INTRODUCCIÓN
Din-din-din… se acercan las navidades, los turrones, lo polvorones, los ágapes familiares, Papa Noel, el tió, los reyes, uvas, árboles, luces, renos, el consumismo desaforado… pero también un nuevo MEGA MAGAZINE DE DC y porqué decimos MEGA porqué este mes tenemos un porrón tal de novedades que parece que los reyes se hayan adelantado.
Se trata de un mes de continuaciones, con la del Pingüino (personaje al que le hemos dedicado la friolera de dos magazines) de Tom King, Titanes, Luz de Gas (El regreso del primer ElseWorld) y Green Arrow. Además del Batman Ciudad de Locura, que nos vuelve locos con sus intensos coloringos.
Hablamos del libraco de David Hernando sobre Batman, y nombramos autora del mes a la excelente Kelly Thompson. A Zatanna le corresponde el honor de ser el personaje al que homenajeamos.
Venga pues, somazepme!!
TITULARES
• Listado Novedades ECC
• Novedades DC
• Autora del mes
• Personaje del mes
• Aniversarios
• Clásicos DC
• Libros
• Destacado del mes
Repaso por los destacados de diciembre con el sello DC. El horror cósmico de Christian Ward en Batman: Ciudad de locura, pondrá el broche final a la celebración del 85 aniversario del Caballero Oscuro mientras el clásico Batman: Año uno, de Frank Miller y David Mazzucchelli, se une a la colección Deluxe en blanco y negro. El sello Otros Mundos se reactiva a través de Gotham: Luz de gas: La era kriptoniana, secuela de uno de sus títulos emblemáticos, firmada por Andy Diggle y Leandro Fernández. A los que se suma un nuevo capítulo de The Nice House by the Sea, la segunda temporada de la aclamada saga de James Tynion IV y Álvaro Martínez Bueno.
TITANES #02
Tom Taylor vuelve con sus titanes tras todo lo ocurrido con Titanes: Mundo Bestia. La trama nos lleva exactamente al final de la misma, donde deben lidiar con todo lo ocurrido y ver como evoluciona el giro final sobre cierto miembro integrante de este equipo (si no habéis leído el evento os vais a sentir completamente fuera de lo que nos plantea el bueno de Tom).
Toda la trama de Raven es la última del guionista y de Nicola Scott en la serie, pues con este tomo la colección se pone al día a tan solo dos número de USA y la cabecera tiene un cambio de equipo creativo con el sello de DC All In, que todavía no se sabe como planea ECC publicar con Absolute aún sin plan editorial.
Aunque la trama de Trigon y el ser alma de Raven nos lo hayan contado muchas veces a lo largo de las distintas cabeceras de los jóvenes superhéroes, la conexión de los protagonistas y la forma tan única de hacer funcionar las dinámicas del equipo consigue que se siente fresca una historia tan conocida.
BATMAN GOTHAM LUZ DE GAS – LA ERA KRYPTONIANA 1
Esta obra transcurre em 1893, cuatro años después de la original, y es escrita por Andy Diggle, quien regresa a DC Comics tras su etapa a principios de los 2000, donde además de crear el cómic Losers en el sello Vertigo, destacamos su Adam Strange: Planet Heist, Green Arrow: Year One o su paso por Hellblazer. Para esta secuela cuenta con el argentino Leandro Fernández, quien ya había sido el dibujante en obras de Vertigo tales como The Names o American Carnage.
Mencionar las obras del guionista no es simplemente por mostrar su currículum, sino ver que las elecciones de Adam Strange o John Constantine en esta nueva obra no son casuales. No son los únicos nuevos personajes conocidos, puesto que esta nueva obra abre con la conocida llegada de un bebé kriptoniano frente a Jonathan y Martha Kent, varias décadas antes de la actualidad.
Allí vemos que quizás no fue la primera vez que esa raza visitó la Tierra, algo que ya se ha intentado explorar en otras obras del universo DC, incluso fuera de los cómics, pero que en esta secuela tendrá unas implicaciones mayores, al ser hasta ahora un universo sin ese componente ‘super’ en sus aventuras. Bruce sigue al lado de Julie Madison, tal y como vimos en Batman: Amos del Futuro, pero otras mujeres a lo largo de la existencia del personaje aparecerán en esta nueva obra, empezando por una Selina Kyle que le sienta como un guante esta época y estética.
