Ah, los años 90… alocada época en el cómic de género superheroico en la que los cambios trepidantes en las colecciones, los tipos duros, las metralletas, el tabaco y el furor “macho men” impregnaban cada viñeta. Una época que tras la desbandada de los grandes talentos a la recién nacida Image, casi acaba con Marvel y DC las dos principales editoriales de cómics de superhéroes del mundo. En dicha época, era raro ver colecciones que despertaran el interés del lector, y es que, todo eran grandes cambios en las vidas de los personajes que no eran malos por su espíritu revolucionario, sino porque estaban perjeñados de manera pobre, buscando sólo rascar el bolsillo de los lectores sin aportar un gran talento y sin entender el espíritu de personajes que llevaban más de treinta años haciendo feliz al fandom pero que parecía que habían perdido el toque.
Pues bien, no todos los 90 trajeron obras malas para los superhéroes. Ahí está la Era de Apocalipsis, un crossover mutante que siempre estará en mi top 5 de los mejores cómics con Gen X, La Búsqueda de Thanos y el Guantelete del Infinito, donde Jim Starlin sacó el mejor jugo posible de su más ambiciosa y cósmica creación y desde luego, quizás en el puesto número 1 de esas pocas pero magníficas obras que consiguieron arrojar un halo de esperanza a tan funesta década; Las Historias Jamás Contadas de Spiderman.
Corrían años duros para el Hombre Araña. Estábamos en 1995 y los mayores problemas a los que se enfrentaba
Por fortuna, para Spiderman, para Marvel, y para los lectores,
Kurt Busiek es uno de esos guionistas que además de tener una pluma excelente, es un investigador incomparable, pues cuando ambienta sus historias en el pasado de los personajes se zambulle en décadas y décadas de tebeos, teniendo mucho cuidado de no cometer ni el más mínimo error de continuidad. Es decir, hace todo aquello que Brian Michael Bendis jamás hace: Leer y estudiar los cómics a los que hace referencia. En 1994, un año antes, ya nos había traído Marvels: La Era de los Prodigios junto a Alex Ross, esa gran historia sobre un fotógrafo que inmortaliza las primeras décadas de Atlas y Marvel, desde la Antorcha Humana original y Namor hasta la muerte de Gwen Stacy, por lo que estaba claro que si Busiek se iba a encargar de revisitar aquellos primeros años de Peter Parker, lo haría excelentemente.
No sería de justicia no mencionar en esta reseña a
En total, hablamos de 25 números que aprovechando algunos personajes y situaciones introducidas por Lee y Ditko, pero que nunca terminaron de desarrollar (dado el carácter autoconclusivo y lineal de aquellos primeros cómics de los 60), cuentan toda una serie de historias “jamás contadas” de Spiderman que encajan como un guante en la continuidad de aquellos primeros números de la colección, situándose más o menos a partir del Amazing Spiderman número 6, cuando Parker trabajaba en el Bugle y todavía tenía que aguantar a Flash Thompson, quien estaba lejos de ser el gran amigo que más tarde fue para el lanzarredes.
Por supuesto, veremos a un Norman Osborn que todavía no ha caído en desgracia, que comienza sus primeros pasos como criminal, y a un Capitán Stacy que se empieza a interesar en quién está tras la mascara del arácnido que patrulla Nueva York. Pero también veremos a personajes como Sally Avril y Jason Ionello, a quienes nadie jamás salvo Busiek ha recordado nunca, y que fueron esbozados por Lee y Ditko como personajes terciarios y muy tangenciales de sus historias.
En cuanto a las ediciones que estos cómics han tenido en nuestro país, podemos hablar de cuatro, salvo error u omisión por mi parte. La primera como no, a cargo de Cómics Forum, casi coetánea a la publicación americana, que nos regaló una segunda ya recogida en tomos. Años más tarde Planeta Cómics, editorial que por aquel entonces tenía los Derechos de Marvel Comics, nos ofreció una reedición en cómodos tomos de tapa dura que agrupaban unos cuatro o cinco números por volumen, con una calidad superior a la hasta entonces realizada para estos cómics, y aquella que con más cariño recuerdo, por ser con la que me fueron presentados y prestados por un muy buen amigo, gracias al cual los conozco.
