Renacimiento DC: Fase 1 (3 de 6)

Tercera oleada de títulos de la mano de ECC centrados en Renacimiento. Una nueva remesa cargada de una dispar combinación que permite aventurarse y decir que hay un poco de todo para poder satisfacer el gusto de la inmensa mayoría de lectores. Veamos que podemos esperar de estas nuevas series que llegan mañana a las tiendas de toda España.

Sinopsis: Harley Quinn, nuestra querida payasa psicópata, sigue intentando buscar su sitio en la vida tras su mudanza a Coney Island, y tras 30 hilarantes números que han sido personalmente de lo más divertido que he podido leer en mucho tiempo en un cómic de superhéroes. En el primer número de esta nueva etapa, se nos muestra una breve presentación de su origen, para los más profanos con el personaje que quieran iniciarse ahora. Justo después, Coney Island se inunda de zombies o infectados para los más puristas, que pillan por sorpresa a Harley Quinn, Red Tool y el resto de sus amigos, que intentarán salir de esa como mejor saben: repartiendo leches a diestro y siniestro, y sin ningún tipo de miramientos ni autocensura.

A destacar: Varios aspectos. Primeramente, que por fin tenemos zombies en Harley Quinn. Después, que Amanda Conner y Jimmy Palmiotti continúen con el nivel tan alto como el que tenían en la etapa anterior, y que sigan introduciendo hilarantes personajes y desarrollando los ya introducidos para enriquecer el ya amplio microuniverso de Harley Quinn. En general muy destacable el primer arco, que para los fans de los videojuegos de zombies, les va a recordar y mucho a la saga Dead Rising, en la que te paseabas por un centro comercial matando a zombies de las maneras más inverosímiles y con los objetos más bizarros posibles. Pues aquí lo mismo, y sin un ápice de censura, tanto en la violencia más gore, como en el ya característico humor negro que ha acompañado a la serie desde su etapa anterior.

Por el contrario, resalto negativamente el trabajo de Chad Hardin, artista que no me he cansado de alabar durante la etapa anterior, y que en esta nueva que ha empezado parece que no está en plena forma. Sus diseños se muestran inacabados, con trazos irregulares e imperfectos, e incluso su estilo en general parece haber cambiado, a peor por desgracia. No es de extrañar que su compañero John Timms, que sí mantiene su nivel, le haya comido la tostada y hayan confiado en él más que en Hardin en esta nueva etapa, ya que el primero ha participado en más números que el segundo (hasta el momento), cuando en la anterior etapa solía ser justo al contrario. No sabemos si Hardin está pasando por una mala racha, está envuelto en otros proyectos que le quitan mucho tiempo o ha sido simplemente algo puntual en unos números, pero esperemos que Hardin recupere su nivel pronto, porque durante la etapa anterior fue una pieza a mi juicio fundamental en el éxito de la serie.

Recomendación: Para los fans de Harley Quinn, debe ser una compra obligada, así como para aquellos que disfrutaron de la etapa anterior, también de Palmiotti y Conner, que es de lo mejor que se ha escrito sobre el personaje en toda su historia. Muy recomendable también para todos aquellos a los que les interese el personaje y todavía no se hayan atrevido a hincarle el diente, ya que no necesitan saber nada del mismo para entender y disfrutar de la historia que los autores nos plantean. Recomendable en general para todos aquellos que quieran descansar del tono normalmente serio de los cómics de superhéroes, para embarcarse en una comedia negra descacharrante. Y por qué no, recomendable también para los amantes de las historias de zombies, especialmente aquellas sin pretensiones lejos del tono realista y dramático de obras como The Walking Dead. Eso sí, en este último caso solo para el primer arco, que consta de tan solo tres números, porque el siguiente ya tiene un contexto muy diferente.

Sinopsis: Tras los sucesos de la Darkseid War, Lex Luthor se proclama como nuevo Superman de Metropolis, declaración que es vista por el Superman de la serie Lois & Clark como un ultraje y un gran peligro, volando hacía él para desenmascararle. Es entonces cuando se produce un enfrentamiento verbal y físico entre dos personas que solo conocen a otras versiones de su némesis, pelea que cede ante una amenaza mayor contra la que han de luchar juntos, al mismo tiempo que varios misterios saltan a escena.

A destacar: No hay mayor ejemplo de lo que significa Renacimiento que Action Comics, serie entregada a un guionista que conoce muy bien a Superman, que lo dibujó y escribió durante la década de los noventa, especialmente en dos momentos cruciales de su historia; su muerte y su regreso. Acontecimientos que encuentran su paralelismo con la situación actual del Hombre de Acero, pues este feneció tras 52 números y tras él regreso el “viejo Superman”, aquel que Jurgens, entre otros, mataron, para posteriormente hacerle regresar. Y podría decirse que a Jurgens, le pidieron que diese el triple salto mortal, haciendo que retornase nuevamente Superman, su Superman, el Superman de todos, en uno de los mejores cómics del malogrado evento que supuso Convergencia. Su éxito posibilito la miniserie de ocho números de Lois & Clark: La LLegada, la cual también fue alabada por la crítica, dejando la puerta abierta para la entrada de este Superman y su familia en Renacimiento. Paradójicamente, la sucesora o continuación de esta miniserie es la cabecera de Superman que guionizan magistralmente Tomasi y Gleason, y Action Comics es la petición de DC Comics a Jurgens de que conjugue una especie de nostalgia equívoca; enfrentamiento con Luthor, pero no es su Luthor, con Doomsday pero no es su Doomsday y…

