Nightwing una vez más es supeditado a Batman
«Nos deslizamos hacia nuestros viejos patrones (…) distracciones y castigos»
Grayson se encuentra en Bludhaven pensando todo lo que tiene por delante. Enfrentarse a Blockbuster, dilucidar si Melinda Zucco es amiga o enemiga y ante todo defender a unos desamparados ciudadanos de la corrupción política y de los peligrosos monstruos que acechan las calles. Casi parece un catálogo del propio Taylor, que se dice a sí mismo y también a los lectores, “de esto va la serie, no te olvides”, incluso llega a escribir “es un mal momento recién anunciado mi compromiso con Bludhaven”, porque a continuación, Dick, recibe un audio encriptado de Oráculo reclamándole en Gotham. El infalible sistema de Barbara parece haber sido hackeado por el Magistrado.
Es así como Nightwing se inmiscuye de lleno en Estado de Miedo, el crossover de Batman que afecta a todas las series adyacentes. Cabe preguntarse si no hay un editor que sepa ver que la historia de Tynion no es tan grande como para incluir a todas las colecciones. Cabe preguntarse si no hay un editor que ve la ocasión de subir las ventas elevando artificialmente un arco argumental convirtiéndolo en evento para todos los cómics de la batfamilia. Si lees la serie principal del murciélago ya sabes que no es la más atractiva, desde luego no más que la de su primer pupilo. Si además, Redondo se toma un descanso durante las grapas incluidas en la guerra contra el Magistrado, es obvio y definitivo, el nivel de Nightwing baja.
Dick con el disfraz puesto y con chaqueta marrón recuerda a su “hermano” Jason (Capucha Roja se dejará ver muy pronto en la serie) o a la versión de Murphy en Caballero Blanco. Antes de salir hacia Gotham, por supuesto, ha tenido que dejar a Haley con Clancy. Muy apropiado remarcarlo en estas fechas en las que las vacaciones provocan despreciables abandonos de mascotas. Clancy fue creada en el Nightwing #2 (1996). En aquella primera serie regular del personaje era una vecina con cierto interés amoroso por Grayson, aquí la vemos con dos niños. Como se expresó en la reseña del primer arco argumental los autores remiten a la mejor etapa del personaje a menudo, guiñando el ojo a los seguidores.
La llegada a Gotham es una nueva oportunidad para atisbar la difícil relación entre mentor y pupilo. Se adhiere a lo mostrado normalmente, pero Taylor mide muy bien, entregando menos y resultando más, satisfaciendo con el encuentro entre antiguos compañeros.
Parece que el sistema Oráculo está siendo controlado por el Magistardo, pero leyendo esta grapa compruebas que no es del todo así, la culpable es Vidente, una nueva enemiga para Batgirl. Fear State es un compendio de villanos aparentemente unidos, pero que con el transcurso de capítulos se descubren como traicioneros, todos con sus propios planes, dispuestos a llevarlos a cabo.
Babs y Dick, como no podía ser de otra forma, hacen equipo contra el Magistrado. Recuerdos compartidos por la pareja pueden verse en el cómic. Taylor se aleja todo lo posible de la presumible épica del cruce en el que está inmerso y acude a las relaciones personales de sus protagonistas, sin fondo suficiente como para emocionar y resultar tan atractivo como en los primeros números de la colección, pero resultando definitivamente solvente, además de continuista con el intimismo y corazón que escoge priorizar en su serie. Tan solo es un espejismo, el guionista lo intenta, pero las necesidades del crossover se imponen, conduciendo directamente a Batgirls por Becky Cloonan, Michael W. Conrad y Jorge Corona. Los números incluidos de esta serie en su edición original se integran en la grapa de Batman, ECC la publica junto a Nightwing en nuestro país. La cabecera de la chicas murciélago (al menos lo que vemos aquí) tiene un guion estrictamente dedicado a Estado de Miedo, un dibujo con reminiscencias lejanas de Riley Rossmo y un color algo excéntrico pero de tonos apagados. No es una adicción que genere entusiasmo a pesar de ser protagonizada por dos personajes atractivos. Cass y Steph contarán con seguidores a los que les gustará leerlas, aunque la encarnación tiene una clara tendencia a ser más juvenil que en anteriores representaciones.