Y llegamos hasta 2018, en el mes de Abril, en el que Panini ha recogido las peticiones de sus lectores regalándonos la más magnífica edición nunca vista de éste cómic, en un tomo de su sello Márvel Héroes que es más bien un omnigold que recoge los 25 números, los especiales y todo tipo de extras y comentarios que hacen de esta edición todo un must en nuestra estantería, con un precio que, aunque elevado, se justifica por la cantidad de material al que tenemos acceso, con más de 800 páginas para deleitarnos una y otra vez.
Una obra maestra de la época de los 90 que nos recordó que todo empezó para Marvel y para Spidey en los 60, y que siempre había muchas historias para contar de nuestro más querido amigo y vecino, y que todavía había un futuro para él, siempre y cuando se comprendiera su espíritu y motivación, lejos de clones y engañifas facilonas que jugaban con el corazón del fiel lector.
Guión - 10
Dibujo - 10
Interés - 10
10
Obra Maestra
Kurth Busiek y Pat Olliffe le dieron al Hombre Araña en la década de los 90 el revulsivo nostálgico que éste necesitaba.
Fantastico articulo! Recuerdo estos comics con mucho cariño, los lei cuando Planeta publico su coleccionable. Por curiosidad,¿trae esta edicion algun contenido adicional respecto al coleccionable de Planeta?
Excelente colección. Un Kurt Busiek en su salsa
Genial noticia! Seguí la primera edición en grapa, poco antes de abandonar los tebeos por una temporada, así que no llegué a terminarla. La recuerdo con mucho cariño y muy posiblemente me haga con el «tochaco».
Le bajaría un poco la nota al dibujo, pero poco más que criticar del artículo. Excelente reseña 🙂
Pues aun a riesgo de que se registre alguien más para censurar también mi comentario, y sin ánimo de ofender al autor de esta crítica, tengo que decir que a mí también me parece muy exagerada la nota de este tebeo.
Especialmente, como ya han dicho otros comentaristas, en el apartado del dibujo. ¡Un 10 al dibujo de Oliffe para esta serie, por Tutatis!
Aunque entiendo que tal vez las lecturas de Raúl Gutierrez no lo han llevado todavía a descubrir clásicos como los que cita Ignacio, por ejemplo, o tantos otros más que se deja en el tintero. Ahí está el Sky Masters of the Space Force de Kirby y Wood, por ejemplo.
O quizá, simplemente, el interés del señor Gutierrez sea únicamente el género superheroico, no lo sé. De ahí que calificase el dibujo de Frank Quitely para Jupiter’s Legacy en una crítica anterior como «bello y distinto a lo que estamos acostumbrados los lectores de cómic».
Pero, vamos, que un diez al dibujo de Oliffe me sigue pareciendo demasiado. Sobre todo si tenemos en cuenta que en ocasiones anteriores el mismo redactor dio, para que podamos contrastar, un 10 al Miller de Daredevil, un 9 al dibujo de Sal Buscema en El Increíble Hulk («magistral», le llamó, pero se queda un punto por debajo del trabajo de Oliffe en estos tebeos), otro 9 al Mike Zeck de La Última Cacería de Kraven o un 7 al Simonson de Los 4 Fantásticos. Por ejemplo.
Cuestión de sensibilidades, imagino.
Tranquilo, nada más lejos de mi intención censurar la opinión de nadie, y menos la tuya, que expones con respeto y con tu criterio. Evidentemente das en el clavo con “cuestión de sensibilidades”. Eso es el arte, cuestión de sensibilidades. Todos tenemos nuestra sensibilidad y nuestro gustos, y podemos opinar muy diferente de una obra. Ahora bien, me parece una falta de respeto llamar “sobrevalorado” a Kurt Busiek, y a cualquier otro guionista o dibujante o profesional del medio. Y por supuesto, creo que es un camino muy equivocado comparar obras solo porque sean comics, creo que nadie en su sano juicio compararía una obra renacentista con una expresionista, igual que sería muy vanal comparar alien el octavo pasajero con el padrino. Y solo quería dejar constancia de mi tristeza al leer vez tras vez críticas que se fundamentan en: “te gusta eso porque no has leído lo otro” o “es que te falta mucho por leer”. Eso pensaba yo también antes, ahora me doy cuenta de lo errado y pretencioso que es, y lo vacías que suenan esas palabras.
