Ya estamos en veranito, y el Sol aprieta, y los tangas también xD Todo el mundo se relaja, en TV no hay noticias, las empresas dejan las corbatas de lado y los atuendos de vestir se reducen al mínimo. En esta situación creí oportuno acercaros algunos mangas relajantes, que pasaran bien como una buena sangría, o un buen helado. Para la ocasión arramblé de la estantería dos historias bien distintas. El género de mechas es muy popular en Japón, por lo que no es dificil creer que un manga ligero pero a la vez intrincado de leer como Brain Powerd tuviese éxito. Por otro lado no suelo reseñar mangas donde el amor sea protagonista (así me va), por lo que creí que ya era hora. Otaku In Love es el relato real de un amor surgido por casualidad, de las agallas de un joven por cambiar su vida y de cómo un grupo de extraños te pueden ayudar a través de la Red. Espero que os gusten ambas propuestas!
Edición original: Brain Powerd JAP vol 1 a 4
Fecha de edición: Agosto05-Feb06
Guión y dibujo: Yukiru Sugisaki
Color: Blanco y negro y color
Formato: 168-196 págs.
Ivrea (5,9)
Sinopsis: Yuu es un joven piloto de Grand Cher. Estos son unos mechas que dependen de Orphan, un organismo de tamaño considerable que está apareciendo en el océano. La organización Orphan se encarga de protegerlo, mientras que sus enemigos, concentrados en la nave Novice Noah, quieren destruirlo porque creen que traerá el caos y la destrucción al mundo. Al estar resentido con sus padres, Yuu abandona Orphan y se enrola en la NN, haciendo pareja perfecta con un Brain Powerd, muy similares a los GC. Una trama de odios familiares une a estas dos organizaciones, y mientras tanto, la enigmática Orphan prosigue su camino.
Entre líneas: Hace algunos años Planeta publicaba sus mangas en formato Biblioteca Manga. Eran aproximadamente como un comic book, pero con lomo y dividían los tomos originales en dos. En ese formato leímos obras de humor como Dr Slump, de corte histórico como Antón o la fantástica Edén. El problema de esta etapa pre-tomo era que eran series limitadas, se publicaba lo previsto y ya está. Mientras que obras como Antón estaban completas, muchas otras simplemente no “renovaron temporada”, dejándonos colgados. Por suerte la madurez del mercado estaba cerca y las editoriales adquirieron el firme compromiso de publicar toda una serie (actualmente este compromiso se está rompiendo en algunas editoriales pequeñas, veremos como acaba la cosa). BP tuvo su momento, y la compré. No me disgustó, las portadas eran bonitas, la historia estaba bien y dejó ganas de más. Pero la vida sigue y aparecieron nuevos títulos.
Unos cuantos años más tarde, la editorial argentina Ivrea, especializada en relatos para adolescentes (con alguna excepción), decidió apostar por la misma serie, y por suerte nos ha llegado entera, incluyendo un práctico cartón/caja que nos sirve para tener los 4 volúmenes bien juntitos. Pero la gente cambia, y lo que antes me atrajo ahora le veo más pegas.
Seré conciso, si eso es posible: o yo no me he enterado de la misa la mitad, o este cómic está mal explicado. Ya desde el principio cuesta bastante enterarse que son los GC, los BP, qué demonios es Orphan y los entresijos que se vislumbran entre miembros enemigos. El primer tomo contiene un curioso experimento, que es el de narrar la misma secuencia de hechos desde dos puntos de vista distintos. Así la línea del tiempo vuelve al punto de origen, narrando los mismos hechos pero presenciando las reacciones y pensamientos del otro bando que antes no veíamos. Aunque con algún fallo de escenario, es un experimento curioso que hacía prever que la lectura sería de calidad. Pero no ha sido así, hasta cierto punto.
El argumento se asienta en varias bases: Yuu traiciona Orphan y huye a NN, esto provoca continuas persecuciones de la hermana de Yuu (también de Orphan) para detener al que ya no considera hermano sino enemigo; estas batallas aéreas son confusas, al menos yo aún no se distinguir un GC de un BP, y restan puntos; también son comunes las peleas con Jonathan, un fanático de Orphan que resultará estar mucho más cerca de Yuu de lo que parecía en un principio; las idas y venidas entre Orphan y NN son constantes, y aunque siempre sabemos donde estamos (la mayoría de veces), a menudo te preguntas por qué tanto movimiento.