Tim Drake, al que el autor de Injustice siempre da un valor añadido a sus acciones, las mencionadas Batgirls y la pareja del momento forman equipo contra el Magistrado y Vidente. Muy alejados de Batman en este cruce (en favor de los nuevos Ghostmaker o Miracle Molly) algo que gusta, estos héroes tienen suficiente trayectoria para apoyar a su mentor como una célula independiente, pero no termina de saber bien por la preponderancia de los nuevos añadidos. No porque sean nuevos sino porque Ghostmaker sale demasiado.
Robbi Rodriguez tiene un trazo suelto (poco ortodoxo a menudo en cuanto a posturas y rostros) que puede dar una sensación dinámica conveniente a la serie. Redondo nos ha recordado que una de Nightwing bien dibujada debe prestar atención a las secuencias acrobáticas y de acción, escasas en el caso de Rodriguez. Tiene la ocasión de lucirse con la batfamilia y un grupo de soldados llevados a una trampa en un callejón, pero lo resuelve con atención al ataque sorpresivo para, al pasar la página, verlos ya atados. Las comparaciones son odiosas pero la serie echa de menos a Redondo. En cuanto al color, Adriano Lucas opta por cambiar a menudo la paleta empleada en números anteriores. La luminosidad coloreando los lápices de Redondo no es seguida estrictamente con los de Rodríguez, optando por tonos más fríos y sobrios. Quizás sea el cambio de Gotham por Bludhaven o a que no le sienta igual la misma paleta a los artistas. Un buen arte, cumplidor, pero lejos del nivel exhibido al principio de la colección.
Nightwing es una excelente serie interrumpida abruptamente por injerencias editoriales. Taylor salva el bache, pero no impide que la que era la mejor serie superheroica de la editorial (y una de las mejores del mercado) baje al nivel de una colección más, involucrada en un crossover sin alma ni interés. Por si fuera poco, el dibujante titular y nominado al Eisner, Bruno Redondo, se toma un descanso y se le echa de menos. La próxima grapa es muy especial y promete un reencuentro con aquello que dejamos en la sexta entrega, un Grayson excelso con todo lo que lo hace único en una Bludhaven a rescatar, con Redondo representando y narrando como solo él sabe hacerlo.
Lo mejor
• La caracterización de los personajes es buena.
Lo peor
• Nightwing nunca debió ser interrumpida para participar en este evento.
Guion - 6
Dibujo - 7
Interés - 5
6
Crossover
Un cruce que no se siente necesario malogra la buena serie que es Nightwing. Taylor salva como puede la papeleta y nos emplaza al próximo número, ya con Redondo de vuelta, dispuestos a reenamorar a los que quedamos prendados por el primer arco argumental.
Gracias por la reseña!
No te voy a discutir lo que dices. Me limitare a dejar unos apuntes:
No se si Nightwing es de las mejores series del mercado. Pero sinergias aparte, es lo que es más por Redondo que por Taylor.
Que Nightwing este supeditado a Batman argumentalmente es discutible. Editorialmente y con Tynion a los mandos como un sosias de Hickman es inevitable.
Sobre lo anterior, Nightwing es convocado por Batman pero se mantiene bastabte autonomo con Babs (mas que en Tierra de Nadie). Taylor se reserva el derecho de detenera Saint y acabar con su base voladora. En realidad es el que se lleva la pieza de caza mayor.
Hay quien dice que pasara de este arco por superfluo. Respetable, pero deben tener en cuenta que hay un paso importante en la relacion entre Dick y Babs.
Dentro de la bajada del nivel de la serie, este arco y el de Catwoman es lo mejor de Estado de Miedo con diferencia. A distancia le sigue el Detective de Tamaki pero basicamente por Mora, y con un error de continuidad de bulto. Esos editores que no editan!
