Que no se diga que en ECC no saben preparar un buen verano, que cómics hay y muy interesantes. Empecemos por lo gordo, que es el estreno de Las Tortugas Ninja: El último Ronin – Los años perdidos una precuela de esa historia post-apocalíptica protagonizada por la última tortuga superviviente, que llega en formato grapa. Hablando de grapas, sigue adelante el Amor Eterno de Charretier y King. También tenemos el cuarto tomo de la antología de terror John Carpenter: Historias para una noche de Halloween, pero toca hablar de finales. Parece que fue ayer cuando ECC comenzaba su propia edición de The Walking Dead y aquí tenemos su último tomo. Lo mismo ocurre con Stillwater, la obra de Chip Zdarsky y Ramón K. Pérez acaba aquí.
– Amor Eterno 5 de Tom King y Elsa Charretier, 2,50€, Image Comics
– The Walking Dead 16 de Robert Kirkman y Charlie Adlard, 44€, Image Comics
– John Carpenter: Historias para una noche de Halloween vol. 4 de Varios Artistas, 21€, Storm King
– Stillwater 3 de Chip Zdarsky y Ramón K. Pérez, 24€, Image Comics
– Las Tortugas Ninja: El último Ronin – Los años perdidos 1 de Kevin Eastman y varios artistas, 3,50€, IDW
Jeff Lemire y Tyler Crook unen fuerzas para un nuevo spin-off de Black Hammer, una miniserie que vio la luz en 2021 y en la que una autora recibe la visita de uno de los personajes que había creado. Además la edición de Astiberri incluye en especial del Free Comic Book Day del 2019, con David Rubín al dibujo.
– Los increíbles antiadolescentes, de Jeff Lemire y Tyler Crook, 19€, Dark Horse
Es el turno de Moztros que siguen con su tomo semanal, para traernos finales, continuaciones y un grandísimo estreno. Mighty Morphin Power Rangers avanza con su sexto tomo con el cruce Un mal necesario, mientras que dos de las series más recientes, las magníficas Coda y Home Sick Pilots, llegan a su final. Pero sin duda el pelotazo del mes es Vanish, la nueva serie de Donny Cates y Ryan Stegman que ha resultado todo un éxito en Estados Unidos.
– Mighty Morphin Power Ramgers 6, de Ryan Parrot, Eleonora Carlini y varios artistas, 26€ BOOM! Studios
– Coda 3, de Simon Spurrier y Matías Vergara, 18,90€ BOOM! Studios
– Home Sick Pilots 3, de Caspar Wijngaard y Dan Watters, 18,90€ Image Comics
– Vanish 1, de Donny Cates y Ryan Stegman, 20€, Image Comics
Planeta Cómic Tiene un buen plan para entretenernos en verano con unas obras que pueden presumir de variedad. Spawn sigue su andadura en la serie principal más allá del número 300, mientras que Scott Snyder, Charles Soule y Giuseppe Camuncoli continúan su extraña distopía, Undiscovered Country. Pero si hablamos de distopías este mes se lleva la palma Post York, un interesante ejercicio reflexivo de James Romberger. También hay finales, la adaptación de Choque de Reyes acaba en su cuarto tomo, y lo mismo ocurre con Once & Future, la colección de Kieron Gillen y Dan Mora sobre la llegada del Rey Arturo termina con su quinto recopilatorio.
–Spawn: La cruzada, de Todd McFarlane y Varios artistas, 15,95 €, Image Comics
–Post-York, de James Romberger, 20 €, Dark Horse
–Juego de Tronos: Choque de Reyes nº 04, de Landry Q. Walker y Mel Rubi, 20 €, Dynamite
–Undiscovered Country nº 04, de Scott Snyder, Charles Soule y Giuseppe Camuncoli, 19,95 €, Image Comics
–Once and Future 5, de Kieron Gillen y Dan Mora, 17,95 €, BOOM! Studios
Nos llegó algo tarde la información el mes pasado, pero no podemos dejar de lado en el Magazindie que Aleta sacó ya a la venta el octavo y último tomo de la serie Battlefields, con el final de su historia sobre Anna Kharkova. Ennis no decepciona.