EL PINGÜINO #02
Como siempre una primera escena que deja preguntas en el aire y engancha al lector. Cómo no un Batman falible. Y por su puesto, uno de sus enemigos elevado a la máxima potencia de inteligencia y capacidad para el terror. Efectivamente, estamos ante un cómic de Tom King.
Y es que ya empezamos a pillarle los truquitos al famoso guionista, que incluyen otros cuantos tics habituales… Sin embargo, quién puede negarle igualmente su talento y lo atrayentes que son sus historias, máxime si se acompaña de dibujantes de sobrado talento, en el caso que nos ocupa de un inmenso Rafael de Latorre. Sin olvidar la por ta da ca de Stefano Gaudiano.
En los primeros seis números que recopiló ECC vimos a un aparentemente muerto Pingüino disfrutando de una especie de programa de protección de criminales hasta que la ley, a través de una malhablada agente especial, le da carta blanca para recuperar su ciudad. Vale, hay más agujeros en este guion que en la continuidad de un cómic de Bendis, pero es endiabladamente divertido ver al villano resurgir de las cenizas y montar su propio equipo de perdedores (recuperando a Force of July para el actual UDC, por cierto, punto para King).
Tanto que tenemos ganas de más, mucho más. Nos queda saber cómo se las apañará para enfrentarse a sus propios retoños, qué otros socios dejará usados y tirados por el camino, cómo resolverá King el intrigante inicio de esta maxiserie… Y sí, oh sí, cómo será la venganza que le propinará a la agente que lo reclutó ¡J0D3R!
GREEN ARROW #02
Si bien este segundo tomo de la serie regular de Joshua Williamson, Ollie descubre que su segunda familia, la Liga de la Justicia, ya no está activa tras los sucesos de la última gran Crisis. Sin su ayuda directa, sólo le queda su hijo Connor para encontrar a su compañero Roy, así como encontrar respuestas de Amanda Waller, por lo ocurrido en el primer tomo. La cosa no será tan fácil, con lo que más enemigos clásicos de Green Arrow se interpondrán en su camino. Al ver que todos los caminos apuntan a The Wall, tocará hacerle una visita, pero resolver todos sus problemas y poder unir al fin a toda su familia, tendrá un coste muy alto para Oliver, en una trama que sirve de prólogo a lo que se vendrá en Poder Absoluto.
A nivel de lápices y tintas, hay un carrusel de artistas que acompañan a Sean Izaakse, tal y como ya empezábamos a ver en el tomo anterior: Carmine Di Giandomenico; Trevor Hairsine; Phil Hester; Eric Gapstur; Tom Derenick; siempre manteniendo a Romulo Fajardo Jr. con sus colores para darle unidad al tomo. Además de la serie principal, como ocurrió durante esos números el evento de Titanes: Mundo Bestia, este número incorpora dos pequeñas historias de las que se publicaron en el Titans: Beast World Tour: Star City #1.
La primera está guionizada por el propio Williamson, quien es acompañado por Jamal Campbell, algo de agradecer. La historia nos lleva a una misión conjunta padre e hijo durante los mencionados eventos, cuya resolución en el mismo tomo corre a cargo de Ted Brandt y Ro Stein. En ella se centra más en Connor Hawke, cosa que es de agradecer, puesto que también es un Green Arrow, y llevábamos mucho tiempo esperando poder volver a disfrutar de sus aventuras.
BATMAN Y LOS OUTSIDERS #01
1983 fue un año clave para DC. Los tiempos difíciles parecen quedarse atrás y habría que aprovechar la gran efervescencia creativa, así que la joven editora jefe, Janette Kahn, ya se siente con más fuerza para comenzar a experimentar.
Para contratar a la fulgurante estrella de Marvel, se publica la atrevida Ronin. Con dos valores seguros pero una idea demasiado radical, se arriesga con Green Lantern/Green Arrow. Pero sobre todo, después de la DC Implosion, Kahn por fin da luz verde a nuevas series.
