Los Villanos también lloran
Si bien los eventos periódicos serían algo que caracterizaría la colección de El Asombroso Spiderman durante la etapa inmediatamente posterior a cargo de Dan Slott, lo cierto es que como sabemos, tampoco eran algo especialmente ajeno a Un Nuevo Día, que sí que es cierto que como etapa huía de esas historias “más grandes que la vida” apostando por lo cotidiano y corriente dentro del género superheroico.
Pues bien, este tomo es el primero que trata El Desafío un evento en el que aunque la cotidianeidad se mantiene, pues no se nos narra en él nada que defina al personaje, la trama se centra en los villanos más icónicos de la amplia galería arácnida, ofreciéndonos una visión de ellos nueva y actualizada por un público perteneciente a otra época.
La primera historia está protagonizada por Electro, con un magnífico dibujo de Javier Pulido, en la que se nos narra qué ocurre cuando Electro decide presentarse como una víctima de los abusos arácnidos, agitando a las masas.
Sí, puede resultar poco creíble que alguien como Max Dillon sea capaz de mover al pueblo neoyorkino en contra de uno de sus mayores héroes, pero Spiderman no es ajeno a la difamación, y esto no hace si no representar al ciudadano americano medio que se deja de llevar por casi cualquier icono que los medios de comunicación creen de la noche a la mañana.
La trama continúa con una historia protagonizada por el Hombre de Arena que se convierte en la mejor que podemos encontrar en este tomo, plagada de tragedia y emotividad, y con un dibujo de los que quita el aliento, en la que nos muestra la cara más compasiva de Flint Marko.
En el año 2009, la tercera película de Spiderman no se encontraba tan lejos como ahora, y todavía quedaba en el público esa imagen del Hombre de Arena que no era si no una víctima del sistema, un buen padre de familia que había tomado malas decisiones, no un villano al uso.
Finalmente, el Rhino protagoniza las últimas páginas de este tomo, dibujadas por Paul Azaceta, en las que un Rhino que ha decidido redimirse, gracias al amor de Oksana, la mujer que lo ha cambiado. Rhino literalmente mata a su alter ego villanesco y trata de ganarse la vida de forma honrada, huyendo de un pasado oscuro y criminal.
Mark Waid y Fred Van Lente son los encargados de esta puesta a punto villanil tan interesante.
Sin que este argumento nos cuente nada del otro jueves, la realidad es que como mínimo supone un ejercicio de originalidad dentro de la colección arácnida que presenta aspectos diferentes de tres de los villanos más conocidos del plantel, buscando hacer avanzar a los personajes de la serie principal más allá de la aventura mensual que termina con la habitual pelea superheroica.
Un tomo recomendable, como el resto que conforman este pequeño evento y que analizaremos en los meses venideros.
Lo mejor
• El dibujo de Javier Pulido.
• La mirada hacia adelante con personajes tradicionalmente más simples.
Lo peor
• Que este tipo de historias acaban quedándose en el olvido por el eterno retorno de lo mismo inherente al medio.
Guión - 6.5
Dibujo - 8.5
Interés - 6.5
7.2
Entretenido
Paul Azaceta, Javier Pulido, Fred Van Lente y Mark Waid comienzan aquí un interesante evento arácnido.
The Gauntlet mete directamente al Rhino entre los quince mejores villanos de Spiderman, dándole todo ese trasfondo que puede leerse en esta historia.
Fue una interesante «puesta al día» de los mejores enemigos de Spiderman.
En general las historias del Desafío fueron bastante buenas, y el personaje del Rhino es quizás el que más gana de todo esto. Aunque el punto álgido estaría, sin duda, en Muda, que tiene quizás la historia que más mal cuerpo deja de todas ellas.
Este tomo es en general bastante notable en la caracterización de los villanos y Javier Pulido, como siempre, maravilloso. Esa historia del Hombre de Arena es maravillosa.
(Por cierto, Raúl, dices que Pulido es quien dibuja el arco de Electro, pero todo el arco lo dibuja Azaceta, no?)
Porque, eso sí, no hay forma de defender cómo dibuja Azaceta el cuerpo de Spidey, que en algunas viñetas parece que se metió de golpe 50 Whopper XXL entre pecho y espalda. Solo hay que ver como ejemplo esa viñeta que sale en el artículo en la que está agarrando al Chapucero!!!
Coincido con que lo peor es que esta historia no tendrá repercusion alguna.Basta ver el numero de comentarios que ha tenido.