Si alguien abre las páginas del diario ABC se dará cuenta de que una viñeta que lleva 59 años dibujándose, hoy está en blanco. Ángel Antonio Mingote Barrachina, Mingote para los amigos, intérprete honoris causa de la realidad nacional española, murió ayer martes a los 93 años de edad, dejando huérfanos de humor a millones de ciudadanos.
Mingote ha sido uno de esas personas que siempre ha estado ahí, formando parte de ese gran mural que describe la España contemporánea. Artista inconfundible y de rápido reconocimiento, sus viñetas siempre han estado en la mente colectiva del ciudadano español y de todo aquel foráneo que se interesara por su original manera de ver el mundo. De hecho, sus ilustraciones y diálogos traspasaron fronteras más de una vez, señal de que Mingote acertaba en su visión humorística del momento con demasiada frecuencia.
Los comienzos de Mingote como humorista gráfico se remontan a 1953, cuando empezó a trabajar en el diario ABC, una relación laboral que ha durado hasta su muerte. Sin embargo, sus colaboraciones no solo se limitaron al periodístico, sino que también dirigió durante cien números la revista humorística Don José y también escribió para el teatro, el cine y la televisión. Es más, alguno tal vez recuerde sus apariciones como contertulio en aquel programa de Telecinco dirigido por Jose Luis Coll, Este páis necesita un repaso.
Su labor a lo largo de toda su vida como artista le reportó premios, galardones y reconocimientos de todo tipo. En 1967 Prensa Española instituyó un premio en su nombre (qué él mismo ganó la primera edición) que reconoce los trabajos de humor y periodismo gráfico. En 1987 fue nombrado miembro de la Real Academia Española y pasó a ocupar el sillón con la letra “r”. En 1996 le fue otorgada la medalla de Oro del Mérito en el Trabajo y tanto en 2006 como en 2007 fue nombrado Doctor Honoris Causa por las Universidades de Alcalá de Henares y Rey Juan Carlos I, respectivamente. Incluso fue alcalde honorífico del madrileño Parque del Retiro, un título que cariñosamente premiaba la relación entre la ciudad capitalina y Mingote. Y por último en diciembre de 2011 le fue concedido el título de Marqués de Daroca.
Hoy son todos homenajes hacia este humorista que deja un vacío en el panorama gráfico español difícil de rellenar. Muchos de esos tributos son en forma viñeta, como no puede ser de otra manera, toda una señal de que el maestro deja un amplio elenco de artistas gráficos. Gracias y hasta siempre, Mingote.
Descanse en paz.
Cuando un dibujante se va, siempre ocurre lo mismo: todos nos lamentamos. Pero es que el adiós de Mingote es, sin duda, una pérdida irreparable para el mundo del humorismo gráfico español. Qué grande era y cuánto lo voy a echar de menos. Gracias por todo, maestro. DEP.
Qué bonita la viñeta de Forges. Descanse en paz.
Otro cachito de sueño,alegria,humor,ironia y ternura que se nos va.
va por ti maestro!!
Al menos queda el consuelo de que tuvo una vida larga y fructífera, plagada de un humor muy mordaz y muy acorde con los tiempos que le tocó vivir…
Preciosa la viñeta de forges, se nota mucho cariño contenido.
Cuando un dibujante nos deja, mis lápices pasan la tarde temblando y estremecidos en mi taza. No hay más que saber verlo. DEP maestro.
Era y es un grande… Desde chico me encandilaba su dibujo… me encantaba… era lo unico que leia del ABC junto con el GENTE MENUDA… Descanse en paz!
Fletcher!!
Mingote no era solo su estilo de dibujo, único e inconfundible, sino su visión ácida y sin pelos en la lengua sobre la gente y la sociedad de la que no hacia distinciones.
Descanse en paz.
Un saludo.
Maravilloso ilustrador. Era capaz de escribir editoriales del ABC sin una sola palabra. Nos deja un grande. Maravillosamente sentimental la despedida de Forges.
Viendo las viñetas, muchas de las culaes no habia visto,no he podido evitar reireme. Deja un trabajo del cual siepmre podremos disfrutar.
Descanse en paz maestro !
Como cualquier otra persona, Mingote combinaba grandes pareceres con otros bastante cuestionables. Pero lo que no puede ponerse en duda es que ha sido una de las grandes referencias de la ilustración satírica de nuestro país y que sus lápices derrochaban arte por los cuatro costados. Aunque llegar a los 93 años trabajando es todo un logro, va a ser inevitable echar de menos esas viñetas que de alguna forma u otra han conseguido hacernos reir, reflexionar o mosquearnos. Las tres bases fundamentales a las que debe aspirar cualquier historietista gráfico. Descanse en paz.
Se va parte de nuestra historia, este genial autor tenía una visión crítica y satírica como pocas. Era un analista gráfico de la sociedad. Desde luego, lo mejor del ABC.