Un Vigilante que pedía a disparos serie propia. Un héroe científico, Átomo, que se pasa a la espada y… brujería, la de una chica convertida en princesa, Amatista. Y dado el éxito de los supergrupos adolescentes, puerta abierta a la sangre nueva, se crean los Omega Men y el grupo que nos ocupa, Los Outsiders.
Cojamos además la fórmula que ha funcionado con los Titanes, héroes conocidos (Rayo Negro, Metamorfo) y otros creados para la ocasión (Katana, Halo, Geoforce). Y para darle ese toque radical que los haga atractivos, vienen acompañados de un Batman rebelde que se independiza de la Liga.
También imitando a el grupo de sidekicks, se presentan en una serie contenedor, en este caso en el último número, el 200, de The Brave and the Bold. El cual se incluye en este volumen de ECC, junto con los primeros 10 números de la serie y el primer cruce editorial del grupo con, cómo no, los Nuevos Titanes (#37).
¿Aún no estás convencido? Ok, aquí va mi as en la manga: Mike W. Barr y Jim Aparo. El guionista ya había sorprendido con Camelot 3000 y en breve haría las delicias de los aficionados con su Batman post-crisis. Del dibujante qué decir: Aquaman, The Brave and the Bold, Batman, Spectre…
Un tomo que merece estar en cualquier biblioteca del aficionado a los cómics pijameros. Unas aventuras tan inocentes como divertidas, tan fantásticas como pegadas a sus personajes. Un clásico digno de tal nombre.
Kelly Thompson nació en Estados Unidos, sin fecha ni lugar exacto conocido. Actualmente usa el ‘1979’ en web y redes sociales, año en el que empezó a estudiar su licenciatura de Arte Secuencial en la Facultad de Arte y Diseño de Savannah (Georgia, USA) tras pasar por la universidad de Arizona, por lo que probablemente nació ese año en dicho estado.
Sus primeros años involucrados con el mundo del cómic fue como redactora en CBR, cuando la web era un sitio de referencia. Desde 2009 hasta 2015 hizo multitud de reseñas, así como llevaba una columna llamada ‘She Has No Head!”, hablando de personajes femeninos, lo que acabarían siendo su especialidad.
Durante esa etapa llegó a publicar dos novelas. La primera en 2012, a través del mecenazgo en Kickstarter titulada The Girl Who Would Be King y en 2014 su segunda novela, Storykiller. Entre las buenas reseñas de ambas novelas y su buen hacer en CBR, finalmente tuvo su primera oportunidad para ser guionista de cómics.
En 2014 se anunció que Kelly Thompson sería la guionista de la nueva serie de Jem y los Hologramas, junto a la artista Sophie Campbell. Esta empezó a ser publicada en marzo de 2015 por la editorial IDW Publishing, cuya etapa contó con 26 números. También escribió la mini Jem: The Misfits con la dibujante Jenn St-Onge.
Su debut como guionista fue suficiente para que en el mismo 2015 pudiera dar el salto a Marvel Comics, junto a la guionista Kelly Sue DeConnick para la mini Captain Marvel and the Carol Corps, durante el evento Secret Wars.
Tras su debut obtuvo su primera serie regular, Hawkeye, siendo protagonizada por Kate Bishop. Eso se valió en 2018 una nominación al Eisner a la Mejor Serie Regular, aunque la serie acabaria siendo cancelada por Marvel ese mismo año.
Durante su estancia en Marvel logró que su Captain Marvel #1, con la dibujante malagueña Carmen Carnero y la colorista Tamra Bonvillain, superase las 100 mil unidades vendidas, cuya serie regular llegó hasta el número 50. Otros trabajos fueron Journey to Star Wars: The Last Jedi – Captain Phasma, Rogue & Gambit, y tras casarlos, Mr. and Mrs. X o la serie digital Jessica Jones.
A nivel grupal, escribió a la A-Force, los West Coast Avengers, de donde salió su mejor creación, Jeff the Land Shark – incluso escribió una mini titulada It’s Jeff!, quien tuvo una nominación al Eisner al Mejor Cómic Digital en 2022 – o los Uncanny X-Men. Sus últimos trabajos se centraron en personajes regulares tales como Deadpool, Black Widow o algunos números de The Amazing Spider-Man.
