Ultrón, Padre de Todos
«Soy el que trae la tormenta, el maestro del trueno, el que te envía a Hel y ¡el hijo de mi padre!»
A día de hoy, cuando como lectores nos acercamos a obras superheroicas mainstream, esto es, Marvel o DC, en las que a modo de What If…? Elseworld o como fuera, se nos narra un futuro distinto para los héroes de la editorial de que se trate, la primera sensación, al menos en el caso de quien esto escribe, es de profundo rechazo.
Muchas décadas han pasado desde que obras como Siempre Vengadores o Días del Futuro Pasado cautivaran nuestros corazones, y lo que entonces sorprendía por su novedad y arrojo, a día de hoy no deja de ser un mero truco publicitario con el aumentar las ventas de una rueda siempre en movimiento con es la que forman este tipo de publicaciones.
Sin embargo, considero que lo importante de una obra, y esto se aplica tanto a cómic como a cine, televisión, novela etc, no es lo qué se cuente, sino cómo se cuente. Y es que, es casi innegable que todas las historias ya están contadas una y otra vez hasta la saciedad, que es prácticamente imposible crear algo completamente nuevo que no tome referencias de obras anteriores, por lo que al final, lo que queda es el poso de las buenas obras, que son aquellas que, aún en el caso de ser reiterativas, si están bien escritas y dibujadas volverán a ser leídas una y otra vez.
Y creo firmemente que este es el caso de Los Vengadoes: Siempre Ultrón, obra que pretendo analizar en esta reseña.
Como su propio título ya sugiere, el argumento principal no es nada del otro jueves: En un futuro distópico que data de cinco siglos más allá del momento actual, Ultrón gobierna todo lo que existe, siendo de hecho considerado el Padre de Todos de esta realidad, título que tradicionalmente ha correspodido siempre a Odín.
Ocurre, sin embargo, que el guionista de esta obra no es otro que Al Ewing, quien todavía no ha hecho un mal cómic y además es buen conocedor de los personajes con los que trabaja.
A su lado, se encuentra nada más y nada menos que Alan Davis, dibujante clásico de superhéroes que convierte en oro todo lo que toca.
Siendo así, lo que no deja de ser una obra del año 2015 que se publicó como impulso para el inminente estreno de La Era de Ultron, la que fue la segunda cinta de Los Vengadores en cines, resulta ser un muy buen cómic precisamente por cómo se lleva a cabo.
En esta ocasión, y con reminiscencias a obras tan importantes como la ya mencionada Siempre Vengadores de Kurt Busiek y el tristemente finado Carlos Pacheco, Rick Jones no es quien llama a los Vengadores de todas las épocas, pero sí lo es un Doctor Muerte desesperado que a pesar de su villanía, no soporta vivir en un mundo tan horrible.
Los elegidos para esta aventura son el Thor de la etapa de Walter Simonson, su contrapartida actual del momento de publicación de la obra, esto es, Jane Foster, la Viuda Negra también del momento editorial en el que este cómic se realizó, y la Visión también de aquel tiempo.
A ellos se une desde el pasasdo el Hulk anterior incluso a unirse a Los Vengadores en el clásico primer número de la colección llevado a cabo por Stan Lee y Jack Kirby, y el Iron Man con James Rhodes en su interior en lugar de Tony Stark.
A todos ellos, y desde el futuro, no se suma Killraven, sino una Capitán América muy especial: Danielle Cage.
Por si todavía hay alguien a quien dicho nombre no le dice nada, baste con decir que se trata de la hija de Luke Cage y Jessica Jones a la que Brian Michael Bendis creó para The Pulse en el año 2006.
Al Ewing demuestra que ha tenido sumo cuidado en la selección de personajes realizada, puesto que se maneja perfectamente no solo con aquellos que vienen de series en aquel momento actuales, sino que se nota que ha leído (o al menos revisado) los cómics en los que los Hulk, Thor y Iron Man de esos distintos tiempos pretéritos hacían su aparición.
