Marvel Deluxe: Guerra Mundial Hulk

 

Edición original:World War Hulk 1-5
Edición nacional/ España:Panini Comics
Guión:Greg Pak
Dibujo:John Romita Jr.
Entintado:Klaus Janson
Color:Christina Strain
Formato:Libro en tapa dura. 224 páginas.
Precio:21,95€

 

Había ocurrido, nadie podía negarlo. Planet Hulk había sido un gran éxito, no sólo para el Goliath Esmeralda sino para Marvel en general, por lo que su secuela estaba más que servida, al haber aumentado la popularidad del personaje de forma exponencial.
Sin ánimo de concederle demasiado terreno al spoiler, era obvio que Hulk se acabaría vengando de los Iluminati (esa cábala marvelita secreta de héroes que buscan arreglar el mundo a espaldas de éste formada por Rayo Negro, El Doctor Extraño, Profesor X, Mr. Fantástico, Namor y Iron Man) no sólo por haberlo desterrado bajo engaños y subterfugios a otro planeta y acabar esclavizado, sino porque aquello que consiguió hacerle feliz en su destierro también le sería arrebatado, de lo que culparía sin duda a sus otrora compañeros de armas, los mentados Iluminati, que se habían ganado un fuerte (y verdoso) oponente en el Increíble Hulk.

Así pues, Hulk decide volver a la tierra clamando venganza, seguido de sus “Warbounds”, sus compañeros de armas, ex esclavos como él, liberados y liderados por Hulk, que seguirán a éste hasta la muerte si es necesario, con tal de poner un sangriento y definitivo fin al ansia de venganza que consume a su caudillo.
Todos y cada uno de los distintos enfrentamientos de Hulk con los miembros de los Iluminati son francamente increíbles, dignos de ser leídos y contemplados una y otra vez, pues demuestran que la furia ciega y desmedida es lo único que necesita Hulk, por muchas habilidades y poderes que posea el resto.

Por otro lado, resulta interesante como se confirma algo que ya se atisbaba desde Planet Hulk, la gran precuela que precede a esta historia, también escrita por Greg Pak, y que no es otra cosa que el hecho de que poco a poco Hulk ya no es ese ser estúpido y furioso que veníamos conociendo desde hacía ya muchas décadas (con las excepciones llevadas a cabo por Peter David y Bill Mantlo entre otros), si no un ser que pese a solucionar casi todos sus problemas con fuerza bruta, da paso al intelecto cuando éste es más necesario, pues sólo gracias a éste es capaz de diseñar nuevas y originales formas de causar más dolor y sufrimiento a sus enemigos.

Sin duda, otro punto fuerte es el juego de grises que se lleva a cabo en la historia y es que ¿quién es el villano y quién es el héroe? A priori, resulta fácil calificar a Hulk de villano al ser éste quien invade la tierra, buscando acabar con la vida de los protectores del planeta, pero… ¿no fueron éstos los que le engañaron y exiliaron haciendo gala de un despotismo sin parangón en el bando de los buenos?

Por otro lado, en el apartado del dibujo, aunque resulta todo un honor que se reclutara a Jhon Romita Jr. (Kick Ass, Spiderman, Daredevil El Hombre Sin Miedo) para darle forma a los guiones de Pak, la realidad es que el trazo de Romita palidece en comparación al de Carlo Pagulayan o al de Aaron Lopestri en Planet Hulk. Los personajes son en su mayoría de rostros muy parecidos, al igual que sus entornos, lo que construye un dibujo que en difinitiva, cumple pero no sobresale.

En conclusión, Worlk War Hulk se erigió en una más que digna secuela de Planet Hulk, si bien en opinión de este redactor un poco por debajo de su predecesora, lo que sin embaro, no desaconseja su adquisición en absoluto.