MARVEL ZOMBIES: HAMBRE INSACIABLE, de Robert Kirkman y Sean Phillips

 

Edición original: Marvel Zombies #1-5; Marvel Comics.
Edición España: junio de 2007; Panini Cómics.
Guión: Robert Kirkman.
Dibujo y entintado: Sean Phillips.
Color: June Chung.
Formato: tomo recopilatorio de 120 págs.
Precio: 11 €.

 

Si la semana pasada abordábamos el análisis de Los Muertos Vivientes, una de las más destacadas obras del siempre interesante Robert Kirkman, en esta ocasión centraremos nuestra atención en Marvel Zombies, nueva incursión del talentoso guionista de Kentucky, quien durante los últimos años ha venido demostrando una asombrosa capacidad para revitalizar géneros acostumbrados a redundancias y excesos. Junto a Kirkman, Sean Phillips y Arthur Suydam, desempeñando funciones de dibujante y portadista respectivamente, completan un equipo creativo de ensueño que ha dado forma a uno de los más sorprendentes, insospechados y arrolladores éxitos de La Casa de las Ideas en los últimos años.

El pasado mes de junio, Panini Cómics tuvo a bien publicar esta miniserie, recopilada en un tomo perteneciente a su línea 100% Marvel, de modo que se antoja el momento perfecto para comentar el origen, el desarrollo y las claves del éxito de esta versión zombificada del Universo Marvel, que tanto interés parece haber despertado entre los lectores de medio mundo, gracias a una inusual mezcla de humor negro, guiños a los lectores habituales de Marvel Comics, y una estrategia de márketing apoyada fuertemente en el impacto visual de las portadas de Suydam. ¿Merecerá este cómic la acaparación de atención y elogios que ha recibido durante los últimos meses? en las líneas que siguen trataremos de responder a esta pregunta.

El hecho de ostentar la nacionalidad escocesa no ha impedido que Mark Millar sea considerado como uno de los más revoltosos enfants terribles del cómic mainstrem norteamericano, y es que desde su desembarco en las grandes editoriales afincadas al otro lado del Atlántico no ha mostrado el menor reparo a la hora de provocar a los lectores, de agitar sus conciencias mediante el tratamiento de los más polémicos temas y la retorsión de los convencionalismos de un género (el superheróico) poco dado a los excesos de este polemista nato. Entre su extensa bibliografía figura el trabajo realizado al frente de la línea Ultimate de Marvel Comics, siendo uno de sus principales ideólogos e impulsores, tanto en lo referido a Ultimate X-Men, como Ultimate Fantastic Four, versión definitiva de La Primera Familia de Marvel, colección en cuyo primer arco argumental coincidiría con Brian Michael Bendis y Adam Kubert. Pero al parecer, esta experiencia no resultó especialmente gratificante, pues sus funciones se redujeron a la redacción de los diálogos. De este modo, el guionista escocés guardó un ánimo de revancha que vería satisfecho tras finalizar la andanza de su colega Warren Ellis en la colección.

Libre de las ataduras implícitas en el hecho de colaborar con otro guionista, y contando con Greg Land a los lápices, dio el pistoletazo de salida a su etapa con Cruce (Crossover en su edición original) arco argumental que el propio guionista se encargó de insinuar que representaría la primera convergencia de los universos Ultimate y tradicional de Marvel. La premisa resultaba tan sencilla como atrayente: el joven Richards logra contactar con su versión adulta de un universo alternativo, y Reed, curioso por naturaleza, se resiste a la idea de dejar pasar semejante oportunidad, de modo que opta por desplazarse a la realidad del Reed alternativo. Tras este punto de partida se ocultaba una inquietante trama que, finalmente, terminaría por acaparar todo el protagonismo: el lugar de procedencia de su contrapartida adulta estaba poblado por zombies infectados por un misterioso virus del que tan sólo un pequeño grupo organizado y liderado por Magneto había logrado librarse.

Con toda probabilidad, ésta fue la aportación más interesante de Millar en su etapa como guionista de Ultimate Fantastic Four, hasta el punto de que los grandes responsables de Marvel decidieron continuar explotando el filón descubierto por uno de sus principales guionistas. De este modo, dieron luz verde a la miniserie Marvel Zombies que, tomando como base los sucesos acontecidos en Ultimate Fantastic Tour: Cruce, trataba de explorar con mayor grado de detenimiento el Universo Marvel en su versión zombie. Los elegidos para acometer tal empresa: Robert Kirkman, Sean Phillips y Arthur Suydam.

