Vuelve
«The universe wanted more from me»
Como la máquina de escribir de Paul Sheldon en Misery cuando perdía alguna de sus teclas, así se sentía DC sin que Green Arrow tuviera una presencia (serie) regular en la continuidad oficial. Tierra Prima continúa girando, pero no es lo mismo sin “el perillas”.
La destrucción, reestrucción, el reinicio, el enésimo pim, pam, pum… nos lo ha traído de vuelta. Con Mark Waid multitasking y Geoff Johns recuperando personajes parece que la editorial quiere recuperar ese aroma de (cierto) clasicismo.
En este contexto, Green Arrow debía volver por la puerta grande.
El arquero verde suele morder el polvo a las primeras de cambio en cada evento, es casi un cliché ver a Canario Negro atacar furiosa a los asesinos de Oliver. Está claro que GA debía servir para algo más que para ser la primera muerte (cada vez menos) impactante en el macro-crossover de turno.
Los dioses del cómic han atendido nuestras plegarias y nos traen al mejor arquero de este lado del río.
Es cierto que lo del arco y las flechas es cada vez más difícil de adaptar, pero el cómic se encuentra en una situación de bendita dispersión temática y formal por lo que un arquero podría tener muchas posibles interpretaciones. Con mayor o menor dificultad, se pueden hacer grandes cómics de todo. A pesar de que la edad de Oliver se mantiene más o menos a la par que los principales personajes de DC, sus habilidades lo presentan como un personaje conceptualmente añejo.
Cuando supimos que el guionista seria Joshua Williamson arqueamos (je, je) las cejas, pero de un tiempo a esta parte el perpetrador de Dark Crisis nos está demostrando dotes de buen guionista y si bien la etiqueta de genio que le atribuyó Daniel Sampere nos parece excesiva, no podemos negar que nos hizo disfrutar en su momento con Rogues y actualmente con Superman.
En el cómic que nos ocupa es más un número cero que un número uno. Williamson replega los principales aspectos del personaje y lo que será la base de su nueva etapa. Nos resume el origen, sitúa a Ollie y reúne a la Arrow-family. Tenemos además de a Canario a Roy Harper y a Conner Hawke.
Hagamos un breve resumen de los últimos años, pero para un repaso más detallado del personaje aquí tenéis un enlace. El reboot anterior a Dark Crisis fue el de Renacimiento. Allí Benjamin Percy se hizo cargo de la colección del “flechas”. Recuperó la relación con Canario Negro y definió políticamente a Oliver convirtiéndole en un héroe social. El aspecto rojeras de GA siempre ha sido una constante (aunque más o menos explícito según la etapa), así como su humor explosivo y algo cascarrabias. La serie se dejó de publicar al llegar a su número 50 (2019) pero en este tiempo hemos podido disfrutar de Ollie en Elseworlds y eventos. Todo se fue al garete con su muerte cruda y brutal a manos de Doomsday en la última crisis, la oscura. De hecho, ya es un detalle que a pesar de ser la primera muerte, es la que recibe mejor trato, ya que se prepara en un par de página y tenemos la reacción de Canario. El resto de muertes se concentran en dos paginitas aunque muy bien dibujadas por Sandoval.
El inicio de esta colección regular es el regreso de esa muerte. La “resituación” ocupa gran parte de las 24 páginas del tebeo. Es una presentación ágil, cómoda, dinámica… que demuestra que ambos autores narran bien, saben explicar una historia, conocen los recursos, la técnica y los trucos.
Los diálogos son medidos y precisos. Nos presentan a los personajes, explican lo que deben y nos permiten proyectar lo que no se dice explícitamente. Y hay mucho que explicar.
Williamson escribe con soltura y nos plantea las situaciones con frescura y naturalidad, pero originalidad poca ya que este tebeo es deudor de muchas explicaciones.
Por otra parte el dibujo de Sean Izaakse (Thunderbolts) es dinámico y brillante. Destaca su estilo moderno en el trazo, los encuadres y la estructuración de página. Algo que contrasta con un personaje poco tecnificado como Green Arrow, que siempre ha tenido un toque clásico, no en vano se inspira en un icono cultural ubicado en el medievo.
No sé si esta mezcla de modernidad y clasicismo va a cuajar. Da la impresión de que el encaje es un poco a la fuerza. Puede que el arte de Sean Izaakse cuadrara más en una serie superheroica más estándar.
El color brillante y petón de Rómulo Fajardo Jr resalta la pátina de modernidad del número por lo que la apuesta está clara.
Veremos cómo se desarrolla en un futuro. Williamson debe saber encontrar el punto medio o ser totalmente rompedor y muy creativo para que no desencaje el viejo gruñón de Oliver con el tono de la colección. Seguramente, una buena manera de lubricar ambas tendencias sea el uso del humor y la ironía que tan bien casan con GA.
Se trata, en definitiva, de un primer número muy de presentación que apenas nos sitúa y presenta a los personajes que rodean a Green Arrow. Se pueden sacar pocas conclusiones más allá del tono futurista y moderno que parece que será la tónica de la colección.
Lo mejor
• Green Arrow tiene serie regular.
• Y parece que va en serio.
Lo peor
• Demasiado high-tech
Buen inicio pero demasiado inicial
Guion - 7.5
Dibujo - 7.5
Interés - 8.5
7.8
Se trata de un número para situarnos pero que ya apunta maneras.
La mini serie que se convierte en maxi serie que se convertirá en una serie regular antes de terminar el verano. ¡Sin queja alguna!