–Battlefields Vol. 08, de Garth Ennis y Russ Braun, 12,95€ Dynamite
Cerramos este mes con Norma Editorial que viene con algunas de sus mejores series bajo el brazo. Empezamos con el esperadísimo nuevo tomo de Lazarus, una fantástica serie que avanza más despacio de lo que nos gustaría. También sigue adelante una de las colecciones del momento, El Departamento de la Verdad, para contarnos más sobre El Ministerio de la Mentira. Tenemos un nuevo spin-off de Hellboy, La espada de Hiperbórea, los seguidores de AIDP sabrán de qué va. Y acabamos con todo un estreno, Do a Powerbomb, la última obra de Daniel Warren Johnson que llega en un formato de lujo.
–Do a Powerbomb, de Daniel Warren Johnson, 39,50 €, Image Comics
–Lazarus 7: Fractura parte 2, de Greg Rucka y Michael Lark, 26 €, Image Comics
–La espada de Hiperbórea, de Mike Mignola y Varios Artistas, 20 €, Dark Horse
–El Departamento de la Verdad 4, de James Tynion IV y Martin Simmonds, 21 €, Image Comics
Ya se sabe que lo mejor para el verano son el gazpacho y una buena tanda de estrenos comiqueros, y aunque en EEUU lo primero no lo manejan, de lo segundo tienen para rato. Este mes tenemos un buen puñado de cositas interesantes, empezando por un nuevo trabajo de Garth Ennis y Jacen Burrows, creadores de Crossed. Varias obras que ya han visto la luz en digital aterrizan en el papel, como Barnstormers de Snyder y Lotay, Flishflies de Lemire y nuevas historias del I Hate Fairyland de Young. W. Maxwell Prince sigue abonado a las antologías de relatos (y que siga así), y las Tortugas Ninja se cruzan con los niños de Stranger Things porque en esto de los crossovers el límite es el cielo. Además, una nueva etapa de Conan en Titan Comics, más BRZRKR y ojo al gran Pepe Larraz uniendo los mundos de Mark Millar. ¡Que alguien me traiga agua!
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Hay algo que no se le puede negar a Mark Millar, y es que es un publicista de puta madre. El célebre guionista de KickAss hace muchos años que lanza una tras otra series con premisas interesantísimas… que terminan quedándose en agua de borrajas, con finales chuscos y apresurados, como si tuviera funcionando la churrera de IPs a destajo para alimentar a la maquinaria audiovisual que tantos ingresos le han dado, sobre todo desde la adquisición de Netflix de Millarworld. Pero al final, es innegable que acabamos picando con cada nueva cosa. En parte, porque siempre esperamos ver de regreso a su mejor versión, y en parte porque siempre se rodea de los mejores artistas del mundo.
Mucho de ambas cosas nos pasa con el estreno de Big Game, su nuevo lanzamiento. Porque sí, la premisa de un evento en el que todas las series de Millar se cruzan despierta nuestra curiosidad. KickAss, Kingsman, The Magic Order… ¿Cómo narices se mezclarán todos? No lo sabemos, pero lo que sí sabemos es que quien se encargará de llevar el peso del arte será nuestro queridísimo Pepe Larraz, quien probablemente sea uno de los mejores artistas del mundo actualmente y ha conquistado Marvel con su inimitable trabajo. Y por Pepe, nosotros nos apuntamos a un bombardeo.
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Siempre hablamos del buen momento que vive el terror en el cómic USA en los últimos años, y uno de los mejores ejemplos es Ice Cream Man. La peculiar serie de W. Maxwell Prince y Martín Morazzo sorprendió a propios y extraños con una propuesta surrealista y retorcida, explotando el formato de las antologías de relatos cortos que tan buen resultado han tenido históricamente en las publicaciones del género. Y es que si hablamos en concreto de Maxwell Prince, podemos hablar de un guionista que ha encontrado su identidad y su zona de confort en ese tipo de escritura, con historias que van mucho más allá del mero terror superficial y se adentran en los rincones más íntimos de los miedos y otras emociones. Y no parece que tenga intención de cambiar su estilo, a la vista de este nuevo estreno.
Swan Songs es el título de la nueva serie del autor, otro proyecto construido como una colección de historias cortas en las que, como ya hiciera en la interesante Haha, se acompaña de un artista nuevo en cada número. Aquí, sin embargo, Maxwell se pone más filosófico y lo que nos trae es un grupo de relatos relacionados todos ellos por un hilo común: los finales. El fin del mundo, el fin de un matrimonio, el final de una frase… Una premisa muy atractiva y poderosa, sobre todo teniendo en cuenta a los primeros artistas confirmados. Martin Simmonds (El Departamento de la Verdad), Caspar Wijngaard (Home Sick Pilots), Filipe Andrade (The Many Deaths of Layla Starr)… Canela en rama para poner la guinda a uno de los guionistas más interesantes de la escena.