Yo recuerdo esta colección como un tesoro en los 90, en un tiempo donde la serie regular del arácnido estaba más que perdida. Todo lo relatado encajaba como un guante en la continuidad y podía sentirse el respeto y amor al material original de Lee y Ditko. MUY RECOMENDABLE. Poner notas es siempre arriesgado. Quizá si lo hubiese dibujado Marcos Martín el 10 sería inncuestionable, pero pienso que Olliffe y Williamson fueron muy efectivos y consiguieron contar una historia sin ensombrecer la labor del guionista. Una obra coral donde guión y dibujo se complementan sin solaparse, lo que viene a ser un clásico.
Yo creo que esto de las puntuaciones es algo muy subjetivo. Ya que un servidor tuvo una charla con una persona que como Ignacio veía el 10 muy exagerado. Es
obvio que comparando con joyas del comic universales los críticos e intelectuales del comic se reirían de la puntuación. Pero a los fans del trepamuros y amantes de la etapa de Ditko nos parece una joya amen de que se publico en los infaustos 90; ganándose asi las simpatías de los fans. Yo compre las grapas en su primera edición y las disfrute como un cochino. Y para mi personalmente no las cambio ni por Asterix, Blueberrys, Maus o lo que sea. Por muy legendarios que sean nunca me han impactado como los supers…
Gracias a todos por vuestros comentarios! Personalmente creo que os fijáis demasiado en la nota. Le pongo un 10 en todo por el valor global que tiene como obra y lo que supuso en su época. Evidentemente, no en todo se puede estar de acuerdo y eso es algo indudablemente afortunado. Leo muchas cosas, europeo, americano, superhéroes y no superhéroes, pero reseño área Marvel.
Un saludo a todos.
Yo es que directamente no entiendo por qué se ponen notas; quicir, dedicas una, dos horas, las que sea para escribir una reseña de puta madre y al final le colocas la tontería esa de las puntuaciones como si el lector no fuese capaz de deducir por sí sólo lo que el articulista opina sobre el tebeo.
Más allá de fomentar la vagancia lectora o crear polémicas innecesarias, como en este caso, ¿cuál es su utilidad? En serio que no lo entiendo.
En el caso particular de esta reseña, si a mí me preguntasen yo diría que Las Historias Jamás Contadas es un tebeo muy recomendable, más aún en el contexto de la época que se publicó. Y con eso ya da para hablar del tebeo y que cada uno exponga sus impresiones sobre él.
Pero si después suelto que el dibujo es de diez, al final en vez de hablar del tebeo vamos a hablar del criterio para puntuar, de lo que se ha puntuado en otras reseñas, etc. Flaco favor al tebeo, al articulista y a la propia página, creo.
En fin. Cosas que pasan.
Lo dices como si fuera algo inherente a tener notas en una reseña el discurrir de comentarios de esta entrada, con el tipejo este faltando el respeto al personal. Lo siento pero No. La nota evidentemente abre la posibilidad a opinar de ella como cualquier otro aspecto del texto, pero las ínfulas de cultura por leer comic francobelga vienen de casa y encontrarían salida en cualquier otro elemento insustancial del texto del articulista.
Yo voy a abrir una firma en change.org para que cambiéis la nota de este artículo, es una verguenza. Por favor, señor Ignacio, estoy deseoso de leer tus críticas y reseñas en tu web, más aun, desearía leer alguna de tus obras, seguro que no son tan mediocres como las de Busiek. Sería muy iluminador para mí disfrutar de tu erudición. Dijiste que tenías cómic franco-belga, no tenía ni idea de qué en Europa se hacían cómics, podrías recomendarme algo para cuando termine de leer Heroes Reborn? De verdad… no salgo de mi asombro. Si estos artículos hacen flaco favor al cómic, qué hacéis vosotros? Dar un 10 no me parece que signifique que “no se puede dibujar mejor”. Entonces nadie lo merecería, porque si pensáis que hay alguna obra perfecta, entonces no tiene sentido seguir explorando distintos caminos narrativos, o distintas técnicas plásticas. Un 10 significa que una obra ha alcanzado a la perfección los objetivos que buscaba. Y aunque no merezca un 10… es que el artículo lo ha escrito otra persona con su criterio y opinión! Bueno, dije que no diría nada más, y lo vuelvo a decir, pero… quién sabe? Coherencia, vaya!
Hola a todos!! No suelo comentar sobre tebeos que no he leído, y en general el rollo retro no me va mucho, así que este comic de Spiderman sin duda no es para mi. Pero no he podido evitar ver el volumen de comentarios e intuir que algo chungo se estaba «cociendo».