Durante esos años en Marvel también estuvo trabajando por otras editoriales, con la mini Mighty Morphin Power Rangers: Pink para Boom! Studios, Sabrina the Teenage Witch para Archie Comics, y Nancy Drew para Dynamite. Esta serie, junto a las otras que estaba escribiendo en Marvel en 2019, se valieron una nominación al Eisner a la Mejor Guionista.
No sólo se ha dedicado a cómics puramente comerciales, también participó en Shots Fired para Comicker Press, para recaudar dinero para combatir la violencia armada, una de las mayores lacras en Estados Unidos.
El año pasado finalmente dio el salto a DC Comics para escribir Birds of Prey, la serie grupal femenina más popular. Junto a Leonardo Romero, es una continuación al estilo – e incluso alguna trama – de la gran etapa escrita por Gail Simone.
La alineación recupera a Barbara Gordon haciendo de Oráculo, con un equipo capitaneado por Black Canary, junto a otras guerreras como Cassandra Cain o Big Barda, así como otros miembros rotatorios como Zealot, Harley Quinn o Vixen.
Esta serie regular se valió una nueva nominación a los Eisner a la Mejor Serie Regular. No fue la única nominación en 2024 – de hecho fueron hasta 5 distintas -, puesto que también la recibió como Mejor Guionista por el conjunto de series escritas, ganando incluso It’s Jeff el Eisner a la Mejor Publicación Humorística.
También fue nominada por The Cull a la Mejor Serie Limitada, así como Black Cloak a la Mejor Nueva Serie, ambas publicadas por Image Comics. Dentro de su sello Skybound, también la podemos encontrar con Scarlett junto a Marco Ferrari.
Probablemente la veamos nuevamente nominada en los Eisner 2025, pues su último trabajo en DC Comics es Absolute Wonder Woman, junto a Hayden Sherman y Jordie Bellaire. El universo impulsado por Scott Snyder nos ha dado tres de las mejores series regulares en este 2024, cada cual mejor.
En el caso de Diana, tenemos una reimaginación donde lo mitológico y mágico se combina con lo humano y militar, para darnos una historia cautivadora y tremebunda, la joya de una autora en estado de gracia.
Zatanna es una superheroína que se ha hecho un hueco entre el imaginario popular. Si hablamos de la representación de la parte más mística de la editorial, de lo mágico, la primera imagen que se te viene a la cabeza es Zatanna Zatara. En el mismo número que Superman debutaría en el Action Comics 1 también lo haría un mago muy especial, Giovanni Zatara. Nuestro querido mago estuvo durante la Golden age teniendo sus historias de mago poderoso a escondidas, y de artista de espectáculos de cara al público.
Con la llegada de la Silver Age, los superhéroes de la edad dorada eran revitalizados y recreados para una nueva generación, como con el caso de Flash y Barry Allen. Zatanna fue la respuesta para traer de vuelta al mago, y para ello en vez de empezar de cero, se creó una conexión directa, pues era la hija del personaje clásico.
Creada por Gardner Fox y Murphy Anderson, debutó en el número cuatro de la serie de Hawkman, allá por 1964. Aquí descubrimos que estaba buscando a su padre quien había desaparecido. Por las distintas cabeceras donde estaba como editor Julius Schwart fue apareciendo y creando una pequeña trama interconectada, algunas de estas fueron Átomo, Green Lantern, Elongated Man y Batman, acabando todo con una trama de la Liga de la Justicia de América, más específicamente con el número 51. Ahora que hemos tenido la publicación de DC Infinite podéis encontrar esta colección como Justice League of America: Zatanna’s search.
Tras encontrar a su padre y a su madre en la cabecera antes mencionada, estuvo como miembro principal de la misma y como secundaria en algunas cabeceras hasta la llegada de Crisis en Tierras Infinitas. En el 87 tuvo un número especial de la mano de Conway, que desembocó en una miniserie en 1993, la primera del personaje. Aquí ya vimos mucho de los conceptos que se han quedado de forma perenne, como puede ser su relación con Constantine en continuidad y la muerte de su padre. Como eran los noventa, el traje con pelo corto y una personalidad más combativa iba a juego.
