Todos podemos tener un mal día
«I beat the Batman»
Es el día de Bane. Es su momento para pasar por este proyecto doblemente retrospectivo. Por una parte repasamos la esencia de los villanos de Batman y por otro volvemos a La Broma Asesina cuya premisa es la base de estos especiales.
Estos tebeos nos producen una sensación parecida a cuando escuchamos covers de nuestros temas preferidos. Nos gusta la canción, nos gusta buscar y encontrar los puntos en común con la versión original, nos gusta lo mismo pero nos gusta diferente.
DC no se corta en exprimir hasta el tuétano la herencia de Moore y la esencia de Batman. Grandes autores explican el día clave en el que los villanos se convirtieron en esos personajes míticos que ejemplifican el mal de diferentes maneras.
Bane es un villano clásico de Batman pero a la vez es moderno, apenas tiene 30 años. Nace en esa época gozosamente oscura, patéticamente placentera que fueron los noventa. Un remanso de violencia, músculos venosos, dientes apretados, pistolones, cuero, cadenas, tangas, desproporción, rallitas… Los noventa, la cocaína hecha cómic.
Bane era una síntesis de muchos de estos tópicos. Sin embargo, el personaje trascendió. Su carácter brutal y ultraviolento disparó su popularidad, su origen inenarrable y absolutamente imposible le convertían en una criatura que iba más allá de toda verosimilitud. Batman necesitaba un enemigo a la altura de su leyenda y de los tiempos.
En esa época DC pegó pelotazo con la muerte de Superman. Las ventas de ese evento de eventos, de esa piedra fundacional de la eventitis que ahora sufrimos, superaron todas las expectativas.
DC, insaciable, quiso hacer algo con Batman y creó a Bane (como había creado a Doomsday) con una misión concreta. Vencer al héroe como nunca había sido vencido. Como todos sabemos, Bane le rompió la espalda al murciélago.
El villano se incorporó entonces a la galería de enemigos habituales de Batman. Se vulgarizó para poder ser recurrente y ha mantenido su vigencia hasta el momento.
Esto le otorga el honor de ser uno de los “invitados” en la iniciativa One Bad Day.
Esta iniciativa se caracteriza por que cada número lo protagoniza un villano y lo realiza una pareja de autores de primer nivel.
Arrugamos el morro. Le toca a Joshua Williamson, polémico por su trayectoria irregular y protagonista en la DC de los últimos años y a Howard Porter que ha demostrado una irregularidad casi peor en Deasthtroke Inc.
¡Oh, sorpresa! El cómic está muy bien. Fuera de la presión de plazos que supone la continuidad de una colección mensual ambos autores demuestran de lo que son capaces. Ganas y tiempo. Ya vimos que Williamson en Villanos era otra cosa.
La trama husmea en los orígenes de Bane. Williamson construye muy bien las causas de la personalidad de este psicópata cruel y adicto. Se centra en el mal día de Bane, el día de su triunfo y tragedia, el día que hizo caer a Batman.
El guionista le pone mucho cariño al villano. Es imposible no sentir simpatía por ese hombre montaña brutal y derrotado. Bane está atrapado por sus demonios, es prisionero de su pasado y víctima de un mundo despiadado.
Williamson se toma su tiempo. Diálogos afilados y situaciones de tensión creciente que explotan en momentos de violencia cruda. La trama se acelera en momentos con una narrativa intensa y original.
Porter agradece y nos premia con más tiempo para realizar las páginas. Su estilo untuoso, trémulo, detallado y orgánico. Los detalles y texturas del dibujo de Porter son una gozada. Está como nunca. Aunque en algún momento pueda parecer algo irregular o deslavazado.
Destacan también sus planos extremos, sus escorzos retorcidos y una configuración de página original, creativa y muy dinámica.
Mención especial merecen sus ilustraciones de acción y de extrema violencia, el clima y la ambientación de película de terror.
Los mejores momentos del dibujo los multiplica el color magistral de Tomeu Morey.
El trabajo e ambos autores conforma una alquimia especial que toca diferentes géneros.
Se trata de un cómic muy notable, que conforma un pico para ambos autores en los últimos años y sobretodo, un Howard Porter que nos demuestra que cuando trabaja a sus anchas puede ser un gran dibujante.
Lo mejor
• El dibujo de Howard Porter en todo su esplendor.
• No nos engañemos, Bane mola y nos encanta verle repartir leña.
Lo peor
• DC podría ampliar iniciativas parecidas a otros personajes que no sean Batman.
Lee aquí las reseñas de los otros especiales Batman One Bad Day:
Muy destacable.
Guion - 7.5
Dibujo - 8.2
Interés - 8
7.9
Williamson y Porter nos traen acción, violencia, entretenimiento... de muy buena factura.
Guan cuestion: la serie de doce números Bane Conquest sigue inédita por aquí? Que a raíz de este artículo me ha dao por buscarla y no encuentro nada. Thx.
Me mola mucho Graham Nolan.
Por el pinganillo me chivan que está inédita todavía.
A ver si tenemos suerte y la rescatan.
Gracias por comentar
Gracias a ti por el artículo y por la respuesta :), mira que es raro que se dejen algo de Batman en el tintero.