¿Estamos ante una digna sucesora de Siempre Vengadores? Rotundamente no, pero no por ello estamos ante una mala obra, sino todo lo contrario. Siempre Vengadores, es una obra que como El Regreso del Caballero Oscuro, Daredevil: Born Again o Watchmen, juega lógicamente en otra liga, la de aquellas obras más sagradas que la Biblia para quienes disfrutamos de ellas y que jamás serán alcanzables, entre otras cosas, porque el momento en el que surgieron, jamás volverá a recrearse, no consiguiendo por tanto influenciar a posteriori a otras obras venideras como aquellas sí lo hicieron.
Sin embargo, y como digo, Siempre Ultrón es una obra poblada de personajes a los que Ewing conoce muy bien, y que entiende a la perfección, encajando perfectamente las motivaciones de cada personaje con el papel que el guion juega con ellos.
En cuanto al dibujo de Alan Davis, simplemente no podemos decir nada que no se sepa ya. El estilo clásico del autor se adapta perfectamente a una obra moderna como es ésta, y demuestra que quien es una leyenda, si conserva su salud, lo es siempre dibuje lo que dibuje.
Una obra que agradecemos sea recopilada en un formato tan accesible como Marvel Essentials dado que desgraciadamente, pasó un poco desapercibida en su momento sin que ahora prácticamente nadie la recuerde, lo cual no deja de ser una pena.
Un total y absoluto must que no debéis dejar pasar.
Lo mejor
• Sin duda, el colosal dibujo de Alan Davis.
• El muy competente guion de Al Ewing.
Lo peor
• Que esta obra no consiguiera el reconocimiento que merece.
Guión - 7.5
Dibujo - 9
Interés - 8.5
8.3
Imprescindible
Reseñamos Siempre Ultrón, la obra con la que Al Ewing y Alan Davis narraron un futuro distópico del Universo Marvel en el que el hijo artificial de Hank Pym gobernaba todo lo que existe.
Gracias por la critica.
Recuerdo este comic y me pareció muy decepcionante, aunque a primeras al ver el equipo creativo de este historia uno suponía que no podía salir algo malo de esto, pero fue todo lo contrario.
Para mi el problema aquí es que no funciona la historia y varios de los personajes elegidos, se entiende que en el contexto de ese época con el lanzamiento de la segunda película de Los Vengadores era una obligación usar a ese villano pero al menos la historia se debería haber trabajado mejor, y ni hablar de los miembros que conforman el equipo de Vengadores para enfrentar esa amenaza, ya que salvo Thor (el original) y Vision el resto esta de relleno.
El autor quiere emplear varios elementos que venía usando en otros comics creyendo que juntanto todo iba a funcionar bien y no fue así el caso.
Lo único realmente bueno de este comic es el arte de Alan Davis, que como siempre demuestra un nivel increible.
Es una pena pero fue una oportunidad perdida de leer un buen comic con los lápices del maestro Davis.
Solo por ver al Thor de Simonson hablando y actuando como el Thor de Simonson ya merece la pena.
Aunque para eso tb puedes coger los cómics de Simonson y leertelos que los vas a disfrutar más…
Bromas aparte a mi me pasó que yo ni había seguido Avengers A.I. o como se llamaran y no pille el «giro» final, ni idea de quién era ese personaje.
Y bueno, Ultron ni pincha ni corta por cierto. Pero tras haberle visto controlar a la Falange, tenerle aqui con el poder de Odin… me hace pensar que se está perdiendo el norte con la hipérbole de la amenaza de la IA maligna. Busiek lo supo hacer peligroso como nunca sin despegar los pies del suelo.
Es que ahí das en el blanco.
La amenaza de Ultron tomando el control de la Falange la puedes llegar a pasar, pero lo de aquí ya es cualquiera y para colmo se da que tenías que haber leído ese otro comic del autor para entender la vuelta de tuerca final.
Y como dije antes lo de la formación es bastante polémica, tienes al Thor original pero por las dudas agregas a Foster, o incluso pones a Natasha, Rhodey y la hija de Luke Cage que no pintan nada ahí.
Creo que ni el autor sabía bien que buscaba hacer.
«Foster»
Sólo eso ya me echa para atrás.