Con los dosmiles llegó el momento de que en alguno de los eventos le tocará ser parte principal, y así fue con Crisis de Identidad. En esta historia de Brad Meltzer, Zatanna fue especialmente relevante, aunque no por una buena razón, pues tomaba decisiones cuestionables. Esto también le llevo a tener que afrontar consecuencias en otras historias como con Catwoman y en Jóvenes Titanes, en todas las ocasiones por haberles borrado la memoria a gente y que su lobotomía mágica les llevara a enfrentarse a consecuencias inesperadas.
Al año siguiente de la crisis y su especial centrado en ella tuvimos a Grant Morrison revitalizando a algunos personajes clásicos en su interpretación de Los 7 soldados de la victoria. Donde Zatanna tendría dos números centrados en ella y luego tomando protagonismo en el número grupal. Siendo, seguramente, el personaje más conocido de todos los que salían (lo siento Scott).
En los siguientes años, la joven maga seguiría tomando protagonismo en el Universo y se vendría uno de los momentos más importantes y que mayor impacto ha tenido, una cabecera regular guionizada por Paul Dini y dibujada, en gran parte, por Stephane Roux. Una serie que fue recopilada primero en dos tomos y posteriormente en uno solo, hablando de su publicación americana. Es la publicación que terminó de llevar al personaje a convertirse en uno de los más importantes y consiguiendo destacar en solitario más allá de su gran protagonismo que siempre había tenido de La Liga de la Justicia.
Con Flashpoint tuvimos que despedirnos de tenerla en una serie regular y sería la líder de su propia Liga de la Justicia mágica: Liga de la Justicia Oscura. Donde estuvo durante los 42 números que duró el primer volumen, serie que comenzó con guion de Peter Milligan y con dibujo del español Mikel Janin. Durante los eventos de Geoff Johns también estuvo formando parte, con mayor o menor importancia. Paralelamente, para un público más joven, se publicó la miniserie de Mystik U, donde nos presentaban a una Zatanna más adolescente, cuando aún era estudiante.
Con la liga de la Snyder y su Nueva Justicia tuvimos otra cabecera de LJO con Zatanna y Wonder Woman como líderes, escrita por Tynion IV y con el español Álvaro Martínez Bueno a los lápices. Durante El reloj del juicio final también hizo su aparición, en Liga de la Justicia Encarnada también contó con ella como uno de los 10 personajes llamados a defender el multiverso y con ello tuvo su momento en Crisis Oscura, apariciones en eventos parece que iba a ser su cosa. Paso otra vez con Terrores Nocturnos donde tuvo sus dos números centrados en ella y su aparición en la serie principal.
En 2023 también tuvo una serie regular, pero esta digital. En Webtoon hemos tenido Zatanna & The Reaper de Sarah Dealey y Syro, un webcómic juvenil que salió junto a Vixen: NYC. Por suerte, este año hemos tenido la suerte de tener la miniserie de cuatro números que acaba ahora de Mariko Tamaki y del español Javier Rodríguez titulada Zatanna Bring Down the House. Por último, se ha anunciado una nueva serie regular de Zatanna escrita y dibujada por Jamal Campbell, que saldrá el 19 de febrero su primer número.
ES LA HORA DE LA ENCUESTA…
20 AÑOS DE SUPERMAN – TRUE BRIT
Lamentablemente debe enmendar la plana a mi amigo Gustaver. Este cómic que cumple años este mes, no es un what if de qué pasaría si Superman hubiera aterrizado en el Reino Unido, o una de las obras de Byrne que hay que tener en la biblioteca.
La gracia de este cómic, el hecho de que sea un tebeo tan especial no es por el dibujante, el personaje o la situación alternativa del mismo.
No.
La gracia (y la palabra gracia no es casual) está en el guionista invitado. Nada más y nada menos que John Cleese, el legendario miembro de los Monty Python, el impresionante actor que interpretó a Basil Fawlty, el protagonista absoluto de una de las mejores sitcoms británicas de todos los tiempos. Autor de una de la autobiografías más divertidas y crueles publicadas en lengua inglesa.
Un comediante especial, excéntrico, profundamente misántropo, explosivamente divertido. Uno de los mejores de siempre según el público inglés.
Tenemos un cómic escrito por John Cleese, Superman en versión el humor inglés más puro. No es un cómic para fans del personaje, ni para lectores de los superhéroes al uso. Es un tebeo dirigido a los amantes de este tipo de humor (flemático e irónico), a los fans de los Monty Pyhton, a los aficionados a las curiosidades a las mezclas más bizarras.