Tengo la sensación de que el autor quería explicar una historia muy complicada y no supo salirse con la suya. O que para enmascarar una falta de argujmento se dedica a liar mucho la cosa. Contra más personajes, mejor, contra más gritos, más calidad parecerá que tiene la obra. A medida que pasan los tomos se te presentan personajes que poco o nulo peso tendrán en páginas posteriores, y sin decir que desaparecen, pasan rápidamente a un segundo plano. La introducción de nuevos personajes se hace a piñón fijo, dedicándoles los títulos de los capítulos, sin que se vea una intención verdadera. Es como poner capas de pintura de distinto color a una pared de forma indiscriminada a ver como queda el resultado. Un potingue, señores.
Seguimos con los protagonistas, en este caso los más principales (Yuu, Quincy, Hime, etc): parece que para ser carismáticos tienes que gritar mucho y tener un nombre molón (Quincy Issa, Gaybridge, Kanan Gymms, etc). Efectivamente, son caracteres fuertes, pero débiles a la vez. Aquí los únicos que son como tiene que ser son los niños, jugando a ser espías e intentando comprender lo que les pasa alrededor. Los adultos se enfadan mucho y gritan mucho, así parece el autor que se construyen personajes fuertes. Bien, el no ha visto Evangelion, o espera, quizá lo ha visto demasiado.
Aquí es donde quería venir a parar: la comparación con Neon Genesis Evangelion es evidente. Para los que no la conozcáis, NGE es una superlativa serie de Gainax, un estudio japonés que dio en el clavo con esta serie de mechas. Ríos de tinta se han escrito sobre esta serie, pero solo tenéis que saber que es complicada de entender, y comúnmente se dice que los autores fumaban cosas fuertes cuando hacían los guiones de la serie de animación, las películas y finalmente el manga donde se basó todo (y que aún no ha concluido). Digo que es complicada de entender porque tiene una narrativa única, con frases que han pasado a la historia y un ambiente muy especial. O la adoras o la odias. Pero se reconoce que hay un trabajo especial detrás de ella. En mi caso me gusta. En la que nos ocupa hay una trama complicada, pero porque el autor no sabe explicarla bien. O ni tan solo él la tiene clara. La presencia de Evangelion es continua, y aunque la serie cuenta con elementos originales, los personajes son casi calcos de la serie de Gainax. Para los que sabéis de lo que hablo, el prota Yuu vendría a ser Shinjii Ikari, pero sin ser tan bobalicón y poco decidido. Asuka ve su papel llevado por Quicy Issa en BP (incluso comparten color predominante, el rojo). La organización NERV de NGE vendría ser una suma de los dos enemigos en BP, con varios personajes en los mismos roles, como Gaybridge como el padre de Shinjii, o la capitana Anoa como Ritsuko de NGE. Pero donde en Evangelion había un cultivo de relaciones muy compacto, con relaciones sexuales entre varios protagonistas (esas escenas de cama entre Misato y Kaji!), y niveles de amor y odio, en BP todo es más desdibujado. Sí, la pobre Kanan está sola en el mundo, o Jonathan tiene un trauma que ni él conoce, pero no atraen ni la mitad que las de Evangelion.
En ciertos momentos el autor se centra y ahí es donde podemos sacar en claro algunas cosas: mientras que Orphan (la organización) cree que el organismo que aparecerá traerá paz al mundo, los componentes de NN creen que Orphan llevará el mundo al caos. Ecos de X de Clamp vemos también por aquí, sobretodo en el último tomo. Más allá de eso, algo que complica la lectura es que vemos que varios familiares están enfrentados en bandos opuestos, y no vemos exactamente el porqué, y las llaves que muy de tanto en tanto nos da el autor no aclaran mucho. La sensación final que te queda es que el autor quiere contarnos una historia de familias rotas, de la importancia de tener un buen apego padre-hijo. La tónica que descubrimos en el manga es que varios de los hijos se han rebelado contra el padre o madre por no hacerle caso durante su infancia, de desaparecer mientras el crío necesitaba una imagen a la que apegarse. Pues vale, muy bien, pero no acaba de llenar. Además, los dos últimos tomos introducen tramas a saco sin prepararte anteriormente (¿que pintan los EEUU aquí y ahora?), por lo que la sensación de lío, improvisación y mala narración de los hechos aumenta. En varios momentos te encuentras fuera de la narración, sin saber mucho lo que pasa. No conectas con lo que está pasando, y bien podrías saltarte 20 hojas y seguir leyendo tranquilamente. Ya no digamos la sorpresa final del último tomo, donde muchos de los roles se alternan y vemos por ejemplo a Yuu más cerca de Orphan que de NN. Lo que me faltaba por ver, oiga. Pero a estas alturas este giro ya no interesa, aunque sorprende, claro.