Por un lado, creo bajo mi punto de vista que Pat Olliffe es un dibujante correcto y cumplidor a secas, en ningún caso de sobresaliente. Pero leyendo la reseña de Raúl se entiende perfectamente que este tebeo, y por tanto sus autores, encajó con él completamente y le dio el tipo de historia que no se estaba haciendo en esa época y que él necesitaba. ¿Le hubiera dado yo un 10? Seguro que no. ¿Entiendo que pueda ser un sobresaliente para alguien? Por supuesto.
Y luego tenemos al tal Ignacio, que ha entrado como elefante en una cacharrería con unos malos modos lamentables y una actitud que ha dado vergüenza. Me encanta que la gente recomiende los comics que le gustan con argumentos en la mano y se generen debates sanos sobre nuestro hobby. Sinceramente, a gente como Ignacio, que obviamente es mucho más inteligente e ilustrado que el pueblo llano al que pertenecemos la mayoría, no le necesitamos… Al menos con esa actitud sobrada. Que pena.
El problema es que la conclusión de la reseña es que el objeto de la misma es considerado una obra maestra y sus creadores autores sobresalientes. Lo que me hace preguntar si Las historias jamas contadas de Spiderman es al cómic lo que Las uvas de la ira a la literatura. Porque la novela de Steinbeck sí se considera, de manera más menos unánime, una obra maestra en su medio.
Demasiado a menudo, confundimos placeres culpables con obras relevantes, algo que, manifestado públicamente, hace un flaco favor a la imagen que damos del medio y de nosotros mismos como aficionados y/o expertos.
Pero es que esto no es una revista profesional. Ni siquiera es una web profesional. Son las opiniones de Raúl Gutierrez en su blog, no tiene que hacer un favor al medio o a los aficionados/expertos.
Yo no me compraré este tomo de Spiderman por control de costes, y si considerara que es un 10, o un 8,5 seguramente lo haría. Quiero decir que no coincido con Raul en absoluto en la alabanza al tebeo, y tampoco me emociona como a él el dibujo.
Pero esta es SU entrada de blog. Le puedo decir que no estoy de acuerdo, pero no decirle como tiene que usar su espacio público de escritura ni darle reglas para calificar obras de arte. Porque ni esto ni Watchmen son las Uvas de la Ira, lo siento. Son cómics de superhéroes y el 50% del valor que tienen es, en muchas ocasiones, nostalgia y apego a los personajes.
Ponle un 10 a lo que quieras Raúl. Aún vivimos en un mundo libre aunque Internet a veces intente imponer el criterio de la mayoría con más fuerza que la censura de otros tiempos.
Sé que no es una web profesional ¿quieres decir con eso que no debemos tomarnos en serio el trabajo de análisis de sus colaboradores? Yo no lo creo. Un crítico o comentarista crea opinión, así que tiene una cierta «responsabilidad» y, a mi modo de ver, sí se da una imagen pobre de un medio si se califica de obra maestra un trabajo de calidad media.
Y no le digo a nadie cómo tiene que hacer su trabajo, creo sinceramente que no lo he hecho, he dado mi opinión, igual que lo has hecho tú, pero no insinúes que en mi ánimo está censurar o decir a nadie cómo debe hacer las cosas.
Yo estaba hablando al respecto de unos comentarios que han descalificado la calidad de la reseña y los conocimientos del articulista, indicándole que sus valoraciones eran ridículas. El mundo de los comentarios tiene eso, hay que aguantar las maneras de gente que, seguramente, no sería tan vehemente en persona, pero no deja de parecerme mal y lo digo.
Yo no he pretendido decir que tú hayas hecho nada de eso, en cualquier caso. Ni por asomo además.
Y sí, lo que digo es que Raúl no tiene responsabilidad ninguna como crítico porque esto es un blog no profesional. Yo sigo ZN desde hace tantos años que ni me acuerdo, y sé tan bien como tú que esta web es referencia en castellano del mundo del cómic americano, esforzándose además en serlo del europeo o del manga. Les alabo la trayectoria y los éxitos conseguidos por sus colaboradores, todos ellos amateurs cuando empezaron. No te critico pensar que ese legado debería mantenerse y honrarse por los más novatos pero sí cierta crítica al articulista por no estar «a la altura» en sus opiniones o valoraciones.
