Mangaland #06: Gundam The Origin por Marc Bernabé

 

Gundam The Origin
Título original: Gundam The Origin
Autores: Yoshikazu Yasuhiko
Editorial: Norma Editorial
Precio: según el tomo, 8, 8,5 o 9 euros
Formato: tomo con sobrecubiertas
Clasificación: seinen
Tomos: 18 (en curso) (En Japón, 21 y en curso)

 

Antes de empezar, me disculpo por mi silencio en esta sección, en principio mensual. He estado una temporada en Japón por temas de trabajo dedicándome, además, a realizar un nuevo proyecto llamado Masters of Manga, además de mis obligaciones como padre ^_^ No debería ser excusa, pero lo cierto es que me he visto totalmente desbordado e incapaz de hacer nada más. Afortunadamente, Masters of Manga ha podido nacer –al principio no las tenía todas conmigo– con muchas posibilidades de éxito.

En fin, este mes me gustaría comentar un clásico que en realidad no es un clásico: Gundam The Origin, otra de estas series manga tremendamente buenas que lamentablemente parecen estar pasando muy desapercibidas en nuestro país. ¿Por qué digo “clásico que no es un clásico”? Porque Gundam es una franquicia que lleva más de 30 años dando mucho que hablar en Japón, es todo un fenómeno social de enorme magnitud que, curiosamente, apenas ha salido de las fronteras niponas.

Mobile Suit Gundam fue una serie de animación emitida en 1979 que, en su primer pase, no consiguió demasiado éxito. Era “una más” de las incontables series de robots que se produjeron en Japón en los años 70, siguiendo la estela de los macroéxitos de Mazinger Z, Grendizer y demás, las space opera de Leiji Matsumoto (Capitán Harlock, Yamato, Expreso Galáctico 999…) y el brutal boom de la ci-fi originado por Star Wars, de la Gundam que recibe una evidente influencia en varios aspectos. Sin embargo, esta serie que en principio no parecía ser gran cosa escondía una gran profundidad argumental y unos personajes tremendamente carismáticos, por lo que poco a poco, muy poco a poco, fue ganándose el favor del público hasta explotar definitivamente a principios de los años 80.

Gundam nos cuenta una historia de guerras espaciales. En una época en la que se han creado varias colonias fuera del planeta Tierra, una de estas colonias declara la independencia con el nombre de Principado de Zeon y declara la guerra a la Federación Terrestre. Debido a unas partículas que impiden el uso de grandes armas de larga distancia, Zeon desarrolla los llamados “mobile suit” o “armaduras móviles”, grandes robots pilotados cuyos primeros modelos reciben el nombre de Zaku. A su vez, la Federación Terrestre responde creando sus propias armaduras móviles, los Gundam, pero Zeon se entera del desarrollo de estos prototipos y manda a un escuadrón de Zaku a investigar a la colonia espacial donde supuestamente los han enviado. Los Zaku, mediante un ataque sorpresa, consiguen destruir a todos los prototipos menos a uno, el Gundam RX-78-2. Entonces, Rei Amuro, un chaval bastante especialito, acaba pilotando al Gundam prácticamente “porque pasaba por allí” y consigue repeler a los Zaku enemigos.

Poco después, los colonos y los pocos militares supervivientes suben a la nave White Base, otro prototipo de la Federación, y consiguen escapar. A partir de este momento, con una tripulación de civiles y novatos, y con pilotos adolescentes y sin ninguna experiencia como Amuro, los inquilinos de la White Base deberán ir esquivando los ataques de Zeon –al principio capitaneados por el carismático Char “cometa rojo” Aznable– y luchando contra los numerosos mobile suits de modelos cada vez más evolucionados que mandan los de la colonia rebelde.

A priori puede parecer una historia más bien aburrida, del montón, pero lo cierto es que no es así en absoluto. Gundam fue una de las primeras series de animación en la que los malos no eran tan malos, tenían sus motivos para comportarse como lo hacían, y en la que los buenos tenían sus problemas, a veces muy serios y de tipo psicológico, y donde morían personajes carismáticos aquí y allá. El carisma de los personajes y la profundidad de sus planteamientos, sumado todo ello a un trabajo excelente de diseño de personajes y de robots, naves y vehículos, se ganaron los corazones de los fans. Además, el buen trabajo de la juguetera Bandai, que muy inteligentemente comercializó maquetas de estos robots para montarlas y pintarlas (las llamadas Gundam plastic model o “Gunpla” (Ganpura)), provocó que varias generaciones de japoneses, empezando por los que ahora tienen unos 35-40 años, hayan crecido montando Gundams y Zakus sin parar.

