Pluto 3

 

Edición original: Pluto Nº1 JAP
Edición nacional/ España: Planeta de Agostini
Guión: Naoki Urasawa, Osamu Tezuka
Dibujo: Naoki Urasawa, Osamu Tezuka
Formato: Tomo manga rústica de 190 páginas
Precio: 7,95€

 

En este tomo aparece por primera vez Epsilón, el último robot de los siete robots más poderosos del mundo. Su participación en este volumen se limita a parar los planes de Herácles de enfrentarse a Pluto, como hiciera Brand. Con ello, no sólo quiere evitar la muerte de uno de sus congéneres, sino evitar que estalle otra guerra. Gracias a él, descubriremos que durante el 39º conflicto centro-asiático existió algo gigantesco, llamado Bora, escondido en el desierto de Persia… Sin duda, Urasawa sabe como mantener el nivel de intriga a lo largo de los capítulos…

En la ciudad de Gesicht, Düsseldorf, conocemos a la familia Haas que celebra el tercer aniversario de la muerte del hermano del padre de familia. Un hombre problemático que murió en un tiroteo. A causa de ello, sus restos han permanecido en dependencias policiales hasta el día que narra Urasawa. Adolf Haas, tras recoger el ataúd con su hermano, lo lleva hasta la consulta del doctor Schiller. Con la intimidad que le proporciona la consulta de su amigo, Haas se dispone a ver los restos de su hermano. En ese momento, descubre que, de su ser querido, sólo quedan cenizas. Según el criterio del doctor, este nivel de destrucción sólo puede originarse con un proyectil Zeronium, que a su vez sólo puede ser disparado por el arma de un robot. Por tanto, estaríamos delante del segundo caso de asesinato de un humano por un robot, después del perpetrado por Blau. Esta revelación podría no tener importancia o pasar desapercibida para muchas personas, pero no para él. Adolf Haas forma parte de una organización de extrema derecha que profesa el odio hacia las máquinas y los robots. Una organización llamada KR de estética similar al KKK que reclama la abolición de los derechos de los robots.

Las cosas se complican cuando descubrimos que los proyectiles Zeronium son una de las armas con las que Gesicht cuenta. Recordemos que la memoria de nuestro protagonista fue alterada hace tres años. Por tanto, este misterio coincide con el asesinato del herano de Adolf Haas. ¿Estará Urasawa jugando con nosotros? O ¿Realmente Gesicht tuvo que disparar y acabar con la vida de un hombre? Pero cuando Haas consulta en el Ministerio de Justicia los datos sobre los disparos con armas Zeronium, no encuentra nada. Nadie ha disparado este tipo de proyectil des de que acabó el 39º conflicto centro-asiático. Hasta la noche anterior, cuando Gesicht usó su arma Saaw en una persecución policial. Aunque en el ministerio no le revelan quien fue el tirador, sus contactos en el KR le informan de que, en Alemania, sólo Gesicht tiene esta tecnología. Rápidamente, supone que él es el asesino de su hermano y pide ayuda a la organización para llevar a cabo su venganza. Pero sus compañeros deciden usar a los medios de comunicación para hundir la reputación de Gesicht y, así, modificar la opinión pública sobre los robots. Ante la falta de interés por hacer justícia, Adolf decide trazar, en solitario, un plan para destruir a Gesicht.

Mientras, en Japón, nos encontramos con Uran. La hermana de Astroboy, es una robot con la capacidad de percibir el miedo de los animales. Al final del tomo anterior, esta capacidad le permitió salvar a un niño de las garras de un grupo de tigres y leones que habían escapado de un camión de transporte. Este tomo empieza con Uran dando su versión de los hechos acaecidos al jefe Nakamura. Al salir de la comisaria, los dos hermanos se cruzan con un personaje de mirada misteriosa: el doctor Abracadabra. Este científico es un ciudadano persa que participa en la Conferencia Mundial sobre la Paz y la Ciencia, donde se tratarán elementos para la reconstrucción de Persia. De hecho, por esta misma razón, visitó el país tres meses atrás. Entonces, se reunió con Jun’ichiro Tazaki, el legislador asesinado en el tomo anterior. De hecho, Abracadabra fue la última persona que habló con él. Recordemos, que en la escena del crimen todo indicaba que la persona que acompañaba a Tazaki era un robot, excepto por pequeños detalles como dos tazas de té con sus respectivos trozos de membrillo. Y, aunque la apariencia de este personaje es totalmente humana, quizás estamos ante un robot de última tecnología, como puedan ser Uran y Astroboy. Finalmente, antes de salir de la comisaria, el Dr. Abracadabra pregunta al jefe de policía por el tornado que liberó a las bestias que Uran calmó. De este modo, descubre que el altercado sucedió cerca del parque Chûô. Qué curioso, el día que se fue de Japón, hubo un tornado. El día que vuelve, otro…

Al día siguiente, Uran decide saltarse las clases para ir al parque Chûô. Nota un intenso dolor que proviene de allí, y no puede frenar su instinto de protección. Finalmente, encuentra a un robot exhausto, casi sin energía, que ha perdido la memoria. Día, tras día, Uran se encargará de llevarle catalizadores de energía, ropa, pinturas… y de hacerle compañía. De este modo descubriremos dos cosas. En primer lugar, que sufre el Síndrome de la Guerra de Persia. Cómo el niño de Epsilón, él también revive la visión de Bora en el desierto de Persia. En segundo, e igual de importante… tiene el poder de devolver a la vida a las flores marchitas. La pregunta es: ¿hasta dónde alcanza la capacidad de dar vida?

Pero nuestro enigmático robot desprende unas ondas electromagnéticas anormales que llaman la atención del ministerio de la ciencia. Un día aparecen Astroboy, el Dr. Ochanomizu y la policía japonesa para apresar al robot. Pero, al oír el nombre de Astroboy, el odio le invade hasta caer inconsciente al suelo. Cuando el Dr. Ochanomizu se acerca, descubre asombrado que no habían insertado ningún disco de memoria en el cuerpo robótico. Cosa totalmente imposible, dado que todos los robots, para funcionar, hacen uso de uno. Justo en ese instante aparece un robot excavadora que afirma que ese es su cuerpo de uso privado… Mientras tanto, en otra zona del parque, el Dr. Abracadabra y un extraño robot de su creación, nos explican qué ha pasado. El robot Pluto, con número de chasis SOL-2083553, ha estado escondido en el lago del parque durante todo este tiempo. Mientras tanto, con ondas electromagnéticas controlaba el cuerpo del robot excavadora. Pero su creador, Abracadabra, ha llegado para exigirle que realice su misión: acabar con Astroboy.