NY Comic Con 07: Brian K. Vaughan

Y el último hombre terminará con un número doble en el #60. Cuando se le preguntó por la fuente de inspiración para el argumento de esta serie Vaughan respondió que él estudió en un colegio católico exclusivo para chicos y que cuando a veces tenía que visitar a su hermana (que estudiaba en un colegio exclusivo para chicas) y sólo veía mujeres, caminaba por los pasillos con una mezcla de excitación y miedo. Según sus propias palabras la idea definitiva la alcanzó a partir de «su inusual educación» y «su retraimiento ante la mujeres». Describiéndose en la adolescencia como «un inadaptado que fantaseaba con una atractiva pelirroja de su clase», afirma que llegó a la conclusión de que sólo si el resto de sus compañeros cayeran fulminados él tendría alguna oportunidad con ella. «Quería subvertir la fantasía masculina», remata.

Sobre los derechos de New Line Cinema para la adaptación a la gran pantalla, Vaughan se mostró algo reacio: «Siempre he sentido que Y el último hombre funcionaba mejor como cómic» pero aún así no le gusta ser cerrado.

Siguiendo con esta serie, también se le preguntó acerca de si el final que tenía en mente cuando la comenzó ha cambiado a lo largo de estos años o sigue en pie, a lo que el guionista contestó que a pesar de haber introducido algunas variaciones en el camino, el final continúa como siempre lo tuvo planeado. Por lo visto, desde hace seis años, cuando gestó la idea, tiene escrito un cuaderno de 20 páginas con un plan para un desarrollo de la historia en cinco años y respetarlo es algo a lo que se siente obligado para con el personaje.

No tiene ni idea de qué proyecto empezará tras finalizar Y el último hombre, pero adelantó que probablemente será (como esta serie) algo totalmente original, ya que se encuentra incómodo haciéndose cargo de personajes creados por otro. En cualquier caso, consciente de su éxito, es una buena señal que conteste: «[sé que] a cualquier absurda idea que se me ocurra ahora mismo le darían luz verde [la editorial]. Pero tras haber concebido ideas como Y el último hombre o Pride of Bagdad sólo lo mejor va a salir a la superficie». Se le relacionó con otro proyecto para el Doctor Extraño en Marvel, pero Bendis ya tiene planes para él. «Él es mucho mejor con estos personajes que yo», dijo Vaughan.

Refiriéndose a Pride of Bagdad, una novela gráfica que recurre a la fábula para narrar la situación en la guerra de Irak, se mostró preocupado ya que, al ser un proyecto que ha tardado 3 años en gestar, temía que hubiera quedado desfasado desde su misma salida al mercado, de tal manera que alguno de los temas políticos que afronta en la obra se vieran de una forma retrospectiva. La experiencia, no obstante, parece haberle gustado ya que no duda cuando dice que la novela gráfica es su medio favorito y que está deseando hacer otra.

Acerca de Runaways, comentó que nunca se le ocurrió darle un final y que nunca tuvo en mente como guionista sucesos más allá de los siguientes seis episodios. Además dejó patente su buena sintonía con Marvel, ya que piensa que ha dejado sus creaciones en muy buenas manos. Por último, expresó el consentimiento a Joss Whedon para darle su propio toque a los personajes con total libertad.

Cuando un fan hizo referencia a la proliferación de fan-fictions en la red que usan personajes de Runaways, Vaughan contestó que no le importaba que otros escritores usaran sus creaciones ya que él escribe sobre personajes de otros guionistas y, además, se divierte con algunas de las historias de «sexo guarro» que implican a Runaways. Incluso se permitió bromear: «Siempre he considerado lo que pasa online entre número y número como parte del canon». También señaló que como guionista tienes que escribir al menos una historia por cada pieza de fan-fiction.

Asimismo comentó que su manera de llevar una serie como Runaways es diferente a la forma en que trata sus creaciones para el sello Vértigo. Literalmente: «Cuando tengo que matar a un personaje de forma temprana en Runways es difícil, pero sé que tengo que hacerlo. Cuando empiezo a cuidar mucho a un personaje, sé que es el momento de destruirlo». Añade: «Con una serie que está bien asentada y tiene un canon consolidado es más difícil seguir tus elecciones. Matar a Jimmy Olsen puede ser bueno para un arco, pero dónde vas después. Simplemente te habrás jodido para los próximos 60-80 números».

Vaughan también evocó su irrupción en el mundo del cómic, cuando un editor de Marvel fue a Nueva York al principio de los 90 y descubrió su trabajo. Esto fue un punto de partida para una discusión entre él y Dennis acerca de lo difícil que es entrar en la industria. Hasta tal punto Vaughan lo considera complicado que sus palabras fueron «Dos personas no irrumpen a la vez en el mundo del cómic», y continuó comparando esa industria como un castillo impenetrable para el que, no obstante, hay varias vías de acceso; vías que incluyen hasta la publicación online o la autopublicación por parte de los autores. Por último recordó las palabras que le dirigió Neil Gaiman cuando por fin consiguió ser publicado: «Nada te hará mejor escritor que tener a otras personas leyendo tu terrible escritura».

Vaughan también comentó que los primeros números de una serie son siempre difíciles, especialmente con un mercado repleto de buenas obras; por eso el gran reto del guionista es doble: atrapar al lector y asentar el planteamiento de la historia. Por último, refiriéndose a su estatus actual especificó que muchos guionistas saltan de la TV o el cine al cómic, o viceversa, pero que él se considera un guionista de cómics con un pie en la TV. No obstante recalcó que a nivel de ambiente creativo, considera superior al cómic.

Sólo cuando piensa en sus primeros trabajos se tensa un poco, pero sugiere que la experiencia no fue del todo horrible: «Estuve encantado de romper los juguetes de Vértigo [refiriéndose a Swamp Thing], en vez de los míos. Y no tuve que leer nada al respecto en internet, porque nadie la estaba leyendo. Hoy estoy orgulloso de gran parte de mi antiguo trabajo. Supuso una experiencia enriquecedora»