El éxito (tardío) de la primera serie de Gundam provocó, por supuesto, la producción de múltiples secuelas y spin-offs basados en el universo Gundam; tantas, que resultan casi incontables. Lo mismo ocurre con el manga: existen montones de cómics con el título Gundam en portada, de todos los géneros y para todos los gustos.

Y sin embargo, hay un manga de Gundam que destaca por goleada por encima del resto, y lo hace por contenido y por pedigrí: este manga es Gundam The Origin. Por contenido, porque adapta al manga el argumento de la primera serie de Gundam, la original y, para los fans más puristas, la única que vale la pena. Por pedigrí, porque es Yoshikazu Yasuhiko, diseñador de personajes original de la serie animada –además de un increíble mangaka– quien se encarga de esta adaptación con una maestría que deja con la boca abierta. Yasuhiko trabaja con el consentimiento de Sunrise, la productora del anime, adaptando el guión original de Yoshiyuki Tomino y manejando con sorprendente habilidad los diseños mecánicos creados por Kunio Okawara.

En Gundam The Origin, Yasuhiko no se limita a adaptar la serie animada con una maestría raramente vista en adaptaciones manga de anime (de hecho, no parece en absoluto una adaptación de un anime, sino al contrario), sino que además coloca nuevos episodios y matiza la historia de modo que sea más fácil de comprender, rellenando los puntos flacos del anime, cuya duración es solo de 43 episodios porque en su primer pase tuvo tan poco éxito que la cadena de televisión decidió acortar la serie.

Una curiosidad de esta serie manga es que originalmente incluye un porcentaje altísimo de páginas a color, coloreadas de forma magistral por Yasuhiko con acuarelas. Ello radica en el nacimiento de Gundam The Origin: en 2001, la editorial Kadokawa Shoten decidió fundar una nueva revista de manga llamada Gundam Ace y dedicada exclusivamente al universo Gundam (sí, sí, no es coña), y buscaban una serie estrella que por sí sola pudiera sostenerla, realizada por un autor que llamara la atención y fuera bien recibido por los exigentes fans. El encargo fue a parar a manos de Yoshikazu Yasuhiko que, al principio un poco reacio, decidió aceptar. A partir de ese primer número de la revista, pues, Gundam Ace se publica mes a mes incluyendo unas 60-80 páginas de Gundam The Origin, y su portada está siempre ilustrada por Yasuhiko. ¡Creo que es la única revista de manga cuya portada está siempre, invariablemente, dedicada a la misma serie! Como el peso de The Origin es tan fuerte en la Gundam Ace, y además Yasuhiko es un monstruo del dibujo, cada mes se incluyen muchas páginas a color, la mayoría de las cuales desaparecen lamentablemente en la edición en tomos, que deben publicarse así para que su precio no se dispare. Esta edición es la que tenemos en España, de la mano de Norma Editorial.

Otra curiosidad es que, paralelamente a la edición regular en tomos de la serie, se está realizando en Japón una edición de lujo, de tapa dura, carísima, y con todas las páginas a color incluidas (esto también es algo peculiar en Japón, ya que tener una “edición definitiva” cuando la regular aún no ha acabado es a todas luces una excepción).

Gundam The Origin lleva 21 tomos en Japón, de los que 18 ya se han editado en España. Para los que os preocupe la longitud de las series, debéis saber que Origin está a punto de llegar a su fin y se calcula que en su totalidad abarcará unos 23 o 24 tomos. Si tenéis la oportunidad, os recomiendo encarecidamente haceros con esta serie, una auténtica maravilla de argumento y de dibujo que además adapta una de las series más emblemáticas e influyentes de todos los tiempos, madre directa de series posteriores como Evangelion (casi se diría, ojo, que esta última es un plagio de Gundam).