ZN ha sido siempre una gran comunidad, que desde hace años está muy disminuida en cuanto a comentaristas. No siempre se echa de menos las luchas de egos y bromas privadas de los visitantes más veteranos, pero se aprendía tanto o más de los hilos asociados a cada artículo que de las propias reseñas. La ZN actual tiene una comunidad menor (dudo que de lectores, pero sí hay muchos comentaristas que han renunciado a escribir) y eso yo lo echo de menos y lo lamento. Pero tampoco voy a pedir a los que comentamos que mantengamos el nivel de los viejos rockeros a la hora de valorar la narrativa y el metalenguaje de Morrison o Moore.
Comentar la reseña es enriquecedor. Criticarla lo es más aún porque ayuda al lector ocasional a entender los distintos puntos de vista. Hacer una propia es ya de nota. Decir que tal o cual cosa es ridícula o que falta cultura del cómic es gratuito y no crea comunidad, al contrario. Y Jesusy, insisto que no he dicho que tú lo hayas hecho.
Sobre tu comentario, por no convertir esto es un offtopic de libro, creo que lo importante aquí es entender que para Raúl, un 10 no quiere decir Obra Maestra sino que el lo recomienda al 100%. Mientras entendamos lo que el autor quiere decir me parece que no es tan grave lo de las notas, aunque como a casi todos no me gusten mucho en este tipo de reseñas.
Agradezco tu aclaración, pero tu comentario aparecía como respuesta al mío y era lógica mi confusión.
Sí, es que no tengo el don de la concisión. El primer párrafo iba sobre algo que habías dicho tú al respecto de la responsabilidad de cara al medio o al aficionado y a partir de ahí me he dejado llevar.
En cualquier caso estos posts aunque molestos seguro para el moderador de la web son interesantes de cara a poner sobre la mesa el estado de ánimo de la comunidad.
En otras ocasiones, por ejemplo, se ha reclamado mejor redacción a los articulistas. Las maneras de hacerlo a veces han sido malas, aunque si de ello deriva una corrección formal mayor, yo personalmente lo agradezco. Hoy se pide más imparcialidad en las reseñas, entendiendo que ZN es algo más que un blog personal, por historia y por legado. Pues si se hace con respeto también me parece interesante, a lo mejor Raúl toma nota y le quita una capa emocional al análisis (o añade una nota emotiva a la estrictamente analítica).
Pero siendo una web de colegas reseñando en su tiempo libre no está de más que los consejos vayan de la mano del reconocimiento al tiempo que dedican a mantener ZN viva y saludable como siempre.
Sobre tu argumento, muy interesante y con el que coincido en muchos aspectos, lo único que puedo decir es que esto no es el New Yorker o el Jot Down, garantes de la intelectualidad, sino una web de amantes del comic realizado sin ánimo de lucro.
Yo entiendo que dar un 10 de Matrícula de Honor a este tebeo puede ser excesivo, pero vaya! Dejemos que cada uno tenga su opinión y la exprese de forma tan razonada como Raul.
Yo no digo que deba ser el Jot Dow o el New Yorker, eso lo dices tú.
Y sí, me habéis convencido, dejaré que cada uno de su opinión, sin intervenir, que no gusta que se insinúe que soy un intelectualoide o un censor.
Zona Negativa ha sido durante muchos años un referente en castellano y no creo que haga falta mencionar algunos de los articulistas que han pasado por aquí y que a día de hoy se ganan la vida con los cómics. Si se ha llegado al punto en que hay que tirar de «esto es un blog de opinión» o de «esto no es Jot Down o el New Yorker», es una verdadera lástima.
Estoy de acuerdo contigo David For President. Respeto mucho el trabajo de muchos de los colaboradores de esta web como para ser condescendiente con su trabajo y zanjarlo con un «sólo son súper héroes» o «cada uno puede tener su opinión».
Si algo puede decirse de Olliffe es que ha mejorado de forma notoria. Merece la pena detenerse en su más reciente trabajo con algunas páginas asombrosas que venden por sí solas el producto.
