Sin embargo, el personaje nunca había corrido mucha suerte editorial. Y es que, tras aquellos primeros números enclavados en la citada Marvel Premiere, gozó de colección propia… una colección que tras quince números fue cancelada, pasando el personaje a formar parte de las páginas de Power Man, en una colección que continuando la dedicada a Luke Cage, llamada hasta entonces Power Man, pasaba a estar protagonizada por ambos personajes, denominándose desde ese momento en adelante, Power Man & Iron Fist (Power Man y Puño de Hierro).
Tras esa andanza, la más larga para el personaje, pasó a protagonizar distintas mini series y a aparecer en algunos eventos de La Casa de las Ideas, pero sin el protagonismo que merecía… hasta que
El momento elegido por Panini para publicar esta colección, que a juicio de este redactor es la mejor que ha tenido jamás el personaje en solitario (sobre todo cuando hay tan poco material para elegir) no podía ser más propicio, y es que, por todos es sabido que el personaje fue elegido por el binomio Marvel-Netflix para tener serie de televisión propia (que vio la luz en 2017), y un gran protagonismo en la serie crossover que fue Los Defensores, también lanzada en el año 2017, siendo este 2018, concretamente el inminente mes de Septiembre, el momento elegido para estrenar la segunda temporada televisiva dedicada al personaje.
Dejando de lado el tema de la serie de televisión, que ha sido objeto de análisis propio en esta casa, este tomo, primero de la colección El Inmortal Puño de Hierro, que duró un total de 27 números, nos deja una primera sensación si no nos habíamos acercado a él nunca, y esa sensación es la de sorpresa. Y no una sorpresa negativa, si no una sorpresa grata, muy grata, y es que, estamos ante un cómic que además de ser muy entretenido y disfrutable que está escrito y dibujado con una gran calidad. No podíamos esperar menos del equipo creativo detrás de él, pues tanto Fraction (Thor, Ojo de Halcón) como Brubaker (Capitán América, Daredevil) son autores de gran talento capaces de multiplicar el atractivo de cualquier personaje que escriben, siendo el dibujo de David Aja (que por aquel entonces todavía era primerizo en Marvel y tan sólo había dibujado un número del Daredevil del propio Brubaker) uno de los mejores que podemos encontrar en Marvel.
La historia, que comienza planteada como una serie limitada (introducida por un número especial enclavado dentro de la Guerra Civil de Superhéroes) y que hacia su final, introduce los elementos que la llevarán a convertirse en la serie más larga en la que dado su éxito se convirtió, es apta tanto para fans del personaje como para aquellos que lo desconocían por completo.
Así, sin caer en la manida “historia de origen” nos sirve en bandeja los elementos necesarios para conocer Quién es Danny Rand, Qué y Quién es el Puño de Hierro, y la trascendencia que ello puede llegar a tener. Y es que, este volumen insiste con gran maestría en que Puño de Hierro es mucho más que el nombre de un artista marcial capaz de hacer proezas con su cuerpo y con el Chi que reviste sus manos de energía devastadora, pues es el protector de K’un Lun, la mística ciudad oriental que protege a la humanidad de impensables males de naturaleza mística, título que sólo los más capaces, aquellos capaces de derrotar al Dragón Shao Lao son elegidos para ostentar.
En este caso, la historia toma lugar en distintos momentos temporales. Por un lado, tenemos un Danny Rand que se ocupa de sustituir a Daredevil como protector de la Cocina del Infierno mientras Murdock vivía su propio drama en su colección, también escrita por Brubaker, labor que pronto tendrá que dejar cuando tras un ataque de Hydra perciba que hay fuerzas místicas en juego que él como Puño de Hierro tendrá que investigar y, si es necesario, parar.
Por otro lado, tenemos distintos flasbacks que nos llevan a eras en las que otros distintos a Danny Rand portaban el manto de Puño de Hierro, lo que le da al lector esa pista de que estamos ante un papel de gran importancia para el equilibrio universal, un papel que muchos otros antes que el Héroe de Alquiler llegaron a portar, y cuyas acciones del pasado puede que tengan en el presente más importancia de la que pueda parecer a priori, sin que este redactor quiera ahondar más en el tema para no caer en el siempre odioso spoiler.
Por supuesto, veremos en la colección a Hogarth, abogado y asesor de la máxima confianza de Danny cuando éste tiene que verse obligado a desempeñar su papel civil de CEO de una de las empresas más importantes del mundo, sin que grandes personajes como Luke Cage, Misty Knight o Colleen Wing, unidos por siempre al destino de Danny Rand tanto en el sentido editorial como ficcional, falten a la obligada cita.
La historia tampoco se olvida de personajes como Davos, Yu-Ti o Lei Kung, capitales para la faceta de protector de K’un Lun que debe desempeñar Danny Rand.
En cuanto al dibujo, y como decía, David Aja hace un trabajo exquisito, que ya anticipa las cotas de calidad que alcanzaría en Ojo de Halcón años más tarde y que dotan a la colección del broche final de calidad que ésta necesitaba. Aja domina a la perfección el trazo suave y pausado en las escenas más “cotidianas” sin que ello en absoluto lo incapacite para otorgarnos unas imágenes dotadas de calidad y frenetismo cuando Danny u otros personajes sacan al héroe que llevan dentro y hacen toda una exhibición de artes marciales que, en manos de otro autor, habrían carecido del impacto necesario.
Sin embargo, no sería justo no hablar en esta reseña del trabajo de otros ilustradores que nos acompañan en este tomo, como
Por otro lado, también debemos mencionar al mítico
Sin duda, un volumen muy recomendable para cualesquiera lectores, sean fans o no de Danny Rand, que no deberían dejar pasar esta oportunidad de poseer en tomos una de las mejores colecciones jamás protagonizadas por el personaje.
Guión - 8
Dibujo - 9
Interés - 8.5
8.5
Místico
Ed Brubaker, Matt Fraction y David Aja relanzaron con gran maestría a Danny Rand con una colección que le daba al personaje el trato que merecía.
Una serie estupenda. Que lastima que no continuasen explotando esta faceta pulp del personaje en sus siguientes series.
Como detalle, David Aja también dibujo previamente a esto un episodio de Lobezno en X-men unlimited muy disfrutable. Yo lo tengo en grapa y lo releo de vez en cuando.
El diseño de todos los puños de hierro corre a cargo de Aja, como muestran los extras del tomo.
Foreman se limita a reproducirlos.
Pedazo de cómic. Descubrí a David Ajá en esta tremenda obra y me enamoré de su estilo. Un tebeo 100% recomendable, incluso para los que, como yo, nunca habían leído nada del personaje.
8/10
Su paso por Héroes de alquiler de Ostrander y Pascual Ferry tampoco estuvo nada mal.
También me parece remarcable su etapa dentro de la colección de Namor de John Byrne, algo que empezo siendo anecdótico para según pasaban los números tomar màs protagonismo y casi reemplazar de tapadillo en la cole al príncipe de atlantis….
El Namor de Byrne: pocos Marvel Héroes me urgen tanto como ese, ahora mismo. ¡Y que sigan con el de Jae Lee -que no he leído, no sé cómo estará de guión-!