Normalmente la industria japonesa del cómic bebe principalmente de las grandes revistas de las editoriales, esos tochos de centenares de páginas de baja calidad donde se agolpan varias series. Posteriormente se recopilan en tomos (tankoubon), y las más exitosas tienen versión en anime (otro gran mercado). En este caso hemos presenciado el proceso contrario: una serie original de anime ha derivado en una serie de manga, para aprovechar el éxito cultivado. No es la única, grandes series como Cowboy Bebop han tenido versiones en papel, pero curiosamente pocas hay que hayan tenido una calidad alta. Nadie recuerda a Spike Spiegel en papel, mientras que en la serie de TV caló muy hondo (gracias en parte también a la banda sonora de Yoko Kanno). Por mucho que me pese, la versión animada de mi personaje favorito, el Capitán Harlock, es mucho más carismática que su origen en papel. Con Brain Powerd pasa algo similar, una serie animada que debe estar bien no es trasladada con efectividad al papel. No saben amoldarla a las necesidades del cómic. ¿No pasaba lo mismo con las novelas derivadas de las películas de Indiana Jones?
Valoración: Quiero y no puedo, o me lío, este sería el resumen para esta serie. Algo que empieza bien, de la que no te enteras mucho pero piensas que ya se irán aclarando las cosas, pero que acaba resbalándote por todos los lados al no saber dar información clara de lo que pasa, amontonando peleas espaciales, broncas para parecer el más chulo de la clase y unos líos familiares dignos de culebrón. Hay momentos buenos, toques de humor, pero la sensación de lío no te la quita nadie. El dibujo es bueno, especialmente el pelo de las chicas parece siempre al viento y muy ondulado. Pero particularmente siempre me ha costado bastante seguir peleas de mechas en papel, y BP no es una excepción. Las páginas a color son muy bonitas, bien reproducidas por Ivrea. La colección sale algo cara, ya que los tomos son más pequeños de lo habitual y más delgados, pero el trabajo de edición es bueno. Tenemos las famosas aclaraciones de traducción, donde, aquí si, anotamos un punto negativo: no puedes poner una “Aclas” al principio del tomo explicando qué pasará dentro del tomo. Ya sabemos que las “Aclas” se leen al final, pues mejor ponerlas físicamente al final del tomo (lo que sería el principio de un tomo leído a la occidental). No es ninguna desgracia, pero te preguntas porqué lo pusieron ahí si el resto de colecciones de la editorial tienen las Aclas donde deben estar, después de las viñetas, y no antes. Encaja perfectamente en la línea adolescente de la editorial, volcada básicamente en shojos picantes de títulos sonrojantes y shonens típicos de aventuras, aunque es de agradecer que continuen la labor con los seinen como Vagabond o Real. Por cierto, la editorial también viene publicando DNAngel y Candidate for Goddess, del mismo autor.
Aún con todos los errores, la serie se puede disfrutar si se lee tranquilamente y absorbiendo conceptos (rangos familiares, situación de cada personaje en su nave, etc). Sería una lectura perfecta de verano si no fuese por este nivel de complicación para explicar algo que se resume en “Mamá, no estabas ahí cuando yo te necesitaba de pequeño”. Pero podéis probar si queréis, pero en tema de mechas mucho mejor la mencionada NGE o Patlabor. A precio de portada quizá os parecerá cara, pero está bien editada. Si la encontráis en un mercado de segunda mano, la relación satsfacción/precio mejorará ostensiblemente.
Edición original: Densha Otoko JAP vol 1 a 3
Fecha de edición: Oct-Dic 2006
Guión y dibujo: Hidenori Hara
Color: Blanco y negro
Formato: 192 págs.
