La ira de Marc Spector
«Alguien tenía que hacer las cosas divertidas»
Con siete años de andanza a sus espaldas, Marvel Saga se ha convertido por derecho propio en ese sello editorial en el que hoy en día tienen cabida todo tipo de colecciones Marvel siempre que las mismas pertenezcan al Siglo XXI, y que además, supongan puntos de entrada sencillos para cualquier tipo de lector.
De este modo, quien comience la compra de unas de las colecciones de Marvel Saga desde su primer tomo, tiene garantizado que en sus manos tendrá la etapa o etapas de determinados autores al frente de un personaje, y que además no necesitará ningún tipo de background previo, ningún conocimiento sobre la continuidad Marvel para poder subirse a la colección en cuestión y disfrutarla.
Por tanto, si se es un nuevo lector que llega a estos personajes por influencias audiovisuales, Marvel Saga resulta un buen modo de iniciarse en el mundo del cómic, pero también es apto para aquellos lectores que llevan un tiempo sin leer cómics de la editorial y que gustan de series cerradas y terminadas que no les obligan a conocer los distintos sucesos de calado que han tenido lugar en la Casa de las Ideas como universo compartido.
En esta ocasión, la colección vuelve a esas raíces más urbanas que tenía cuando Daredevil o Jessica Jones estrenaron en sello. La razón, es sencilla: En aquel entonces, año 2015, Netflix se disponía a estrenar series de televisión protagonizadas por dichos personajes y hoy, en 2022, es inminente la llegada del Caballero Luna al MCU.
Con esta tesitura, es lógico que se recuperen las series modernas del Puño de Konshu en un sello tan propicio para ello como Marvel Saga, que estrena así nueva colección a la que poder subirse tanto si se es fan del personaje, como si buscamos conocerlo a fondo y no queremos leer sus aventuras fundacionales.
En esta caso, comenzamos con el inicio de la etapa del novelista Charlie Huston al frente de la colección, acompañado por el insigne David Finch al dibujo, quienes tenían entre manos adaptar para un nuevo siglo y un nuevo público al héroe presentado en las páginas de Werewolf By Night en 1972.
Pues bien, dado que el personaje había vivido varias etapas editoriales pero pocas de ellas de calidad, siendo siempre visto como suerte de Batman de segunda, lo que Houston, experimentado novelista llevó a cabo fue quedarse con las bases que durante décadas habían hecho al personaje lo que era, desprendiéndose de todo lo demás.
Así, teníamos por supuesto a Marc Spector, el mercenario que en una guerra fue rescatado por el dios egipcio Konshu que lo convirtió en su vengador. También teníamos al resto de personalidades del personaje, como el taxista Jake Lockley y el playboy Steven Grant, que aquí no son tanto un recurso narrativo o un juego del personaje, si no más bien partes de la fracturada mente de Spector, que deja claro en esta serie lo que ya era un secreto a voces de etapas previas: Su personalidad múltiple.
La novia a ratos del personaje, Marlene, y su amigo Frenchie, también aparecen, pero más que como secundarios cómicos o excusa para que la acción avance, como aquellas personas que tienen la difícil misión de aguantar la locura de Spector cuando ésta sale a la luz, sin que su amistad o amor compensen por lo que tienen que vivir.
Por otro lado, el Caballero Luna no se nos presenta como un vigilante al uso, con un código moral más o menos definido que le invite a imponer la justicia, si no exactamente como lo que es: El brazo armado de un dios vengativo que sí, castiga a los malvados, pero con una dureza y una implacabilidad que no admite grises ni opiniones contrarias. Un enfoque que hace al personaje más similar al Castigador que, por ejemplo, a Daredevil, pero que en lugar de estar motivado por una venganza propia, es empujado por una misión sagrada que lo hace quizás, aún más peligroso.
Tenemos por tanto al antihéroe perfecto, que no es en absoluto idealizado por su guionista y que David Finch con su estilo suave y dinámico, dota de la suciedad y el macarrarerío necesario para que la figura de Spector cale en nosotros como lectores.
Un cómic muy recomendable para iniciarse en el personaje, o simplemente, para disfrutarlo, si como quien esto escribe eres fan de las aventuras urbanas y del vigilantismo callejero.
Lo mejor
• Una actualización perfecta para el personaje.
• Un punto de entrada excepcional.
Lo peor
• Que no se incluya en este tomo el anual que sí incluía la anterior edición, más barata.
Guión - 7
Dibujo - 8
Interés - 6.5
7.2
Recomendable
La línea Marvel Saga vuelve a sus raíces más urbanas con el comienzo de la recopilación de las series modernas del Puño de Konshu.
No sé si estoy flasheando pero por algún motivo el arte de Finch me recuerda al de Hirohiko Araki.
En fin, otra etapa de Moon Knight que toca leer.
Me llena de alegría volver a leer todo este relanzamiento de Spector con ese aire tan Marvel Knights, y lo que esta por llegar de Bendis, Warren Ellis, Wood, Bunn y Lemire también lo espero. Sobra decir que a nivel gráfico esta primera saga es de un nivel elevadísimo, perteneciente a la época donde posiblemente tuvimos la explotación del splash page en su mejor expresión. A nivel guion pues recopila datos y recuerdos de todo lo que se puede apreciar en la «Biblioteca Caballero Luna» y te lo reinstala en una NY que esta cambiando hacia una nueva era, una donde el crimen cada día es más brutal con los vigilantes y nuestro disociativo de la personalidad favorito hace gala de lo terriblemente impredecible que puede llegar a ser
Muy recomendable