Continuando con el Off-topic, no sé quién ha dado una clave por la que entre en este debate, ZN es una página de referencia en esto desde hace mucho años, y yo recuerdo haber leído comentarios y comentarios y comentarios… y desde hace tiempo la participación es muy baja, y cuando se anima la cosa es por encontronazos desagradables como estos. Y no es un problema de esta página, no, es una maldita epidemia que inunda internet, por culpa de gente que, en lugar de aportar, se dedican a demoler las opiniones de los demás a base de: “no tienes ni idea, si hubieras leído lo que yo no pensarías así”. Efectivamente en esta página se cometen errores, como por ejemplo, errores de redacción, y se debe decir, para que mejoren. Eso es una cosa, y entrando de nuevo en el caso que nos ocupa, tampoco es que hayan puesto a un 10 a… no se… el Spiderman de McFarlane, esos guiones y esa narrativa no tiene defensa posible. Pero en este caso, resulta que esta obra, para muchos (fans del trepamuros, consumidores de cómic, páginas de reseñas y opiniones) es un imprescindible, y le dan notas como 4,5 sobre 5; 9 sobre 10 (ay, como nos gustan las notas). Y es que, no hay muchas historias de Spiderman que funcionen fuera de su continuidad. Muchos amigos me dicen que les recomiende algo de Spiderman para leer, pues hombre, depende del bagaje que tenga, pero el Spiderman de lee y ditko no es el mejor para entrar en el año 2018. Spiderman Blue, Las historias jamás contadas, la última cacería de kraven, el niño que llevas dentro (mi debilidad personal), pecados del pasado (es broma!!!), son mucho más apropiadas porque aúnan una historia autocontenida con una extraordinaria calidad, que hacen que funcionen perfectamente para cualquier lector, de género súper heroico o no, fan de Spiderman o no.
Antes de nada, recordar que si la participación es baja no creo que sea tanto por algo epidémico como porque el 90% de aquellos comentaristas habituales de la página se fueron a la vez.
Offtopic aparte, yo estoy de acuerdo en que dentro de lo publicado de Spiderman Las Historias Jamás Contadas es una obra importante y, sobre todo, entrañable. Pero si la nota depende de la media de tres categorías diferentes y para que no te salga una nota global más baja de lo que te gustaría tienes que cascarle un 10 al dibujo de Olliffe en esta obra (o un 9 a Rom Lim en sus cómics con Starlin),… joer, igual vale más dejar que el lector interprete a partir de tus palabras si la obra es recomendable o no.
Es que veo el percal, me imagino a día de hoy una reseña de Sandman y no quiero ni pensar en la nota que habría que ponerle artificialmente al dibujo para que no te quedase un media inferior al sobresaliente que se merece la obra independientemente de su dibujo.
Ese cómic es sencillamente UNA JOYA y uno de los mejores trabajos escritos por Kurt Busiek. En ese entonces los cómics regulares de Spider-Man eran el summun de la mierda envuelta en vistosas portadas lenticulares y cromadas, que podía tener unos dibujitos muy monos, pero cuyas historias eran terribles, infumables al cubo. UNTOLD TALES OF SPIDER-MAN fue lo que salvó al personaje de la debacle absoluta, aunque se publicó originalmente en un papel de menor calidad que el de las series «regulares» y no se proyectaba que durara más de seis números, pero el título empezó a vender y, lo mejor de todo, a gustar a todos. Era imposible ser indiferente a un cómic en donde veías al auténtico Hombre Araña «haciendo lo que sea que las arañas pueden hacer».
Acá en Perú una tienda trajo un ejemplar de este tomo y nadie le daba pelota porque hasta los que atendían en la tienda no tenían ni puta idea de lo que era. Yo no tenía dinero para comprarlo, pero por suerte me acompañó un amigo en plan de asesorado, pues quería comprar algo para reiniciarse en los cómics del trepamuros, al que hace años había abandonado. Ahora se ha vuelto un fan acérrimo de esta serie y dice que en varios momentos se le escaparon las lágrimas de la emoción por lo buena que era y lo adictiva que era su lectura. Tal vez algún día me la preste o yo me la encargaré por Amazon, pero al menos me va a presentar a su hermana, lo cual ya es ganancia. 🙂
Y sin irnos muy lejos, si esto es un 10, que nota le pondrían a la etapa de Lee y Ditko?
Me parece muy buena serie esta de Busiek y Olliffe, pero creo que está muy mitificada debido a la época en la que salió.
Ignacio, por favor, controla un poco tus formas. Si no estás de acuerdo con un artículo, una nota o la opinión de otro comentarista, comenta sin problemas, pero no faltando el respeto a nadie como has hecho reiteradamente en esta entrada.