Glenat (7)
Sinopsis: Un friki que viaja en tren salva a una chica de los improperios y ataques de un borracho. La chica, agradecida, le envía un regalo por haber sido tan valiente. El chico, no muy dado a las relaciones sociales, buscará ayuda en Internet para poder conseguir esa chica de los sueños y convertirse en una persona distinta. El poder del amor lo cambia todo (pero la Red también ayuda!).
Entre líneas: Una historia de amor en tiempo real y alternando lo digital con lo analógico (real). Esto es lo que consiguió un simple post en un macroforo japonés (similar al caótico 4chan), convertirse en un punto de reunión de decenas de personas para seguir en directo una historia de amor. En 2004, un usuario posteó algo que le había ocurrido: había protegido a una chica de un maleante. Él, friki de pro, sin novia ni futuribles planes de tener ninguna, tímido, fan de animes y mangas, había salido en ayuda de una preciosidad. La chica, a cambio, le pidió su dirección y le envió un bonito regalo. Excitado pero a la vez asustado de lo que podía pasar, el chico pidió ayuda en Internet. Ahí empezó el mítico post, donde iría volcando todas sus experiencias con la chica, todos sus temores, preguntas, etc El post tuvo tanto éxito que se llegó a publicar en libro, sin tocar una sola línea, por lo que todos los que colaboraron de forma desinteresada y hasta activamente en que el chico consiguiese novia, se vieron al cabo del tiempo en papel. Esto se convirtió en un experimento sociológico, ya que aparte de que se continúe considerando el papel como único recipiente válido para contener una historia (¿el papel durará más que la Red?), el libro se convirtió en un éxito precisamente gracias a Internet, y sin ser una novela, historia inventada, o novelización de los hechos reales. La cosa no acabó aquí sino que se convirtió en una película, una serie de TV y varios mangas, de los cuales Glénat nos ha traído la versión más significativa. Y lo mejor es que el libro original viene firmado por un pseudónimo general, Nakano Hitori, parecido al John Smith que se usa en Holywood cuando un director no quiere que su nombre vaya asociado a un proyecto, por haber salido mal, o ser denigrante para su imagen, etc. En este caso no es así, sino que engloba a todos los foreros que participaron de esta gran historia de amor, simplemente alguien recopiló todo el hilo (me imagino que de decenas de páginas) y lo llevó a editar.
Protagonistas de la versión en película.El está clavao, ella tampoco es tan guapa…. aunque quizá esté hecho expresamente….
Sabiendo que estoy en ZN y no en una web de expertos aficionados al manga, debo advertir que este relato contiene varia información referente a cosas inherentes a la cultura japonesa y sus vertientes televisivas, de ocio, restaurantes, etc. El mejor ejemplo lo tenemos en el título: que es un Otaku? En Japón, un otaku es un chico (normalmente) que no sale de su habitación, o muy poco. Se aísla de esa sociedad tan competitiva porque no puede resistir la presión, y se encierra en sí mismo, como un autista. En los tiempos modernos, con al entrada de Internet en las casas, ha acentuado su aislamiento porque de alguna forma tienen una ventana al mundo, pero una ventana que no les agobia ni presiona para que tengan éxito. Hay casos de jóvenes que se pasan años dentro de la habitación, con el lógico pesar y preocupación de sus padres. El asunto es mucho más profundo (del cuál yo solo tengo unos datos, no lo domino al 100%) pero para que sepáis de que va es suficiente. Por suerte, en España se adoptó la palabra otaku a todo ese friki de los mangas, animes, RPG japoneses (Final Fantasy), jpop, idol singers, etc, pero sin llegar a los extremos japoneses. Simplemente somos “los frikis”. Pero ni se os ocurra ir a Japón y decir que sois otakus porque os miraran mal!
