Muchos fans recuerdan la etapa de Peter David en Factor-X como una de las mejores habidas en las series de mutantes. Consiguió hacer interesntes a personajes hasta entonces dejados de la mano de Dios como Kaos o Polaris, y escribió números antológicos como el del famoso psicoanálisis de Doc Samson.
Recientemente uno de esos personajes de Factor-X, El Hombre Múltiple, ha protagonizado una excelente serie limitada obra de David y Paolo Raimondi, por la que se han pasado también otros colegas mutantes como Guido Carosella o Loba Venenosa.
El éxito de esa miniserie de Madrox ha permitido el retorno como serie regular de Factor-X, de la que no ha sido sino un preludio en toda regla, porque la agencia de detectives que regenta El Hombre Múltiple se llama precisamente así, Factor-X.
Al reparto de la nueva serie se unirán Syrin, Ríctor y M, que junto a los ya mencionados mutantes en las anteriores líneas se ocuparán de ejercer las labores detectivescas de una agencia fundada con el dinero que Madrox ha ganado, haciendo trampas, en el concurso televisivo ¿Quiéres ser millonario?
El propio David asegura que ha elegido a esos personajes para rodear a Madrox por la gran variedad de contrastes que presentan: Syrin se está recuperando de su alcoholismo, Ríctor siente que ha perdido el control de su vida, Rahne es una chica muy insegura de sí misma, Monet cubre con su soberbia sus propias inseguridades y Guido es muy fuerte por fuera, pero no tanto por dentro. Y todo ello sin contar con los triángulos e incluso cuadrados amorosos que pueden aparecer, cosa bastante normal en personajes jóvenes con ellos.
David bromea diciendo que el único miembro que no le han dejado unir al grupo es Osama Bin Laden.
Aunque la serie renace a partir de los eventos de House Of M, no es un derivado per se, sino que más bien se aprovecha de las circunstancias generadas por el crossover para establecer la dirección de la misma.
Del dibujo de la serie se encarga Ryan Sook, un autor que ha sabido rodearse de buenos escritores en sus anteriores proyectos. Como con Dan Slott estuvo en Arkham Aylum Living Hell o con Grant Morrison en Zatanna.
Se ha ganado el respeto del público y de la crítica por esos trabajos, así que su labor en Factor-X se augura a la altura de los geniales guiones de David.
Terminamos con la propia definición de Peter David de lo que es el tema fundamental de la serie:
‘Nadie es lo que aparenta ser. Siempre hay algo que subyace, siempre hay más cosas por descubrir. Lo inesperado está siempre ahí para desbaratar las expectativas. Justo cuando Jamie cree que ya tiene su nuevo status, este cambia. Justo cuando los lectores piensen que conocen al equipo o a sus oponentes, descubrirán que no, que hay algún aspecto que no conocían o no habían considerado.’
Todo esto no hace sino aumentar las expectativas de una de las series más esperadas del futuro cercano. De hecho cualquier serie en la que se embarque Peter David merece ser tenida en cuenta, porque a buen seguro está realizada con el mínimo de calidad y de inteligencia que le suele corresponder.