Misterios de un asesinato

 

Edición original:.
Edición nacional/ España: Norma Editorial.
Guión: Neil Gaiman.
Dibujo: P. Craig Russell.
Entintado:.
Color: Lovern Kindzierski.
Formato: Cartoné.
Precio: 13,00 €.

Todo el mundo ha oído hablar de los ángeles. Todo el mundo está hartos de ellos y nadie les ha visto. … salvo en esas raras ocasiones en donde trabajan para la HBO o son cantantes.

Cuando empecé a leer el cómic de Neil Gaiman me di cuenta que en verdad no sabía absolutamente nada sobre el reino de los ángeles. Tampoco sé hasta que parte del cómic trata sobre la ficción o coge del imaginario católico.

No voy a dar una clase de teología, pero sí algunas nociones para que entendáis y disfrutéis mejor del cómic. … porque ya habrá nombres que se os atascarán.

Por muy complicado que pueda parecer, hay un orden establecido para lo que vamos a hablar. Recibe el nombre de angeología cristiana: hay tres jerarquías con tres grupos distintos de seres celestiales. (los consejeros divinos, gobernantes y mensajeros) No los podemos llamar a estos nueve ‘ángeles’ porque este obedece a la última categoría más baja.

Igual Neil Gaiman no se quiso complicar mucho y puso a todos estos seres celestiales por igual: sus dos brazos, ojos (porque sí, algunos tienen más de uno) o igual lo hizo con conocimiento de causa y los hizo a todos ‘ángeles’ ya que son los más relacionados con los asuntos humanos, como protectores y mensajeros. No confundir con los arcángeles, quienes tienen grandes misiones para la humanidad, pero sí pertenecen a esta última categoría más baja.

De ser esta la última solución hay algo que no encaja: Lucifer.

Dos cosas curiosas acerca de este personaje que veremos en el cómic. La primera es que es un querubín. Pertenece a uno de los rangos superiores en la jerarquía celeste. Fue el favorito de Dios como todos sabéis, además de su primera creación. Conocido por la cultura romana por el Lucero del Alba. De hecho está representado por la estrella de Venus: la primera en salir al anochecer o el amanecer según la época del año.

Pero ¿es un demonio, es Satanás? Sí y no a todo. La segunda parte que tocaría es su rebelión contra su Dios Padre. De nuevo, múltiples interpretaciones (es lo que pasa cuando no es una ciencia exacta…) La que estamos acostumbrados es que Lucifer lleno de arrogancia, desafió a Dios y este fue expulsado del cielo por San Miguel. Otra versión es que recelaba de Dios ya que este podía usar La Palabra y todos se postraban (véase Predicador) y por último, Lucifer era un ángel bello, lleno de sabiduría e inteligencia. Y ya sabemos cómo de mal se lo tomó Dios cuando Eva comió la manzana del árbol de la ciencia. Más adelante en la historia de la cristiandad, a Lucifer se le da el nombre de Satanás.

Pongamos este ejemplo de por qué pudo pasar: Lucifer es el hijo adolescente que reniega de seguir los pasos de su padre alistándose en la marina para estudiar ciencia y biología. A ojos del padre, esto es el mal. A ojos de un adolescente es el bien. El problema es que el Padre impuso su historia y aquí estamos.

Preguntaréis entonces que este tochaco entonces, para qué. Bueno como veréis en este cómic, Neil Gaiman narrará el asesinato de un ángel en el mismo cielo. Esta historia es contado con un mendigo en la ciudad de Los Ángeles donde está nuestro protagonista mientras pasa el mal tiempo en Londres para volver allí, su verdadero hogar. Parte de la historia se desarrolla en la Ciudad de Plata y la otra en Los Ángeles. En un momento de la historia, ambos mundos se cruzarán.

Nuestro protagonista celestial es Ragüel. Su significado varía entre enviado o explorador del Señor.

Una cosa curiosa, son los nombres de los ángeles. Todos terminan en -el. Por ejemplo Gabriel, Rafael, Miguel… Su por qué tiene que ver con el hebreo. El sería literalmente Dios. Su plural es Elohim. No es un nombre propio, sólo una especie de título.

Ragüel permanece en una especie de sala de la existencia, esperando que Dios le llame ya que con su nombre sabe su función. Ragüel, el arcángel de la justicia, imparcialidad y de la armonía, vela para que los ángeles trabajen adecuadamente con los ángeles haciendo la voluntad de Dios. Así que esta vez le tocará averiguar quién ha sido el que ha atentado contra un ángel.

Acompañaremos a Ragüel por la Ciudad de Plata en la cual los ángeles está construyendo el Universo. El siguiente al que nos encontraremos sería Fanuel, otro arcángel. Este, según el cómic menciona que se ocupada de los detalles de la creación. El siguiente es Carasel – este ya si es inventado -.

Este cómic os recordará a Predicador en el uso de la Palabra para hacer la voluntad. El siguiente, Zadquiel, sí pertenece a la mitología cristiana. Es algo así como el ángel de la benevolencia. De hecho es el ángel que detiene Abraham de sacrificar a su hijo.

Otro personaje que ya os puede sonar es Azazel quien sale de mano del mismo autor en el cómic de Sandman. Aquí ya es demonio, un ángel caído. En el cielo, es el lugarteniente de Lucifer.

Ya a estas alturas os habréis dado cuenta del dibujo de Russell quien apoya bastante bien la narrativa de Gaiman acudiendo con grandes planos, aprovechando el espacio. Esto es importante ya que hay numerosos diálogos.

Gaiman consigue contar una buena historia. Es la típica de detectives, sí. A mata a B por un motivo y C encuentra al malo. Pero lo curioso es la relación que se establece en los ángeles, el fin del cómic más allá de una historia detectivesca. Entre A – B y C hay algo más. Ese será el otro misterio que está a libre de interpretación de cada uno.