La premisa parece simple, un enfrentamiento entre Superman y Doomsday, pero todo lo que lo rodea es enigmático, es un cómic en apariencia noventero pero con diversas capas de misterio, de incógnitas por resolver, de múltiples piezas que encajar. Algo no extraño pues Action Cómics es la cabecera donde aparecerá un personaje clave dentro del rompecabezas que es Renacimiento. Ante ello, resulta incomprensible que, en relación al dibujo, con Action Comics no se haya seguido la política de la mayoría de series quincenales; dos dibujantes que se van alternado cada dos o tres números o tras cada arco argumental, pues en este primer arco Path of Doom constituido por los números que van de 957-962 han aportado sus lápices Patrick Zircher (957-958), Tyler Kirkham y (959-960) Stephen Segovia(961-962), y si bien el primero realiza un dibujo correcto, directo y limpio, muy adecuado por un cómic donde predomina la acción de una pelea física entre personajes, el dibujo del segundo supone, para un servidor, un bajón de calidad, con algunas páginas atrevidas pero en general con dibujos mal acabados o poco definidos que lastran la interesante lectura, por suerte, en los dos últimos números Segovia, sin grandes alardes de originalidad, coloca el dibujo a la altura del guión en el desenlace de esta primera historia. Respecto a los coloristas, Tomeu Morey, Ulises Arreola y Arif Prianto realizan un trabajo correcto y adecuado para una obra que intenta caminar en la paradoja en la que se hayan los personajes y los lectores, ante una situación ya vivida, en otro siglo y en otro universo.

Recomendación: Dan Jurgens vuelve a sorprender, y nuevamente es el encargado de colocar un par de piezas fundamentales, tanto para el nuevo universo DC, como para el nuevo/viejo Superman, y al igual que en sus recientes obras con el Hombre del Acero lo hace de manera sobresaliente. Action Comics es un cómic de lectura obligada para todo aquel lector que quiera saber el desarrollo de la trama central de Renacimiento.

Sinopsis: Diana está percibiendo que algo no encaja. La verdad se escurre entre sus dedos, mientras todo cambia. Por ello, va en busca de la única persona que puede ayudar a encontrar, a encontrar lo que más le importa en su vida. Muy cerca de allí, sin que Diana lo sepa, Steve Trevor y su escuadrón están intentando acabar con una amenaza para todo el continente africano. Ambos acabarán encontrándose, como lo hicieron años atrás cuando Steve llegó por primera vez a Themyschira, y Diana abandonó a su madre y su familia, para convertirse en la legendaria Wonder Woman.

A destacar: Si William Moulton Marston y George Pérez son los padres de Wonder Woman, sin duda Greg Rucka es el tío preferido. Y este ha vuelto 6 años después para una historia doble. En los números impares, nos cuenta una historia en el presente. En ella, tres personas se vuelven a juntar: Wonder Woman, Steve Trevor… y Cheetah. En los números pares, vemos la historia que llevó a conocerse entre ellos por primera vez, años atrás. Para contar la primera historia – llamada Las Mentiras -, cuenta con el potente dibujo de Liam Sharp y los colores de Laura Martin. Y además, se reconcilia con una parte de aficionados de Wonder Woman, que deseaban más villanos clásicos. La etapa de Brian Azzarello y Cliff Chiang fue un soplo de aire fresco, muy bienvenido y realmente necesario. Pero DC Rebirth recupera esa parte también esencial, esa que la diferenciaba de otros personajes grecorromanos como Hércules.

Para la segunda historia – llamada Año Uno -, tenemos a una vieja conocida, tanto para el escritor cómo para Wonder Woman. Nicola Scott también regresa a DC Comics, tras los 2 primeros años de Earth 2 – con James Robinson primero, luego con Tom Taylor – para seguir colaborando con Rucka, pues ambos están en Image con Black Magick. Y en esa historia – con Romulo Fajardo Jr en los colores -, nos muestra como Diana puso por primera vez un pie en el «mundo de los hombres». Además de conocer a Barbara Ann Minerva, quien acabaría convirtiéndose en la villana Cheetah. Barbara es el tercer eje de esta historia, teniendo el Wonder Woman #8 dedicado para ella. Ese número lo dibuja Bilquis Evely, quien tomará el relevo a Nicola una vez finalice este Año Uno. Ambas historias son de una alta calidad, y no hay que perderse ninguna de ellas, pues poco a poco Greg Rucka va encajando todas las piezas de esta gran historia.