Cierto es que a veces no todo encaja, cierto es que igual el medio no es ideal, cierto es que Byrne puso el piloto automático y no es el autor perfecto para dibujar un cómic humorístico. Pero DC le debía a John Cleese la posibilidad de escribir a su personaje más icónico…no en vano…
…Basil Fawlty protagonizó una aventura de la JLE.
Publicado en 2015 por ECC, Cleese tuvo ayuda de Kim Thompson con el guion (habitual de Marvel y DC). La dificultad para el lector no británico está en la cantidad de guiños y juegos de palabras intraducibles y en el fuerte sabor inglés del humor de este tebeo. Algo muy, muy para cafeteros… que hay que leer con la mente abierta.
Un cómic que también puede leerse como pasatiempos para encontrar todos los eastern eggs… y echarse una risas a costa de los británicos, porque si algo saben hacer en UK es reirse de ellos mismos. Algo que nos conviene a más de uno.
BATMAN Y EL PINGÜINO DE GRANT Y BREYFOGLE
El Pingüino está de moda, para que negarlo. Una serie de televisión de calidad indiscutible que acaba de dejarnos y una serie de cómic notable que termina en nuestro país este mismo mes. Pero ya era hora de dejar el personaje del mes a alguien fuera del ambiente del murciélago y hay que decir con cierto sonrojo que le hemos dedicado el honor no una, sino dos veces.
Así que decidimos dejarle lugar en el clásico de esta edición del Magazine, pero claro, ¿qué clásico tiene el Pingüino? Historias tiene muchas, pero hay que admitir que no tiene alguna que nos venga a la cabeza como magistral, al contrario que otros villanos más afortunados. Sin embargo, si nos acordamos de la versión del personaje que le dedicaron la gran pareja artística formada por Alan Grant y Norm Breyfogle.
Entre otras cosas porque fue prácticamente la primera versión post-crisis y aunaba algunos ecos de la versión más clásica sin renunciar a un lenguaje moderno (por aquel entonces). También por el talento que demostraban tanto escritor como dibujante. Y de paso, porque podremos visitar tres instantáneas de aquella etapa del Murciélago, acompañados por distintos equipos artísticos. Las únicas constantes, salvo rareza, serían Dennis O’Neil como editor y la mítica colorista Adrienne Roy.
Empezamos el repaso por el Batman Annual #11, publicado en junio de 1987. Aquel pedazo de especial, con portadaca de John Byrne, que incluía la mítica historia de Clayface III guionizada por Alan Moore (y dibujada por el magnífico George Freeman, todo sea dicho), pero en la que también se incluía una simpática historia de nuestro elegante villano.
Ésta estaba guionizada por el escritor de moda y a la postre encargado de la serie regular, Max Allan Collins, pero la incluimos en la lista por ser la primera historia del murciélago de un aún novato Breyfogle. Si bien la historia de Collins es divertida y con ciertos tintes de humor bien llevados aquí y allá, lo que la hace verdaderamente atractiva es el artista.
Las fisonomías aún no son tan rectangulares como acabarían siendo y la suavidad también se refleja en algunos rostros. Pero su capacidad narrativa ya comienza a mostrar retazos de lo que podrá llegar a dar y algunas composiciones de página se salen sin vergüenza ninguna de lo establecido en la década anterior. Y qué decir del arte de plasmar juntos a Robin (Jason) y Batman como digna combinación de luz y oscuridad.
El personaje pasaría de ahí a manos de John Ostrander, principalmente en el Escuadrón Suicida. Aunque el anterior especial fue algo inocente, este guionista si lo pone claramente en el bando de los villanos y lo destaca como estratega a tener en cuenta.
Y justo antes del meollo, nuevo especial memorable, también con portadaca pero de Brian Bolland, en el que nuestro personaje es eclipsado por otro guionista famoso. En aquel Secret Origins Special de octubre de 1989, donde Neil Gaiman narró el origen del Acertijo, se esconde otra joya. En este caso echamos de menos al artista de nuestra pareja, pero es Grant el que nos deslumbra acompañado por Sam Kieth, nada menos.
