Ninguna de las novedades de esta semana me llamaron la atención, por lo que dedicaré la entrega de hoy a comentar mis impresiones sobre dos estrenos de la semana pasada que no pude cubrir por motivos de última hora. AfterShock Comics vuelve a recordarnos por qué consiguieron hacerse hueco en un mercado tan competitivo como el independiente americano. Y una de las grandes series de Dark Horse Comics vuelve a la carga… pero en otra editorial.
Dark Red #1, de Tim Seeley y Corin Howell
La experiencia de Seeley en el género es bastante obvia. Maneja muy bien todo lo relacionado con el vampirisimo, la violencia y el ocultismo. Pero eso no es ninguna sorpresa. A estas alturas, es capaz de escribir un cómic de terror medianamente interesante con los ojos cerrados.
Donde tenía mis dudas era respecto al tratamiento de temas sociales. Basta con leer cualquier edición del New York Times para darse cuenta de que la historia de Seeley es una analogía de la América actual, dividida como nunca antes en su larga historia. Me alegra poder escribir que el guionista sale airoso del desafío de retratar esas divisiones. Dark Red no tiene miedo de mostrarnos la peor cara de la América rural, racista e ignorante, aterrada de cualquier cosa que parezca feminista o, incluso peor, «socialista» (aunque no tengan muy claro en qué consiste el socialismo). Pero también nos recuerda que los habitantes de esas áreas son seres humanos, capaces de los mejor también y frustrados porque Ford se llevó la fábrica de su pueblo a México, donde los salarios son mucho más bajos. Y, sobre todo, gente hastiada de ser el blanco de burlas y reproches en todos los medios de comunicación excepto Fox News y en el mundo del entretenimiento. Seeley es consciente de que el desprecio con el que se trata a esa gente desde las urbes americanas solo alienta a su continua radicalización. Lo podemos ver en la excelente caracterización del protagonista de la serie y su amiga, motivo que de por sí sería suficiente para recomendar esta serie.
Por su parte,
En definitiva, el debut de Dark Red es uno de los mejores que ha publicado AfterShock Comics en mucho tiempo. Un cómic de terror que se gana nuestra curiosidad por su particular visión de los vampiros y nos atrapa por unos personajes que retratan a la América olvidada con todas sus contradicciones, lo bueno y lo malo.
The Goon #1, de Eric Powell
¿Qué podemos esperar de este All-New, All-Different The Goon? Más de lo mismo. Y eso no es nada malo si uno es fan de la serie. A mí nunca me ha gustado mucho el humor de Powell, y este relanzamiento no me ha hecho cambiar de opinión. Sin embargo, eso no significa que sea incapaz de apreciar el inmenso trabajo del autor. No hay ningún otro cómic como The Goon en las estanterías, y solo por eso se merece unas cuantas alabanzas.
The Goon mezcla la comedia y el terror en una ambientación única, deudora de la América de los años 30. Hay acción, humor y drama a partes iguales. Por sus páginas deambulan zombis, fantasmas, y muchos otros monstruos salidos de la desbordante imaginación del autor, quien los dibuja a todos con diseños maravillosos. El estilo de Powell se mueve entre la caricatura y el realismo de una forma única e irrepetible. Cada página es una genialidad, un gran ejemplo de cómo narrar una comedia absurda; Powell nos hace creer que en el cómic reina el caos absoluto, pero en realidad nos guía sutilmente viñeta a viñeta. Igual de loable es el coloreado de
Me entristece no ser capaz de disfrutar del talento que derrocha esta serie. Por lo menos puedo consolarme con que tiene una legión de fans que conecta con el sentido del humor de su creador. Y con que Internet puede acercarla a muchos seguidores potenciales. Si aún no le habéis dado una oportunidad, os animo a ello. Puede que esta sea una de vuestras nuevas series favoritas.
Ser capaz, no solo de apreciar, sino de defender un comic que no te gusta es digno de alabanza. Enhorabuena.
Y al fin este mes ha salido el nuevo Lazarus.
A ver si planeta nos trae Dark Red