En una versión alternativa del Universo Marvel, la práctica totalidad de los héroes y villanos han padecido los rigores de un extraño virus. Sus consecuencias más evidentes: la transformación en criaturas cuya alimentación se basa de forma exclusiva en la ingesta de carne humana. Magneto, líder de la resistencia, tratará de escapar del voraz apetito del Coronel América, Spiderman, Luke Cage, Hulk y compañía. A su vez, ante la escasez de carne humana, quienes en otro momento fueron denominados como “Los Héroes Más Poderosos de La Tierra” tendrán que pensar formas alternativas de obtener su sustento alimenticio, al tiempo que asumir la posibilidad de que existan más supervivientes de los que inicialmente habían calculado, no infectados por el virus de origen desconocido. Por si ello fuera poco, un poderoso heraldo se acerca a La Tierra, dispuesto a hacer la voluntad de su amo y señor.

Más de un lector ocasional o despistado podría incurrir en el (comprensible) error de pensar que Robert Kirkman corre el riesgo de encasillarse como autor de género zombie. Pero nada más lejos de la realidad: si bien es cierto que el joven guionista ha logrado consolidarse como una de las no ya promesas, sino realidades del cómic estadounidense contemporáneo, gracias a su trabajo en Los Muertos Vivientes e Invencible, no es menos cierto que el enfoque con el que ha abordado su dos “trabajos zombie” son radicalmente opuestos, hasta el punto de resultar antagónicos en su finalidad, estilo e implicación del lector.

En Los Muertos Vivientes, bajo el especto de una obra de género al uso, se esconde una brutalidad inicialmente insospechada. Una explosión de sinceridad y crudeza, no exenta de crítica social, dirigida sin miramientos a la conciencia del lector, quien tras empatizar con los personajes, termina por verse reflejado en un aterrador espejo, en cuya superficie se proyectan imágenes de las más crueles facetas de la naturaleza humana. Aquellas que, por fortuna, sólo salen a relucir en situaciones límite, en momentos críticos en los que las reglas y convenciones sociales terminan por derrumbarse ante el implacable instinto de supervivencia. En último término el guionista parece buscar remover los sentimientos del lector, ponerlo en situación hasta el punto de que comprenda las decisiones, las motivaciones y la evolución de los protagonistas, lo cual, teniendo presente hasta qué punto llevan su lucha por la supervivencia, resulta tan meritorio como aterrador.

En cambio, Marvel Zombies representa todo lo contrario: la vertiente más lúdica, despreocupada y gamberra de un género fácilmente parodiable, que en este caso cuenta con la peculiaridad añadida de contener infinidad de guiños dirigidos al lector habitual de Marvel Comics. La pretensión última es la de entretener y divertir al lector mediante la tergiversación del Universo Marvel, retorciendo la escala de valores, la integridad, la moral, las motivaciones y el comportamiento habitualmente intachable de sus más representativos iconos, todo ello mediante un estilo hiperbólico, grotesco y cómico.

Con casi veinticinco años de trabajo a sus espaldas, pueda afirmarse con rotundidad que Sean Phillips es todo un veterano dentro del mundo del cómic. Curtido en todo tipo de editoriales, géneros y personajes, evidencia en todos y cada uno de sus trabajos su peculiar estilo, caracterizado por un trazo aparentemente descuidado y tosco, que oculta una personalidad inconfundible e inimitable. Si bien es cierto que acumula grandes dosis de experiencia, ha sido en los últimos años cuando ha recibido los más unánimes elogios, principalmente por su trabajo en Sleeper, serie guionizada por Ed Brubaker donde el dibujante británico dio lo mejor de sí mismo para retratar la historia de Holden Carver, agente doble infiltrado en una organización de criminales superpoderosos. Paradigma del género negro de calidad, Sleeper representa a la perfección hasta donde puede llegar este grandísimo artista cuando se lo propone.

Curiosamente, la práctica totalidad de sus obras en muchas de sus obras (la propia Sleeper, Batman: Jeckyll & Hyde, Hellblazer, Criminal) comparten una estética oscura, opresiva, tenebrosa… muy ajustada a la temática de sus obras: intrigas criminales, tramas sobrenaturales, terror, etc… De modo que, teniendo en cuenta estas circunstancias, su elección para desempeñar el papel de dibujante de Marvel Zombies resulta bastante coherente, pues en dicha miniserie prima lo grotesco, al tiempo que el homenaje a las más clásicas versiones de los más clásicos personajaes de La Casa de las Ideas. Sin lugar a dudas, como viene siendo habitual en Mr. Phillips, en Marvel Zombies realiza un trabajo sencillamente sobresaliente: expresivo, contundente, impactante, grotesco… ¡divertido!