Recomendación: Greg Rucka ha vuelto a uno de los personajes que más conoce y quiere. Y esto se nota en la calidad de sus historias. Si eres un aficionado que había echado de menos a Wonder Woman en los últimos años, esta es tu puerta de regreso. Si te gusta Diana, pero sólo la has leído en series grupales como la Liga de la Justicia, es tu puerta de acceso a Wonder Woman. Si entraste con Azzarello/Chiang, o le tienes un especial afecto a dicha etapa… tendrás que darle una oportunidad a Rucka/Sharp/Scott, pues la calidad está asegurada.

Sinopsis: Lois Lane organiza en su rancho una cena con Wonder Woman y Batman para iniciar una relación apacible entre su marido –el Superman proveniente de otro universo– y sus dos compañeros de la Liga de la Justicia tras los últimos –trágicos– sucesos del Universo DC. Sin embargo, una terrible amenaza comienza a surgir en el granero de la familia de Superman y viejos recuerdos comenzarán a florecer…

A destacar: El primer número es una obra maestra. Además de un dibujo excelso a manos de Francis Manapul, en una sola cena se tratan temas de calado que no suelen tener cabida de forma tan expresa en los cómics de superhéroes: la paternidad en su expresión más sincera, la amistad, los miedos, etc. Esta personificación de los personajes se ve ampliada en los siguientes números y hace de este primer arco una buena historia emocional en unos personajes que acostumbramos, al menos en los últimos tiempos, a ver como simples figuras de acción.

Destaca también el dibujo de Francis Manapul que dibuja, entinta y colorea 3 de los 5 primeros números, siendo sustituido por un magnífico Clay Mann en la segunda entrega y una Emmanuela Lupacchino que parece más perezosa que en otras colecciones. Sin duda, lo más reluciente de este primer arco de la colección.

Recomendación: A todo aquel que le gusten estos tres personajes, esta serie le va a encantar. Supone una recolección de recuerdos y memorias de los tres muy bien documentada y, aunque se nota que la mano de los editores es más larga de la cuenta (no creo que Manapul tuviera en mente usar a Hiedra Venenosa), el guión es aceptable (se derrumba tras el primer número pero sigue siendo una buena historia) y el dibujo es sensacional, sobre todo cuando Francis Manapul –el mejor dibujante, a mi juicio, de la casa– toma las riendas.

Sinopsis: Esta nueva alineación del Escuadrón, que bebe directamente de la encarnación cinematográfica, se ve envuelta en una misión en una cárcel submarina rusa en la que se esconde un artefacto llegado desde espacio. Los datos indican que se trata de algo valioso, pero nadie puede suponer lo que de verdad se esconde detrás de los vagos informes de inteligencia. El Escuadrón tendrá que enfrentarse a una amenaza de enormes proporciones incluso para sus peculiares talentos.

A destacar: Hay dos aspectos a destacar de esta serie. El primero son las historias de complemento que acompañan a la historia principal. En ellas se nos narra algún momento del pasado de los diferentes miembros del Escuadrón, en los que se nos muestran como algo más que simples criminales y desequilibrados. Un pasado que los retrata como personas que tuvieron un mal día, un punto de inflexión, que cambió para siempre el destino de sus vidas.

La segunda es Amanda Waller, dura, cínica, extrema, desequilibrada como el miembro más peligroso del propio Escuadrón. Un personaje que va a más en cada número y que cohesiona todo el conjunto a la perfección.

Recomendación: Para todos aquellos que quieran volver a leer un cómic donde Amanda Waller es el peor miembro del Escuadrón. También es muy recomendable para los que busquen leer una historia en la que puede pasar de todo, con unos protagonistas impredecibles y cargados de mala baba a la hora de encarar los problemas. Y a los fans de Jim Lee que demuestra que puede hacer un cómic mensual y no morir en el intento, al tiempo que demuestra seguir en forma a la hora de plasmar de forma espectacular cualquier escena de acción que exija el guion de Rob Williams.

Sinopsis: Dick recupera su identidad de Nightwing y comienza el proceso de transición entre su pasado reciente como agente de Espiral y su faceta como Nightwing. Un proceso que implica volver a sufrir el acoso del Tribunal de los Buhos de la forma más inesperada que le obligará a forjar nuevas alianzas y se verá inmerso en una nueva trama donde nada parece lo que es y las mentiras y las traiciones revolotean a su alrededor.

A destacar: El trabajo de Tim Seely logra que la serie sea una muy digna continuación de todo lo ocurrido, lo que ayuda a dar cohesión al conjunto. La historia personal de Dick sigue evolucionando y permite intuir nuevos cambios en su vida. Dick gana globalmente como personaje al asumir su destino y hacer las cosas a su manera. Su pasado es fundamental para definir su presente y su presente define su futuro como el héroe enmascarado.

Recomendación: La mejor manera de realizar una transición es hacerla de la forma menos traumática y es que de eso va Nightwing, de una transición, de un cambio de rumbo pero sin perder de vista todo lo narrado en la excelente Grayson. El personaje asume de nuevo su manto y se posiciona en el actual presente del microuniverso de Batman, con un ojo mirando al futuro y otro mirando al pasado que parece querer volver a perseguir a Dick. Por eso la serie agradará a todos esos lectores que quieran recuperar el sabor inicial de la serie de Nightwing en los Nuevos 52, sin acabar de desligarse del todo de los acontecimientos de Grayson.