La historia es mucho más oscura y nos narra un nuevo origen para el Pingüino muy ligado al maltrato infantil. Parece que, aparte de un interés propio en pájaros y paraguas, fueron las torturas recibidas en su niñez por un compañero de clase lo que forjaron a convertirle en el criminal sin escrúpulos del presente. Ya se muestra la despreocupación por sesgar vidas, la capacidad para la crueldad y una intrincada mecánica mental.
Kieth, como siempre, tan exagerado como atractivo. Sombreado hasta la saciadez y con algunos experimentos alucinantes. Por cierto, que esta es la rareza a la que me refería, pues, al no ser una cabecera del murciélago, el editor no es otro que Mark Waid y el colorista Tom McCraw.
La siguiente parada sí que es la recordada por muchos lectores de Zinco, se trata de los Detective Comics #610-11, de enero y febrero de 1990, que aquí se publicaron como el tercer especial de la colección regular de Batman. Ahora tenemos por fin a la dupla completa Grant & Breyfogle (el dibujante entintado por Steve Mitchell) contándonos una muy entretenida historia que no puede ser más arquetípica del personaje.
Plan complicado, robos, alianzas y traiciones, pájaros y paraguas y alguna pista para el mejor detective del mundo. La historia empieza con una situación bastante similar a la actualidad de hace unos meses, pues abre con el funeral del orondo enemigo de Batman. Nadie termina de creerlo pero la realidad es palpable, Cobblepot ha muerto en prisión por fallo cardíaco a los 51 años.
Por supuesto todo es falso, pero hará falta recurrir al causante de ese estado comatoso inducido, otro personaje creado por la pareja (más John Wagner), Mortimer Kadaver. Pero mientras, se desarrolla el plan del Pingüino, que se burla de sus mafiosos enemigos (a lo tonto se define claramente su estatus en el mundo criminal más real) con una estafa aparentemente benéfica.
Un solitario Batman (estamos en la época sin Robin) irá juntando fragmentos poco a poco hasta deducir cual será la última pieza del puzle que se despliega ante él. E irá acumulando lógica rabia de ver como todo el jugueteo cruel del villano va dejando vidas como meras fichas sin importancia (incluido Kadaver, al que los propios creadores dan finiquito sin miramientos). La escena final de enfrentamiento entre los dos protagonistas es simplemente espectacular.
De ahí saltamos a nuestra última parada, titulada de hecho “The Penguin Affair”. Una trilogía compuesta por las dos cabeceras del Cruzado de la Capa, Batman #448-449 y Detective Comics #615, publicadas durante junio y julio de 1990. Marv Wolfman y Alan Grant se alían en los guiones y, aunque los dos capítulos de la serie principal son dibujados por el gran Jim Aparo (entintado por Mike DeCarlo) y el pasable Mark Bright (con Randy Emberlin), todas las portadas y el Detective son obra de un magnífico Breyfogle (de nuevo acompañado por Mitchell).
Estamos ya en compañía de Tim Drake, aunque aún ni siquiera se le permite llevar el manto de Robin y acompañar al “jefe” en sus escapadas. Curiosamente el Pingüino aparece libre, aunque en este tiempo no se ha visto al personaje ni ha habido ninguna fuga de prisión que yo recuerde (lo admito, soy un tiquismiquis de esos fallitos de continuidad). Y también parece otro protagonista traído por el editor, Harold, el genio deforme creado en el Question de O’Neil (que se convertiría en uno de los secundarios habituales durante la Caída del Murciélago).
De nuevo tenemos planes intrincados (incluso se cuela una partida de ajedrez entre Oswald y Bruce sin que ninguno sepa quién es quién), falta de consideración por la vida ajena y se recupera algo muy típico del personaje, la venta de sus planes o el resultado de estos al mejor postor. Aunque se descubren otras facetas más desconocidas del villano como una pasión por las telenovelas.
Es cierto que tampoco hacían falta tres números para lo que se cuenta, pero es un placer ver de nuevo al Batman detective, que descubre poco a poco los tejemanejes de su enemigo con cierta ayuda del inteligente Tim. Y nunca está de más un inquietante homenaje a Los Pájaros. Además de que siempre es un goce disfrutar de las magníficas versiones de Batman de Aparo y Breyfogle, que marcaron a una generación a fuego.
