de Kirkman y Burham, del que Planeta publicó el primer tomo. Bueno, o Extremity del mismo DWJ.
Ok, muchas gracias! Por un momento se me olvidaba lo del cambio de licenciataria
«El Cabronazo: Flipando en colores»
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Pffffffffff…
Pos ta bien la traducción.