Sobre el conplemento de las Batgirls elndibujo de Coroba es embrollado, pero va a gustos. El to o es un poco Young Adult pero nada que objetar. La mayor parte de la accion es exagerada (ese tanque) o redundante (te lo cuenta Taylor en su serie). Excepto el ultimo numero, el del encierro en el hotel (en serio, deberian leer mas Claremont). Vidente es muy cargante. En general no me ha convencido para seguir la serie.
Saludos!
Hola Drury Walker. Creo que Nightwing, entre las series superheroicas, sí es de las mejores, las nominaciones al Eisner pueden tomarse como baremo (o no). De las que yo leo (ni muchísimo menos son todas) Radiant Black es la única que me gusta al mismo nivel. Coincido contigo en que Redondo es la estrella de la colección, pero valoro la buena caracterización de Taylor.
Creo que es posible «pasar» sin más de este cruce y retomar la serie una vez pasado. El avance de la relación, bueno, es parecido al del final del capítulo 6, solo que ahora la batfamilia es consciente. Además son Dick y Babs, cualquiera con un mínimo de bagaje sabe de qué va la cosa.
Estoy de acuerdo con que editorialmente Nightwing está supeditado a Batman (es a lo que me refería)pero pensándolo bien la mayoría de series de la editorial pueden estarlo en algún momento. Lo de los editores actuales es de traca y parece que va a más, no se aprecia su figura y si se hace es para mal. Y también comparto la opinión de Batgirls, no hay problema porque vire hacia el Young adult pero no resulta interesante.
Saludos!
Es una opinion muy extendida. Pero lo cierto es que mes a mes leo antes a Tom King o a Ram V o a la ultima macarrada de Garth Ennis, que como guionistas me parecen superiores a Taylor. A Nightwing le veo problemas, si que es verdad que menores en comparacion con sus aciertos. Pero bueno, va a gustos.
Los Eisner (o cualquier premio de esas caracteristicas) me parece un baremo sobre las series hot que hay que leer a juicio de un sector en el momento. Nada mas (y nada menos). No veo por que los Eisner tienen un nivel de recomendacion mas fuerte que Zona Negativa, por ejemplo. Al menos para mi. Sobre todo con el equipo DC!
Me parece que ambos besos tienen significados ligeramente diferentes, pero tampoco es que recomiende la compra del arco por ello. Es como un aviso a navegantes completistas, que no es solo el Magistrado!
Saludos!
Jajaja muy de acuerdo con los de los Eisner y sobre todo con lo de Zona Negativa 😉
Como tiene que ser!
La serie regular de batgirls que continua el complemento no sube mucho el listón. La verdad que quitando algún que otro acierto, es una serie a la que le hicieron mucha publicidad pero que pasa sin pena ni gloria, nada nuevo ni original ni especialmente bien ejecutado.
Si, se esforzaron en promocionarla pero para mi el dibujo, el tono y el revoltijo de personajes y situaciones del primer arco no funciona. Y es una pena, la verdad, porque los personajes y la premisa daba para algo mas lucido…
Otro proyecto fallido, el de los Robins con un Tim Seeley que parece que guioniza cosas en DC porque tiene que saldar una deuda o algo asi.
Del nuevo look de Acertijo y la revelacion de su patrocinadora ya hablaremos…
La verdad que si, podría haber salido una serie divertida al menos, pero al final se quedo en nada. La verdad que Cloonan y Conrad no han dado con la tecla correcta en DC, porque su wonder woman también me está gustando mas bien poco, tanto la serie regular como ese revoltijo de guionistas que fue el trial of the amazons.
Lo de robins también. Ahora que estamos en un artículo de Tom Taylor, si el proyecto se hubiese quedado en una mini serie guionizada por él, yo creo que habría quedado mucho mejor, pero vamos, que lo que Seeley ha hecho en Marvel con ese Gwen-verse tampoco es una obra de Moore que digamos.
esta serie empezó gustándome muchisimo, pero este arco fue un punto y a parte en la calidad. Para mi, a partir de aqui piderde mucho porque Taylor falla en como organizar la historia. Hay demasiados arcos de relleno y hasta en los importantes apenas pasan cosas. Sigue estando bien escrita, pero a estas alturas ha dejado de gustarme tanto como al principio.