“El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo.” Ezequiel 18:20
No suelo comenzar mis artículos con citas bíblicas, y no por nada, sino porque no tengo un conocimiento suficiente sobre la Biblia como para poder establecer referencias adecuadas, siendo hoy evidentemente una excepción. No recuerdo exactamente en qué circunstancia ni dónde leí esta cita, pero el caso es que viene muy a cuento para la reseña de hoy. No es justo que alguien tenga que responder por los errores que haya cometido su progenitor, y sin embargo, esto es algo que pocas veces se cumple. De alguna manera u otra, todos hemos sufrido en algún momento las consecuencias de algún error que hayan podido cometer nuestros padres, y cargamos con ello ya sea a nivel emocional, marcando nuestra forma de ser y nuestra vida para siempre, o incluso a nivel económico. Y no solo tenemos que llevar algunas veces esa carga, sino que los demás nos juzgan por ello. No ocurre siempre, desde luego, pero estoy seguro de que todos nosotros nos sentimos de alguna manera u otra identificados en esta situación, o por lo menos la conocemos por algún familiar o amigo que haya pasado por lo mismo.
Es el caso del Batman de Telltale Games, que en el primer videojuego tuvo que pasar por una situación muy desagradable relacionada con sus padres, y que sirve de leit motiv para un cómic que continua con esa trama y enlaza con el siguiente videojuego.
Sobra decir pues que, aunque no es imprescindible, sí que es muy recomendable haber jugado al primer videojuego de Batman de Telltale Games no solo para entender la historia, sino para disfrutarla. El universo de Batman de Telltale es diferente del que estamos acostumbrados. Si bien todo es perfectamente reconocible, algunos personajes están cambiados (y ojo que aquí vienen spoilers del videojuego), como Harvey Dent, que se transforma en Dos Caras al descubrir la infidelidad de su novia, Selina Kyle con Bruce Wayne, Cobblepot que se convierte en presidente de Wayne Industries o Vicki Vale, que es la villana secreta del videojuego bajo la apariencia de Lady Arkham, líder de los Hijos de Arkham, y que busca venganza contra la familia Wayne por sus crímenes. Y sí, este es uno de los mayores cambios que nos encontramos en el universo Telltale, Thomas Wayne fue un despreciable criminal que enviaba a Arkham a todo aquel que se interpusiese en su camino, provocando el nacimiento de villanos como Cobblepot o Lady Arkham, y dando sentido así a la trama de este cómic digital que hoy reseñamos.
Así pues, Batman comienza este número enfrentándose Los Zuccos, que no son una banda de música de los 60, si no una infame mafia de Gotham, de tantas que hay, y que nos suena a los lectores especialmente por Tony Zucco, el asesino de la familia de Dick Grayson. El caso es que el murciélago ayuda a la policía y al recién nombrado en este universo comisario Gordon a derrotar a estos delincuentes y a no sufrir bajas y vuelve a la batcueva como parte de su rutina habitual como justiciero enmascarado. Es entonces cuando nos damos cuenta de que Bruce Wayne no está bien anímicamente, pues su empresa está en una situación muy delicada ante la revelación de los terribles crímenes que cometió su padre en el pasado, siendo este primer inicio una leve pincelada de lo que tendrá que afrontar Bruce durante los siguientes números. Lo importante es el cómo lo hace, y si
El apartado artístico corre a cargo de
Guión - 6.7
Dibujo - 7
Interés - 6
6.6
Limitado
Un cómic con una puesta en escena interesante, especialmente para los siguientes números, pero que está muy limitado por la experiencia o conocimientos del lector por el videojuego de Telltale, para los cuales esta historia puede ser un buen complemento.