Por suerte para todo tipo de lectores, los 3 tomos que conforman este manga están repletos de notas a pie de página, explicando quién es o a qué se refieren los protagonistas, con lo que es bastante accesible a todo el mundo. El texto final explicatorio añade más luz al asunto. Otro aspecto a destacar es la traducción, muy simpática y “de calle”, con expresiones que te hacen sonreír y estar más cerca de los protagonistas. Cabe destacar que mucha parte del tomo está escrito en lenguaje SMS, o de messenger, por lo que nos encontraremos con los consabidos “xk”, “&”, omisión de vocales, etc. El lenguaje actual de estos sitios de Internet, muy lograda su recreación (y no quiero saber como es el japonés original en estos trozos del manga…). Eso sí, sin la garrafales faltas de ortografía que están apuñalando el castellano y que pueblan los foros y chats nacionales. Incluso se nota cuando el personaje escribe con prisas (o tiene a la “novia” al otro lado del teléfono, estresado), ya que el nivel baja aún más, como por ejemplo cuando recibe la primera llamada seria, que escribe rápida y alocadamente “yatakí” («ya está aquí»). Un detalle que se suma a la buena edición de los tomos, con varias tipografías según quién escriba o hable, buen papel y elegancia en las portadas. Destacar que los personajes no tiejne nombre, solo «el del tren», «Hermes» (ya que el regalo que la hace es de esta marca), «Amiga», etc. En parte es para no citar a las peronas reales que mantuvieron el romance pero también sirve para universalizar la situación, ya que cualquiera puede ponerse en situación de uno de ellos. Es de agradecer que se lancen a publicar cosas así, que no tienen un segmento claro de ventas. Está catalogado como seinen (lo acabo de ver), pero realmente es algo único. No es shonen, desde luego, pero tampoco es shojo por el dibujo. Así pues seinen se utiliza esta vez como un poco un cajón desastre. Realmente la etiqueta da igual. De forma graciosa y casual acabo de leer el último chiste gráfico de DAC, un chico bastante conocido en el mundo del manga, que viene ni al pelo a lo que comentamos aquí.
Por suerte o por desgracia, el relato de Otaku In Love es el de mucho de nosotros, los muchos frikis del manga (o del cómic en general, que aquí no os escapáis, mamones!), tímidos, poco dados a relacionarse con el otro sexo (el mercado continúa siendo básicamente masculino pese a que ha habido una entrada muy fuerte de féminas jóvenes atraídas por el shojo), poco “tirao palante”. Evidentemente es una generalización y no todo el mundo es así. Pero sí hay un tanto por ciento que se vería identificado en el protagonista de la historia. Un azar del destino le permite cambiar su vida, y aunque le cueste horrores, debe intentarlo. Una vez entablada la conversación con la chica se hace ilusiones, cualquier cosa la recuerda a ella, se la imagina en la ducha, sufre una montaña rusa de sentimientos (ahora está en la gloria y a los dos minutos está deprimido pensando en que no podrá conseguirla jamás), parte de una autoestima tan baja que ni existe, etc. La verdad es que teniendo 22 años, el protagonista parece que viva una primera relación propia de los 15 años. Al fin y al cabo, quizá su adolescencia empiece en ese momento. La relación va por los derroteros conocidos: se vuelven a ver, cenan, titubeos para decir las cosas, miedo al “silencio eterno” del no saber qué decir, superar etapas como varias cenas, enviarse SMS de amoríos varios como colegiales, citas conjuntas con amigas de la futurible novia para que “caten” el producto (uy! aquí habría mucho que hablar!), etc, hasta que se llega a un desenlace, que obviamente no desvelaré. Solo diré que lo que me pensaba que ocurriría al final no ha sido así, pero hasta aquí puedo leer.
El manga aprovecha también para enseñarnos la fauna de Internet. El “núcleo duro” de colaboradores del chico están colgados del foro, son un compendio de distintos personajes que encontramos en la sociedad pero todos rigen sus horarios según lo que marque la historia de amor. Así, hay otro otaku que lo vive con pasión, y se enamora de la chica en la distancia. Hay una pareja que soluciona sus problemas leyendo a la vez las aventuras amorosas del chico. Hay un empresario que desde el trabajo sigue todo el show y no se pierde comba. Entre otros personajes, nos hacen ver que Internet es una nueva “vieja” forma de relacionarse con gente que quizá de otra forma nunca habrían hablado entre sí. Además, la historia de amor se “retransmite” por todos y cada uno de los gadgets que llevan wifi, desde PSP hasta PDAs. Da un realismo muy actual de la situación tecnológica.
Flora y fauna de Internet apoyando a alguien que no van a ver en su vida. Estan locos estos humanos….
