Peter Parker ya se lo advirtió: No dejes que te clonen
«¿Entonces tú quién eres? ¿Cientos Morales?»
Anteriormente en Miles Morales: Spider-Man, tuvo que luchar con un doble hasta que fue capturado y luego se reveló ante él tanto el Evaluador como Ultimátum. Este último reveló ser el Miles Morales de este mundo y que iba a enviar a la familia invasora a su mundo original para conquistar Brooklyn con los duendiformes. Por suerte, el tío Aaron salvó a Miles y ambos escaparon, pero no pudieron evitar que muchos se transformaran en duendiformes, por lo que tuvieron que luchar junto con Jefferson Davis, el Capitán América y Bomba contra el Duende Verde Ultimate para noquearlo y acabar con Ultimátum. Pero nada podía detenerlos, así que el tío Aaron sobrecargó su traje y se sacrificó para destrozar la máquina de teletransporte y así llevarse consigo al Duende Verde Ultimate y Ultimátum. Esto no sentó nada bien a Miles y acabó llorando esa noche. Por suerte, una patrulla con Estornina le acabó animando. Sin embargo, llegó la invasión de Knull y tuvo que dar todo de sí contra un dragón simbionte y contra su amiga Kamala Khan para salvarla.
En el presente arco argumental, Miles quedó con Kamala y, aunque quisieron divertirse, vieron cómo un edificio se destrozó por la culpa del dueño al no renovar el suelo de las escaleras, lo que provocó la ira de Miles y amenazó al casero de forma agresiva y Kamala tuvo que mediar, aunque luego creyera que serviría para algo. Al llegar a casa, Miles vio una foto de como alguien con su traje secuestraba a un científico. Después de enterarse que Bárbara y Ganke estaban saliendo, fue al almacén médico y peleó con Peter Parker hasta que le demostró que era el verdadero Miles y que le habían clonado. Juntos, buscaron al clon y lo derrotaron, pero fueron gaseados, pese a que no afectó mucho a Miles. Spider-Man siguió el rastro y descubrió que tenía tres clones: Selim, Tejementes y Amorfo. Poco después, pelearon con Miles y Peter se unió a la lucha, pero fueron derrotados nuevamente y Miles le pidió que le dejara la batalla a él. Al llegar a casa, vio que uno de los clones trataba de arruinarle la vida con mensajes a su familia, por lo que arregló sus malentendidos con Ganke y rastreó la señal del teléfono hasta un almacén donde rompió un vial verde. Entonces, llegaron los clones furiosos por romper su cura, le enredaron con telaraña y Selim explicó cómo les crió el Evaluador. Tras ello, Selim y Tejementes se marcharon para matar a Rio Morales, pero Amorfo se quedó y decidió no hacer daño a Miles mientras se escapaba para ayudar a su madre. En el hospital, Miles ayudó a su madre y derrotó a Tejementes, pero descubrió que era un cebo, porque Selim iría a por su hermana. Al llegar a casa se enteró de todo y Selim quedó con él en el puente. Una vez allí, Selim amenazó la vida de su hermana y tuvieron que luchar hasta que Amorfo la rescató y Tejementes evitó que Selim hiciera daño a su hermano, por lo que Selim y Tejementes se destruyeron entre ellos. Después de esa pelea final, Amorfo demostró ser todo un artista y Billie le estornudó. Al día siguiente, Miles tuvo que lidiar con sus frustraciones y descubrió que el estornudo de Billie ayudó a que Amorfo se estabilizara un poco. Finalmente, una amiga de Miles le entregó un nuevo traje basado en un chándal de tejidos Van Dyne.
En general, estamos ante un arco argumental bastante bueno que da un buen giro de tuerca a ese concepto que el lector tiene de la clásica saga noventera “La saga del clon” y Saladin Ahmed consigue hacerla lo suficientemente refrescante y novedosa para que no se sienta una idea aburrida que viene de la nostalgia, ya que se han ido dejando pistas a lo largo de los números anteriores y aquí ha estallado de manera espectacular, pero en vez de darnos una gran dosis de acción que nos deje helados, nos entrega una dinámica de personajes encantadora que te hace sentir empatía por todos y cada uno de los personajes, entendiendo incluso sus perturbadoras motivaciones, aunque no sean justificables. Además, el pequeño cameo de Peter Parker le da a este pequeño arco argumental tanto un poco de ayuda a Miles en tema de clones como un poco de comedia totalmente necesaria para relajar la tensión que no para de crecer número a número. Por otro lado, y ajeno a la saga del clon, hay dos partes que merecen ser destacadas que son tanto el inicio como el final. En la primera historia que marca el final de Rey de Negro es bastante destacable ver cómo Miles pierde los nervios ante un casero al ver que por su culpa se derrumbó un edificio y pudieron perderse vidas. Y, al final del último número es sensacional ver cómo Saladin Ahmed narra cómo Miles lidia con la frustración a la vez que ayuda a Amorfo y nos presenta una nueva versión del traje de Miles Morales, que puede ser del gusto de muchos o no.
