Pero ¿Qué es la continuidad retroactiva? A lo mejor a estas alturas resulta innecesario explicarlo, pero quizás haya lectores que no sepan en qué consiste esta técnica, y no cuesta nada dedicarle unas breves líneas a su significado. Pues bien, la continuidad retroactiva es aquella técnica por la que se introducen elementos nuevos en la continuidad del personaje a través de flasbacks que nos dicen que siempre han estado ahí, que forman parte del pasado del protagonista. Se trata de un engaño cómplice en el que participan autor y lector, pues desde el principio el consumidor es consciente de que estamos ante un personaje nuevo, y si ha leído varias historias del héroe en cuestión, sabe que nunca ha aparecido ese nuevo elemento.
De esta forma, acudiendo a esta técnica, Brian Michael Bendis introduce a
Lo primero que sorprende de esta historia es que Bendis juega como quiere como la continuidad de Daredevil. Esto es, crea a un personaje, Bont, que a priori está pensado para un solo arco argumental, por lo que no es esfuerza demasiado en que el pasado que narra encaje a la perfección con la que ya sabemos de
Interrumpo aquí mi análisis del argumento para hacer referencia al que en este caso es el verdadero rey de la historia: El Dibujo. Y es que, si en algo destaca el noveno arte por encima de la escritura es que se pueden narrar historias ambientadas en otras épocas haciendo uso de un estilo de dibujo distinto.
Y ese es exactamente el caso de La Edad Dorada, cómic en el que
En primer lugar, parte de la historia está ambientada en los inicios de Alexander Bont, en los años 40, el cual pasa de ser un delincuente de poca monta al verdadero rey del crimen, demostrando a los vigilantes de la época que no les teme y que no va a dejar de hacer negocios por mucho que ellos se vistan con trajes coloridos y traten de arrebatarle su ciudad. Esta parte está dibujada en riguroso blanco y negro, como si de una película antigua se tratara, demostrando Bendis un gran conocimiento del quién es quién marvelita de aquella época, recordándonos a otros obras como El Proyecto Marvels.
En segundo lugar, tenemos una historia que podríamos decir que está ambientada en la década de los 60 dado el estilo de dibujo con “impresión en puntos” y color más apagado que el empleado actualmente, pero que por continuidad marvel debería de ser la década de los 90, en la que un Bont con un poder consolidado en los bajos fondos se enfrenta a un primerizo Daredevil, el cual desde luego y como no podía ser de otra forma, va vestido de amarillo, con ese traje que llevara en sus inicios en la casa de las ideas. Y es que, no hay mejor manera de hacer saber al lector que está ante el pasado de un héroe que si vestimos a éste con sus primeros trajes.
Finalmente, el resto del argumento está enclavado en la actualidad, donde ya Alex Maleev hace gala de su dibujo oscuro y de trazo firme al que nos tiene acostumbrados.
La realidad es que La Edad Dorada es una de esas historias que pese a jugar con el pasado de Matt Murdock, no aporta prácticamente nada a éste, ni a la gran historia que desarrollan Bendis y Maleev, esa novela río que comenzó con el arco Lugarteniente. Sin embargo, ello no lastra su calidad, pues una historia no es buena porque revele cosas o porque proporcione datos de rigurosa importancia, si no por como está escrita y dibujada y como ese se proyecta en el lector y en este caso, La Edad Dorada quizás tenga un interés bajo como historia de Daredevil, pero es de lo mejor que existe sobre el personaje.
Guión - 8
Dibujo - 10
Interés - 6
8
Nostálgico
Brian Michael Bendis y Alex Maleev viajan al pasado de DD con una historia que tendrá importantes consecuencias en el presente.
Nunca me he acostumbrado a este dibujante, me parece un dibujo feo, sucio y desagradable, así que lo del 10 no lo entiendo pero bueno sobre gustos ya se sabe.
Totalmente de acuerdo, la etapa esta será de lo mejorcito pero lo que es el dibujo al menos para mi es feo de narices.
Hola, amigos:
sin querer entrar en polémicas, pero, ¿qué es feo? No sólo es que sea, en mi opinión, una apreciación subjetiva, sino que, además, no tiene en cuenta, por ejemplo, el aspecto de la idoneidad al tono de la historia que se cuenta. Yo no me imagino este tebeo dibujado por Reiss o Lee, no porque su dibujo sea feo, aunque a mí no me guste, sino por el simple hecho de que no es el más adecuado para él.
Dibujo feo, sucio y desagradable para una historia…fea, sucia y desagradable. Perfecto, pues es gran virtud del dibujante conseguir la atmósfera adecuada al tono de la historia. No desmentirla, sino reforzarla. Esto no trata de felices saltimbanquis salvando el universo cada mes, sino de algo distinto. Felizmente distinto.
Bueno, un saludo, y hasta otra.
A un servidor esta historia de la notable etapa de Bendis con el cuernecitos no le hace demasiada gracia a causa de esa «continuidad retroactiva» que maneja el guionista y que nunca, pero nunca le sale bien. Este caso roza el absurdo justo con el ejemplo que se pone de la «edad» de Matt pero hay más perlas como poner una escena del pasado donde se ve a DD con el primer traje amarillo junto con Tigre Blanco… cuando es un personaje que se presentó muchos años después y con el traje rojo de DD mucho más que asentado. No se que problema tiene Bendis con revisar los cómics antiguos que se «basa» pero es que es criminal que cometa siempre errores de continuidad en prácticamente todos sus trabajos, miedo me da cuando empiece en DC.
En cuanto al dibujo de Maleev he de decir que me encanta, sin volverme loco, ya que le sienta muy bien a la etapa. La saga en concreto está espléndido a la hora de manejar los diferentes estilos de dibujo por cada época (sin llegar a parecerse demasiado a esos estilos de dibujo pero que se le va hacer). Su estilo en la parte de los años cuarenta me recuerda bastante al dibujo del gran Jose Muñoz.
Eso sí, me extraña un poco que en el artículo se hayan puesto imágenes del Daredevil #65 dibujadas por Michael Golden cuando el número se incluye en el anterior tomo de la colección, no en el presente.