El de Arthur Suydam es un caso realmente extraordinario. Artista multidisciplinar, destacó en el campo de la ilustración desde su infancia, al tiempo que perfeccionaba unas habilidades musicales que le llevarían a trabajar con leyendas como the Platters, The Rolling Stones o el mismísimo Bruce Springsteen (curiosamente, su grupo se llama The Gotham Playboys). También ha participado en la producción de películas y cintas de animación infantiles, además de colaborar en revistas fantásticas. En el mundo del cómic, además de haber emprendido numerosos proyectos personales, ha realizado multitud de portadas para las más diversas colecciones, como Batman, Conan, Caballero Luna, El Motorista Fantasma, etc… destacando su producción dentro del campo del terror.

Curiosamente, y pese a llevar décadas en activo, muchos lectores han descubierto a este gran artista gracias al trabajo realizado para la miniserie que hoy comentamos, pues no cabe duda de que sus ilustraciones, inspiradas en algunas de las más famosas portadas de la historia presente y pasada de Marvel Comics, representan un reclamo publicitario sin parangón: Lobezno, Hulk, Spiderman, El Capitán América, Elektra… ninguno de los grandes iconos de la editorial americana se ha librado del tétrico trazo de Suydam, quien ha sabido combinar a la perfección homenaje y creatividad. Inquirido al respecto, Suydam comenta que esta miniserie representó una oportunidd perfecta para poner en práctica “años de estudios de anatomía”, además de reconocer sentirse “genial por la cálida acogida de los lectores. Siempre he tenido en mente cómo representar de ese modo a los personajes Marvel, he estado mucho tiempo esperando el momento oportuno”. De hecho, el éxito fue tal que desde Marvel no pararon de encargarle nuevas ilustraciones para adornar las portadas de las reimpresiones de esta miniserie.

Robert Kirkman

“Mucha gente pensará: ¿sheesh, Robert, no has tenido suficiente con los zombies? Pero a mi realmente me gustan. Siempre me han gustado. Este es un proyecto genial, y además me permite trabajar con Sean Phillips. Quiero decir… ¿quién podría dejarlo pasar? Y de las portadas se encarga Arthur Suydam. Dejándome a un lado, realmente éste es un paquete ganador.” Y ante la posibilidad de ser encasillado como “ese tío que escribe sobre zombies”, afirma lo siguiente: “No creo que esté en una posición de quejarme por recibir ofertas de trabajo. Mientras sigan llamándome, no me quejaré acerca de lo que me ofrezcan. Si no se ajusta a lo que busco, simplemente lo declinaré respetuosamente. Tampoco creo que corra peligro de ser encasillado como El Tipo Zombie. Los trabajos centrados en este género ocupan aproximadamente el 20 % de mi trabajo actual. Corro un peligro mucho más serio de ser encasillado como El Tipo de los Superhéroes, ¿y quién podría quejarse realmente de eso? Creo que mis trabajos zombies mantienen la diversidad de mi obra.”

En relación al tipo de zombies que protagonizan este cómic, Kirkman afirma que están lejos de la visión ofrecida en las ya clásicas cintas de terror dirigidas por George A. Romero: “Es necesario tener presente que éstos no son zombies del estilo de Romero, lentos y estúpidos. Éstos son los Héroes y villanos Marvel, infectados por algún tipo de virus. Son los mismos personajes que amamos y amamos odiar, pero alimentándose de carne humana…lo cual les conduce a cometer cosas malvadas.”

Acerca de Sean Phillips comenta: “Sean era la elección perfecta para este libro. Creo que hará un gran trabajo retratando las emociones de los zombies, así como en las escenas gore. Este tipo parece ser todo un maestro.”

Respecto a una hipotética continuación, afirma no haber escrito la miniserie con vistas a una continuación, sino que trató de centrarse en escribir los mejores cinco números para la miniserie.

Sean Phillips

En relación a que sintió cuando vió pro vez primera a los Marvel Zombies en las páginas de Ultimante Fantastic Tour, comenta que “pensé que eran geniales cuantos de ellos había. Casi cualquier héroe Marvel que pudieras imaginar se había convertido en un zombie comedor de carne. Pero una vez que tuve que ponerme a dibujar a tantos personajes ya no me pareció tan genial”.