Un saludo
Llevo visitando esta página desde mi adolescencia, cada vez más lejana. Nunca he comentado porque me da mucha pereza la gente que opina por internet, pero al leer esto, no he podido hacer otra cosa que registrarme para contestar. Primero, porque llevo viendo desde hace tiempo una corriente que ataca las reseñas que aparecen en esta web con argumentos irrefutables como: un 10, por favor! Autor sobrevalorado! Y, en segundo lugar, porque, si hay una obra de Spiderman que merece un 10 (y alguna hay…), desde luego es esta. Podemos discutir un 9 quizá en el dibujo… venga, un 8.5… pero estamos locos? Que se merece Watchmen o Maus? sin duda un 10. Eso es argumento para que ninguna otra obra lo merezca? Que chorrada…
No sé si te habrás percatado, pero tampoco he hecho ningún intento de argumentar por qué me parece una obra maestra el cómic que nos ocupa, principalmente porque no me apetece, ya lo ha hecho el señor Raúl Gutierrez, a su artículo te remito. Delirante me resulta que tú mentes watchmen. Solemos valorar muy positivamente (incluso tapar errores) que una obra aporte algo nuevo, que rompa ciertos esquemas o que explore diferentes puntos de vista de un mismo hecho. Watchmen lo hace, igual que Authority, Black hammer, o la obra del “sobrevalorado” Busiek, Marvels. Muestran los superhéroes desde distintos ángulos. Bien, pues, eso mismo hace en las historias jamás contadas. En una nefasta década en la historia del cómic en la que se estaban haciendo cosas diametralmente opuestas con dibujantes que provocaban urticaria, Busiek vuelve a recuperar el Spiderman de Stan Lee y Ditko (espero que lo hayas leído, si no te conmino a ello) y es asombroso cómo logra llevarte a esos años 60, tratando a los personajes secundarios, a los villanos, a todo lo que rodeaba a ese Spiderman con un cariño inmenso, que no hace otra cosa que contagiarte y convertir su lectura en una de las experiencias más gozosas que puedas tener en un cómic de superhéroes, y de Spiderman en particular. No imagino esa obra dibujada por otro que no sea oliffe, que también hace un excelente trabajo, mediante su estilo, para llevarte a esa nostálgica época. Y no creo que vuelva a comentar, prefiero dedicar mi tiempo a la lectura, que es mucho más provechoso.
Madre mía.
Aplausos! Me has llamado bocazas, cuestionas mi coherencia, me llamas chaval sin saber quién soy! Te dirijes a mi como “campeón” y dices que vomito mis comentarios, aparte de equivocarte enormente acusándome de leer solo superhéroes. Te has cubierto de gloria, y es una pena, porque en este último comentario has dicho muchas cosas atinadas y que merecerían consideración, incluso debate, pero a estas alturas no pienso malgastar ni un segundo más contigo. Sigue vomitando bilis por internet, un abrazo, majete.
A ver Ignacio, en uno de tus comentarios dices lo siguiente:
«Yo no creo que nos fijemos mucho en las notas. Lo que sí creo es que tú las pones muy alegremente, sin reflexionar y pensar cuál es el auténtico valor de un tebeo en general, y de las facetas del mismo en particular.»
Al respecto de dicho comentario, me llevaría una gran alegría si amplías dicho comentario y me dices cual es el auténtico valor de «Las historias jamás contadas de Spiderman», a nivel general. Y si además eres capaz de hablarme de sus facetas en particular, te pongo en un altar.
Y tú lo resuelves todo insultándome basándote en vete a saber qué, ni me conoces, ni sabes mi edad, ni sabes a qué me dedico ni que he estudiado. Seguramente piensas que he empezado leer cómics hace cuatro días por las pelis de marvel (por cierto, cosa que no me parece mal, al contrario, me encanta que la gente se acerque a este medio de la forma que sea). Y lo que estás consiguiendo es que me parta de risa cada vez que leo tus respuestas. Empezó resultándome desagradable e irrespetuoso tu troleo, y por eso entré a comentar, pero ahora ansío tu próxima ilustrada disquisición. En fin, esto no lleva a nada, tú piensa lo que quieras, yo seguiré agradeciendo leer a gente que escribe con emoción y cariño sobre este maravilloso arte, esté o no de acuerdo con sus valoraciones. DEMAGOGIA DEMAGOGIA!