Lo dicho, no hay un clásico indiscutible con el Pingüino como protagonista, pero estas historias son sin duda alguna de las mejores y, para muchos de nosotros, refugios de otra manera de entender los cómics del Señor de la Noche.
Uno de los grandes eventos de este final de año es la reedición y actualización de Batman: El resto es Silencio. Un libro que funciona a modo de biografía editorial del personaje más importante de Gotham.
Hace más de veinte años David Hernando publicó un libro donde repasaba la historia del personaje, sus andares editoriales, sus etapas y aventuras. Libro descatalogado y bastante inencontrable a no ser que el dinero no sea problema.
Dolmen trae una edición actualizada y ampliada hasta llegar a casi, casi… la actualidad USA de Batman.
Hernando nos detalla etapas, momentos y arcos argumentales, relacionándolos con el contexto de cada momento, tendencias del mundo del cómic, intromisiones editoriales, políticas de publicación. Todo con una redacción sintética, detallada y ágil. El autor posee una prosa precisa, casi periodística que nos permite devorar las páginas de manera trepidante.
El libro funciona a modo de enciclopedia batmaníaca, de obra de consulta que permite distinguir las diferentes fases del personaje, además de su relación con otros medios, sobre todo el cinematográfico.
Hernando no deja de dar su opinión bastante razonada, aunque en algún momento se intuye al fan más acérrimo y no deja de mojarse en las recurrentes polémicas que los lectores tienen sobre Batman. La prueba del algodón es la valoración de la Broma Asesina, obra que sitúa a los fans en dos bandos claramente diferenciados (aunque poco beligerantes).
Sin embargo, semejante obrón adolece de algunas omisiones sorprendentes como la de Amor Loco, por poner un ejemplo y de cierta “prisa” a la hora de comentar las etapas editoriales más recientes. Estas quedan un poco por debajo (en extensión) del trato que reciben los eventos cinematográficos. No deja de ser un signo de los tiempos y de la mutación de las tendencias en ocio del fandom. Sin embargo, sorprende que a la etapa de Tynion en Detective (que según el propio Hernando es excelente) recibe un par de párrafos y la película inédita con guion de Miller, un par de páginas.
No en vano, la influencia del cine en el cómic es cada vez mayor y asfixiante.
Pero bueno, a pesar de ciertas asimetrías se trata de un libro muy recomendable, 100% aprovechable, entretenido, muy bien escrito y que no debe faltar en la biblioteca de cualquier fan de Batman.
Un regalo navideño perfecto
(D): Christian Ward.
Christian Ward es experto en los mundos oscuros y truculentos con toques lovecraftianos, obviamente que Batman le viene como anillo al dedo. Dentro de Gotham hay dos Gotham, como decía Scott Snyder, pero esta vez una vive por debajo de la otra. Los encargados de defender y controlar que las dos Gotham no se conecten es el propio Tribunal de los Búhos.
Para poder llevar a buen puerto la investigación de lo que está ocurriendo en Gotham, Ward se aprovecha de la propia mitología de secundarios, con Nightwing, Barabara y Alfred, además de la galería de villanos tan especial que tiene el caballero oscuro. Al contrario que muchos elseworlds, no intenta aprovecharse de saltos importantes en la mitología del murciélago para hacer de motor de trama, si no que con la otra Gotham y El Tribunal tiene más que suficiente para darnos momentos de terror y tensión.
El concepto de un Batman de otra realidad que escapa a la nuestra está manido, pero el juego sobre su identidad y de su necesidad de crear un nuevo Robin es un planteamiento muy interesante. Los diseños de las ciudades, su punto oscuro y el uso de figuras esperpénticas hacen una buena combinación para que Ward se luzca.
Con solo tres números nos ha mostrado una presentación, nudo y desenlace que nos acaba dejando muchas preguntas y a pesar de no tener el final más cerrado de todos, no da pie a una continuación. Ver a un Batman que tiene que enfrentarse al concepto de la humanidad y que su mejor herramienta es la compasión y la empatía son siempre los elementos para una buena historia del detective.
los 3 primeros del Pingüino los tengo!! Villanos Enamorados y el de Sam Keith en Grandes Historias, y el otro en la cole de Batman, todo de Perfil. Muy buenos todos.