Preguntado acerca del grado de libertad del que gozó, teniendo en cuenta que las versiones zombie procedían de las páginas de Ultimate fantastic Four, responde lo siguiente: “Tuve que mantener una imagen similar a la dibujada por Greg Land. Pero terminé dibujándolos más desfigurados, y padeciendo horribles muertes. Además, trate de vestirlos con los uniformes propios de los años sesenta y setenta, pues ésta fue la época en la que comencé a familiarizarme con Marvel. Es como yo los veo.”

¿Qué le asusta? “Los plazos de entrega”.

Respecto al modo en que dibuja, y a cómo reflejar situaciones y personajes que asusten, que resulten repugnantes, Phillips afirma que utiliza muchas sombras, pues prefiere sugerir, más que mostrar.

Los guiones redactados por Kirkman para Marvel Zombies fueron los primeros que leyó de este autor, y afirma que la colaboración resultó genial, pues gozó de mucha libertad y espacio para explayarse en sus ilustraciones.

Entre sus influencias cita a John Buscema, Gene Colan, Jack Kirby y Moebius.

Vista su rentabilidad, la continuidad de las aventuras de estos Marvel Zombies parece garantizada: reimpresiones de cómics, figuras modeladas, posters, … ¡incluso crossovers! Como Marvel Zombies vs The Army of Darkness and Dead Days, donde se recupera al Ejército de las Tinieblas de Sam Raimi gracias a una miniserie de cinco entregas, interrelacionada con el one-shot titulado Marvel Zombies: Dead Days.

La presencia de estas macabras criaturas también se ha dejado sentir en la serie regular de Pantera Negra, en lo que puede ser el inicio de las apariciones estelares de estos personajes, dentro del Universo Marvel “tradicional”. Este verano, Marvel Comics ha anunciado la gestación de Marvel Zombies 2, que nuevamente se publicará en forma de miniserie de cinco entregas.

Ignoro si de todo cuanto he escrito hasta ahora se desprende mi verdadera opinión. Pero para salir de dudas, la enunciaré con claridad: partiendo del precedente de Los Muertos Vivientes, y del resto de obras que componen la bibliografía de Robert Kirkman, tenia altas expectativas depositadas en este cómic, más aún teniendo presente que Sean Phillips se encuentra entre mis dibujantes predilectos. Sin embargo, y pese a que la lectura de Marvel Zombies resulta más que divertida para un lector habitual de La Casa de las Ideas (como es mi caso), se detecta que uno de los grandes males de esta miniserie es, precisamente, que depende en exceso de la complicidad del lector. Más allá de los guiños y las incoherencias (argumentalmente coherentes) del comportamiento de los personajes, Kirkman sugiere y apunta planteamientos interesantes, que no termina de aprovechar en su justa medida. Lejos de su sentido del humor habitual, sutil, irónico, ingenioso y sarcástico, sin caer nunca en el mal gusto, en este caso la gran mayoría de los gags son referenciales, alusivos a la caracterización hiperbólica y premeditadamente contradictoria de personajes icónicos, que en su función asimilada de símbolos, han venido representando durante las últimas décadas determinados valores indisolublemente ligados a su propia esencia, aquí indudablemente pervertidos.

Por momentos divertida, por momentos redundante y cansina, Marvel Zombies deja una sensación agridulce, lejos de la plena insatisfacción, por evidenciar un nivel de calidad más que aceptable, y demasiado cerca de la necesidad de pasar por una reválida en forma de continuación (ya anunciada), que terminará por formar la opinión de quien escribe estas líneas acerca de esta obra. Sea como fuere, que nadie se lleve a engaño: es una lectura entretenida y recomendable, pero con Kirkman y Phillips de por medio, siempre cabe esperar algo más.

Entrevista a Robert Kirkman.
Entrevista a Sean Phillips.
Entrevista a Arthur Suydam.
Página Myspace oficial de Marvel Zombies.
Galería completa de portadas de Arthur Suydam.
Ultimate Fantastic Four: Cruce.
Los Muertos Vivientes: Días pasados.
Los Muertos Vivientes: Muchos kilómetros a las espaldas.
Los Muertos Vivientes: Seguridad tras los barrotes.
Los Muertos Vivientes: Lo que más anhelas.
Los Muertos Vivientes: La mejor defensa.

Un saludo y hasta la semana que viene! (eso espero)