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Thea y Rollo
Es 2017, una serie de doce números llega a las librerías de la mano de Image Comics, concretamente dentro del sello Skybound comandado por Robert Kirkman, que además de ser buen escritor tiene ojo para publicar grandes historias, se llama Extremity y tuvo bastante éxito para ser una obra nueva de un autor prácticamente desconocido. Muchos nos preguntamos ¿quién es Daniel Warren Johnson? Nacido en Chicago, este licenciado en arte deja su trabajo como profesor para dedicarse al medio que adoraba, el cómic. Su primer trabajo es Space Mullet, en formato web-cómic autoeditado, en el que realiza las labores de autor completo, que además se llega a publicar por Dark Horse dentro de su colección EVE, dedicada al famoso videojuego de ciencia-ficción espacial. De ahí ya salta a este Extremity y su calidad le hace ser nominado a los premios Eisner por ella.
Aquí nos vamos a un futuro distópico, en el cual algo no identificado ha reducido la sociedad a pequeños grupos que viven en pedazos de rocas flotantes donde construyen sus ciudades, organizándose en clanes que recuerdan más a épocas pasadas que al presente. El argumento principal de la serie va encaminado a contar una guerra entre dos clanes, los Roto y los Paznina, no sabemos su comienzo y tampoco es importante, solo sabemos que los segundos atacaron a los primeros tiempo atrás causando muchas bajas, entre ellas la de la mujer del líder de los Roto, y mutilando a la hija de este, Thea, una chica pacífica cuya pasión es el arte, a la que arrancan el brazo derecho, con lo que pierde su capacidad para hacer lo que más le gusta, dibujar. Con ello ambos pueblos se meterán en una espiral de violencia y venganza que nos hará disfrutar de cada uno de los doce números, con barcos voladores, armas rudimentarias, un aire a Mad Max y monstruos de diferentes tipos.
El autor ofrece un juego muy interesante con el título de la obra, pues Extremity se refiere en un principio a la extremidad perdida por Thea y cómo ello marca su carácter posterior, cómo alimenta su sed de venganza e influye en la toma de decisiones, dirigiendo su vista a donde antes estaba su brazo cada vez que se encuentra en un dilema moral. Pero según avanza la serie vemos su otro significado, aparece la noción de choque entre los extremos, el lector va observando cómo las posturas de los diferentes clanes se torna cada vez más radical y cómo ese pensamiento va contagiándose de padres a hijos, es decir, cómo son educados para ello aun partiendo del punto inicial de inocencia, hasta llegar a un momento en el que la violencia es tal que parece no importarles la destrucción mutua. Aquí entra en juego Rollo.
Extremity tiene personajes muy potentes y muy variados con los que los protagonistas van interactuando a lo largo de la obra, y que les harán cambiar. Los líderes de los clanes son importantes pero no dejan de ser secundarios, el hilo principal de la obra se ve en Thea, pero también en Rollo, su hermano con el que comparte protagonismo, mucho más calmado que ella, amante de la paz en secreto y de los libros antiguos, que se encontrará con un robot que cambiará su forma de ver la vida. De forma más breve pero igual de interesante está Annora, hija de la líder de los Paznina que también tendrá que evolucionar para vivir. ¿Llegarán al extremo o lograrán un punto intermedio que frene toda esta violencia?, esta es una de las grandes incógnitas que plantea la obra y que hace que los personajes se muevan entre diferentes posturas que reflejan odio y amor a partes iguales.
Si la obra tiene un buen fondo también puede presumir de su forma, el dibujo de Daniel Warren Johnson tiene una narrativa maravillosa, es capaz de reflejar a la perfección la desesperación y la tristeza de ese mundo a la vez que maneja muy bien la acción, sin dejar de lado la violencia explícita que da buena cuenta de la brutalidad de esas sociedades. Queda claro que Extremity es una joya que debe estar presente en toda buena colección y que Daniel Warren Johnson tiene trabajos posteriores que hablan por sí solos, en Image, en Marvel y en DC. Ahora llega con una nueva obra de creación propia, también nominada a los Eisner, Do a Powebomb, que publica Norma este mismo mes, por eso en este Magazindie merece la pena recordar a Thea y Rollo.