Valoración: El sistema de publicación de mangas en Japón a través de revistas semanales o mensuales obliga a veces a los autores a poner semi resúmenes en sus historias. Esto hace que cada ciertas páginas nos encontremos con información conocida. Esto pasa en algunos mangas más y en otros menos (un caso muy claro es X de Clamp). En el caso actual ocurre algunas veces, haciendo que la narración se alargue. No es nada importante, pero ahí está. Siendo sinceros encuentro que a la historia le sobra un tomo, ya que el autor abusa de las escenas de agradecimiento al personal de Internet y a los comentarios jocosos y en voz alta de los foreros. Lo que empieza siendo muy divertido al principio llega a cansar un poco al final, y aunque no sea un gran punto negativo sí resta algo de la buena impresión que deja este simpático manga. Probablemente esto también sea debido a la cadencia de publicación de las historias en Japón: al pasar X días entre entrega y entrega, no se hace tan repetitivo las escenas de apoyo y crítica de los foreros, y los resúmenes le van bien al autor para situar a nuevos posibles lectores. No son grandes fallos pero ahí están, cuando en el tomo se podrían haber modificado (desde origen claro, no por la editorial española).
Decía que este manga no es ni shonen, ni shojo (aunque se trate de una historia de amor, el trato que se le da al dibujo no es precisamente shojo), ni tampoco la idea que tenemos aquí de seinen. Es algo único, con un grafismo correcto, con caras alargadas y grandes ojos, bastante detallado y con fondos (los shojos no suelen ser así), alternando momentos serios y de broma. Una narrativa correcta propia de los mangas, vamos. Es un manga divertido que deja buenas sensaciones pese a los fallos, con el que nos identificamos los aficionados tipo del manga, estos frikis que se ven en librerías, convenciones y salones. A la vez también sirve para dignificarnos un poco, y aunque parezcamos raros a los ojos de la gente, también somos personas (ejem). De hecho, según el traductor Marc Bernabé en el texto final (junto con Verónica Calafell), dado el éxito que tuvo el post original y el libro posterior, muchas chicas buscaron a su “chico otaku” porque se dieron cuenta de que podían llegar a ser más sensibles y más profundos que los “normales”.
Ay que bonito. No voy a negar que he acompañado ilusionado al protagonista de esta historia como si fuera yo mismo, pero también tengo que decir que lo narrado es una exageración de lo que puede llegar a pasar realmente. Hay momentos llevados totalmente al límite. Incluso así creo que vale la pena que lo leáis, entraréis en un mundo tan alejado de las mallas que quizá os interese, con citas culturales, tradiciones, la forma de cortejar a una chica según el canon japonés, etc Pero no os asustéis que está todo muy bien explicado.
Mientras tanto, bajo un nostálgico cielo rojizo de atardecer veraniego, me despido hasta el mes que viene, pensando que algún día yo seré “el del tren”. Tchúúú tchúúúúuuu!!!!!!
Pues Densha Otoko tiene buena pinta… se ve original…
Excelentes disecciones. Me has dado ganas de leer el segundo. ¡Gracias!
Posiblemente sea un error al escribir Jordi, pero Yukiru Sugisaki es autora, no autor. ^^
PD: Brain Powerd…un lío auténtico, creo que me lo tuve que leer varias veces para pillar algo xD
A mí Otaku in love me gustó mucho, me llegó a emocionar por momentos, sobre todo teniendo en cuenta que estaba «basado» en un acontecimiento real… Y es que al final te acaba cayendo bien el friki éste, jeje. Es una historia muy bonita.
De Brain Powered leí precisamente los números que sacó Planeta, pero no me enganchó.
Posiblemente el manga estuviese pensado para el público que ya conocía la serie de anime, y de ahí que por momentos resulte todo tan confuso, ¿no? Vamos, que me quedo con Evangelion de todas todas…
Y por cierto, Patlabor es una serie estupenda! A ver si alguien se anima de una vez a terminar de editar los pocos tomos que quedaron colgados… ^_^U
Ummm…. la película no está mal, pero lo que realmente vale la pena ver es la serie de JDrama de densha otoko. El otaku, salvo en algunas situaciones, es bastante creíble, y la protagonista femenina también mejora bastante.
Buenas recomendaciones, sobre todo Brain Powerd, un manga relativamente nuevo.