En cuanto a los personajes, Miles está un poco harto de todas las injusticias que se están cometiendo en el mundo y que no pueda hacer nada por solucionarlo, de ahí que trate intimidar a un casero para que cuide a sus inquilinos y no se produzcan derrumbes. Por otro lado, Miles continúa teniendo una actitud aún más violenta cuando descubre que el Evaluador ha desarrollado unos clones y que éstos quieren destruirle, aunque a medida que se desarrolla la trama va entendiendo su situación y se lamenta de su situación hasta el punto de no querer pelear con ellos si no es necesario, sobre todo con Amorfo, a quien hacen de menos. Por tanto, su mayor rivalidad sería con Selim, de quien hablaremos a continuación. Selim tiene un gran odio hacia Miles y todo lo que él representa porque considera que él es el único y original, por lo que no duda en atacar incluso a la familia de Miles o a la pequeña Billie. Tejementes no es un personaje que piense mucho, por su morfología, y es utilizado como un peón por Selim, pero tiene bien claro lo que siente y piensa, como que los hermanos no deben pelearse entre ellos y protegerá siempre a la víctima ante el abusón, lo que dice mucho de él. Amorfo es el clon más extraño de todos ellos, ya que se deforma y más aún para atacar, pero es el que más corazón tiene del grupo, por lo que sabe lo que significa la familia, que Rio y Jefferson son importantes y que la pequeña Billie es su hermana, aunque él sea un clon, por lo que no dejará que nadie le haga daño, ni siquiera Selim, demostrando ahí que tiene más de Miles que cualquiera de los demás y que, aunque le llamen “Amorfo” o sus poderes le hagan diferente, físicamente hablando, tiene un corazón de oro igual que Miles. Ganke está temeroso todo el tiempo porque no sabe cómo comentarle su relación con Bárbara a su amigo y si eso romperá su amistad con Miles, quien, al principio, reacciona mal. Por suerte, Ganke pronto entiende que su amigo está frustrado por la situación de los clones y que los mensajes enviados son falsos y que, en verdad, se alegra de que Bárbara y él estén juntos.
Sobre el ritmo, Saladin Ahmed establece unos tiempos que van in crescendo página a página y número a número, a medida que los personajes se van conociendo y las relaciones se van estableciendo hasta el punto que llegan los tremendos choques entre los clones y Miles que tanto esperamos o las sucias trampas de Selim que ni siquiera Amorfo aprueba, porque la familia es la familia. Por lo tanto, podemos decir que Saladin Ahmed ha establecido un buen storytelling, aunque la ejecución de la batalla final podría ser mejorable para poner a Miles más en el filo del acantilado a la hora de luchar, tal como el Duende lucha con Peter en sus batallas para dar lugar a batallas más épicas.
A nivel artístico, Carmen Carnero nos aporta unos dibujos que podemos calificar de excelentes por sus tremendos diseños de personajes, fondos, coreografías, dinamismo y el detallismo que hace gala desde el primer número hasta la última batalla contra Selim, donde podemos sentir la tensión en todo momento y las emociones de los personajes están a flor de piel tanto corporal como facialmente. Por otro lado, Chris Allen no llega al nivel de la anterior dibujante, pero sí aguanta el tipo con un dibujo notable y que no saca de la historia, lo que es, sin duda, un gran logro cuando se cambia, de pronto, de dibujante.
En definitiva, estamos ante una buena saga de Miles Morales que toma una saga clásica para otorgársela a Miles de manera refrescante y darle una gran importancia a la relación de los personajes y cómo el corazón es lo más importante, no ser un clon.
Lo mejor
• La renovación de la idea de la Saga del Clon para Miles Morales.
• La dinámica de personajes.
• El dibujo de Carmen Carnero.
Lo peor
• La batalla final, que podría haber sido mejorable en cuanto a ejecución.
Guión - 7.5
Dibujo - 8.5
Interés - 8
8
¡Fantástico!
Un genial giro de tuerca a la idea de la saga del clon, pero para Miles Morales.
Creo que Miles Morales es un gran personaje con un tremendo potencial todavía sin aprovechar.
Jim Starlin sabría perfectamente qué hacer con él.