Los primeros cómics de John Allison
John Allison se ha convertido en una referencia de la industria gracias a su fantástica Giant Days. Los orígenes de esta obra se retrotraen hasta el 2021. Sin embargo, si hacemos un repaso de la carrera de Allison, veremos que el autor empezó a publicar trabajos suyos mucho antes que eso, en nada menos que 1998. Allison tiene ahora unos 46 años, por lo que estamos hablando de que publicó estos trabajos iniciales con unos tiernos 21 añitos.
Los trabajos iniciales de Allison se publicaron en realidad en forma de webcómics, y no hablamos de algo puntual, sino de una tendencia que se mantuvo ininterrumpida durante los primeros 13 años de carrera del autor. Este dato resulta especialmente relevante porque Giant Days, la obra que lanzó a Allison al estrellato, nació en realidad como un spin-off de uno de aquellos webcómics… o de todos, en realidad.
En resumidas cuentas, la cronología es la siguiente: el primer webcómic de Allison fue Bobbins. Cuatro años después de empezar su publicación, en 2002, apareció otro webcómic, Scary Go Round, secuela directa de Bobbins. Esta obra tuvo un recorrido de unos siete años y derivó en dos spin-off: Bad Machinery (iniciada en 2009 en forma también de webcómic) y la mismísima Giant Days, presentada como idea al sello Boom! Box de Boom! Studios, dedicado precisamente a artistas bien establecidos que no formaran parte de la industria del cómic tradicional.
Por recapitular, Giant Days es el segundo spin-off de la secuela del primer webcómic que publicó John Allison. Ahora intentad decirlo sin trabaros.
Dado el enorme éxito de Giant Days, consideramos que publicar cualquiera de estas obras en el mercado español podría ser muy interesante. Por supuesto, también entendemos que a nivel de mercado quizá no sean las obras más fáciles de vender o editar del mundo.
Es decir, se trata de obras muy extensas y que además están dibujadas por el propio John Allison. No seremos nosotros quienes critiquemos ese dibujo porque a nivel narrativo Allison suele mostrarse más que competente, pero lo cierto es que se nota que el autor británico es más de letras que de trazos y su apartado artístico puede no resultarle muy atractivo a la mayoría de lectores.
Lo de la facilidad de edición lo mencionamos porque, si no estamos equivocados, estamos hablando de obras que no cuentan con una edición completa en papel en su idioma original (salvo por algunas recopilaciones autoeditadas por el propio Allison). Entendemos que el motivo principal de ello reside en que son obras que ya se pueden leer online. Debido a esto, una edición en papel en su idioma original podría no resultar tan atractiva, aunque esta apreciación cambia si hablamos de mercados con otras lenguas principales. Sin embargo, sí que hay un webcómic que cuenta con una edición física más tradicional: Bad Machinery, editada por Oni Press para el mercado anglosajón en la módica cantidad de 11 tomos (de ahí lo de calificarlas de “muy extensas”).
A pesar de las citadas dificultades, pensamos que estas obras siguen teniendo un interés potencial considerable para un mercado español que ya se quedó prendado con Giant Days. Puede que a primera vista no parezcan obras particularmente apetecibles de editar, pero en ellas encontramos el mismo humor chispeante y los mismos personajes entrañables con los que tantos nos hemos convertido en seguidores incondicionales de Allison.
El equipo recomienda…
– Igor Álvarez Muñiz: Lazarus 7, de Greg Rucka y Michael Lark, Norma Editorial.
– José María Vicente: Post York, de James Romberger, Planeta Cómic.
– Juan Luís Daza: Mighty Morphin power Rangers 6, de Ryan Parrot, Eleonora Carlini y varios artistas, Moztros.
– Edu Sesé: Vanish 1, de Donny Cates y Ryan Stegman, Moztros.
– Raúl López: Vanish 1, de Donny Cates y Ryan Stegman, Moztros.
– Sergio Fernández: Lazarus 7, de Greg Rucka y Michael Lark, Norma Editorial.
– Alfonso del Pino: Do a Powerbomb, de Daniel Warren Johnson, Norma Editorial.
– Mariano Abrach: Vanish 1, de Donny Cates y Ryan Stegman, Moztros.
Mira que adoro Giant Days, pero las otras veces que me acerqué a la obra de Allison no me convenció nada. Algo raro pasa ahí.
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